LANZAMIENTO DEL LIBRO “ROSTROS, ÉBANO Y CANELA”
Octubre 25 de 2005 (Bogotá – Cundinamarca)

Compatriotas:

Quiero felicitar muy de corazón a la Fundación Granitos de Paz por este esfuerzo, en buena hora emprendido. Qué estimulante el informe tan serio, de realizaciones concretas, que nos acaba de presentar el señor ex ministro Orlando Cabrales sobre el primer año de actividades de la Fundación.

La verdad es que una ciudad con el problema de Cartagena, que se replica en muchas otras ciudades colombianas, si no nos aplicamos todos a resolverlo, de pronto no vamos a ver la solución. En buena hora ustedes han emprendido esta iniciativa.

Hemos estado empeñados en construir unas obras básicas a ver cómo Cartagena puede empezar a superar estas comunidades subnormales, a reivindicarlas, y qué complemento tan importante el esfuerzo de ustedes.

El doctor Orlando nos mostraba en el mapa y nos contaba cómo este barrio Rafael Núñez queda justo allí, donde el Gobierno Nacional, con un apoyo del Distrital, está construyendo la Vía Perimetral de la Ciénaga de la Virgen.

Esa Vía Perimetral tiene muchos objetivos. El primero de ellos es que sea el eje para reivindicar esa zona subnormal. También busca esa Vía Perimetral frenar todo lo que es la invasión del espejo de agua, devolverles el espejo de agua a los peatones en las mejores condiciones para la recreación, para el esparcimiento.

El doctor Orlando nos mostraba en el mapa y nos contaba cómo este barrio Rafael Núñez queda justo allí, donde el Gobierno Nacional con un apoyo del Distrital, está construyendo la Vía Perimetral de la Ciénaga de la Virgen.

Esa vía perimetral tiene muchos objetivos. El primero de ellos es que sea el eje para reivindicar esa zona subnormal. También busca esa vía perimetral frenar todo lo que es la invasión del espejo de agua, devolverle el espejo de agua a los peatones en las mejores condiciones para la recreación y el esparcimiento.

La Vía Perimetral en esta fase inicial tiene tres kilómetros y medio de longitud. A eso hay que sumarle mil 600 metros, que la van a conectar con la Ciudadela Deportiva, que ahí la alcanzábamos a ver en el mapa que nos exhibió el doctor Orlando.

En promedio tiene 70 metros de ancho y la parte más importante de la Vía Perimetral es el sendero peatonal que va contra el espejo de agua. Creo que va a ser una obra bien importante para la ciudad.

A esto se suma el esfuerzo por toda la unidad deportiva, buena parte de la cual está concentrada en esta misma área. Entonces diría que la Vía Perimetral, la Unidad Deportiva se convierten en pilotes, jalonadores del proceso de recuperación de estos asentamientos subnormales.

Y a eso se suma la gran tarea de ustedes, que ojalá la pudiéramos replicar en todas partes y que no fuera solamente en el barrio Rafael Núñez sino en todos los barrios subnormales de Cartagena.

Para el turista debe golpear mucho: asomarse por la ventanilla derecha del avión al momento de aterrizar, con la ilusión de llegar a esa ciudad tan bella y ver semejante mancha tugurial. Creo que estamos en mora de superarlo.

En muy poco tiempo Cartagena pasó de ser una ciudad de 500 mil habitantes a una ciudad de un millón de habitantes. Y todo ese crecimiento, en muy buena parte inducido por el desplazamiento, se asentó en la más tremenda pobreza.

Cuando veo estos logros de la Fundación Granitos de Paz, me pregunto: “Bueno, ¿por qué no se hace una gran campaña para que todo el mundo replique la Fundación Granitos de Paz?

En Colombia diría que hay un proceso de construcción de capital social muy importante, pero no suficiente.

Si toda la empresa privada colombiana, todos los ejecutivos, dedicaran siquiera seis – ocho horitas del sábado, a hacer tareas como la que ustedes hacen en la Fundación Granitos de Paz, de pronto sacamos este país adelante más rápidamente.

Yo le propondría eso, doctor Luis Carlos. Decirle al sector privado colombiano. Miren, es que el reto de este país es muy grande. Yo creo que este país necesita ya más hechos que discursos. Si nos aplicamos todos, que el sector privado colombiano dedicara seis – ocho horitas del sábado, pero todos los ejecutivos del sector privado colombiano a esta tarea, creo que es más rápido el recorrido para reivindicar todas estas expresiones de pobreza en la sociedad colombiana.

Multiplicar ese Granitos de Paz, que empezáramos con eso, ¿no? Porque esto es muy bueno, pero la dimensión del país es inmensa frente a las posibilidades de este esfuerzo de ustedes. Pero hay con quien replicarlo.

Y también quiero felicitarlos por el libro. Bellísimo. Quiero felicitar a Helena, a Dora y al ex ministro Rodolfo Segovia. Ya vimos algunas de las fotografías: ¡una belleza! Y vamos a leer con mucho entusiasmo los textos.

