INAUGURACIÓN DEL CENTRO DE CONVENCIONES LAS AMÉRICAS
Agosto 27 de 2005 (Cartagena de Indias – Bolívar)

Compatriotas:

Acudo con inmenso entusiasmo a compartir con ustedes el alborozo de este magnífico aporte, que con la luz, la inteligencia y el patriotismo de don Alberto Araujo, la familia Hotel Las Américas Global Resort, le hace a nuestra Patria.

Hoy es un día muy emocionante. Ver esta magnífica obra, el entusiasmo que subyace a ella, la fe en Colombia que la ha inspirado, ver una vez más las dotes intelectuales, la capacidad ejecutiva de sus promotores, el patriotismo de sus líderes, el consumado y ejemplar patriotismo de don Alberto Araujo.

Yo sé que bastaría con decirle don Alberto: “muchas gracias por lo que ha hecho por Colombia”, pero la solemnidad de la ocasión, sus palabras, sus propuestas, sus proyectos, el libro “Cartagena Empresarial”, que entrega en el marco de esta ceremonia ese cartagenero también ejemplar, el capitán Jaime Borda Martelo, la concurrencia de tantos colombianos venidos hoy de diferentes regiones A Cartagena y al Hotel Las Américas para el Consejo Comunitario del Turismo, me obligan a decir algunas palabras.

La verdad es que esta Patria nuestra, con su situación geográfica, con su diversidad, con el temperamento de sus ciudadanos, con la espontaneidad que no ha logrado amargarse ni resentirse a pesar de tanta tragedia, tiene todo el potencial para reducir sustancialmente las tasas de desempleo a partir del turismo.
Hemos querido ponerle todo el empeño. Por eso hoy -para aprovechar la inauguración de este magnífico centro- convocamos en la ciudad de Cartagena, aquí bajo la cálida hospitalidad de don Alberto, de Juan Carlos, del Hotel Las Américas, el Consejo Nacional Comunitario del Turismo.

El señor vicepresidente de la República, Francisco Santos Calderón, continúa allá remplazándome mientras acompañamos aquí a don Alberto, porque vinieron compatriotas de todas las regiones, los que están haciendo las habitaciones ecológicas en la Isla de los Micos, en el Amazonas; los que están adelantando los famihoteles, las posadas nativas en la Guajira, en Nuquí, en Bahía Solano, en otras partes de la Patria; los que están recuperando destinos turísticos tan importantes como la Cocha en Nariño, o la Laguna de la Tota en Boyacá.

Los que están mostrándole al mundo esa gran posibilidad turística en nuestros Llanos Orientales, en nuestra Amazonía, en nuestra Oceanía. Todos ellos han concurrido con gran entusiasmo y al ver esta obra y lo que sigue que nos acaba de contar don Alberto, van a regresar a sus sitios de origen con el entusiasmo redoblado.

Yo quiero agradecerle a los solados y policías de la Patria, aquí representados por el almirante Guillermo Barrera, sus esfuerzos para regresarle a esta Nación las seguridad que sus ciudadanos merecen, para que los colombianos puedan desplazarse por las carreteras, para que -como me lo decían en alguna ocasión en San Jacinto- nuestros compatriotas que allí producen artesanías, puedan reactivar su almacencito de venta de artesanías que es la carretera, para que ese turismo interno que congrega a 44 millones de ciudadanos -la totalidad de los colombianos-, sea un gran motor generador de empleo y un presupuesto para construir confianza a fin de que llegue el turismo internacional.

Hoy estuvimos revisando la política de turismo: en qué vamos bien, en qué vamos mal, todo lo que falta. Y la tenemos que incorporar en ese documento que hemos propuesto para la discusión de nuestros compatriotas que es la visón de la Patria al 2019, 7 de agosto, cuando la Nación estará cumpliendo dos centurias de vida independiente.

Ese documento, preparado por Planeación Nacional, es apenas un primer borrador que confiamos mejorar con la discusión democrática, para publicar en el primer trimestre del año entrante ya recogidos los comentarios iniciales de la discusión, un segundo borrador y ahí debe jugar un papel muy importante esta industria del turismo.

Yo diría que hay aspectos que van bien. La recuperación de la confianza, el aumento del tráfico en las carreteras, la recuperación del transporte aéreo interno y ya una tendencia creciente y sostenida del transporte aéreo internacional.

