FIRMA DEL ACUERDO PARA LA CONSTRUCCIÓN
DE LA CONEXIÓN VIAL ABURRÁ – ORIENTE
Diciembre 17 de 2004 (Medellín – Antioquia)

Compatriotas:

Quiero felicitarlos muy efusivamente por este logro. A todos. A usted Gobernador, Eugenio Prieto, con quien tuve la oportunidad de trabajar en el tema durante los primeros 18 meses de este Gobierno Nacional, a la concesionaria.

Agradecerle inmensamente el apoyo al Consejo de Estado, al Tribunal Administrativo, a la Contraloría del departamento. Agradecerle a la Asamblea del departamento y felicitar a todos los antioqueños.

Cuando el Ministro (de Transporte, Andrés Uriel Gallego), era Secretario de Obras del departamento, reunió 78 firmas de Antioquia, en una unión sin precedentes para esa concesión, que nació simultáneamente con la de Bello – Hatillo y con contratación del túnel Fernando Gómez Martínez, al occidente del departamento. Esa concesión se pacto para que esas 78 firmas construyeran el túnel a oriente y construyeran las vías complementarias.

Cuando empezó este Gobierno Nacional vimos una dificultad para que el país reasumiera un ritmo más acelerado de crecimiento, casi todas las concesiones nacionales estaban en pleito: las viales, los asociados de Telecom, ferrocarriles, algunas de aeropuertos, etcétera. Nos propusimos la tarea de resolver todos esos pleitos, pensando que un país en el cual toda la inversión privada que se compromete con el Estado y entra en contencioso, es un país sin futuro, es un país sin posibilidades de crecimiento.

Encontramos muy serias dificultades, una de las dificultades el temor a transigir, otra de las dificultades lo entusiastas –para no decir sanguíneos- en la toma de posesiones que nos bloquean la imaginación para transigir.

Y nos propusimos avanzar en esas transacciones sobre tres bases: primera base, que haya justicia conmutativa en las peticiones de las partes. Hay que transigir pero con equidad. Segunda base, que haya total seguimiento al ordenamiento jurídico. Y tercera base, que haya total transparencia que le cree confianza a la opinión pública.

Y nos propusimos, para esta tercera base, hacer el siguiente experimento con las conciliaciones que venimos haciendo en Telecom con los asociados: que los contratos, antes de firmarse, se divulguen ampliamente ante la opinión pública para que la ciudadanía conozca el contenido de esa transacción, porque muchas veces las transacciones generan suspicacia. Cuando se involucra la opinión, esas transacciones generan confianza.

A todo esto hay que sumarle lo siguiente: de todo el proceso de disputas legales en el Estado colombiano, todos tenemos que sacar una lección. Los contratos que más fácilmente entran en disputa, son los que nacen mal. Hemos tenido con algunos contratos muchas dificultades porque nacieron mal.

El Consejo de Estado, por ejemplo, nos acaba de reversar la Concesión de COMMSA, que con un gran esfuerzo de Alicia Naranjo se había logrado reorientar.

Entonces, alrededor de este tema hay que llamar la atención a todos nuestros compatriotas para que los contratos nazcan bien, con toda la transparencia y eso ayuda a evitar disputas legales. Y para que en aquellos casos, donde podamos hacer transacciones, las hagamos con equidad, con ajuste al ordenamiento, con transparencia.

Le pregunté a los concesionarios y a Eugenio Prieto hace más de dos años: ¿cuál es la dificultad de ustedes? Eugenio Prieto me dijo: ‘no, lo que pasa es que la Gobernación de Antioquia no esta de acuerdo con que se haga túneles, sino que se busque otra alternativa’. Y le pregunté a la concesionaria: ¿cuál es el problema de ustedes? ‘Que nosotros ganamos el derecho a hacer el túnel y nos lo van a quitar’. Entonces ahí empezamos un proceso de buscar opciones, porque lo que se hizo era muy importante, que lo consignarán en un relato bueno, nos ayuda, como un caso bueno de negociación.

En el país se ha tenido mucha inclinación a querer dialogar con los grupos violentos, pero muy mala disposición para resolver dificultades entre los que vivimos al amparo de la Constitución. A mi me sorprende eso.

