CONMEMORACIÓN DE LOS 10 AÑOS DE ISAGEN
Septiembre 22 de 2005 (Bogotá – Cundinamarca)

Compatriotas:

La verdad es que este tema es un tema apasionante, de primera importancia, que yo ahora mientras les hacía unas preguntas al ministro (de Minas, Luis Ernesto Mejía) y al doctor Luis Fernando Rico Pinzón (gerente general de Isagen), decía: deberíamos convertir esta celebración en un consejo comunitario sobre el sector energético. Pero tenemos que hacerlo, Ministro.

Hoy recibimos una buena noticia: hace dos horas me llamó el doctor Santiago Montenegro (director del Departamento Nacional de Planeación) y me dijo: hombre, yo no le quiero dar simplemente malas noticias, acaban de comunicarme del Foro Económico Mundial que en la última medición Colombia subió 7 puntos en el foro de competitividad. Es el noveno país del mundo que más subió y es el primer país latinoamericano en cantidad de ascenso.

Yo veo relación con realidades muy importantes que tiene el país como este conjunto Isagen – Isa, a cuyos valores corporativos con tanta precisión ha referido el señor Ministro de Minas y Energía.

Esto es motivo de orgullo para Colombia, por su eficiencia, su nivel gerencial, su transparencia. La manera como se trabaja en el día a día y la manera como se visiona el mediano y el largo plazo.

Yo quiero darles una felicitación muy sentida y decir a todos ustedes que ese conjunto humano que ustedes integran se constituye en un motivo de orgullo para la Patria entera.

La semana pasada en Naciones Unidas, cuando discutíamos las metas del Milenio, aparece el problema de la crisis energética, que se ve venir en muchos países y que preocupa en la discusión de las metas sociales del Milenio.

Porque ya se anticipa que algunos países pobres, que no disponen de suficientes fuentes de energía, tienen enormes dificultades para adquirir hoy sus combustibles, hasta el punto, como empieza a verse en Centroamérica, que van a tener que desviar los recursos que inicialmente habían orientado para cumplir las metas sociales del Milenio, a fin de poder pagar sus costos energéticos. El tema es de la mayor gravedad.

He escuchado decir a muchos economistas que la gran causa de una nueva recesión mundial provendrá de la escasez de energéticos. Y a eso se le suma la preocupación que muchos incumplan las metas sociales del Milenio, por las dificultades para adquirir estos productos y estos servicios.

Por eso es de gran importancia la visión y la ejecución en el país sobre todo el tema en su conjunto.

Quisiera registrar algunos avances importantes. Creo que se ha avanzado muchísimo para recuperar la confianza de los inversionistas en petróleo. Hace pocos días preguntaba a unos inversionistas: bueno, ¿ustedes han vuelto a Colombia por qué? ¿Por los precios o por confianza en el país? Y me dijeron: por confianza en el país. Pero me lo decía un inversionista internacional de mucho peso.

Finalmente las situaciones de precios se dan cíclicamente y los ciclos tienen alguna regularidad. Lo más importante es la confianza en el país.

Sé que todavía no hemos alcanzado, por ejemplo, el nivel que necesitamos en exploración, de acuerdo con lo que ha sido la historia de las probabilidades del sector en Colombia, pero con los esfuerzos del Ministro y de su equipo, con el ascenso que se nota, que es importante, es firme, un país que ha pasado de explorar 10 pozos por año y que este año puede explorar 40 pozos, un país que ha aumentado ya muchísimo los kilómetros cuadrados de sísmica por año, un país que este año puede firmar 70 contratos, es un país que va teniendo posibilidades de mayor confianza.

Creo que es importante lo que viene pensando en el gas, creo que es bien importante lo que ha pasado en carbón, creo que es bien importante la circunstancia de que estemos ya con la primera planta de alcohol carburante concluida. Hoy me llamaron del Grupo Ardila Lulle a decirnos que están listos para inaugurar la primera destilería de alcohol carburante.

Hemos dado pasos muy importantes en esa materia. La reforma tributaria de diciembre de 2002 fue fundamental. Entre este septiembre y enero el país tendrá ya capacidad instalada para destilar un millón de litros diarios de alcohol carburante. Y confiamos muchísimo en que rápidamente estemos también produciendo biodiesel. Con responsabilidad el Congreso y el Gobierno han tomado las decisiones pertinentes para facilitar esto.

