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INSTALACIÓN XXXIV CUMBRE DE GOBERNADORES
Octubre 17 de 2002 (Manizales – Caldas)

Apreciadas señoras y señores:

Me siento muy honrado de poder acudir a Manizales, a esta Cumbre de Gobernadores. Tuve el privilegio de haber sido gobernador de mi departamento y de conocer de primera mano la importancia del nivel intermedio de gobierno.

Quiero repetir hoy, que una democracia en vía de profundizar la descentralización, no funciona sin un nivel intermedio de gobierno fuerte. Como lo acaba de decir nuestro gobernador anfitrión y presidente de la Federación, los departamentos están bastante debilitados por sus finanzas públicas, sus gastos, la situación económica y fiscal de la Nación.

Y, contrariamente a lo que ha ocurrido en lo formal, que pareciera dar señales de profundización de descentralización, en lo real y material hemos echado para atrás.

Basta abordar un avión en cualquiera de nuestras capitales hacia Bogotá para encontrar que buena parte de las butacas va ocupada por alcaldes y concejales. Y cuando se les pregunta porqué las gestiones que tiene que hacer en la Capital de la República no las adelantan en la capital de su departamento, ellos sienten que el nivel intermedio no lo estamos apoyando para que funcione y que todas sus gestiones las tienen que realizar ante el Gobierno central, directamente.

La primera reforma práctica que yo pediría es, que los gobiernos departamentales sean los únicos para viabilizar proyectos municipales. De lo contrario, seguimos debilitando el nivel intermedio de Gobierno.

Convoquen a todos los alcaldes, con la ayuda del Ministerio del Interior, de Planeación Nacional, demos esa instrucción perentoria y que, por su puesto, en los despachos de ustedes –como gobernadores- las puertas estén abiertas para todos los alcaldes. No exijan sino dos requisitos: transparencia y capacidad de gestión.

Por supuesto, da mucha alegría venir a Manizales y también hay muchos motivos de tristeza al iniciar esta cumbre. ¡Alegría, llegar a esta ciudad, tan bella, este enclave andino de esas tonadas verdes tan ilusionantes!, al cual refiriera un poeta de los nuestros como “una fonda de Dios en tierra fría”. ¡Cómo agrada llegar a este cruce de caminos de la Patria!

Y, en medio de las difíciles circunstancias, después de muchos años, parece haber un leve respiro para la economía cafetera: se ha recuperado, levemente, el precio internacional. Infortunadamente el anuncio de fenómenos naturales en otras partes incide en ello, lo cual no debería ser así.

Se está haciendo un gran esfuerzo internacional para descartar cafés de mala calidad. Hemos pedido al gobierno de los Estados Unidos utilizar los poderes del Presidente de ese país, en materia de defensa del consumidor, para dictar unos estándares de calidad de café, a fin de que haya unas indicaciones claras al público sobre los cafés de calidad para que eso ayude a recuperar nuestro café.

Muchos teóricos dicen que el café de Colombia no es competitivo porque es de muy baja productividad. Yo no comparto esa tesis. Es muy costoso cultivar café en estas laderas y cultivarlo con las técnicas y procedimientos requeridos para lograr un café de alta calidad. Al contrario, Colombia ha hecho un gran esfuerzo para mejorar su productividad en procura de llevarla de la mano de la preservación de la calidad.

Lo que tenemos que hacer es recuperar la prima de calidad del café de Colombia. Por eso, los esfuerzos que muchos de ustedes lideran para industrializar el café de su departamento, son bienvenidos.

En Consejos Comunitarios que he podido realizar en algunos departamentos, he visto esos esfuerzos. Hay que continuar haciéndolos, el Gobierno Nacional los va a apoyar. Los va a apoyar con Bancoldex y los va a apoyar a través del acuerdo con la Federación Nacional de Cafeteros.

Necesitamos una gran proliferación de pequeños exportadores que busquen nuevos nichos de mercado, que industrialicen café de muy buena calidad y que lo exporten con valor agregado. Una buena operación avispa para recuperar en el mercado internacional la presencia de calidad del café de nuestro país.

Tenemos un consumo per cápita muy bajo. Mientras en el Brasil es de 3 kilos – persona al año, en nuestro medio es de 1.5 y además, hay países industrializados con un consume per cápita de 7 kilos. Tenemos que hacer, también, un esfuerzo para mejorar el nivel interno de consumo.

