CONSEJO COMUNAL DE GOBIERNO # 93
Abril 30 de 2005 (Santander de Quilichao – Cauca)

Querida comunidad

Muy grato venir a esta bella tierra de la Patria en el día del niño y en la víspera del Día del Trabajo. Es muy grato encontrarme aquí con estas bandas infantiles de música y de danzas. Quiero felicitarlo, Alcalde, a Usted y a toda la comunidad por ese gran esfuerzo. Me emocionaron mucho porque me entregaron una tarjetica, en donde recuerdan aquello que acuñamos en la Gobernación de Antioquia cuando dijimos “niño que abraza un instrumento musical, jamás empuñará un fusil contra el prójimo”.

La Ministra de la Cultura (María Consuelo Araujo) en agosto completará en lo corrido de este Gobierno la dotación y promoción de 590 bandas de música. Un país con estos talentos artísticos, ver que hoy solamente, mientras transcurre en Valledupar, en los municipios del Cesar la versión 38 del Festival de la Leyenda Vallenata, aquí en otro extremo de la Patria encontramos tanta creatividad y tanta riqueza artística. Por eso aquí hay un gran pilón para construir convivencia, para despertar ese talento innato de nuestra gente, de nuestra juventud y estoy seguro que la Ministra de la Cultura va atender algunos temas que ya me propusieron sobre esto. Ximena Garrido, de la Secretaría Privada, hija de Popayán, quien nos acompaña hoy, entonces la primera tareita Ximena, con todo afecto, que conectemos al Alcalde y a los directores de las bandas infantiles de música de acá con la Ministra de la Cultura.

Quiero saludar también a mi buen amigo Lucio Muñoz, representante a la Cámara por el Cauca, hijo de El Tambo, y quiero saludar la presencia del senador Moreno de Caro, que aún no la habíamos advertido.

Quiero felicitar a todos los niños de Colombia. ¿Qué Patria queremos? Una Patria que le felicidad a nuestros niños, yo le decía ahora a los senadores Aurelio Iragorri y José Darío Salazar con quienes venía en el avión, la generación mía, la de ellos, la nuestra no ha vivido un día de paz, nosotros no queremos eso para los niños colombianos. Queremos una Patria en donde ellos puedan vivir felices, una Patria que les de todas las oportunidades y una Patria que les garantice la convivencia.

La Ministra de Educación (Cecilia María Vélez) se propuso para los niños colombianos que en este Gobierno creáramos millón y medio de cupos escolares. Hemos creado millón 100 mil, aspiramos cumplir esa meta y hacer un gran esfuerzo para cumplirla y que el país quede cerquitica de la plena cobertura en educación básica. Le faltarían unos 500 mil cupos que nos tenemos que apresurar todos los colombianos para crearlos.

Yo pensaría en que la paz y la revolución educativa constituyen el gran núcleo, constituyen el gran marco, el principio básico para que los niños colombianos puedan vislumbrar que van a vivir plenamente felices en esta Patria.

Con Bienestar Familiar estamos haciendo un gran esfuerzo, en lo que va corrido de este Gobierno hemos creado dos millones 700 mil cupos más en Bienestar Familiar y aspiramos crear otro millón 200 mil cupos en lo que resta del año.

Entre los crecimientos de Bienestar Familiar quiero destacar que hemos crecido en 450 mil los cupos en los restaurantes escolares, que nos propusimos llevar un millón de niños nuevos a Bienestar Familiar a recibir un desayuno todos los días. La meta inicial eran 500 mil, aspiro, el 20 de julio cuando rinda el informe al Congreso de la República, decir que ya hemos llegado al millón.

Hemos trasladado a Bienestar Familiar temas tan importantes como la atención de los ancianos, en este momento estamos subsidiando 170 mil ancianos en la Patria, pero aspiro, el 20 de julio en el informe al Congreso, poder decir que ya se ha consolidado, perfeccionado el proceso de contratación para que 400 mil ancianos pobres reciban una comida diaria.

Llegamos a este Cauca tan bello, con problemas pero lleno de posibilidades. Cuando la televisión muestra los problemas del Cauca, no muestra la espontaneidad de las gentes caucanas. No muestra la alegría de las gentes caucanas. Que bueno que el país pudiera registrar eso, porque eso contagia, anima mucho a luchar por Colombia.

