Querida comunidad:

Un saludo con todo mi afecto a todos ustedes. Me gusta muchísimo estar esta mañana en esta tierra del orden, de la ley, de la autoridad.

¿Cuál es el propósito de esta reunión? Dos propósitos: uno, alimentar lo que ha de ser el Plan Nacional de Desarrollo, que las opiniones de ustedes se empiecen a recoger por parte del Congreso, del Ejecutivo, para alimentar el Plan Nacional de Desarrollo. Y segundo, promesas, cero; compromisos, uno. Acordar la línea de trabajo entre los gobiernos municipal, departamental y nacional en este cuatrienio.

Y entonces, a medida que vayamos en estas reuniones acordando esa línea de trabajo, proponernos implementar las acciones que nos permitan tener los resultados definidos en esa línea. Esos son los dos propósitos.

Un diálogo sincero, permanente, lo único que les puedo ofrecer es esa voluntad de trabajo y un gobierno de puertas abiertas, que ordenadamente todas las carteras ministeriales, los institutos nacionales, la Presidencia de la República, estén con sus oficinas abiertas permanentemente para tener un diálogo creativo, que permita hacerle seguimiento a esto, remover todos los días obstáculos y avanzar hacia la solución.

Quiero referirme a los temas en el orden en que los ha planteado el señor Gobernador.

Empecemos por la situación financiara, de inmensa dificultad. Yo creo que no hay más camino que la austeridad y la transparencia. Por su puesto, hay que pensar en temas adicionales.

Yo veo sumamente bien a los departamentos, hay que fortalecerlos con unas reformas dentro del esquema y con otras por fuera del esquema.

Dentro del esquema: una de las propuestas del referendo es eliminar contralorías y personerías, que ese servicio lo preste la Contraloría General de la Nación sin crecer la nómina, la Procuraduría sin crecer la nómina. Y que esos ahorros favorezcan a los departamentos y los municipios para llevarlos exclusivamente a educación, al menos durante un buen número de años.

Dentro del esquema: me parece de gran importancia que el Gobierno Nacional empiece a acordar, con los señores gobernadores, la delegación de funciones y recursos, hay mucha duplicidad. En vez de gastarnos un dinero, con Caminos Vecinales, que debería desaparecer, esa suma –así sea de poca cantidad- acordarla con los gobernadores selectivamente para ese mejoramiento de vías terciarias.

Dentro del esquema: me preocupa mucho ver a los municipios gastando tanto dinero en viáticos a Bogotá y en pasajes. Abordan ustedes un avión en Cúcuta o en Bucaramanga o en Medellín, buena parte de las sillas va con alcaldes y concejales. Centralizamos el país de nuevo, dependen exclusivamente de Bogotá.

Mi propuesta es que la viabilización de proyectos la hagan los gobernadores y eso le ahorra mucho a los municipios y le devuelve funciones a los departamentos. ¿Cómo hay que hacerlo?: transparentemente.

Quiero anunciar desde Cúcuta lo siguiente: para este Gobierno no hay alcaldes o gobernadores de uno u otro partido político, lo único que clasifican son alcaldes y gobernadores honestos y buenos gestores y es la instrucción que hemos dado. Alcalde honesto y buen gestor, gobernador honesto y buen gestor, a trabajar con él.

Es lo mismo que le quiero recomendar a los gobernadores: para que los alcaldes acepten tranquilos, que los departamentos sean los que viabilicen los proyectos, que sientan confianza, que no ahí no hay manejo político, que las puertas de las gobernaciones van a trabajar con todos los municipios, solamente exigiendo esas dos condiciones: transparencia y diligencia en la gestión.

Y pensemos en unas reformas estructurales, ceo que necesariamente vamos a tener que pensar en las regiones autónomas. Me parece que el ente departamental como esta hoy, está muy débil y tiene muy poquito futuro.

El Congreso anterior hizo un gran esfuerzo buscando nuevos recursos para los departamentos y es bien difícil, en la actual situación de la Nación. Nosotros lo estamos haciendo para presentarlo y encontramos, hasta ahora, una posibilidad de mejoramiento, por ejemplo, a través de modificar los grados alcohólicos de los licores. Pero eso es muy insuficiente.

Entonces, quiero invitarlos a que consideremos muy seriamente la creación de esas regiones para tener unas entidades intermedias de Gobierno, fuertes.

Cuando el señor Gobernador empieza con la ley 617, el esfuerzo que han debido hacer departamentos y municipios, ese fue un buen paso, hay que complementarlo.