Con miras a ayudar a posicionar la calidad del café de Colombia en los nuevos nichos de mercado y a mejorar el nivel de consumo interno, hemos hecho un acuerdo con la Federación para empezar a abrir unas tiendas de café de calidad que vendan al detal.

Da tristeza ver, por fuera del país, los Starbucks y otras cadenas, que han aprestigiado unos cafés y han conquistado unas luchas de mercado, donde nuestra presencia es muy débil. Hay que fortalecer la presencia en esas tiendas y tener las propias, que se llamen Juan Valdez o Café de Colombia. En el acuerdo que suscribimos a principios de septiembre con la Federación, está prevista que a finales de este año, vamos a abrir las primeras cuatro: una en los Estados Unidos y tres en Colombia.

Si bien, nacerán de la Federación y del Gobierno, el Estado jugará a penas un papel promotor. Queremos que finalmente sea, un conjunto democrático de inversionistas colombianos, el que capitalice y desarrolle plenamente la estrategia.

La señora Gobernadora de Risaralda y la señora alcaldesa de Pereira, han pedido una concesión para tener en Pereira una tienda de ésta naturaleza y estamos dispuestos a que eso se haga. Y ojalá pudiéramos hacer esa concesión con cada uno de ustedes en todas sus principales ciudades.

El Gobierno, prudentemente, realizó un acuerdo con la Federación que implican costos fiscales en medio de esta escasez crítica de recursos y que va a ayudar a recuperar el café de Colombia.

Y además, hemos trabajado –respetando la independencia del Banco de la República- para que la tasa de cambio sea más competitiva. Lo que ha pasado en materia de tasa de cambio, en los últimos 70 días en Colombia, algún alivio ha traído a esta zona cafetera de la Patria.

Y lo hemos hecho con mucha convicción, porque un pesito de más que le llegue al cafetero, no se compra en dólares ni se lleva a especulación ni a financiar contrabando. Es platica que entra a la corriente de la economía, que inmediatamente produce un gran impacto en la demanda agregada y que se refleja en la adquisición de alimentos, de vestuario. Esto es, de aquello que impacta con extraordinarias consecuencias, la economía.

Por supuesto que siento tristeza y preocupación de que, al instalar esta Cumbre de Gobernadores, cuando todavía tenemos que registrar la noticia de que continúa secuestrado el gobernador de Antioquia, el ex gobernador del Meta, una gran cantidad de colombianos, la ex candidata Ingrid Betancur, los diputados del Valle del Cauca. Me he reunido ya, en tres ocasiones, con el Secretario General de Naciones Unidas (Koffi Anan), he hablado ya, con él, por teléfono en varias ocasiones y con los funcionarios.

El tema, de acuerdo con nuestros compromisos con Naciones Unidas, hay que manejarlo con confidencialidad. Pero, quiero decirles a ustedes que de la misma manera que como gobernante de los colombianos siente el deber de aplicar todas las medidas de autoridad para derrotar la violencia, también siento el deber de buscar por todos los medios salidas humanitarias, porque soy solidario y me golpea como a ustedes, la tristeza y la tragedia de estos compatriotas secuestrados.

Hemos puesto, en las prudentes manos de una gestión de buenos oficios de Naciones Unidas todas nuestras intenciones para que la Patria llegue a unos acuerdos con los grupos violentos y confiamos que Naciones Unidas nos conduzca, también, a poder tener un acuerdo humanitario que permita la liberación, cuanto antes, de estos compatriotas.

Para mi es muy difícil referir al tema porque, de un lado está el compromiso de confidencialidad y por otro lado está la angustia de ustedes.

Pero déjenme sí, transmitir, así sea tácitamente, toda la voluntad del Gobierno Nacional para cooperar a fin de que la gestión de Naciones Unidas sea exitosa.

Quiero referirme, antes de atender las preguntas de ustedes, a algunos temas que ha planteado el señor Gobernador de Caldas.

El Fondo Cuenta. Creo que fue una buena creación, sirve de antecedente para lo que, a mi juicio, tienen que hacer los departamentos: asociarse en tareas operativas y buscar la tercerización de servicios, a fin de lograr más eficiencia y economías de escala. El Fondo Cuenta tipifica dos elementos: una asociación de departamentos y la contratación de un sistema de servicio de terceros, para cumplir asociadamente, la tarea de recaudar unos impuestos.

Participo de la propuesta de ustedes de fortalecer y de extenderlo a otros tributos, como mismos lo han propuesto, el manejo del impuesto de vehículos.