Hoy hicimos un viaje muy bello en un helicóptero del aeropuerto de Cali hasta acá. Con esta hoya del río Cauca, con este Valle que aquí comparten los dos departamentos, el Cauca y el Valle del Cauca, con esa fertilidad y esas plantaciones tan bellas y pudimos mirar obrar que llenan de orgullo a Colombia, pudimos mirar cómo se ha hecho una gran conservación de la carretera que va de Villa Rica a Candelaria, el Ministro (de Transporte, Andrés Uriel Gallego) se va a referir ahora a eso, cómo está prácticamente concluida la doble calzada de Santander de Quilichao a Villa Rica, me dan cuenta que la carretera entre Santander de Quilichao y Popayán está en muy buenas condiciones; sobrevolamos también la variante de Santander de Quilichao, que ya la están utilizando, faltan los dos intercambios viales, uno en el sur por donde se llega de Popayán y el otro en el norte por donde se sale a Cali. ¿Por aquí está el Alcalde de Puerto Tejada? Allá le sobrevolamos el Puente del Hormiguero y la obra va adelantada, Alcalde cumplido te felicitamos, ya vimos la obra en ejecución, el Ministro dice que en pocos meses va a estar lista.

Veo cosas muy buenas. El Alcalde de Popayán y el Gobernador me han dicho: ‘una magnífica Semana Santa en Popayán, tan católica como siempre, hablaba de eso el domingo en Roma en la misa de posesión de Su Santidad con el Arzobispo Iván Marín, pero con una afluencia turística extraordinaria, con una gran afluencia turística que eso bastante le ayuda a la economía de Popayán y a la economía del Cauca’.

Pero tenemos dificultades. Mil cosas buenas. Esa base industrial que aquí se ha instalado. Es distinto escribir un editorial en un períódico económico diciendo que aquí tenemos que quiten esos incentivos y venir aquí y registrar que gracias a esos incentivos se instaló esa base industrial. Ojalá no se hayan instalado esas industrias sino 100 más, ojalá lo que se ha instalado allí se hubiera multiplicado por mucho más, para generar empleo a favor de nuestros compatriotas.

Tenemos serios problemas, también, pero hay que enfrentarlos con amor, en el servicio a esta Patria. Lo único que nos ayuda a superar problemas es la perseverancia y no se logra sino con amor a esta Patria.

En el Pacífico nos ha crecido la siembra de droga, vamos muy adelante, Gobernador y honorables congresistas con todo el proyecto para la central hidroeléctrica de Rioseco, en Guapí, en Brazo seco, eso va ayudar muchísimo, todo está afirmado, asegurado con el Gobierno español, el Ministro de Minas (Luis Ernesto Mejía) les va a dar ahora un informe del avance de Ríoseco. Nos preocupa el crecimiento de las siembras de droga allí, hemos hecho obras muy importantes, quedó en muy buen estado el aeropuerto de Guapi, pero tenemos que enfrentar ese tema.

Yo quiero proponer hoy una idea., Uno de los programas sociales más importantes de esta Patria es el programa Familias en Acción. Lo concibió la anterior administración presidencial, y esta administración lo ha aplicado con entusiasmo y lo ha financiado con toda la determinación. Nosotros inicialmente empezamos a financiar 300 mil Familias en Acción, después 340 mil, este año estamos subiendo a 400 mil

En una reunión del Fondo de Inversiones para la Paz con el Consejero Social de la Presidencia, Luis Alfonso Hoyos hace dos días, tomamos varias decisiones, una de ellas es tener 40 cuadrillas de campesinos colombianos, 30 inicialmente en la erradicación manual de la droga y eso hay que crecerlo muchísimo, vamos a comprometernos a fondo en la erradicación manual. Hoy tenemos 26 cuadrillas trabajando, en pocos días vamos a tener 30, no para sustituir fumigación, sino para tener al lado de la fumigación otro esquema que ayude, que genere empleo, que irrigue ingresos, que vincule más colombianos a esa necesaria lucha de erradicación de la droga.