Me parece que es de gran importancia el ensayo de energía eólica de Empresas Públicas de Medellín en La Guajira, donde hay un enrome potencial. Y cuando escuchaba al doctor Rico Pinzón hablar de los proyectos de generación a partir de diferentes fuentes, pues yo pensaba: qué bueno que pudieran generar a partir de carbón en boca de mina. Qué bueno que Isagen pudiera también agregarle a ese parque experimental que instaló Empresas Públicas de Medellín de energía eólica en La Guajira.

El informe que tengo es que allí hay un potencial de 4 millones de kilovatios y que este experimento de Empresas Públicas de Medellín, que va bien, apenas es un experimento para generar 20 mil kilovatios. Ahí tenemos un gran potencial.

Y la verdad es que yo llamaría la atención sobre la circunstancia de que no nos podemos confiar en que todavía tenemos un gran exceso en capacidad de generación. La economía colombiana se está recuperando y confiamos que con el ritmo de inversión que se dé, el crecimiento de la economía en los años que vienen sea mucho mayor.

Miren, nosotros habíamos visto descender la Inversión Extranjera Directa en Colombia a 500 millones de dólares por año. El año pasado superó los 3 mil millones de dólares, y este año va a superar los 5 mil millones de dólares. Hay un gran interés en invertir en Colombia.

Yo diría, con razonable optimismo, que Colombia está de moda. Además que ese interés es para invertir en todas las expresiones de la economía colombiana. No es solamente para invertir en la búsqueda de petróleo. Se quiere invertir en el sector agroindustrial, en el comercio, en la industria, en el sector energético, en diferentes expresiones del sector servicios.

La Dian, por ejemplo, registra que la deducción tributaria del 30 por ciento sobre nuevas inversiones, adoptada por este Gobierno en diciembre de 2003, ya por las inversiones efectuadas en 2004 nos cuesta este año alrededor de un billón de pesos. Pero, así y todo, estamos obteniendo un incremento en el recaudo por encima del 14. Y esas son inversiones productivas, que van a contribuir a la economía especialmente en los años que vienen.

Entonces ese ritmo de inversión en Colombia augura para el país un ritmo de crecimiento mucho más acelerado. Y es importante esto, mucho más sostenido. Porque cuando aquí se hacen comparaciones, comparan apenas un año con otros países de América Latina.

A nosotros nos comparan con el año cuando Venezuela empieza a recuperarse, o con el año cuando Argentina empieza a recuperarse, pero no nos comparan en la senda histórica.

Creo que en la senda que viene por delante, en una secuencia importante de años, el crecimiento de la economía colombiana va a estar mucho más firme y sostenido, en un nivel más alto, que el de muchos de los países que en la comparación de los últimos meses han aparecido por encima de nosotros.

Y lo digo por el nivel de confianza, por el nivel de inversión, por el nivel de diversificación en la inversión en Colombia.

Y también por una circunstancia. Por ejemplo, nosotros hemos crecido muchísimo sin enormes beneficios de la economía china que muchos países han tenido. Yo hablo con el señor Presidente Lagos y me cuenta cómo ese crecimiento de las exportaciones de Chile ha estado sustentado de manera muy importante en las exportaciones de minerales a China.

El crecimiento de Brasil muy sustentado también en las exportaciones, por ejemplo, de soya al mercado chino. El crecimiento de Perú muy sustentado en la exportación de minerales.

La incidencia del mercado chino en Colombia ha sido una incidencia de menor impacto. Por supuesto, hoy vale más el carbón, por el jalonamiento chino. Pero las exportaciones nuestras a China son todavía muy modestas y tenemos unos sectores que, al contrario de haberse beneficiado, han sufrido muchísimo por la competencia china, tal el caso del calzado, tal el caso de las confecciones, tal el caso de los textiles.

Entonces veo una economía colombiana, de cara al futuro, mucho más sustentada en buenas realidades que en loterías. Y eso me hace pensar que no nos podemos confiar en que todavía tenemos un excedente no utilizado de generación.

Creo que hay que apurar el ritmo de generación. Y hay que confiar en este crecimiento, en el ritmo de instalación de capacidad de generación. Y hay que confiar en el crecimiento del mercado interno en lo que se está haciendo internacionalmente, que va a ser mucho más importante por lo que les decía en la introducción: este temor a que la crisis energética, los costos de adquisición de combustibles, incluso empiecen a gastar los dineros que se tenían previstos en países no productores de estos combustibles para financiar las metas sociales del Milenio.