Me asaltan dudas, distinguidos gobernadores, de que un artículo específico de la reforma tributaria ordene dedicar recursos de ese Fondo Cuenta al sostenimiento de la Federación. Sugeriría lo siguiente, como opción para que miremos varias: que ustedes exploren, en esta cumbre y de los días que vienen, con el señor Vicemisnitro del Interior (Juan Carlos Vives Menotti) la posibilidad de un decreto del Gobierno para que se pueda variar la comisión al administrador del Fondo Cuenta a fin de que, la Federación –que tiene que estar trabajando como representante de ustedes en las relaciones con ese Fondo Cuenta- participe de esa Comisión. Y por supuesto, pueda entrar la Federación a equilibrar su situación de ingresos.

Le veo causa. ¿Por qué?: porque ninguno de ustedes es, en particular, interlocutor del administrador del Fondo Cuenta. Ustedes lo hacen a través de la Federación, entonces la Federación realiza allí un trabajo que, en alguna forma, debe ser remunerada para su propia subsistencia.

Y, si fortalecemos el Fondo Cuenta, de acuerdo con lo que se ha propuesto con la reforma tributaria, pues esa ampliación de volumen de operación también va a ampliar la cifra absoluta percibida por el pago de los servicios o por la comisión de administración y por ende, la participación de la Federación.

Me da miedo hacerlo por ley, porque podríamos estar dando malas señales en materia de buscar recursos legales, para sostener entidades que en alguna forma son necesarias, aplausibles, pero finalmente gremiales. Creo que es mejor asimilar la tarea de la Federación a una tarea de co-participación en la administración del Fondo Cuenta, que le deriva el derecho de obtener recursos de esa Comisión. Sería mi sugerencia para que ustedes lo examinen.

El periodo de los gobernadores. Tenía yo, el gran honor de ser Presidente de la Conferencia de Gobernadores cuando en la administración del Presidente (Ernesto) Samper se propuso ampliar el periodo. Entre quienes éramos gobernadores en aquella época, está hoy, aquí, mi dilecto amigo y gobernador del Valle del Cauca, el doctor Germán Villegas.

Recuerdo que expresé que no era partidario de que por reforma constitucional tramitada por el Congreso, se nos ampliara un periodo porque el pueblo, al votar por nosotros, había votado para un periodo de tres años.

Eso lo repetí como candidato presidencial, pero en las reuniones con ustedes y con los alcaldes de Colombia, ustedes me han hecho los planteamientos que ha repetido esta mañana el señor gobernador de Caldas. A ustedes les ha tocado ser los gobernadores de la ley 617, a ustedes les ha tocado trabajar en una época de dramática escasez de recursos fiscales, a ustedes les ha correspondido tener que vivir factores de ingobernabilidad por la acción de los grupos violentos. Sus sucesores, tendrán la oportunidad de desempeñarse durante 4 años.

El país tiene un tremendo desorden en materia, ya, de elecciones de gobernadores y alcaldes. El señor Ministro del Interior (Fernando Londoño) tiene una cifra muy preocupante de la cantidad de elecciones que habrá que realizar el año entrante. Además, todos los días se nos dificulta más, la armonización de los planes municipales, departamentales con el Nacional de Desarrollo.

Razones, todas, para que encuentre muy razonable la petición de ustedes, de que el Congreso permita someter al pueblo, al mismo pueblo que los eligió a ustedes, la posibilidad de que su periodo no sea de 3 años sino de 4.

Esta semana, hubo una votación negativa en las Comisiones Primeras de Senado y Cámara, por su puesto respetable.

Creo que argumentos sólidos como los que ustedes han presentado, deberían examinarse de nuevo con el Congreso, en las próximas dos semanas, para que el Congreso haga un re-examen del tema en su Plenaria.

Se presentó, también, la alternativa de que entonces, se les permitiera, en defecto de la posibilidad de la extensión del periodo inmediatamente a 4 años, que les permitiera la reelección inmediata. Creo que el camino es el examen de ustedes, con el Congreso en estas próximas dos semanas, nuevamente del tema.

El Referendo. La situación de recursos de la Nación es bastante grave pero la tenemos que resolver. El presupuesto de la Nación el año entrante, vale aproximadamente 67 billones de pesos, los ingresos –a penas- 32,7 billones.

¿Qué le pasa a una familia cuyos ingresos representen menos de la mitad de sus gastos?: es insostenible. Lo mismo le pasa a la Nación.

Cuando comparamos los ingresos con los gastos, sin incluir los financieros, el déficit de la Nación el año entrante, es de casi 14 billones de pesos. Si a eso le sumamos las amortizaciones, encontramos que la necesidad de recursos está oscilando alrededor de los 28 billones de pesos.