Yo recuerdo al doctor Rodolfo Segovia como compañero en el Senado de la República. Cada vez que pedía la palabra nos decía algo lleno de bagaje cultural, de bagaje histórico. Y aquí nos ha traído algunos de esos textos, esta presentación que acabamos de escucharle al ex ministro Orlando Cabrales.

La verdad es que el país, necesita para su credibilidad internacional y para su confianza interna, tres elementos básicos: la Seguridad Democrática, la derrota de la corrupción y el cumplimiento de las Metas del Milenio.

Pienso que eso ya no puede seguir siendo una proposición por si acaso. Estamos compelidos a unas fechas. Tenemos que mostrar unos resultados y el mundo nos va a juzgar por eso.

Este proyecto ayuda muchísimo a inspirar a los colombianos, a motivarlos en el propósito de que nos pongamos a cumplir las Metas del Milenio.

Diría que en educación vamos bien. Las vamos a cumplir antes de la fecha. Pero las Metas del Milenio son muy poco ambiciosas en educación. Nosotros tenemos que ir mucho más allá.

En salud vamos bien en unos aspectos, pero con retrasos regionales muy preocupantes. Por ejemplo, en el caso de mortalidad infantil y en el caso de mortalidad en las mamás al momento de dar a luz, hay unas diferencias nacionales muy grandes. Confió que con la Ley que está aprobando el Congreso de la República ahora, el país en breve va a poder decir que ya tiene plena cobertura en régimen subsidiado de salud.

Ustedes, Granitos de Paz, están ayudando allí en el Sisbén. Algún obstáculo que hemos tenido en muchas ciudades colombianas para avanzar velozmente en los programas sociales, como el régimen subsidiado de salud y en los programas de nutrición de Bienestar Familiar, son justamente por fallas en el Sisbén.

Qué bueno la ayuda de ustedes en esa materia.

Cuando el Gobierno empezó el país tenía 10 millones y medio de ciudadanos en el régimen subsidiado de salud. Este año debemos terminar con un poquito más de 18, pero hay que llegar rápidamente a 22. Los estratos uno, dos y tres de la población colombiana suman aproximadamente 26 millones.

¿Por qué hablo de que debemos llegar a 22? Porque suponemos que hay cuatro millones de los estratos uno, dos y tres en el régimen contributivo. Y ya esa meta no puede ser puramente discurso. Tiene que ser una meta de cumplimiento.

Nosotros tenemos confianza que si el país sigue acrecentando su ritmo de inversión, continúa en la recuperación de la economía, mantiene una tendencia de optimismo y de confianza, el Congreso de la República nos aprueba ahora la ley de reforma al régimen subsidiado, el país en dos o tres años puede decir: tengo plena cobertura en seguros de salud para los estratos uno, dos y tres.

Si logramos decirle al mundo: hemos cumplido las Metas del Milenio en salud antes de tiempo y las hemos cumplido en educación, eso nos puede ayudar muchísimo en la consolidación de la confianza interna, en la consolidación de nuestra democracia y en la credibilidad internacional.

En lo práctico esas metas son sellitos que hay que ponerle al pasaporte colombiano, para que el pasaporte colombiano sea mejor visto por la comunidad internacional.

Todos tenemos que poner granitos. El nombre es bien afortunado. Nosotros tenemos que hacer más esfuerzos en el Gobierno para poner más granitos, para poner granotes.

Y las Fuerzas Militares los tienen que hacer todos los días, los tiene que hacer el sector privado. La paz no la conseguimos sino con el Gobierno trabajando honradamente, realizadoramente, con las Fuerzas Militares y de Policía haciendo mayores esfuerzos, con el sector privado invirtiendo, generando empleo, con este tipo de fundaciones como Granitos de Paz.

Eso si nos echamos a llorar o simplemente a hacer el diagnóstico y no remamos, todos. No llegamos.

No nos quedemos en Granitos de Paz, doctora Helena. Pongan a todo el país a hacer lo mismo, un compromiso. Díganle al sector privado que todo el mundo marque tarjeta los sábados a las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde a ayudar en estas actividades.

Creo que el sábado que el país vea a sus ejecutivos del sector privado trabajando por estas fundaciones, de ocho de la mañana a cuatro de la tarde, ese día cambia la actitud del país.

Esa es una cosa que parecería muy pequeña, pero creo que finalmente es muy grande en el impacto, porque los cambios hay que producirlos no solamente con elementos racionales. Hay que producirlos con elementos sentimentales que afecten el comportamiento de las sociedades.

Si la sociedad colombiana ve a su sector privado empezando a trabajar los sábados por estas metas sociales, en este tipo de fundaciones como Granitos de Paz, y todos los sábados con una labor de ocho horas en eso, eso afecta el sentimiento de los colombianos y, de verdad, impacta una actitud de cambio en Colombia.

¿Qué podemos hacer para ver esto? Que esa sea la meta del próximo año. Los felicito de todo corazón.

Muchas gracias.