Y la otra decisión que tomamos en esa reunión de hace dos días es que al pasar este año de 340 mil a 400 mil Familias en Acción. Ahí no nos vamos a quedar. A propósito, el próximo domingo hay un primer pago de Familias en Acción, extraordinario, en Quibdo y otro en El Pozón, la zona más pobre de Cartagena. Vamos a subirnos, honorables senadores, a 500 mil Familias en Acción este año. Las otras 100 mil se van a financiar con la partida que ustedes apropiaron para atender desplazados.

Pero aquí viene mi propuesta. Anoche en Santa Marta hicimos una evaluación del programa Familias Guardabosques, que hay unos primeros grupos de Familias Guardabosques en el Cauca. ¿Cuántas Familias Guardabosques tiene el Cauca? 700, todavía es poco. En el país hay 36 mil, 31700 que están recibiendo el pago, cinco mil con las que hay problemas porque para pagarle a una Familia Guardabosques, Naciones Unidas necesita certificar que todo el área esté libre de droga. Sin esta certificación no podemos pagar. Y ya de todas partes nos piden más Familias Guardabosques, bastante difícil presupuestalmente. Yo quisiera anunciarle hoy al Cauca un gran programa de Familias Guardabosques para el Pacífico. Mientras lo podemos montar, les voy a proponer lo siguiente. Que la Gobernación y Luis Alfonso Hoyos, con la ayuda de los honorables congresistas y de los alcaldes del pacífico cacucano, definan un avance muy ambicioso de Familias en Acción en el pacífico caucano y en el pacífico nariñense, pero con esta condición. ¿Cuáles son las condiciones que hoy se le exigen a una Familia en Acción? Que los hijitos estén asistiendo al colegio. Se les paga la platica cada dos meses, siempre y cuando los hijitos estén asistiendo el colegio.

Extendamos, Luis Alfonso, Gobernador, todo lo que se pueda el programa Familias en Acción en el pacífico nariñense y en el pacífico caucano, pero con una condición adicional. Que esas familias se comprometan a mantener el área libre de droga. O sea que sería la condición tradicional del programa Familias en Acción, que los niñitos asistan al aparato escolar y la segunda condición, que el área se mantenga libre de droga.

Mañana vamos a anunciar en Buenaventura, Senador Carlos Holguín y José Luis Arcila y Luis Eduardo Sandino, doctor Cuello que me acompañan del Valle del Cauca, vamos a anunciar en Buenaventura una ampliación de cinco mil Familias en Acción. Se va a hacer toda la gestión para realizar el primer pago en agosto y a ver si a la tarde, Usted, Luis Alfonso, de las 100 mil que vamos a crecer, (este año crecemos 160 mil y ya está asegurado el crecimiento de 340 a 400 y está apropiado el dinero para las otras 100 mil), de esas 100 mil, dedíquele un porcentaje importante a los municipios caucanos y nariñenses del pacífico, con esas dos condiciones. Haga cuentas y mire hoy. Estos consejos no son de promesas, uno no puede resolver los problemas del país de la noche a la mañana, pero con buena fe y perserverancia vamos resolviendo un problemita, resolviendo el otro, entre todos.

A ver esta tarde si podemos asumir un compromiso factible, no una promesa, porque un Gobierno que vive a toda hora dándole la cara al pueblo colombiano en esta gestión comunitaria es un gobierno que no puede decir mentiras, porque si ustedes me preguntaran cuál es la razón de fondo, institucional para este esfuerzo de Gobierno con el pueblo a toda hora, recuperar la credibilidad de los colombianos en las formas democráticas que nos gobiernan.

Mi razón personal es de afecto al pueblo colombiano. A mi me dicen por ahí un médico que me trata el oído que tienes que descansar y yo bueno, te voy a hacer caso, mañana me voy a un consejo comunitario. Para mi no hay cosa más satisfactoria que estar a toda hora reunido con el pueblo colombiano porque por lo menos, que yo pueda dejar un recuerdo en la Presidencia de la República, “Uribe quiso al pueblo colombiano”, es mi gran ambición, afecto al pueblo colombiano.

Pero lo más importante es la recuperación de la credibilidad en las instituciones democráticas que nos gobiernan y en eso tiene que haber compromiso, discusión pública, pero no puede haber mentiras. Y cuando el Gobierno falla en un programa o tenga que aplazar un programa, etc, dar la cara y decir hemos tenido este problema, tenemos que introducir este correctivo.