Se han adicionado 3 mil camas hoteleras, 1.700 de ellas han obtenido ya el certificado de las nuevas exenciones tributarias y hay proyectos excelentes en todo el país. Hemos visto ese mejoramiento de la capacidad de la hotelería instalada y detrás de ejemplos como el de este centro de convenciones, avanzan otros proyectos: San Andrés quiere hacer su centro de convenciones, lo quiere hacer Cali, lo quiere hacer Popayán. Esto es muy buen ejemplo para todo el país, en un país de ciudades, en un país de regiones, en un país que hasta ahora ha evitado aquello a lo cual temía tanto Álvaro Gómez Hurtado, convertirse en una organización macrocefálica y que ha podido mantener ese crecimiento regional equilibrado, esto de hoy es muy buen ejemplo para continuar con un crecimiento regional equilibrado, para darle luces a todas las regiones de la Patria.

Por supuesto que tenemos dificultades, los recursos de promoción de Colombia en el exterior son escasos. Esta mañana se presentaron los lineamientos básicos del nuevo proyecto de ley, cuya aprobación vamos a pedirle al Congreso, para contar con unos recursos, a fin de poder aumentar siquiera a 10, 12 millones de dólares el presupuesto de promoción de Colombia en el exterior. Una promoción que tiene que orientarse fundamentalmente a traer personalidades del mundo, a todos los actores de esta industria a nuestra Patria.

El año pasado con el embajador Moreno (Luis Alberto, ante la Casa Blanca) y con el director de Proexport, Luis Guillermo Plata, visitaba las gerencias de las compañías de cruceros en Miami. Nos recibieron por razones de protocolo, nos separaron un cupito en la agenda. Cuando yo les vi que simplemente era una recepción de protocolo, les dije: “yo no vengo aquí sino a invitarlos a que vayan a Colombia”.

Logramos que vinieran, estuvieron unos días en Cartagena, los llevamos a San Andrés, pasamos por el Altiplano del Oriente Antioqueño y ya cuando llevaban unas horitas aquí, la frialdad protocolaria con que nos recibieron en Miami se había tornado en pasión colombiana.

La gente hay que hacerla venir, poco gana uno con hablar de esta Patria en el extranjero. Los hechos, que Dios quiera vayamos superando, rebasan cualquier esfuerzo oratorio con ayudas visuales aún, para presentar a nuestra Patria afuera, pero cuando el visitante llega de afuera, se encuentra con esta Nación tan bella, con esta Nación con tanta inteligencia, con esta Nación tanta calidez, con esta Nación con tanta espontaneidad, el visitante trasforma su mente.

Esa brecha entre la realidad colombiana en inmensa mejoría y la percepción internacional todavía muy por debajo, se va superando a medida que el visitante internacional conoce nuestra Patria. Ahí tenemos uno de los grandes desafíos.

El Presidente Andrés Pastrana logró que viniera el Presidente Bill Clinton. En diciembre del año pasado nos visitó el Presidente George Bush. Gustavo Mutis, por aquí lo vi ahora. Yo no le voy a decir, como a don Alberto, tampoco le voy a decir don Gustavo, a don Alberto siempre le he dicho don Alberto.

En Antioquia hay un pueblo que se llama ‘Don Matías’. Y cuando yo veo a los hijos míos que no le dicen ‘Don Alberto’ a nadie (como ésta nueva generación ahora tan irreverente), digo que estos muchachos de ahora no le dicen ‘Don’ ni a ‘Don Matías’.

Le decía a Gustavo hoy, hombre Gustavo, ¿Cuándo va a volver a traer al presidente Clinton? Tráiganos una visita de esas semanalmente para que conozcan esta Patria y la promuevan, ahí tiene usted un compromiso bien grande, ahí se lo anotamos en el acta de conclusiones del Consejo Comunitario de Turismo de hoy, Gustavo. Queda usted con esa responsabilidad.

Hay que hacer ese esfuerzo. Les quiero dar la noticia que el doctor Luis Guillermo Plata ha recibido ya la comunicación de que las empresas de cruceros se van a reunir en Cartagena en junio del año entrante. Yo creo que es un buen paso.

Vamos a seguir esa tarea por el travel warning, el embajador Moreno ha hecho inmensos esfuerzos y estamos seguros que los esfuerzos del presidente Pastrana van a ser exitosos.