¿Que está previsto?: unos desembolsos de recursos externos, bonos internos, externos de bonos de las multilaterales del orden de 20,8 billones de pesos. Está previsto utilidades del Banco de la República, del orden de un billón de pesos. Así y todo, nos hacen falta alrededor de 6,5 billones de pesos. Un faltante exageradamente alto.

¿Qué ha propuesto el Gobierno? Después de examinar todas las posibilidades, el Gobierno ha propuesto una estrategia con: acciones de ingresos, acciones de gastos y acciones de cooperación internacional.

En las acciones de ingresos, está la reforma tributaria. No me refiero al impuesto de conmoción (interior), porque el impuesto de conmoción no tiene vocación para contribuir a remediar estructuralmente el problema. Es una renta ocasional que se cobra por una vez, de acuerdo con lo que manda el texto constitucional sobre el alcance de los decretos de conmoción; que nos ayuda, simplemente, mientras se agostan esos recursos en el campo específico de seguridad.

La reforma tributaria tiene tres grandes capítulos: el capítulo de control de la evasión, el capítulo de renta y el capítulo de IVA y unos artículos no tan ambiciosos como los requerían departamentos y municipios para traer algún alivio a las finanzas, cuya responsabilidad ustedes tienen.

En el capítulo del control de la evasión, nosotros avanzamos con ese proyecto en el propósito de meter a la cárcel a los grandes evasores. Porque uno encuentra muchos compatriotas que cuando, se bajan de un avión en los Estados Unidos o en España o en Inglaterra, allá se pagan todos los impuestos con solidaridad, con disciplina social y aquí se desconocen las normas, es bien atentatoria contra el capital social de la Nación, la actitud de evasión de impuestos. Hay que sancionarla.

No solamente por razones fiscales sino también por el imperativo de construir un mayor nivel de capital social.

En cuanto a renta, se crea una sobretasa transitoria, se eliminan unas perforaciones y vamos a ver cómo con los ponentes, se puede avanzar en ese sentido. En el sentido de eliminación de perforaciones al estatuto tributario.

En cuanto al IVA, tema controversial, bastante explosivo desde el punto de vista político ¿cuál es la situación?: Colombia ha gravado el 40 por ciento de sus bienes y servicios, la comisión de ingresos del Estado propuso ampliar esa base al 70 por ciento.

Cuando empezamos a revisar ese proyecto, yo dije: muy respetable, pero nosotros no nos podemos comprometer con eso. Porque, para llegar a ese 70 por ciento y obtener la meta de recaudo que se habían propuesto, necesitaríamos gravar con el 16 por ciento toda esa ampliación de la base e incluir con es gravamen del 16 por ciento, la factura de servicios públicos, la factura de un pago de matrícula educativa, la factura de un pago de servicios de salud.

¿Qué definimos nosotros?: ampliemos la base, como también habrá que ampliarla en renta, porque el país que tiene aproximadamente 44 millones de habitantes, tiene 420 mil contribuyentes, que por algunas retenciones, eso se sube a 730 mil. Entonces, hay que hacer un esfuerzo de ampliación de base, ojalá con la mayor progresividad social.

Ampliar la base, dejando por fuera educación, dejando por fuera servicios públicos, dejando por fuera salud –salvo planes complementarios-, dejando por fuera arrendamiento de vivienda, algunos alimentos. Y que esa ampliación de base se grave con una tarifa diferencial. Inicialmente se propuso un 5 por ciento.

En materia de impuestos territoriales se ha propuesto la sobretasa a la gasolina, se ha propuesto la variación en la manera de gravar los aperitivos –a fin de corregir una injusticia, esa propuesta surge de las discusiones con ustedes-.

Ayer me observaban algunos congresistas que en el texto original no hemos sido suficientemente claro para que eso tenga efecto primero, en el impuesto de consumo y después en el IVA. O sea que hay que revisar que esa variación produzca un mayor recaudo de consumo y el proporcional mayor recaudo de IVA.

Por el lado del gasto, las propuestas de nuestra política son las siguientes: una reforma administrativa en varias etapas que nos ahorre, finalmente, un punto PIB. Ustedes han hecho un esfuerzo grande con la ley 617, lo han hecho los municipios, la Nación no la ha hecho.

En la última década, los gastos del Gobierno central aumentaron 11 puntos, en relación con el PIB. No es posible, que haya semejante aumento, en una época de descentralización.