Y aquí empieza esta cordillera en donde hemos tenido estos problemas de orden público. La verdad es que estos consejos no se refieren al tema de orden público, yo lo voy a tocar marginalmente, de pronto hasta me excederé en él. Primero que todo reiterar la Colombia que queremos, una Colombia sin drogas ilícitas, una Colombia sin guerrillas, una Colombia sin paramilitares, una Colombia sin corrupción.

Yo saludaba ahora a mis compatriotas indígenas. Saludaba ahora a mis compatriotas alcaldesas y alcaldes, saludaba ahora a mis compatriotas los niñitos, saludaba ahora a mis compatriotas los parlamentarios, los diputados, los concejales, los líderes comunitarios. ¿Qué queremos? Que todos podamos vivir tranquilos y felices en Colombia. Que al congresista que critique al Gobierno nadie lo moleste. Que al que apoye al Gobierno nadie lo moleste. Que el alcalde proceda honradamente en el cumplimiento de sus deberes y que no tenga presión de grupos terroristas de índole ninguna, que no la tenga.

Que la democracia florezca tranquilamente, que todas las ideas posibles florezcan en Colombia sin que sean perturbadas por el terrorismo, que haya debate permanente, pero debate fraterno, debate creador, no debate de posiciones que antagonicen, sino debate en el camino de construir soluciones, de sintetizar la contradicción para hallar la solución. Eso es lo que queremos. Para que eso se de, por eso tenemos que derrotar el terrorismo en esta cordillera y hay que derrotarlo. Ustedes han tenido esa plaga 40 años y hay que derrotarlo, yo le decía esta mañana a los generales Mario Correa, comandante de la División, al General Pérez, comandante de la Brigada, al Coronel Florez, comandante de la Policía del Cauca, al Coronel Garay, comandante de la Brigada de Popayán y al General Pérez, comandante de la Base Aérea Marco Fidel Suárez, vamos a mantener una acción militar y policiva contundente, permanente, Colombia no puede seguir en esta cordillera caucana con una acción militar de simple contención, de simple sostenimiento, necesitamos una acción militar de definición para derrotar el terrorismo y devoverle la paz al pueblo caucano, que es justamente el reconocimiento de sus libertades.

Hace 15 días cuando visité Toribio saludaba allá a muchos de mis compatriotas indígenas, 40 años con esa pesadilla encima, este país bellamente en su democracia, en su Constitución ha reconocido todos los derechos de la diversidad étnica de Colombia. Qué bueno encontrar aquí en esta reunión la diversidad étnica de la Patria, qué bueno en esta reunión darle la mano a mis compatriotas indígenas, a mis compatriotas indígenas, a mis compatriotas afro colombianos, a mis compatriotas que residen en esta parte del departamento. El ordenamiento jurídico colombiano, la sicología colectiva del pueblo colombiano, ambos son generosos sin restricciones para construir un país en paz sobre la base de su diversidad. Por ejemplo vine el año pasado a Popayán, discutí mucho con la comunidad indígena cinco puntos que ellos proponían para su marcha. Hoy les quiero asegurar que nosotros no vamos a comprometer los recursos ambientales de Colombia en tratados internacionales de comercio. Es la primera vez que un país en un tratado de comercio defiende sus recursos ambientales.

Muchos gobiernos en Colombia han sido comprensivos de los reclamos de tierras de las comunidades indígenas, este país ha avanzado bien en eso. A mi me gusta la controversia, participo en la controversia, pero también la respeto, me he sentado muchas veces con el honorable Congreso a controvertir sobre el texto de un proyecto de ley, pero a buscar opciones, como me he sentado en Popayán con mis compatriotas de las comunidades indígenas a discutir pero también a buscar opciones.

Hicieron esa marcha pacífica. Yo les dije hombre, creo que los cinco puntos que me proponen están resueltos, pero respetamos la marcha, lo importante es que no interfieran la carretera y el mundo les destacó esa marcha, bellísima, yo mismo gocé viendo esas fotos tan bellas que venían en primera página de los periódicos. A mi me gusta un país con una democracia vibrante, yo no reconozco sino dos enemigos en la Patria, el terrorismo, mientras sean terroristas y la corrupción.