De ahí el esfuerzo del Gobierno, con ustedes, para avanzar en la interconexión con el Ecuador, para que podamos tener la línea de transmisión a Panamá para integrarnos a la Plan Panamá – Puebla.

Creo que uno de los pasos importantes de la política internacional de este Gobierno es la vinculación de Colombia al Plan Panamá – Puebla, porque eso nos ha despejado dos caminos bien importantes: el camino para participar en el mercado de energía, la posibilidad de construir la línea de transmisión –el Ministro me ha dicho que en el año 2008 va a estar instalada y operando esa línea– y además nos abre las posibilidades de un gran mercado de gas, que ese mercado Panamá – Puebla. Yo tengo muchísima confianza en ello.

Y si bien Isagen tiene unos proyectos bien interesantes, creo que está tan acreditada que necesitamos más. Hace dos noches llamé al Ministro de Minas, angustiado, y le dije: ‘Ministro, yo no aspiré a la Presidencia de la República por comodidad, yo no aspiré a la Presidencia de la República por tener la comodidad de ser ex Presidente, yo soy combatiente, ayúdeme a dejar realizaciones. Yo me sentiría muy mal yéndome de la Presidencia de la República sin dejar unas bases para que el país pueda ver la Central de Sogamoso en Santander o la Central de Pescadero en mi departamento, jalémosle a eso, Ministro’.

Mire, esto es tan dinámico, que cuando este Gobierno empezó se discutía mucho si hacer o no la inversión en la Refinería de Cartagena. Muchos dijeron: cómo van a hacer eso, si hay capacidad de refinación por ahí cerquitica que está ociosa.

Ayer veía a la BBC a las 5 de la mañana con una noticia: los productores de petróleo quieren agregarle 2 millones de barriles diarios a la oferta, pero no hay capacidad de refinación. Yo tengo confianza que es la hora ya de atrevernos a sacar adelante Pescadero, de atrevernos a sacar adelante Sogamoso.

El Ministro me ha dado una idea, que él ha conversado con el señor ex ministro Ramiro Valencia Cossio, que es que nos juntemos todos. Háganlo. Y si juntos todos, si se necesitan incentivos del Gobierno, los buscamos, pero háganlo. Háganlo, que un país que tiene esas posibilidades, cuando se ve, ya rapidito, que el mundo puede entrar en una muy severa crisis energética que se convierta en el gran enemigo del crecimiento de la economía mundial, nosotros no podemos desperdiciar estas posibilidades. Vengo a invitarlos a eso.

El Gobierno está listo para mirar con ustedes esa propuesta del ex ministro Ramiro Valencia. Júntese todos y hagámoslo, discutámoslo poquito y empecemos la ejecución de esa tarea, que es bien importante.

El solo anuncio le da mucha tranquilidad al país, le da mucha tranquilidad a estas regiones y le da tranquilidad a los vecinos. Mire, cuando uno habla con el Gobierno de Ecuador, con el sector privado ecuatoriano, encuentra que allí hay angustia por la necesidad de que nosotros les proveamos energía. Cada vez que hablo con el Presidente Palacio me pregunta: ¿Presidente, cómo va la segunda línea? Le dije: un momentico, Presidente, que voy a llamar al Ministro de Minas, a ver y le cuento.

Entonces cada vez que hablo con los presidentes centroamericanos, con los de las naciones del Caribe, todos preguntan qué posibilidades tiene Colombia de ayudarles como proveedor en estos insumos energéticos de tanta importancia.

El futuro de Isagen. Yo creo que hemos dado, además de ese tradicional buen manejo de ustedes, que enorgullece a Colombia y que enorgullece al sector público, creo que hemos dado pasos importantes en este Gobierno.

El primer paso, resolver la reclamación de Empresas Públicas de Medellín. Eso fue muy útil. Ese acuerdo, por un lado atendiéndole a Medellín y al departamento, en condiciones razonables, los reclamos sobre la refinanciación de la deuda del Metro y obteniendo como reciprocidad que Empresas Públicas de Medellín desistiera de esos reclamos. Pienso que ese fue un paso de gran trascendencia, que ayuda mucho a despejarle el camino a Isagen.

Segundo, la solución de los contenciosos con la Dian. Y tercero, la solución del Conpes y del Gobierno Nacional de darle el aval para que Isagen pueda reestructurar su deuda, a través de la contratación de un crédito muy importante en el mercado internacional, en un organismo crediticio bastante dirigido al sector, y pagar créditos que hoy están causando unos intereses mucho más altos.