Llegó la hora de aplicarle a la Nación la ley 617. Nosotros vamos a hacer esa reforma administrativa con toda la severidad, pero la vamos a hacer también, con herramientas sociales.

Nosotros tenemos que hacer un gran esfuerzo por el lado del gasto. El referendo tiene unas normas pedagógicas, unas normas que alivian la razón y unas normas que alivian las entidades territoriales.

En las pedagógicas, se propone una congelación durante 4 años de los salarios en el Estado superiores a 30 salarios mínimos. Esto es, quedarían congelados durante 4 años salarios de altos funcionarios, Fiscal, Procurador, magistrados de las Altas Cortes, congresistas, el Presidente de la República, para dar una señal clara de ejemplo al país entero. Por eso llamo a este tipo de normas que están en el referendo, normas pedagógicas, que nos deben aclimatar el conjunto del referendo y nos deben ayudar a crear una tendencia profunda para que Colombia sea austera en materia de gasto público, a fin de poder premiar la inversión en lo social y en infraestructura.

Normas, de alivio estructural: la congelación general de gastos de funcionamiento durante dos años. Como no se congelan las transferencias, ustedes al recibir esas transferencias podrían tener un ahorro que es, la diferencia entre la transferencia recibida y el menor gasto que resulte de la congelación.

Y en el texto se propone que ese ahorro se lleve al Fondo de Pensiones territoriales y a los fondos de pensiones de los sectores de salud y de educación.

Ese artículo, el primer año ahorra 1,5 billones de pesos, el segundo año ahora 1,3 billones de pesos. La mitad de ese ahorro alivia la Nación, la mitad alivia a entidades públicas, autónomas y a las entidades territoriales.

Hay otros artículos: por ejemplo, la eliminación de contralorías, la eliminación de personerías. El ahorro se llevaría a educación. Muchos de ustedes han reclamado tener recursos para eliminar en las escuelas públicas los co-pagos o esos gastos que se cobra a los alumnos y que en muchas regiones de Colombia por la agudización de la pobreza, se han constituido en barreras a la asistencia escolar. Ese ahorro permitiría orientar recursos hacia esa finalidad y permitiría también, avanzar en ampliación de cobertura.

¿Cómo se sustituye el control fiscal y la labor de las personerías?: la Contraloría Nacional, sin aumentar su presupuesto, adquiere el compromiso de asumir el control fiscal. Tiene 4 mil funcionarios, en los próximos dos años es posible que se jubilen 1.500, vacantes que nosotros deseamos se supriman y así lo ha dicho el señor Contralor (Antonio Hernández Gamarra). Y con la planta que preserve debe cumplir la tarea de mejorar cada día el control fiscal en lo nacional y extenderlo a las entidades territoriales.

¿Cómo lo extendería?: también con el apoyo de universidades departamentales, en las regiones y con funcionarios vinculados, mediante concurso, que sean oriundos del respectivo departamento.

Organismos regionales de diferente naturaleza, como cámaras de comercio, cooperativas, asociaciones profesionales, universidades, serían delegatarias de la Contraloría para realizar el control. Y la competencia para asuntos decisiones, por su puesto la tendía el ente público central.

La tarea de personerías. No se elimina, se encomienda a la procuraduría y a la personería, también exigiendo que los funcionarios que se vinculen para ese servicio, sean oriundos del respectivo departamento.

Quiero compartir con ustedes una cifra: el control fiscal de España se realiza con 600 funcionarios, para toda la nación española. Creo que, cuando nosotros tenemos una Contraloría Nacional con 4 mil, cómo no vamos a ser capaces, disponiendo además de tanta universidad en las regiones, de tanta buena asociación de profesionales, de hacer ese control fiscal sin las contralorías departamentales y municipales.

Algunas personas me dicen: ‘es un paso atrás en la descentralización’. El control fiscal no es elemento esencial de la descentralización. Fundamentalmente la descentralización es política, administrativa, de recursos, de gestión, operativa. Pero además, esas normas como la de apoyarse en entidades de la región y de realizar la tarea con funcionarios oriundos del respectivo departamento, son normas de salvaguardia de la descentralización.

Y lo más importante: esos recursos son para ustedes, para poder financiar una de las actividades esenciales en el proceso de descentralización que cada día depende más de ustedes, que es la actividad educativa.

