“Acudo en compañía del Ministro de Comercio, Industria y Turismo a entregar la Orden del Mérito Industrial, en la categoría de Gran Oficial, a Roche, en sus 50 años de servicios a Colombia.

No llegó a Colombia solamente para comercializar sus productos. Al poco tiempo de estar en Colombia ya producía en el país, sustituía importaciones, agregaba componente nacional. Y como lo acabamos de escuchar tanto en la intervención de su presidente mundial, el doctor (William) Burns, y el gerente general, el doctor (Antonio Alberto Rocha) Rodríguez, hoy es líder en diagnóstico, en investigación, en atención individual de pacientes de acuerdo con el diagnóstico.

Es una empresa extranjera que llegó a Colombia para quedarse, para volverse colombiana. Es un modelo para todas las empresas extranjeras que ahora, 50 años después de la llegada de Roche, están llegando a Colombia, un país que por mi conducto quiere repetir hoy que tenemos un modelo de Estado en el cual no se desmantela el Estado, pero sí se reforma. En el cual no hay estatismo sino toda la confianza para el sector privado, con la exigencia de la responsabilidad social.

América Latina en alguna década reciente se dedicó a desmantelar el Estado, nosotros lo reformamos. Hemos reformado 419 instituciones en este Gobierno. Empezamos por Telecom, ahora vamos en la capitalización de ECOPETROL. Lo reformamos y eso le ha dado más valor al patrimonio público, más oportunidades a los colombianos. Se reforman las empresas, se mejora la administración. Lo reformamos y le traemos ahorros al fisco. Eso ha ayudado a ahorrarle un punto del Producto (Interno Bruto) al déficit colombiano. Lo reformamos y eso ayuda a que el Estado le llegue con mejores servicios a la comunidad, pero no lo desmantelamos.

Y mientras en muchos países de América Latina ahora se mira con desdén la inversión privada, quisieran consagrar exclusivamente la estatal, en lo que se llamaría una época política de nuevo estatismo, Colombia está firme en el propósito de darle todas, todas las garantías al capital privado nacional e internacional, con exigencia de responsabilidad social.

Responsabilidad social traducida en tres áreas: en la transparencia en las relaciones entre los inversionistas y el Estado. Cincuenta años de Roche en Colombia han sido 50 años de transparencia. Es un ejemplo de ese capítulo tan importante de la responsabilidad social.

Responsabilidad social traducida en el compromiso de solidaridad con la comunidad. Si bien uno podría decir que en el renglón de la producción de farmacéuticos es necesario ir adelante en investigación, en sistemas de diagnóstico individual, de todas maneras, esos agregados de valor también son muestra de responsabilidad con la comunidad, más allá de los requisitos mínimos legales de solidaridad con la comunidad.

Responsabilidad social se tiene que expresar en las relaciones laborales, no de capitalismo salvaje, no de odio de clases, sino de fraternidad cristiana. En Roche hay 50 años de armonía laboral, lo que se constituye en un gran ejemplo de responsabilidad social para nuestro país.

Nosotros estamos trabajando tres áreas en Colombia: la consolidación de la seguridad, la consolidación de la confianza inversionista y la política social. Están profundamente conectadas. Si hay política de seguridad hay confianza inversionista. Eso ayuda a financiar la política social, y la política social ayuda a legitimar, a que el pueblo colombiano reciba bien y encuentre la justificación a la política de seguridad, y a la política de confianza inversionista.

Vengo esta noche a aplaudir a Roche por estos 50 años, a agradecerle todo lo que ha hecho por Colombia y a decirle que invierta todos los días mucho más en Colombia, que confíe en Colombia, que el modelo colombiano es motivo de confianza.

Y son motivos de confianza el avance de la política de seguridad, la decisión popular y gubernamental de sostenerla, la tendencia del saneamiento macroeconómico del país, la tendencia de disminución del déficit, del endeudamiento.

Es motivo de confianza el nuevo esquema tributario. Es motivo de confianza el nuevo concepto de zonas francas. Es motivo de confianza la búsqueda de mercados para la producción colombiana. Es motivo de confianza todo lo que se está haciendo con las nuevas reglas aprobadas por el Congreso, que le permiten al Gobierno firmar los pactos de estabilidad normativa con los inversionistas.

Nuestra tributación cambió la tendencia colombiana. Antes en el país había aversión a utilizar los instrumentos tributarios para estimular la inversión. En este Gobierno lo logramos con la aprobación del Congreso. Hoy tenemos áreas muy importantes de exención tributaria, y para toda la economía. Existe una disposición convertida en permanente por nuestro Congreso, que permite que de toda inversión, el inversionista pueda deducir el 40 por ciento. Eso contribuye a un gran aporte del Estado a esa inversión. De hecho esa deducción con la tarifa tributaria que se aplica, implica que de cada 100 dólares que se invierten en Colombia, el Estado reconoce, le da al inversionista 12.8. Y eso tiene que ayudar muchísimo.

Además están las nuevas zonas francas. Ya para tener el privilegio tributario de zona franca no hay que estar dedicado solamente a la exportación. Si la zona franca produce también para el mercado nacional, paga IVA, paga arancel, pero tiene la misma tarifa reducida de renta del 15 por ciento, que es igual para el ingreso derivado de la producción que se envía al extranjero, que para el ingreso derivado de la producción que se coloca en el país. Esa nueva legislación de zonas francas ayuda muchísimo.

