EL TLC Y NUESTRA AGRICULTURA
Por Andrés F. Arias *
Con la firma del Tratado de Libre Comercio
con Estados Unidos Hemos dado un paso fundamental en propósito de abrirle la
mayor cantidad de mercados que podamos abrirle a la agricultura
colombiana. Nuestros agricultores van a poder llegar al mercado
más rico, próspero y grande del mundo. Nuestros campesinos
productores de hortalizas, frutas, flores, carne, leche, café,
caña, tabaco, palma africana, caucho, cacao, productos forestales,
productos piscícolas etc.; van a tener la posibilidad de
aumentar sus exportaciones y con ello generar el empleo, la riqueza
y el bienestar que necesita el campo colombiano. Las ventajas obtenidas
para el etanol, el biodiesel y toda la agroindustria también
impulsarán nuestra agricultura.
El acceso alcanzado para nuestros productos
es un acceso real. Como complemento a los beneficios arancelarios
permanentes con
que nuestros productos ingresarán de aquí en adelante
a Estados Unidos, Colombia logró la conformación
de un mecanismo permanente de consultas, coordinación y
reglas de juego transparentes en materia sanitaria y fitosanitaria.
Ello agilizará el acceso efectivo de nuestros productos
agrícolas al mercado norteamericano.
Por supuesto existen sectores sensibles
que necesitan un tratamiento especial de protección al interior del tratado. En efecto,
sectores como el arroz y los cuartos traseros de pollo tendrán
largos períodos de desgravación (19 y 18 años
respectivamente). Contarán con períodos de gracia
donde el arancel no se reduce (6 y 5 años respectivamente),
salvaguardias para restituir el arancel cuando aumenten las importaciones
por encima de cierto nivel y mecanismos para que los beneficios
de la importación se le trasladen a los mismos agricultores
de arroz y a los productores de pollo. Vale destacar que mientras
el arroz es el sector que quedó con la mayor protección
en el tratado, la desgravación del sector avícola
se revisará al noveno año para que se evalúe
la inserción de este sector a la competencia con Estados
Unidos.
Sectores de economía campesina como el fríjol quedaron
con largos períodos de desgravación y salvaguardias
protectoras. En el caso del maíz amarillo tecnificado continuará habiendo
importaciones para garantizar la competencia del sector avícola,
porcícola y de alimentos balanceados, pero también
se protegerá la producción nacional con largos períodos
de desgravación.
Como complemento a la firma del TLC, el
Gobierno Nacional ha diseñado
un paquete de apoyos al campo que se llamará “Agricultura
Ingreso Seguro (AIS)”. Habrá apoyos para sectores
como maíz, sorgo, soya, trigo, fríjol y arroz. Lo
importante es que dichos apoyos reforzarán los mecanismos
de protección pactados al interior del tratado y, además,
protegerán a nuestros agricultores de la competencia con
países diferentes a Estados Unidos.
Adicionalmente, el programa AIS permitirá que el sector
agropecuario y campesino cuente con recursos significativos y reales
dentro del presupuesto anual del Gobierno. El programa busca que
nuestros campesinos enfrenten la competencia subsidiada del resto
del mundo en mejores condiciones, pero también permitirá fortalecer
su capacidad competitiva, fomentar la capitalización rural,
mejorar las inversiones en ciencia y tecnología del sector
agropecuario y generar las condiciones para aprovechar los nuevos
mercados que se abren con el TLC.
* Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural
Marzo 16 de 2006