Hay otras normas en el referendo, por ejemplo: las pensiones públicas, en adelante, no podrán tener valor superior a 20 salarios mínimos y no podrán concederse sin que la persona haya cumplido los requisitos de la cotización y eso obra desde el Presidente de la República hasta el más humilde de los funcionarios del Estado.

Dentro de poco, a medida que los ministros y los estudiosos del tema, expliquen el tema, el país verá la dimensión profunda de esa norma. Es una verdadera norma de ahorro y de ejemplo en materia pensional.

Confío que las normas que se van a aprobar en el Congreso de la República constituyan ese temario en un gran principio para que Colombia, por referendo, derrote definitivamente la corrupción, la politiquería; para que Colombia, por referendo, de una señal clara en materia de gasto público.

Frenemos esta tendencia insostenible de crecimiento del gasto público, armonicemos las finanzas del Estado y privilegiemos la inversión social sobre el gasto burocrático.

Tenemos un Estado inmensamente grande en lo burocrático, clientelista e inmensamente avaro en lo social. Eso hay que corregirlo.

Muchos de mis compatriotas se duelen de los procesos de privatización, claman por defender las empresas del Estado, pero hay que hacerlas sostenibles.

¡Claro!, nosotros estamos comprometidos a salvar a Telecom, en esa tarea se encuentra la señora ministra de Comunicaciones (Martha Pinto de De Hart), pero la empresa tiene que ser sostenible.

No creo que podamos hacer compatible el propósito de salvar empresas del Estado con la práctica de que esas empresas del Estado continúen derrochando y haciendo politiquería.

Para salvar las empresas del Estado, tienen que absolutamente austeras, transparentes, lograr altos niveles de productividad económica, social, convertirse en empresas viables, sostenibles, en el mediano y largo plazo.

El Referendo, con esa norma de congelación de gastos, avanza sustancialmente hacia ese propósito.

Está también la reforma pensional, no es bueno. Empecé a percibir el cambio del color de mi pelo cuando era ponente de la ley 100. No hay nada más desgastante que mover un tema pensional.

¿Pero, qué hago? Visito Santander, realizamos un consejo comunitario, presidido por el Gobernador y por el Alcalde de Bucaramanga: pasivo pensional de la región: 1,1 billón de pesos. Visito Bolívar, pasivo pensional, sin incluir sectores de salud y educación: casi 300 mil millones de pesos. Y eso se repite en todas las regiones de la Patria.

Nosotros tenemos que garantizar la manera de pode pagar las pensiones. Por eso, vamos a dar ejemplo y hemos propuesto, anteceder la reformal legal de pensiones, con la norma del referendo que reforma el sistema de pensiones.

El problema pensional que estamos tratando de ayudar a resolver con la ley causa disgustos en muchos sectores. El Ministro (de Salud y Trabajo) y los ponentes están trabajando para que la reforma sea de fondo, razonable, que respete derechos adquiridos –por su puesto- y que sea muy cuidadosa en aquello de las expectativas próximas.

Muchos se preguntan: ‘¿y todo van a ser mayores impuestos y reducción del gasto?, se va a deprimir más esta economía’. Duda plenamente justificada. Pero nosotros hemos encontrado una situación económica insostenible. Lo peor que le puede pasar a esta economía es seguir con esta volatilidad y con esta crisis.

No hay manera de inducir una recuperación del crecimiento económico y de obtener recursos para inversión social, sino se corrigen estos males estructurales de nuestra economía.

No queremos que nuestro país tenga que sufrir la crisis de otros vecinos, no obstante que la nuestra es bien onda. Hay normas de reactivación.

El Gobierno ha trabajado prudentemente con el Banco de la República, en procura de una tasa de cambio más competitiva. Eso le va a ayudar a la reactivación.

Lo que ha pasado con tasa de cambio en los últimos 70 días, va a producir unos resultados muy provechosos. Algunos dicen: ‘¿y la deuda en dólares?’, cuesta más inicialmente pero si reabrimos los mercados, ganando confianza y desembolsamos nuevos créditos, lo compensamos ampliamente. Y eso es válido tanto para el sector público como para el sector privado.

‘Que nos cuesta más la importación de materias primas’. Bueno, pero si exportamos más, lo compensamos ampliamente.

También se ha logrado una liquidez monetaria gracias a ese diálogo del ministerio de Hacienda y del Banco y de la República, que ha evitado que la tasa de DTF siga el curso de los TES.

Muchos observadores no se explican cómo tenemos una DTF por debajo de 8 puntos, cuando la tasa de descuento de los TES ha oscilado alrededor de esa altísima cotización del 17, que hay que rebajar.