Mientras él está allá ayudándonos a que el Departamento de Estado revise esta alarma sobre Colombia, que no la ha quitado, sustrajo apenas a San Andrés, y sobre otras cuatro ciudades la ha suavizado, pero la mantiene vigente, mientras el presidente Pastrana está allá en ese esfuerzo, nosotros aquí, con los trabajadores del turismo, con los policías, con los soldados, procuraremos avanzar en aquello de recuperar confianza para que allá no teman eliminar ese aviso dañino.

Sabemos su preocupación que compartimos por ese tema, Don Alberto, y ahora con la ayuda, el refuerzo del presidente Pastrana vamos a seguir en esa tarea.

Qué bueno que esta ciudad no solamente asista a un evento tan importante de avance en el turismo como es ésta inauguración, sino a la presentación del libro “Cartagena Empresarial” del capitán Jaime Borda.

Porque sí, la ciudad tiene el inmenso problema de 300 mil personas inmensamente pobres, de 700 mil personas pobres. Es que la ciudad creció enormemente, en muy poco tiempo, se convirtió en el mayor polo de atracción para ser destino de colombianos desplazados, realidad que tenemos que enfrentar, la tenemos que enfrentar con la reactivación económica que ustedes están jalonando y con la oportunidad que presenta la ciudad de ser una ciudad con posibilidades integrales y en todos los ramos de la actividad económica. Esa importancia adicional, tenemos que destacar del libro del capitán Jaime Borda.

Querido Jaime, ese libro desde hoy lo adopta el Gobierno Nacional, lo adopta Proexport, y vamos a pedir en todas las oficinas de Proexport, en las embajadas, en los consulados, que se promueva.

Entre las decisiones administrativas que se han tomado en este Gobierno está la de asignarle a Proexport la promoción del turismo en Colombia y la promoción de la inversión extranjera en nuestra Patria. Nos va a ayudar muchísimo este libro.

Quiero reiterar todo el compromiso con Cartagena, apreciados compatriotas. Cuando el avión va aterrizando, ahí se ve por la ventanilla del lado derecho, cómo se va conformando el terraplén de la Ciénaga de La Virgen. Setenta metros de ancho, contra el espejo de agua tiene un sendero peatonal, en la mitad tiene una zona de servicios y después, el sendero vehicular.

Lo veo conectado, como nos decía el doctor Juan Carlos (Araujo, gerente del Hotel Las Américas), con toda esta salida tan bella del Hotel Las Américas hacia la Ciénaga de La Virgen.

Casualmente aquí muy cerca, está el patio de prefabricados de la obra del sendero de la Ciénaga.

Vamos a avanzar en esa obra con la idea de que en algún momento conecte esta autopista que comunica con Barranquilla con la vieja carretera de La Cordialidad, así en la primera etapa no se pueda lograr la distancia total pero hay que continuar y siempre con manos a la obra. Un pedacito es una meta parcial que entusiasma y compromete para lograr la otra meta. Es el curso de la vida, lo importante es ejecutar para pasar de los sueños a la realidad, como en su bella anécdota del sueño de Juan Carlos, nos lo ha demostrado esta tarde.

El domingo pasado en medio de una gran alegría colectiva clausuramos en Armenia los Juegos Bolivarianos. El presidente Pastrana nos dejó tres sedes. No me dejó la plata pero me dejó el reto: la sede de los Juegos Nacionales en Bogotá y Cundinamarca, lo hice quedar bien, nos inventamos la platica poniéndole un impuesto a la telefonía celular e hicimos las obras.

Los juegos Bolivarianos en Armenia y Pereira: se hicieron las obras. Resultó muy bien.

Y ahora estamos haciendo en compañía del Gobernador y del Alcalde las obras para los Juegos Centroamericanos de Cartagena. Los congresistas permanentemente preguntan por ellas, con ayuda de Dios le vamos a responder a la ciudad. Porque esas obras quedan para la juventud, y la ubicación de esas obras, amén de la Vía Perimetral para la Ciénaga de la Virgen, se convierten en inicios de infraestructura para rescatar esos asentamientos subnormales, tuguriales que han venido invadiendo la Ciénaga de la Virgen.

Eso tiene un gran sentido para los Juegos, para su efecto nacional e internacional, para construir infraestructura y para enfrentar con un proceso modular el reto de rescatar estos asentamientos subnormales.

