Durante los últimos años la industria de telecomunicaciones
ha sufrido grandes cambios. En el período 1998 - 2000
se realizaron altas inversiones en infraestructura se consolidaron
actores globales y el valor en Bolsa de las grandes empresas
aumentó de manera considerable.
No obstante, desde el año 2000 la realidad ha sido otra,
pues el mercado mundial de las telecomunicaciones se ha contraído,
desmejorando la situación financiera de la mayoría
de las empresas. Miles de empleados han sido despedidos, los
valores de acciones han caído de una manera considerable
y muchas empresas se han declarado en bancarrota.
D e esta manera la situación de crisis de la industria
de la telecomunicaciones en el año 2000, llevo a un replanteamiento
de algunas de las estrategias de los operadores. Adicionalmente,
el margen obtenido por la provisión de servicios de voz
disminuyó sustancialmente y éstos se convirtieron
en servicios genéricos que agregan poco valor al cliente
final. En consecuencia, los operadores tradicionales de estos
servicios han incluido en sus líneas de negocio nuevos
productos buscando generar nuevas fuentes de ingreso.
Más aún, la convergencia tecnológica ha
permitido la prestación de nuevos servicios y aplicaciones
sobre las diferentes redes de telecomunicaciones, especialmente
con los terminales integrados que poseen las opciones de fax,
correo electrónico, voz, Internet, vídeo y aplicaciones
de software.
D e acuerdo con lo anterior, el sector
esta viviendo una nueva etapa en su evolución en la que los grandes operadores
están migrando los accesos fijos de cobre hacia enlaces
de banda ancha, basados en tecnologías como fibra óptica
o líneas de abonado digital (DSL) para proveer servicios
adicionales a los de voz.
Según la ministra, los servicios móviles empiezan
a convertirse en un producto sustituto de la telefonía
fija y de nuevos servicios de datos personalizados tales como
la transmisión de mensajes cortos y el pago de transacciones
personales.
Adicionalmente, han aparecido nuevas
formas de acceso al mercado mediante la comercialización
de los diferentes servicios de telecomunicaciones, lo que ha
propiciado el surgimiento de
los operadores virtuales i mayoristas.
Finalmente, los operadores han implementado
estrategias comerciales de modalidades prepago y consumo controlado,
mejorando así la
calidad de la cartera y asegurando el acceso de los usuarios
a los servicios.
En conclusión, el sector se enfrentará durante
los próximos años a las tendencias de movilidad,
convergencia en el terminal, flexibilización de precios
e innovación tecnológica. Los países que
cuenten con infraestructura de telecomunicaciones adecuadas y
que promuevan el acceso de sus habitantes a las TLC, tendrán
ventajas para el crecimiento económico sostenido y el
desarrollo social.
*Ministra de Comunicaciones.