Además no hay que ubicarse en zonas especiales, puede pedir a la Administración de Impuestos que se reconozca el territorio de la empresa como zona franca. Y si además de ser zona franca invierte, por ser zona franca tiene la tarifa tributaria del 15 (por ciento) y por invertir tiene la deducción tributaria del 40 (por ciento). Todo eso ayuda muchísimo.

Y el Congreso nos aprobó la norma que permite que haya pactos de estabilidad. Ustedes pueden hoy, para una nueva inversión, solicitar al Ministro de Comercio, Industria y Turismo, un pacto de estabilidad que garantice que las normas tributarias vigentes al momento de hacer esa inversión se les mantengan estables.

Y estamos buscando nuevos mercados. La integración de la Comunidad Andina con Mercosur, nuestro acuerdo con Chile, el que está en proceso con Perú para remover barreras de inversión, el propósito de profundizar el tratado con México.

Además, el recientemente firmado tratado con tres países centroamericanos, el inicio de conversaciones entre Colombia y la Unión Europea, el inicio de negociaciones -que esperamos culminar muy rápidamente- con Suiza y con otros países que están en el continente europeo, es algo muy promisorio, el inicio de negociaciones con Canadá. Y esperamos que se remonten los obstáculos para lograr la aprobación en el Congreso de los Estados Unidos de nuestro TLC.

Todo lo que hagamos por darle a la producción que se hace en Colombia mercado en el mundo, trae confianza para invertir más en Colombia.

Nosotros creemos que los estímulos a la inversión y la confianza inversionista son los mejores caminos al empleo, al empleo que tenemos que buscar, no al empleo deprimido, no al empleo subremunerado, sino al empleo de alta productividad, de alta competitividad, al empleo de alta calidad, al empleo con afiliación a la seguridad social, al empleo con remuneraciones equitativas. Por eso nuestro esfuerzo en esos estímulos a la inversión.

Muchos colombianos me preguntan en el debate político: ¿será bueno que esté llegando tanta inversión a las empresas colombianas? Roche es un ejemplo. Un país que con su modelo da confianza, que con su tributación da confianza, atrae a la inversión productiva, la inversión que quiere quedarse en el país, la inversión que cumple con responsabilidad social en el país.

Roche no llegó aquí hace 50 años para estar un rato y especular, llegó para trabajar con los colombianos, con conciencia colombiana, y a fe que lo ha hecho bien.

Esto nos tiene que inspirar para seguir mejorando diariamente este modelo, a fin de que toda esa inversión extranjera que está llegando a Colombia, llegue para agregar valor económico, científico, social, como lo ha hecho Roche en nuestro país.

Y todo esto es un camino para superar pobreza, para hacer inversión social, que es el tercer objetivo de nuestro Gobierno, cumplir rigurosamente las metas sociales del Milenio, ir más allá, anticiparnos en fechas.

Confiamos que en el 2010 podamos tener plena cobertura en Régimen Subsidiado de Salud en Colombia, para que el país haya ya empezado la otra etapa, la de unificar en el mismo nivel el Plan Obligatorio de Salud del Régimen Subsidiado, con el Plan Obligatorio de Salud del Régimen Contributivo. Esto trae oportunidades para todos: oportunidades para los sectores más pobres de Colombia, oportunidades para los médicos, para las instituciones prestadoras de servicio, para las ARS, para las EPS.

Si hay más empleo de buena calidad, hay más colombianos afiliados a las EPS. Si hay más dineros y transparencia en el Estado, hay más colombianos afiliados al Régimen Subsidiado, a través de las ARS, y eso trae más oportunidades para las clínicas y hospitales, más oportunidades para los colombianos, trae más oportunidades y más desafío para las empresas como Roche, tiene más exigencias a la investigación, en un país con una gran capacidad investigativa.

Creo que Roche me confirmará esto: Colombia es un país que históricamente ha aportado un bajo presupuesto a la investigación. Voy a procurar que al final de nuestro Gobierno estemos aportando el uno por ciento del PIB. Llegar allá es un gran desafío, pero será insuficiente. A ratos me da miedo que en tres años no hayamos sido capaces.

Lo bueno es que Colombia ha mostrado que por cada dólar que aquí se dedica a la investigación, se produce más en investigación que en muchos países del mundo. Cuando yo veo investigaciones en el sector médico en Colombia, investigaciones en la caña de azúcar, investigaciones en el café, me pregunto cómo han logrado semejantes prodigios con tan poco dinero.

Eso es algo importante: ser concientes de que este país tiene una alta productividad de cada unidad monetaria que se invierte en investigación, y es una alta productividad en la comparación internacional.

Queremos llegar a una afiliación total de los colombianos al régimen de salud, con un gran crecimiento en el régimen contributivo y con una cobertura universal para los estratos más pobres en el régimen subsidiado.

Roche es uno de nuestros aliados. Vengo a invitarlos que estos 50 años les den más entusiasmo, para que sean nuestros aliados en la tarea de lograr en 2010 la plena cobertura en salud en Colombia.

A todos mis compatriotas que han trabajado con Roche, felicitaciones y agradecimientos. A usted doctor (William) Burns, presidente mundial de Roche, nuestra gratitud por confiar en Colombia. A usted doctor (Antonio Alberto Rocha) Rodríguez nuestra gratitud por dirigir bien esta gran empresa internacional que tenemos como colombiana.

Confíen en Colombia, inviertan más en Colombia, para que los colombianos se sientan más seguros en su salud. Éste país va para adela“Son motivos de confianza el avance de lante.

A todos, muchas felicitaciones”.