Hay la expectativa de que ese nuevo crédito esté tres o cuatro puntos de tasas de interés por debajo de los que tenía contratados. Eso hay que presionarlo hoy porque las condiciones son favorables para el país. Nosotros, que teníamos unos spreads de 700 puntos, hoy los tenemos por debajo de 300.

En los últimos meses de este Gobierno, hemos colocado en el mercado internacional 875 millones de dólares en títulos en pesos. Y eso ha sido motivo de admiración de muchos, incluido el Gobierno de Brasil.

La semana pasada para pagar la deuda que estaba al 11, colocamos unos bonos por 500 millones de dólares y eso nos resultó, con unos plazos de 20 años, con una tasa alrededor del 7, cuando hace muy poco esos bonos a 20 años nos costaban a una tasa en dólares superior al 10,5.

O sea que las condiciones han mejorado bastante, y en la medida que manejemos con prudencia, con eficacia, la recuperación de la economía colombiana, confío que eso todos los días va a ser mejor.

Y me parece de gran importancia el esquema que se visiona para Isagen. Mantener allí una importante participación del Estado y al mismo tiempo crecer la participación comunitaria, a través de este proceso de democratización accionaria. Ojalá lo podamos hacer rapidito.

A estas alturas del Gobierno uno ya siente mucha angustia y lo que no se pudo hacer en estos 38 meses quisiera hacerlo rapidito, porque los gobiernos para recuperar credibilidad institucional tienen que ser transparentes y realizadores y eficaces.

Qué bueno hacer ese proceso de democratización rápidamente. Pienso que va a ayudar muchísimo. Y qué buena esa participación del Estado que se preserve aquí, porque estos instrumentos necesitan muy buen manejo, pero el Estado no se puede desprender totalmente de ellos. Hemos visto fallas muy grandes de mercado que nadie enfrenta.

Hasta el momento el sector privado no ha hecho hidroeléctricas en Colombia. Y la verdad es que dudo que si no hay unas empresas estatales jalonando esos proyectos y convocando a los otros generadores a crear un ‘pool’ para sacarlos adelante, de pronto no se hace.

Eso de confiar que las soluciones las va a traer el mercado, siempre es muy riesgoso. Entonces cuando algunos decían que el Estado se desprenda del todo de Isagen, les preguntaba: ¿y cuando necesitemos hacer hidroeléctricas porque no haya quién las realice?

Me decían: el presupuesto las subsidia. Sí, eso es facilito. No. Convencer a los economistas, y frente a algunas coyunturas fiscales, de tomar ese tipo de medidas, eso es de una gigantesca dificultad. O sea que preservar estos instrumentos con una participación importante del Estado, en Colombia ha sido necesario, provechoso y, con cara hacia al futuro, es absolutamente necesario.

Un mundo expuesto a estas contingencias energéticas, que Colombia lo tiene claro, indica que un instrumento como éste, en el cual participa el Estado colombiano, el Estado tiene que ayudar a preservarlo y participar en una proporción muy importante en esto.

Yo no veo, pues, ninguna exclusión en esos conceptos: en el concepto de la conveniencia y necesidad de que el Estado siga participando en un porcentaje, y en el concepto de que se adelante un proceso de democratización accionaria para incorporar más y más comunidad.

Deseo muchos éxitos en todo lo que viene. El país lo necesita. En esto pasa tan rápido el tiempo. Recuerdo, como Senador de la República, que en algún momento se nos decía: no, es que tenemos un gran excedente de capacidad instalada, no hay que apurarnos ahora a construir nuevas alternativas, y de pronto nos vimos en un apagón de nueve meses, que mucho le costó al país.

Emprendamos, pues, nuevos proyectos, que hay con qué y con quién. ¿Con qué? Una empresa seria como Isagen. ¿Y con quién? El equipo humano que ustedes integran. Lo grave sería que se arredraran, que fueran poseídos por la timidez y que no emprendieran estas iniciativas.

Yo delegó en el Ministro y en el ex ministro Ramiro Valencia Cossio, para que los convenzan y arranquen con Pescadero y arranquen con la otra y arranquen con Sogamoso.

Es una necesidad. Boten el miedo, que si ustedes no hubieran demostrado la capacidad de cosechar éxitos, como los han cosechado en Isagen, está bien que le tuvieran miedo a esos retos. Pero con todo lo que han hecho, no les vaya a pasar que mataron la culebra y le cogieron miedo al cuero.

Muchas felicitaciones y muchos éxitos.