ENTREGA DE LA ORDEN DE BOYACÁ EN EL GRADO CRUZ DE PLATA
A JORGE BARÓN TELEVISIÓN
Julio 21 de 2004 (Bogotá – cundinamarca)

Compatriotas:

Una efeméride como la celebración de los primeros 35 años de existencia de ‘Jorge Barón Televisión’, es una fiesta popular.

¡ Cuanto bien han hecho usted y su empresa a los colombianos! ¡Cuan merecido es el amor que este pueblo le profesa! ¡Cuanta sinceridad hay en los millares de felicitaciones que le están llegando!

Usted ha logrado una simbiosis colombiana entre televisión y pueblo. Su creatividad, su genio programador, su capacidad de expresión estética, tienen una raíz: el conocimiento de lo mejor de nuestra cultura. Y, el secreto de su éxito como hacedor de televisión y radio, radica en que usted ama profundamente a su pueblo, al gran pueblo colombiano. Usted lo sabe bello, inteligente, alegre, expresivo; y convierte esas virtudes en imágenes y en palabras llenas de fuerza y entusiasmo. Usted que nació del pueblo, es su líder natural, el agua que calma su sed de cultura y el ejemplo permanente para recorrer el camino de la superación.

Elogiar el trabajo de Jorge Barón es hacer un canto a lo comunitario y participativo. Difícilmente se podrá encontrar en la televisión del mundo otra programadora que haya llevado a las pantallas tantas caras de gentes del común, bellas, inteligentes, que cantan alegres, bailan espontáneas y proclaman su pertenencia incondicional a una patria que se llama Colombia. Son las caras de las mujeres cabeza de familia que educan con esfuerzo a sus hijos, de los soldados que están dispuestos al máximo sacrificio para garantizar la seguridad de la comunidad, de los jóvenes que dijeron ¡no! a la violencia, de los estudiantes colombianos, de los pequeños empresarios, de la Colombia campesina.

Su programa es un escenario para los sisbenizados, para todos aquellos que están buscando una oportunidad. Muchas veces, hay que reconocerlo, la que no han encontrado en el Estado, la que no han encontrado en los gobiernos, la han encontrado en sus esfuerzos, Jorge.

En sus programas, sus protagonistas son los mensajeros de las buenas acciones, de las virtudes, de la grandeza moral.

Exalto ante mis compatriotas su visión positiva de Colombia. Para usted, todo el territorio es la Patria. Los ríos de aguas inconmensurables son el bello telón de fondo de los conciertos; la arquitectura de los municipios más apartados, sirve como escenario para la presentación de las orquestas y cantantes a quienes usted con su “patadita de la buena suerte” convierte en ídolos positivos y dignos de imitación de los jóvenes.

Su visión positiva de Colombia es una convicción. Por eso, su Noticiero es la apoteosis de las cosas buenas, del progreso de las comunidades, de la reivindicación de lo colombiano.

Le debemos mucho Jorge: su tierra natal, la musical Tolima, se embelesa con los aires de ‘Jooorge Barón Televisión’, con los aires que programa para los canales. Usted es la avanzada de esa escuela de grandes difusores de la música andina, cuya mejor expresión son los niños de las orquestas de su departamento, que ayer amenizaron virtuosamente los actos de posesión de un coterráneo suyo comp. Presidente del Congreso.

Pero, como colombiano universal que es, también es un publicista de lo llanero, de lo costeño, de lo cundiboyasense, del pacifico, en fin, de cada lugar, clima y paisaje cuya decoración tenga como fondo los tres colores brillantes del pabellón de la patria.

Reciba la Cruz de Boyacá, como una demostración de que Colombia sabe honrar a sus mejores hombres. Usted, producto de su propio esfuerzo, del estudio, de la calidad profesional, es un ejemplo para los colombianos. Con el Presidente Belisario Betancur, digo que usted, es un “ibaguereño espontáneo, que se hizo colombiano integral y está convertido en uno de los mejores propagandistas de su patria ante propios y extraños”.

A Martha, a sus hijos, a sus paisanos tolimenses, a cada uno de los trabajadores y empleados de su empresa, los felicito por pertenecer a una organización que adora los colores de la bandera, que vibra con los himnos de la patria, que difunde la autoestima, que convence a los escépticos de que Colombia es el paraíso soñado de la humanidad.

Reciba en nombre de Colombia, esta condecoración, la Orden de Boyacá en Grado Cruz de Plata, legado del libertador para honrar y enaltecer a las mejores figuras e instituciones de la Patria.

Muchas gracias por todo lo que hace por nosotros, sus compatriotas. Felicitaciones por lo que ha hecho y siga haciendo mucho, mucho, que Colombia lo requiere.