Con los grupos violentos hay que correr a dialogar, entre nosotros hay que correr a darnos la espalda. Lo primero que hay que hacer en estos casos es, no romper la comunicación o si se ha roto reconstruirla y mantenerla permanentemente, aún en los momentos más difíciles. Segundo, buscar opciones. Esas opciones, a partir de conocer los intereses legítimos de las partes. Por eso la indagación, ¿usted por qué se opone? La respuesta: ‘yo no quiero túnel’. ¿Usted por qué se opone? La respuesta: ‘yo no quiero que me quiten el derecho a hacer el túnel’. Ahí exploramos intereses de las partes.

Y después preguntamos: ¿cuál es el interés de la ciudadanía? La comunicación. Entonces estaban examinados los tres intereses: del general ciudadano, del departamento y el de la concesionaria. Y dije: ‘vamos a buscar una opción’. Vamos a satisfacer el interés general, a construir la comunicación.

Le dije al Gobernador: cuando tuve el honor de ser Gobernador de Antioquia se definió hacer ese túnel. En ese mismo año contratamos ese túnel, contratamos la doble calzada de Bello – Hatillo y el túnel Fernando Gómez Martínez –en el cual nos dio un gran apoyo Guillermo Gaviria Correa, entonces director de Invías-, pero los tiempos evolucionan y uno se tiene que enamorar de sus propias obras, pero no del todo. Hay que tener una mentalidad abierta a la evolución.

Primero que todo respetemos el querer de la Gobernación. No se hace túnel, pero le dije: ayúdeme Eugenio, no lo mate, aplácelo. Cambie la idea de no hacerlo por la idea de aplazarlo. Entonces llamé a los funcionarios y les dije: salvemos el derecho de ustedes de hacer el túnel, pero atendamos lo que dice la Gobernación, no lo hagamos en primera prioridad. Ahí salió la idea de hacer la doble calzada, que se había hablado en el pasado y que alguna vez en este despacho, se la oí comentar a Guillermo Gaviria Correa y a muchos de los ingenieros, una idea que se había trajinado bastante en Antioquia.

Primera prioridad: hacer la doble calzada. El túnel: no se mata, se aplaza, para cuando las circunstancias permitan que se ejecute y así los concesionarios mantienen el derecho de hacerlo, con una incógnita en el tiempo. Incluso mi sugerencia es que, cuando estén bien avanzados en esta obra y bien contentos, todos, se vuelvan a sentar aquí con el Gobernador para revisar las fechas con toda la flexibilidad, para que nunca maten el túnel. Sería mi sugerencia, porque cada que uno hace una transacción tiene que celebrar eso y pensar en la otra, ahí les dejo esa inquietud.

De pronto las fechas para el túnel son corticas y lo pueden matar, pero no hablen de eso ahora, no hablen de eso ahora sino cuando lleven bien avanzadas la ejecución de esta obra. Aquí hay que tener mucha amplitud metal y mucha creatividad. Una de las cosas que yo he observado en todos estos procesos es que cuando uno se apega a su posición, se le bloquea la creatividad y deja de ver opciones.

Me parece que los términos que relató el Gobernador, le dan mucha claridad a las concesiones que tenemos que hacer en el país sobre la nueva generación de concesiones. Por ejemplo, este Gobierno encontró muchos pleitos por las garantías de tráfico mínimo, que afortunadamente no están en esta concesión. Bueno los felicito.

A mí me preocupaba mucho, este año, que no pudiéramos crear las bases para un gran programa de obras públicas, pero ahí se van creando. En este año se cumplió el centenario de la ascensión al poder del presidente General Rafael Reyes, quien fuera un gran realizador.

Y hemos avanzado en la solución de bastante de estos problemas. Que bueno que en medio de tantas dificultades fiscales, entre todos estemos avanzando para que el año entrante definitivamente este el túnel Fernando Gómez Martínez. Que bueno que hayamos podido reactivar la doble calzada Bello - Hatillo. Un proceso difícil pero bonito, porque ahí la negociación hubo que hacerla en un duro y constructivo pugilato con la comunidad.

El Gobierno Nacional tiene que reconocer que tiene un atraso en un aporte suyo, pero me dice el Director de Invías (Mauricio Ramírez Koppel) que esta conversando con el Gobernador para extenderle el plazo de sesión del peaje Pan de Queso para enmendar eso, porque esa es una gran obra y totalmente necesaria.