En la reforma tributaria hay normas de reactivación, hay una serie exenciones orientadas a la reactivación. Me voy a referir a dos o tres de ellas.

Una que interesa bastante a esta región: es la exención a toda la industria reforestadota y a su transformación inicial. Eso se convierte en una norma muy atractiva para vincular capitales a la reforestación, donde Colombia tiene inmensas ventajas, que tiene que traducir en realidades porque son apenas hoy potenciales.

Estamos obteniendo una autorización legal, para dedicar unos recursos de capital de riesgo a sembrar 10 mil hectáreas, que produzcan –un ejemplo- en el departamento del Cesar.

Ese capital de riesgo se nutriría con recursos de FINAGRO y después se recuperarán vía titularización. Esa norma incluye la guadua sobre lo cual, Manizales es pionera y caldas tiene un gran futuro.

Otra norma: se propone la exención tributaria a los nuevos hoteles, a la remodelación de los viejos y al turismo ecológico. Nuestro país en eso tiene todo el potencial.

Una de las grandes posibilidades de ustedes, es gestionar desarrollo económico con apoyo en turismo. El fin de semana anterior lo demostró. Yo no veo mejor alternativa o complemento a la caficultura en el Quindío, en este gran Caldas, que el turismo.

Durante todo el fin de semana estuvimos chequeando qué pasaba el turismo interno: Cali y Popayán, incremento del tráfico en la vía: 50 por ciento. Popayán, crecimiento de la utilización de los hoteles: 36 por ciento. Silvia (Cauca), el hotel, con una utilización del 90 por ciento –mucho tiempo que no lo tenía-. Hotel de Coconuco, estaba prácticamente cerrado, utilización el fin de semana: 36 por ciento. Hoteles de Cartagena y Santa Marta: totalmente copados. En el Quindío, una presencia sin antecedentes en los parques, completamente llenas las fincas – hoteles, lo hoteles de la región. Girardot, que ha mantenido un nivel comparativamente alto de utilización turística, también batió record. Boyacá, lo propio. Ahí hay que seguir haciendo un gran esfuerzo.

Se propone que durante los próximos 3 años, la importación de maquinaria o la adquisición de maquinaria fabricada en el país, se le devuelva totalmente el IVA. No lo podemos devolver de inmediato por razones fiscales, pero en el año siguiente a la importación a la adquisición se devolvería el 50 por ciento y en los dos siguiente, de a 25 por ciento.

Y si la maquinaria se importa para una fábrica altamente exportadora, en el momento de la nacionalización, simplemente no se le cobrará IVA. Ya hemos empezado a firmar los decretos para eliminar totalmente el arancel a la importación de maquinaria no producida en el país. Eso nos tiene que ayudar a reequipar los sectores productivos y jalonar la recuperación de la economía.

Y estamos avanzando en normas para, no volver al viejo proteccionismo, pero si para hacer justicia con nuestra agricultura.

Y he dicho: ¿qué hay que hacer con la cadena?, pensemos en el maíz. Primero, garantizarle a ese productor nacional que pueda tener alta productividad. El país tiene ya 50 mil hectáreas de alta productividad pero no les pagan un precio equitativo. Es un maíz competitivo en productividad pero ese campesino no recibe un precio equitativo.

Lo primero que tenemos que hacer es garantizarle un precio equitativo y me dicen: ‘¿entonces qué pasa con los avicultores?’ Lo que les falte para poder atender su industria, déjeselos importar con el mínimo arancel, incluso por épocas con cero, con tal de que le garanticemos al productor nacional el precio equitativo.

No se trata de resolver un problema fiscal sino un problema de equidad frente a la agricultura. Entonces por eso, estamos avanzando en algo controversial pero necesario. Nuestro país, en un 25 por ciento depende de la agricultura, muchas ciudades cuya población aparece en el censo como población urbana pero que dependen totalmente del campo.

Entonces, estamos avanzando hacia la configuración de un sistema arancelario, móvil, que nos permita compensar o corregir los subsidios de los países de origen.

Es alarmante que lo estén llamando a uno, a toda hora de Nariño y que le digan: ‘aquí antes los campesinos vivían de trigo y de cebada, eso se acabó, ahora viven de dos vacas de leche y no hay quien les compre la leche porque se importaron 18 mil toneladas de leche y ni siquiera se impuso un arancel que corrigiera los subsidios de los países donde esa leche se ha originado’.