El referendo propone esto: para que todos demos ejemplo, que los diputados también hagan un sacrificio. No es eliminar las asambleas, no es reducir el número de diputados, sino reducir la remuneración de los diputados. Yo creo que eso nos ayuda muchísimo.

Y en las ciudades que se nos quedaron por fuera de la ley 617, empezando por Medellín, en materia de remuneración de concejales, también rebajarla. No reducir el número de concejales pero sí, en esas ciudades medias y altas, -porque los municipios se dieron la pela y redujeron eso, pero la ley 617 no alcanzó el costo de los concejos en las grandes ciudades-, ahí hay que hacer un gran esfuerzo.

Y otro sacrificio para los diputados: que no ganen salario sino honorarios, a ver cómo entre todos ayudamos a rescatar estas entidades públicas. Y ahí les dejo la idea de las Contralorías. Observando sus cifras, Gobernador, veo que la contraloría del Departamento vale más de mil millones.

Ahora, quiero anunciar desde Cúcuta esto: ¿qué hay que hacer si los colombianos aprueban eliminarlas?: un plan social para los funcionarios de las contralorías. Págueles un tiempo buena parte el salario a título de bonificación, hágales un plan de readaptación laboral. Esto tiene que ser con criterio social. Esto no es para maltratar la gente sino para transformar el país. Y lo mismo con los de las personerías.

Si hacemos ese plan de bonificaciones, ese plan de capacitación, silos departamentos ven que esa platica les es muy útil en educación, lo municipios ven que esa platica les es muy útil en educación y hacemos la transformación con criterio social, no va a ser traumática. Esto no es de maltratar a la gente sino de buscar unas reformas para que todos aportemos para que el país en su conjunto mejore.

Pero le falta el ejemplo al Gobierno Nacional y también al Congreso y lo tenemos que dar. Yo tengo que empezar por dar ejemplo de austeridad en la Presidencia de la República, en el cierre de embajadas, consulados.

Por ejemplo, se va a cerrar mucho instituto nacional, de cinco del agro, va a quedar uno. Los gerentes regionales, con concursos. ¿Cómo?: transparentemente, para la gente de la región, porque alguien dijo: ‘ah, es que no se va a respetar a la gente de las regiones’. No. Hay que respetar la gente de las regiones, es para los ciudadanos de la respectiva región.

Procuremos que eso nos salga bien, transparente, que el Gobierno Nacional haga un gran esfuerzo, si no, no salimos adelante. Con un déficit consolidado de 3.7 y un déficit del Gobierno Central de casi el 6 por ciento, si no hacemos esos esfuerzos no salimos adelante.

El Congreso. El Congreso nos va a ayudar, en el referendo se propone la reducción del número de congresistas, se propone que congelemos, durante 4 años el salario del Presidente –hablo en primera persona-, de los congresistas, de los magistrados de las altas cortes, del fiscal, del contralor.

Se propone que las pensiones en estos sectores no puedan exceder 20 salarios mínimos, hoy hay unas muy altas del orden de 12, 14 millones, al que ponerles ese tope de 20 salarios mínimos, quedarían más o menos de 6 millones 90 mil.

Porque el Ministro (de Hacienda) tiene que presentar el próximo miércoles la reforma pensional. Ustedes ya vieron lo que le pasó al departamento, el pasivo pensional vale más de 400 mil millones de pesos, cuando el presupuesto de ingresos propios es de 100 mil y solamente tiene un respaldo de 4 mil millones en el fondo de pensiones territoriales en las cifras que nos acaba de mostrar el señor Gobernador.

Traslademos eso a la Nación. La deuda pensional de la Nación supera en dos veces y medio el PIB, o sea que se necesitaría dedicar el PIB Nacional dos años y medio solamente para pagar pensiones.

Entonces hay que hacer un esfuerzo, uno no le puede pedir a los colombianos que hagan ese esfuerzo si lo que tenemos el privilegio de salarios y comodidades no lo hacemos. Por eso, aspiro que el Congreso nos ayude en eso. Creo que lo reclama el pueblo colombiano y que es de buen recibo para legitimar esta democracia.

Tenemos que hacer ese esfuerzo, porque miren: aquí se descargan y se descargan siempre, nuevos sacrificios sobre la gente. Ese decreto de conmoción le cuesta a los contribuyentes colombianos dos billones de pesos y ahí no nos podemos quedar, viene una reforma tributaria.