Yo no reconozco como enemigos a mis contradictores en el debate, simplemente son puntos de vista que hay que procurar manejar fraternamente, creativamente, para buscar opciones.

Yo me gasté el primer año en la Gobernación de Antioquia creando condiciones para acuerdos de paz en Urabá. Trajimos al profesor Roger Fisher a capacitar ciudadanos en negociación pacífica de conflictos, capacitamos en todo el departamento 90 mil multiplicadores, era Obispo de Apartadó el inolvidable monseñor Isaías Duarte Cancino, a quien nunca olvidaremos , con quien hicimos una tremenda revolución educativa allá, él presidía la Comisión de Paz.

Las FARC decía y me mandó decir con el Obispo y con la Alcaldesa de Apartadó que necesitaban un diálogo regional para hacer la paz y yo le dije al Presidente Samper y al entonces Comisionado de Paz, nuestro hoy Embajador en Suecia, Carlos Colmes Trujillo. No quería el Gobierno, finalmente aceptaron y cuando el Gobierno me dio el permiso ya las FARC no quiso.

Es que siempre nos han engañado. Hace muchos años antes de aprobarse en este país la elección popular de alcaldes, las FARC nos mandaba comunicados diciendo que persistían en la lucha armada que porque aquí no se podía elegir a las autoridades locales. Colombia incorporó la elección popular de alcaldes en el Gobierno del presidente Betancur, se empezó a practicar en el gobierno del presidente Barco después de más de 100 años de debate e incorporó la elección popular de gobernadores en la Constitución del 91 que además creó excelentes instituciones de democracia directa. En el 2003 tuvimos una elección popular de alcaldes rodeada de garantías. Le dijimos al Ejército y a la Policía hay que cuidar a los candidatos de la oposición con toda la dedicación para mostrar la eficacia de esta democracia y así se hizo.

Yo le he dicho al mundo: los derechos de que hicieron gala opositores y abstencionistas frente al referendo, las garantías que tuvieron candidatos a gobernaciones y alcaldías provenientes de partidos alternativos a los tradicionales, de partidos provenientes de la antigua guerrilla, todo eso habla bien por la democracia colombiana.

Aquellos que decían Uribe dictador, ¿qué pudieron decir con las garantías democráticas con las cuales se les rodeo? Hemos dicho, Colombia puede decirle al mundo que su seguridad es democrática en la teoría del Gobierno y es democrática en la práctica de todos los días. He dicho en privado y en público a los soldados y policías de la Patria que ellos no integran la Policía o el Ejército del Presidente, que ellos integran la Fuerza Pública de la Constitución, para proteger por igual a todos mis conciudadanos. Esa es nuestra tarea.

Creo que en el Congreso de la República han sentido todas las garantías para criticar, para hacer oposición, nosotros llamamos esta Seguridad Democrática porque es para profundizar la democracia, no para instaurar dictaduras, es para derrotar la dictadura del terrorismo, no para instaurar dictaduras de Estado. Eso si que es bien importante y por eso vamos a defender el concepto democrático de nuestra seguridad que nos honra ante los colombianos y nos honra ante el mundo entero.

Yo he procurado que el Gobierno colabore con todos los alcaldes y gobernadores del país, sin preguntarles por el origen político de su elección. Eso se ha hecho para construir gobernabilidad en el marco de nuestra Seguridad Democrática. Pero la respuesta del terrorismo ha sido la misma, siempre la trampa.

Un día la excusa era que no había diálogo regional, se autoriza el diálogo regional y para nada vale, en ese momento lo eluden. Un día anterior la excusa era que no había elección popular de alcaldes, se autoriza, después la de gobernadores y se convierten ellos en los verdugos, en los sicarios de los alcaldes y eso se lo enseñaron a los paramilitares. Y encontramos una Patria con casi 400 alcaldes sin poder ejercer, presionados por guerrilla y por paramilitares. Yo recuerdo que el 8 de agosto, al día siguiente de mi posesión, antes de las 6:00 de la mañana llegue a Valledupar para empezar la tarea de derrotar el terrorismo en las carreteras del Cesar, el Magdalena y La Guajira. Y por la tarde volé a Florencia y encontré los alcaldes del Caquetá arrumados en Florencia porque la guerrilla no los dejaba desempeñar las funciones que el pueblo les había asignado en limpia gesta democrática.

