INAUGURACIÓN DEL FORO: “LA
COMPETITIVIDAD DE LAS PYMES”
Octubre 15 de 2003 (Bogotá -
Cundinamarca)
Compatriotas:
Quiero saludarlos muy afectuosamente a
todos. Este ejercicio de hoy lo concibo como un proceso continuo
para contribuir al desarrollo
de un sector vital para nuestra Patria, como es el de la mediana
y la pequeña empresa.
Cuando analizo la idiosincrasia de mis
compatriotas y la estructura productiva de la Nación, arribo, como muchos de ustedes
habrán concluido, fácilmente a entender que en Colombia
hay más iniciativa empresarial que subalternativad laboral.
Que en el alma de cada colombiano está el potencial de un
empresario. Que lo que necesitamos es crear más y mejores
condiciones para ellos.
Los ejercicios que hemos hecho en todo
el país, gracias
a la colaboración de Confecámaras y de las diferentes
cámaras -por lo menos hasta ahora en seis ciudades-, tenemos
que llevarlos a muchas más ciudades y repetirlos para evaluarlos.
Sugería el pasado viernes en Pereira, que deberíamos
hacer una evaluación trimestral, si no con todos reunidos,
sí por lo menos quienes tengan la responsabilidad de hacer
esa evaluación. A esto hay que hacerle seguimiento. Los
problemas no se resuelven de la noche a la mañana, tampoco
uno debe declararse abatido por la circunstancia de que los problemas
no se resuelvan rápidamente.
Se me ocurre repetir muchas veces: ni triunfalismo
ni abatimiento. Ni triunfalismo, ni moridera. Se los estaba leyendo
en sus labios.
Lo que necesitamos es constancia, constancia, constancia. Es el único
camino.
Reconozco que el sector privado lo hace
mucho mejor que el Estado. Si el Estado colombiano tuviera capacidad
de responder, al ritmo
que ustedes demandan, que ustedes trabajan y que ustedes pueden
producir, las cosas estarían mucho mejor. Pero entiendan
nuestra presencia, la de todos estos compañeros míos
del Gobierno, como una indicación de buena voluntad para
trabajar y remover obstáculos hasta donde sea posible. Para
ayudar a que los propósitos empresariales de ustedes tengan
mejor suceso.
Creo que han escuchado una serie de intervenciones
en el día
bien importantes y mal haría yo fatigarlos ahora con un
extenso discurso. Mi presencia es más de solidaridad y de
compromiso. Y que sigamos en esta batalla permanentemente, con
disciplina, con constancia.
Muchas gracias a todos.
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