Entonces, si todo es por el lado de aumentar ingresos y no reducimos el gasto y no derrotamos la corrupción y no reorientamos este Estado, es muy difícil, se vuelve imposible. El Estado nuestro gasta mucho en politiquería y es muy avaro en lo social. Por eso, reduzcamos el gasto político y burocrático, eliminemos el clientelismo, vayamos creando ahorro para poder pagar la deuda social.

Gobernador, mi invitación es a que sigan con ese gran esfuerzo de austeridad. Y busquemos a ver cómo, al hacerlo la Nación, el Congreso, podemos en algún momento ayudarle a los departamentos y a los municipios.

En el tema de las personerías piensen esto: la eliminamos y las personas que salgan les damos un plan de rehabilitación laboral y se les paga el salario, parte durante un tiempo como bonificación, ya sin trabajar –lo mismo las contralorías- y esa platica a educación. Porque tenemos 3 millones de niñitos en el país, sin educación. Ese es el gran reto: un país con tres millones de niños, que Norte de Santander tenga 100 mil en edad escolar sin estudiar, así no tenemos futuro.

Nosotros hemos propuesto, además de que el dinero de contralorías y personerías vaya a allá, también la reorientación del Fondo Nacional de Regalías.

El Fondo Nacional de Regalías, el año pasado, desembolsó 700 mil millones de pesos, no sabemos este año cuánto pueda desembolsar. La propuesta es: dos grandes rubros y uno pequeño.

El pequeño, un porcentaje pequeño para pensiones territoriales porque como acabamos de ver, aquí hay una deuda, un pasivo actuarial de más de más de 400 mil millones de pesos y una reserva constituida en no más de 4 mil. Entonces hay que llevar un rubro pequeño del Fondo de Regalías a eso.

Y los otros dos grandes rubros: educación y acueductos y alcantarillados. No manejar el Fondo Nacional de Regalías con criterio de ‘escopeta de regadera’, sino concentrar esos recursos y buscar un mecanismo de administración a través de entidades comunitarias bien seleccionadas que nos garantice total transparencia.

A ver cómo pude la señora Ministra de Educación (Cecilia María Vélez) liderar un acuerdo con los gobernadores y alcaldes para aplicar esos recursos y ampliar esa cobertura.

¿Cómo debemos ampliar la cobertura?: respetemos y apoyemos todos los maestros que están en el Estado, vamos a trabajar con ellos, por supuesto hay que avanzar en la racionalización de la planta humanamente.

Una maestra que vive en Pamplona, que tiene su casita allá, los niñitos estudiando, no le podemos decir a la brava: ‘se va para el Catatumbo’, o sea que la racionalización hay que hacerla humanamente, avanzar hasta donde se pueda en racionalización.

Segundo, que con la señora Ministra, gobernadores y alcaldes identifiquen unas organizaciones comunitarias para contratar ampliación de cobertura, igualmente con esos recursos que se puedan desembolsar del Fondo de Regalías. Aquí me mostraron el proyecto de la iglesia en Norte de Santander, a mi me parece muy bueno. Lo que se contrata con la iglesia sale bien. Hay que hacer ese tipo de esfuerzos y eso nos ayuda a cobertura.

También sugiero esto: examinar la posibilidad de hacer esos convenios a través de acuerdos sindicales con el sindicato. Colombia tiene una figura en la ley que no ha aplicado que se llama ‘los contratos sindicales’, es la figura promisoria porque en la medida que los apliquemos, podemos hacer el tránsito de un sindicalismo tradicionalmente reivindicatorio a un sindicalismo más participante.

Que bueno hacerlo, entonces, con la iglesia, con la propia organización sindical, con cooperativas, con comunidades sin ánimo de lucro, pero bien seleccionaditas porque estoy hay que acompañarlo de calidad.

Antes de hablar del tema SENA y del tema educación universitaria, sobre este tema el gobernador mencionó el fondo del Magisterio. Nosotros tenemos que buscarle recursos al fondo del Magisterio, ya el ministro (de salud y trabajo) Juan Luis Londoño va a proponer allí una serie de modificaciones, entre ellas un aumento de cotizaciones. No hay más camino porque lo que tiene que transferirle la Nación al fondo del Magisterio, yo había leído que más o menos 500 mil millones de pesos por año, de los años venideros. Entonces, nos va a tocar hacer unos reajustes en fondo del Magisterio, empezando por cotizaciones.

Bueno demos inicio a este consejo, muchas gracias a todos.