¿Cuál es uno de los resultados de nuestra Seguridad Democrática? Que hoy con excepción de uno, dos, a lo sumo tres casos, los 1100 alcaldes de la Patria pueden ejercer sus funciones sin que hayan sido perturbados por el Gobierno para la elección y sin que el Gobierno permita que los terroristas triunfen en el propósito de perturbarlos para el ejercicio de sus tareas administrativas.

Esta predica nuestra de Seguridad Democrática con casi tres años de Gobierno dejó de ser una teoría y hoy es verificable en la práctica y eso nos da autoridad moral para decir que hay que derrotar el terrorismo. A mi me dicen, Presidente es que en esas zonas no se puede derrotar el terrorismo porque las FARC tiene allí base social. No, tiene crucificados que es distinto a tener base social. En ese primer año de la Gobernación de Antioquia yo hice un gran esfuerzo con esa Comisión de Paz, un gran esfuerzo educativo en procura del diálogo regional y no valió; y me reuní con unos obispos y con un alcalde que había sido religioso. Y les dije, no me quedan sino dos años en la Gobernación de Antioquia, me gasté el primero buscando la paz a través del diálogo y me hicieron trampa, me voy a gastar los dos que me quedan bregando a derrotar a las FARC en Urabá.

Y me dijo uno, Álvaro no lo intentes que tienen mucha base social, y dije creo que no, creo que lo que le pasa al campesinado es que no tiene Estado que lo defienda, entonces tiene que vivir esclavo de los grupos terroristas y la práctica nos dio la razón. Empezamos con el Ejército a entrar a Mutatá, a una parte y a la otra y a derrotar estos bandidos y a llamara a la población civil a que no apoyara ni a la guerrilla ni a los paramilitares sino a la Fuerza Pública, como tiene que ser en una sociedad democrática, la razón subyacente a nuestro programa de cooperantes.

¿Saben qué me decían los campesinos? Buena gobernador, si quiera, eso si no se salgan de aquí, ya que vino la Policía, ya que vino el Ejército no nos abandone, porque si nos abandonan enseguida llega la guerrilla y nos mata por auxiliadores del Ejército y después se va la guerrilla y vienen los paramilitares y nos matan por auxiliadores de la guerrilla.

Entonces veo algo muy parecido en esta cordillera caucana. Comunidades indígenas esclavizadas por el terrorismo, alcaldes condicionados por el terrorismo. Gobernador, yo quiero destacar ante el país su valor civil, su compromiso para que derrotemos el terrorismo como quiero destacarlo de los congresistas del Cauca.

Déjenme decir esto, el debate no es si la población les ha colaborado o no, porque es que la población ha estado sometida, esclavizada por el terrorismo y no ha tenido la presencia con determinación y permanencia de las Fuerzas Liberadoras por parte del Estado. El debate es cómo vamos a permanecer allí con la Fuerza Pública y, generales de la República, al agradecer a ustedes, a sus soldados y policías el esfuerzo, por favor meditemos sobre esto y apliquémoslo: la Patria después de 40 años de sufrimiento del terrorismo no puede seguir con una actitud de acción militar de sostenibilidad, no puede seguir con una acción militar y policiva de contención, la consigna de la hora en esta cordillera caucana es una acción militar y de Policía de definición para derrotar definitivamente el terrorismo de acá.

Que las comunidades indígenas sean regidas por la Constitución colombiana y por las normas que la Constitución colombiana autoriza para que sean adoptadas por sus cabildos. Que la comunidad libremente elija libremente a sus congresistas, sus diputados, sus alcaldes. Que se discutan todas las ideas económicas y sociales, pero que no haya allí terroristas ni de un lado ni de otro. Vamos a sacarlos, me empeño en esa tarea y por lo pronto vamos a seguir evaluando nuestra acción militar y policiva en esa zona cada ocho días un consejo de seguridad dedicado a esa zona de esta tierra porque hay que recuperarle la paz.

Hemos vivido momentos muy difíciles, reveses, dificultades, pero eso hace parte de nuestra determinación de que el Estado desaloje al imperio del terrorismo, de que las fuerzas institucionales de la democracia desalojen las fuerzas esclavizantes del terrorismo, en nombre de una seguridad que quiere ayudar a profundizar la democracia, tenemos que derrotar unas fuerzas que han instaurado una dictadura terrorista y eso tiene costos, tiene dificultades.