La situación de confianza para invertir en Colombia nos está facilitando avanzar en la refinería. Estamos ya en el proceso de licitación porque íbamos a hacer la adjudicación directa al socio internacional pero hay muchos interesados, entonces nos corresponde la licitación pública.

Tenemos todo el compromiso, apreciados compatriotas de Cartagena, de avanzar en esa refinería. Las demoras obedecieron simplemente al tema fiscal, pero la voluntad política es total, cuenten con eso, estamos pues en la etapa inicial ya de escoger el socio e inmediatamente pasaremos a la iniciación de la construcción de las obras.

Está abierta la licitación para el primer tramo del sistema de transporte masivo de Cartagena y el compromiso es sacarlo plenamente adelante y con toda la transparencia.

Y hemos venido avanzando en política social, claro, que en esta pobreza esos avances que uno ve enormes cuando lo muestran en el power point, los contrasta aquí con la realidad y son imperceptibles, pero ahí vamos con la ayuda de los recursos fiscales del sector privado, con la coordinación de Alicia Arango en el tema de la construcción de las casitas de Teletón, del complemento con los recursos del Gobierno Nacional y avanzando en el tema de la Revolución Educativa, del SENA, de las Familias en Acción, de la ampliación de la Seguridad Social, etcétera, con dificultades.

Por ejemplo, ha sido difícil el proceso hospitalario pero confiamos que después de todos los traumas vividos en el Hospital Universitario se vaya reabriendo sin politiquería, con toda la transparencia y con toda la eficiencia para que el nuevo sea un hospital totalmente sostenible.

Hemos reformado 111 hospitales en Colombia, no ha sido nuestra política cerrar los hospitales públicos sino reformarlos y confío que eso le resulte bien a Cartagena.

Aquí andan en un proceso electoral, el alcalde tiene dudas de un concepto que debe dar el Consejo de Estado. Simplemente, con afecto, decía yo esta mañana, en el Consejo Comunitario lo siguiente:

Para conseguir confianza, confianza en nuestra Patria, los procesos electorales tienen que ayudar, y tienen que ser totalmente transparentes. Hemos procurado que más de 200 procesos electorales surtidos en los últimos meses en Colombia sean transparentes.

El propósito del Gobierno es que en las elecciones del año entrante no haya interferencia de guerrillas ni de paramilitares, que los colombianos puedan votar libremente.

Y qué bueno que Cartagena vaya a dar ahora un ejemplo. Que todos los candidatos se comprometan en un pacto de transparencia, transparencia en la financiación. La transparencia en la financiación tiene muchos componentes, dos fundamentales: el origen lícito de los recursos y compromisos transparentes.

El aporte a las campañas tiene que ser un aporte con recursos lícitos y patrióticos. Sin compromisos de reciprocar con contratos. Eso es fundamental, y tiene que haber transparencia total en la relación con los electores, eso es fundamental.

La construcción de confianza nos corresponde a todos y en cada momento y cada uno de nosotros tiene que vivir revisando como procede frente a su Patria a ver cómo mejoramos.

Don Alberto: uno de los antecesores del presidente Pastrana y yo, en el solio de Bolívar, solía decir que los problemas de Colombia no se resuelven con estructuras, sino con hombres.

Usted con su trayectoria de bien, con su capacidad realizadora, es solución de los problemas de Colombia. Yo lo felicito, como todos estos compatriotas por ésta gran obra, pero me voy más ilusionado por lo nuevo que va a hacer.

Alicia (Arango, secretaria Privada de la Presidencia) y Luis Ernesto (Mejpia, ministro de Minas): el me dijo ahora que no ha podido empezar la otra torre porque le tienen un obstáculo atravesado con una corporación ambiental. Llamen allá, que si ese obstáculo es un obstáculo basado en la Ley, en los hechos etcétera, que lo digan rapidito, si no que lo remuevan y que le den el permiso porque necesitamos que empiece la otra torre.

Y confiamos en el proceso que se está adelantando para poder terminar el saneamiento de unos terrenos en Barú y construir el hotel ancla que vaya desarrollando esa zona.

Don Alberto muchas gracias. En una Patria de necesidades como la nuestra, siempre hay una esperanza de que los realizadores sigan haciendo más.

No venimos tanto a congraciarnos con esta obra como a decirle: usted que con su trayectoria se ha ganado en el corazón de los colombianos un gran crédito.

Como ese corazón suyo tiene ese gran crédito, siga haciendo obras de éstas que lo necesitamos.

Muchas gracias.