LANZAMIENTO DEL PROGRAMA DESARROLLO EMPRESARIAL
Abril 01 de 2004 (Bogotá – cundinamarca)
Señoras y señores:
Quiero ofrecer excusas por mi demora esta mañana, pero
hemos estado tramitando en el Congreso de la República un
proyecto bastante delicado, que es el proyecto de ley estatutaria
que desarrolla el acto constitucional antiterrorista, aprobado
el pasado mes de diciembre.
Quiero agradecer inmensamente este esfuerzo tan oportuno. Diría
que el Plan Colombia empieza a mostrar muchísimas caras,
porque algunos lo habían asociado exclusivamente con fumigaciones.
Empezamos a ver unos aportes sociales y empresariales de gran importancia
derivados del Plan Colombia.
Por eso hay que insistir en que el Plan Colombia no puede terminar
el año entrante, como está previsto. Que necesitamos
una segunda fase, que necesitamos continuarlo, que necesitamos
consolidarlo, entre otras cosas, porque la droga a penas ha empezado
a descender. El terrorismo mantiene su capacidad de hacer daño.
Nosotros no podemos dejar una tarea tan importante como es esta,
a mitad del camino.
¡Y qué oportuna esta iniciativa! porque es una iniciativa
que llega justamente en un momento en el cual no hemos aprovechado
plenamente las oportunidades que nos da el ATPDEA. Solamente un
bajo porcentaje de esas oportunidades se aprovecha en Colombia.
Tenemos que mejorar la oferta exportable para aprovechar mejor
esas oportunidades y este camino, que se lanza hoy, es expedito,
produce un proyecto piloto, servirá de modelo de ejemplo
y de espejo para muchos otros en el país.
Y resulta también muy oportuno, porque como todos ustedes
saben, el próximo 18 de mayo empezará el proceso
de negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los
Estados Unidos. Y además, después de haber firmado
la parte esencial del tratado entre la Comunidad Andina y MERCOSUR,
estamos negociando los últimos protocolos.
Entonces, todo lo que fortalezca a la pequeña empresa colombiana
para obtener de estos tratados los beneficios que el país
necesita para el empleo y para el ingreso, bienvenidas sean esas
iniciativas.
El Gobierno Nacional está trabajando en 3 direcciones para
conseguir confianza en Colombia –en la dirección de
la seguridad, en la dirección de la transparencia y en la
dirección de la reactivación económica y social-
encuentra este programa de gran importancia dentro de aquello que
llamamos las Siete Herramientas de Equidad para la reactivación
social.
Las recuerdo: la revolución educativa, el avance de la
protección social, el impulso a la economía solidaria,
el manejo social del campo, el manejo social de los servicios públicos,
la calidad de vida urbana y el país de propietarios.
Alguien me decía que en América Latina se tiene
un capitalismo vergonzante, que el liderazgo latinoamericano no
es capaz de defender el capitalismo. Creo que esa es una aseveración
parcialmente válida, mantenemos unos complejos políticos
por nuestra problemática social que nos impide decir claramente
que de defendemos el sistema capitalista. Creo que hay que enmarcarlo
en la visión de una sociedad sin exclusiones y sin odios,
fraterna, solidaria, con permanente debate democrático,
pero sin antagonismos ácidos. Una sociedad pluralista, pero
una sociedad con oportunidades para todos, sin exclusiones.
Y entonces ahí aparecen dos elementos: cómo la acción
del Estado le da confianza al capitalismo y cómo la acción
del capitalismo le da confianza a la comunidad. En síntesis:
cómo el Estado crea condiciones para que la inversión
fluya con confianza y la economía crezca y el concepto de
empresa no encuentre obstrucciones y al mismo tiempo, cómo
el desarrollo empresarial cosecha cariño entre la ciudadanía.
Diría, a guisa de resumen, que necesitamos un Estado que
genere confianza entre los inversionistas y unos inversionistas
que se legitimen ante la comunidad. Confianza y cariño.
Confianza para invertir, hay que ganarla con la acción del
Estado y al mismo tiempo cariño de la comunidad para la
inversión privada con la acción de la empresa privada.
Y construir un país de propietarios, es construir la consolidación
social del capitalismo, es construir su apoyo político,
es construir la visión de sociedad en la cual no haya exclusión.
Por eso, nosotros hemos celebrado mucho el apoyo que nos ha dado
la banca colombiana, las diferentes fundaciones del sector privado,
el SENA, el Fondo de Garantías del Gobierno, todo coordinado
por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que nos ha
permitido llegarle con crédito en este Gobierno a 900 mil
familias de microempresarios de la Patria. Lo que representó,
el año pasado, un crecimiento –de acuerdo con el Banco
de la República- del 57 por ciento en la afluencia del crédito
al microempresario.
¡Y que papel tan importante juega la pequeña y la
mediana empresa! Hemos encontrado ahí problemas de falta
de capacitación, problemas de falta de garantías,
problemas de falta de proyectos innovativos que agreguen valor,
problemas de falta de proyectos visionarios de las nuevas necesidades
de los mercados internacionales.
Este proyecto piloto, en estas ciudades colombianas, con una meta
tan importante en número de empresas a apoyar, en número
de empleos directos, calificados, a crear y en número de
empleos indirectos que resultarán del impacto general del
proyecto, nos ayuda mucho a superar estos obstáculos.
Recuerden: necesitamos un Plan Colombia que se consolide para
poder derrotar el terrorismo y la consolidación tendrá un
gran apoyo en estas iniciativas sociales y de democracia empresarial.
Necesitamos una empresa privada que se prepare para ganar más
competitividad para hacer más productiva, para mejorar el
ingreso y las posibilidades de empleo de los colombianos.
Necesitamos más capitalismo social. El Gobierno tiene toda
la decisión de contribuir a que haya más confianza
en los inversionistas y toda pequeña empresa que surge o
se consolida, logra que la comunidad le tenga cariño al
concepto de empresa privada.
A todos, mil y mil gracias por este magnífico esfuerzo.
Muchas felicitaciones. Queremos que sea el primero de una serie,
porque 8 mil empleos directos, es una cifra importante, pero necesitamos
multiplicar eso por millones. Muy amables.
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