Estos señores creyeron que allá se iban a quedar toda la vida y que bueno le han dejado a esa región que han dominado durante 40 años. Nada, pobreza, atraso, dificultades, como nada bueno le han dejado a Colombia. Que cada soldado, General Correa se gane el afecto de todos los indígenas. Que cada soldado, que cada Policía, se ganen el afecto de todos los campesinos. Nosotros no estamos para entrar en contradicciones con los indígenas y con los campesinos, sino para quererlos y hacernos querer de ellos. Que ellos sientan que las fuerzas institucionales de la Patria están organizadas para proveerlos de garantías para el ejercicio de sus libertades, transmitamos eso al oído de cada uno de los habitantes de este macizo colombiano y practiquémoslo para que ellos sientan más y más confianza.

Construir esa paz que nace de la autoridad, la paz no nace de la actitud complaciente con el terrorismo, cuando se es complaciente con el terrorismo el terrorismo se crece, la historia de Colombia está llena de ejemplos, alguna vez le oí decir a Antonio Navarro que el M – 19 había hecho la paz porque el Ejército lo copó en Tacueyó, estudié durante un año con Joaquín Villalobos, ex comandante de las guerrillas de El Salvador y me dijo, cada que el Gobierno de Napoleón Duarte nos llamaba al diálogo, nosotros acudíamos al diálogo no para hacer la paz sino para avanzar hacia la toma violenta del poder. Solamente cuando eligieron a Cristiani y él procedió con toda firmeza de autoridad empezamos a entender que teníamos que hacer la paz porque llegó un momento en el cual ya no teníamos victorias militares, llegó un momento en el cual la división al interior de la guerrilla se dio entre aquellos que decían que estaban estancados en lo militar y otros que decían que no, que no estaban estancados sino derrotados.

Colombia ha sido un escenario que ha demostrado cómo ese principio elemental es incontrastable, inobjetable, cuando al terrorismo se le apacigua, cuando al terrorismo se le da ventajas en nombre de la paz, el terrorismo se crece, acrecienta la violencia, aumenta sus expectativas de enriquecimiento, incrementa su tiranía. Cuando al terrorismo se le enfrenta con toda persistencia, llega un momento que tiene que hacer la paz.

La paz que se está haciendo con los paramilitares no es por pura liberalidad de ellos, en eso hay una causa determinante que mirará la historia, la contundente acción militar contra esos grupos en este gobierno.

Yo no se en qué momento va a negociar las FARC, en qué momento va a negociar el ELN. Al ELN le hemos dado todas las posibilidades, están muy bravos porque el Gobierno no les acepta que puedan seguir secuestrando. Nosotros les hemos dicho: no tienen que desarmarse, no tienen que desmovilizarse, basta con un cese de hostilidades y que ese cese de hostilidades tenga como reciprocidad una suspensión de las acciones militares ofensivas contra el ELN mientras se respete ese cese de hostilidades. Y que mientras se da ese cese de hostilidades haya un garante internacional que le diga al mundo, el ELN respeta ese cese de hostilidades y el Gobierno ha respetado no continuar acciones militares contra ellos en reciprocidad con ese cese de hostilidades, y que mientras eso se de haya diálogo en el extranjero como ellos lo propusieron, pero ¿qué dijeron? Que cese de hostilidades si, pero no suspensión del secuestro. ¿Quién puede aceptar eso? Yo estoy seguro que si nuestra acción continua puede que no con este gobierno, pero con otro van a negociar.

Puede que mañana o pasado mañana debilitados digan, se fue Uribe, eligieron uno que nos gusta, con este si negociamos. Esa va a ser la apariencia, de que el nuevo les gusta, pero la causa definitoria de la negociación será la capacidad de este Gobierno de golpearlos, la determinación de este Gobierno de derrotarlos. Por eso llamo desde aquí a los soldados y policías de la Patria para que persistamos en esa tarea, no más contención, no más sostenibilidad, acción militar y policiva contundente, definitiva para quitarle a nuestros compatriotas de la cordillera caucana el verdugo del terrorismo, para devolverles la libertad y para devolverles la dignidad.