La decisión del Gobierno es corregir eso, lograr una economía agrícola crecientemente competitiva, pero con un nivel de protección razonable para que no la siga destruyendo el nivel de subsidios que los países industrializados le pagan a su economía agrícola.

Quiero, pues, decirles a ustedes que si bien tenemos que controlar gastos, aumentar ingresos, el Gobierno tiene un objetivo de recuperación económica y en ese objetivo nuestra política será persistente.

La descentralización. Yo propuse mucho en la campaña el tema de las regiones. He encontrado oposición con argumentos también muy razonables. Muchas personas dicen: ‘no se puede acabar con los departamentos’.

¿Qué me ha preocupado? La norma constitucional vigente permite la creación de las regiones pero en adición a los departamentos. Alguna experiencia tuvimos con los CORPES. Más fue el costo y la parafernalia, que el resultado.

Creo que para hacer unas alianzas de planificación, basta que rejunten los gobernadores y pongan a trabajar sus secretarías de planeación y armonicen sus planes de desarrollo.

A mi me da mucho temor que nosotros autoricemos unas regiones administrativas en adición a los departamentos. Porque, si no hay recursos para sostener debidamente los departamentos, ¿de dónde van a salir los recursos para las regiones? Por eso habíamos propuesto en la campaña permitir que departamentos se fusionaran en una gran región, que lo hicieran voluntariamente.

Si se fusionaran cuatro o cinco departamentos, pues van a tener solamente una gobernación regional, van a tener una asamblea regional, van a fusionar ingresos, reducir gastos vía economías de escala. Deben ser delegatarios de nuevas funciones y de nuevos recursos nacionales, pero la gran objeción que aparece es la que ha repetido el señor gobernador de Caldas: eso nos llevaría a que fueran desapareciendo los departamentos. Indudablemente.

Por esa discusión no encontré oportuno presentar el tema en el referido. ¿Qué les quiero proponer a ustedes? Que entre hoy y marzo, cuando se reunirá el Congreso para el primer periodo del año entrante, estudiemos una propuesta final de regiones, que no les implique mayores cosas.

También, quiero invitarlos a esto: a que desarrollemos mecanismos de asociación de departamentos para fines operativos. Tiene un antecedente: el Fondo Cuenta. Creo que hay que dar ese paso en materia de loterías.

En lugar de estimular una tendencia de centralización de juegos, asóciense. Pero creo que ustedes no pueden esperar iniciativas nacionales en esa materia, las iniciativas tienen que provenir de ustedes. Ustedes que son los líderes del nivel intermedio de gobierno, son los que le tienen que iluminar al país para fortalecer la descentralización.

Asóciense operativamente en todo lo que puedan, si se pueden asociar operativamente en obras públicas, si se pueden asociar para administrar la ecuación con criterio regional, entre departamentos vecinos, háganlo.

Quiero invitarlos primero, a que estudiemos para tener propuesto en marzo un texto de regiones. Segundo, a que avancen ustedes en un mecanismo de integración vía asociaciones para objetivos concretos.

Y tercero, a que examinemos ya, con el ministerio del Interior y con Planeación Nacional, que la Nación les entregue funciones y que la hagamos rápidamente mediante convenios, con recursos y sometidas a estas condiciones: si el recurso no llega, automáticamente regresa la función a la Nación y, que ustedes hagan el esfuerzo de no crecer la burocracia para administrar esa función que se les delega y que se pueda –también- delegar a una asociación de departamentos.

Por ejemplo, hay que acabar a Caminos Vecinales. Una asociación de departamentos puede asumir la función en la respectiva región. No tengo, sobre el tema, sino algunas ideas que me las he imaginado en ejemplos concretos, pero el país no puede seguir viendo que se agotan los periodos presidenciales sin una definición en esa materia.

Entonces, les propongo que entre esta fecha y marzo, avancemos en la definición de nuevas delegación de funciones y recursos de la Nación sin que crezca la burocracia departamental, con la posibilidad de que el delegatario sea una asociación de departamentos.

Y también les propongo que tengamos listo, para el mes de marzo, la nueva propuesta de regiones y que nos ayuden. Que nos ayude el doctor Jaime Castro, que nos ayude el doctor Orlando Fals Borda. Que nos ayuden los gobernadores del sur. –El señor gobernador del Tolima me entregó un proyecto de región que han venido trabajando los señores gobernadores de Putumayo, Caquetá, Nariño, Huila y Tolima-. Y que tengamos una propuesta de regiones que no sea un ente burocrático adicional a los departamentos ni un factor de costo adicional.

Muchas gracias.

 
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