Celebro también lo que ha pasado con Devimed. Porque lo de Devimed estaba también en dificultades. Un reclamo muy grande a la Nación por la caída del tráfico, prácticamente paralizada la ejecución de obra y Devimed contribuye al arreglo de hoy, porque el trayecto nacional de Las Palmas, donde se va a construir esta doble calzada lo había entregado a la concesión de Devimed, ahora se rescata a la concesión de Devimed y se aporta a esta concesión para satisfacer el interés de la Gobernación de la doble calzada, el de la comunidad de tener la comunicación.

Entonces qué bueno que se vayan superando estos problemas y que podamos esperar un 2005 con mayor nivel de ejecución de obras.

Y viene sucediendo en todo el país. Hace dos días se reiniciaron las obras de la doble calzada del Eje Cafetero: Manizales – Pereira – Armenia. La encontramos prácticamente paralizada, sumergida en un gran litigio, logramos la transacción, después la aprobación de la transacción en los tribunales de arbitramento y se ha reiniciado la ejecución de la obra, con los tres elementos. El Ministro, sus directores del Inco e Invías están instruidos para arreglar todos los problemas: la equidad en las prestaciones, el ceñimiento al ordenamiento y la absoluta transparencia.

Pero hay que arreglarlos todos. Ahí por allá uno de ferrocarril que el arreglo es con la voluntad de uno de los dueños que no ha pensado con equidad, que nos ayude vendiendo su participación, pero lo otro veo la posibilidad de dar la vuelta completa y arreglarle al país todos estos litigios en materia de concesiones, que están empezando unas nuevas. Esa concesión de Bogotá a Girardot es de gran importancia.

Y se el interés para esta tierra del tema de COMMSA porque es trayecto esencial de la autopista Medellín – Bogotá. ¿Qué decisión ha tomado el Gobierno Nacional?: anoche me reuní con el Presidente del Consejo de Estado nuevamente y me dijo que no había problema. En los próximos 45 ó 60 días se abren dos licitaciones. Una licitación para mejorar todo ese trayecto del Magdalena Medio de Honda a San Alberto.

Nosotros tenemos un fondo de 160 mil millones en una fiducia en ese pleito, pero el Consejo de Estado ya nos ha dado señales claras de poder utilizarlo. Lo vamos a utilizar de dos maneras: una manera para mejorar la vía que esta muy deteriorada y una segunda que sea cuota inicial para la nueva concesión. Y vamos a abrir la licitación de la nueva concesión en ese tramo que falta de la Sabana de Bogotá al río Magdalena que es de El Vino a Puerto Salgar.

Yo no soy ingeniero, me deberían quitar la tarjeta profesional de abogado porque me graduó la universidad y me ha desgraduado la vida. En administración soy un caos, porque soy muy metido en todo, muy metido en los detalles. Y en economía soy muy aventado. Lo que no le gusta a cierta ortodoxia, pero como soy tan metido, entonces voy a ser uso de ese efecto para hacerle una insinuación a los ingenieros.

Uno de los problemas que hemos tenido con COMMSA es el temor de los colombianos a la longitud en túneles. Definitivamente la lluviosidad en la zona, la geología todo crean mucho temor y hay alternativas de viaductos.

Hemos visto una solución de viaductos magnifica, Ministro, usted me la mostró desde el helicóptero que esta en plena ejecución de Ibagué hasta Cajamarca. No para reemplazar el Túnel de la Línea –que ya lo estamos haciendo-. Y entonces la sugerencia para que esa nueva licitación de COMMSA se saque con el mínimo de túneles, y sustituyendo todo lo que se pueda de túneles por viaductos. Se lo digo muy respetuosamente a los ingenieros, pero creo que en el primer semestre del año entrante damos definitivamente ese paso que va a ser muy bueno para la Patria.

El concepto de Patria hay que estimularlo permanentemente sino no unimos esta Nación y todas estas obras deben ayudar a fortalecer ese concepto de Patria y a hacerlas con una cosita a la que se refería permanentemente El Libertador: la virtud para que no perezca la Nación.

Hay que tener virtud hoy escéptica en el sector privado, en el sector público, no nos queda más camino para evitar que la Nación perezca.

Muchas gracias.