“Me siento muy enaltecido, al tener la oportunidad esta noche, de asistir a estos 60 años de la Clínica Medellín, que tantos servicios ha prestado a nuestra patria chica y a nuestra tierra colombiana.
Esta noche ustedes han recibido una serie de condecoraciones, cuál más merecida. La Orden Gonzalo Mejía, de la ciudad, impuesta por el señor Alcalde; la condecoración de una de las unidades de la Clínica; la condecoración del Senado de la República; la condecoración de la Cámara de Representantes; la condecoración de la Asamblea de Antioquia.
Y me decía el señor Gobernador, que la Gobernación ha debido vincularse a este evento con una resolución, porque el Escudo de Antioquia, en su categoría mayor fue entregado a la Clínica Medellín en el pasado.
En efecto, hace 10 años, cuando yo tenía el honor de desempeñarme como Gobernador de Antioquia, la Clínica cumplió 50 años, y fue muy grato entregarle el Escudo de Antioquia.
En esa época, para entregar el Escudo de Antioquia, hicimos un buen repaso de lo que había sido la Clínica desde el día de la fundación -por el doctor Joaquín Aristizábal, con la idea de tener en la ciudad una clínica a semejanza de la clínica de Mayo, en Rochester- hasta 1997.
Se habían dado unos pasos muy importantes, recientes. Estaba todavía recién inaugurada la Torre Fundadores. En 1996 se había abierto la unidad cardiovascular, hoy el departamento de cardiología, abierta su sede en El Poblado.
Y pensaba yo: ¿ahora qué más irán a hacer? Esos saltos tan grandes que se tuvieron en cuenta para entregar el escudo de Antioquia en 1997, parecían insuperables. Y ahora que el doctor Daniel Villegas Díaz, gerente de la Clínica, me comunicó que cumplían los 60 años, dije yo: ¿y qué más habrán hecho en estos 10 años?
Entonces, cuando el Consejo de la Orden de Boyacá miraba ejecutorias de los últimos tiempos, encontraba todas las distinciones de calidad habidas y por haber, entregadas a la Clínica.
Grandes avances en unidades de cuidados intensivos, banco de sangre, laboratorios, cardiología, cirugía, urgencias, en una serie de unidades especializadas que la ponen al nivel de las mejores clínicas del mundo.
Puesta en funcionamiento la cuarta sala de procedimientos invasivos, ampliación de la unidad de cuidados intensivos a adultos, ampliación de la unidad de cuidados intensivos de pediatría, inauguración del área de servicios ambulatorios especializados, en fin.
Y esa noche escuchamos al doctor Daniel Villegas con el nuevo prospecto, una nueva clínica de la Clínica Medellín, que preste todos los servicios que hoy demanda la comunidad internacional.
Por eso entrego hoy, con el mayor afecto, la Orden de Boyacá, creada por el Libertador, a la Clínica Medellín, que tanto ha honrado a Antioquia y a Colombia. Y que tanto contribuye a las ambiciones que en materia de salud tiene nuestro país.
Tenemos la propuesta de que a finales del 2009 hayamos llegado a cobertura universal en salud en Colombia. Es posible lograrlo.
En los últimos años hemos pasado de 10 mil 700 mil afiliados al régimen subsidiado, a 22 millones. Hemos pasado de 13 millones de beneficiarios de régimen contributivo, a 16 y medio. Y confío que los seis millones que nos faltan para tener plena cobertura en Colombia, podamos vincularlos en los años 2008 y 2009. Estamos haciendo todo el esfuerzo.
Por supuesto, no serán los últimos esfuerzos que tendrá que hacer el país, después vendrán otros. Poner el Plan Obligatorio de Salud del régimen subsidiado, al nivel de servicios del Plan Obligatorio de Salud del régimen contributivo. Todavía hay una diferencia bastante apreciable entre ambos.
Estar haciendo permanentes ajustes en la calidad.
Y esto tiene que estar acompañado de una gran reestructuración hospitalaria, de entidades del sector público, de un gran estímulo a la investigación, de un gran estímulo a la prestación del servicio y a la comunidad internacional.
Para ello, nos hemos propuesto acompañar a todos los departamentos en el proceso de reestructurar sus hospitales, como lo hicimos con Antioquia, y lo ha reconocido esta noche el señor Gobernador del Departamento; y en nuestra tarea de reformar el Estado, tarea que empezó con la reforma de Telecom, y al reformar Ecopetrol completa 420 entidades reformadas en este gobierno, que le asignan gran prioridad a las clínicas del Seguro Social.
Cuando yo veo clínicas de la calidad de la Clínica Medellín, digo: ¿Y por qué vamos a dejar las clínicas del Seguro Social -por radicalismos ideológicos que impiden la reforma, por excesos sindicales que bloquean los procesos reformistas- por qué las vamos a dejar en tan bajo nivel de calidad en la prestación de los servicios?
Por eso, asumiendo desgastes, enfrentando retos, confrontando radicalismos ideológicos, nos hemos propuesto transformar totalmente el Seguro Social. La EPS, la entidad de pensiones, la entidad de riesgos profesionales y sus clínicas.
Ya hemos reformado la Clínica Campo Serrano, en Santa Marta. Está a cargo de la Fundación Cardiovascular de Bucaramanga, prestando un gran servicio. La Clínica de Cartagena, a cargo de los Hermanos de San Juan Dios, prestando un gran servicio; y como lo decía el Gobernador, las clínicas de Medellín empiezan el proceso de transformación, después de que han quedado en cabeza de la Universidad de Antioquia y de la Gobernación de Antioquia, y que de acuerdo con el convenio con el Gobierno Nacional, deberán tener los mejores operadores, seleccionados en procesos de escogencia objetiva.
Tenemos toda la fe que este proceso tiene que mostrarle al país que somos capaces de ir poniendo esas clínicas del Seguro Social al nivel de calidad que envidiamos, cuando nos adentramos a mirar los logros de la Clínica Medellín.
Y, por supuesto, la transformación de la EPS, que no es la privatización. Será una empresa mixta, del Estado y de las cajas de compensación familiar, que son una institución sui generis, bien importante en Colombia. Cajas de compensación familiar que tienen la vocación del Estado de servir fundamentalmente los intereses de la comunidad, la eficiencia y la agilidad del sector privado y la concurrencia administrativa de empleadores y de trabajadores. Tenemos mucha fe en ello.
Y de la mano van los esfuerzos de investigación científica y los esfuerzos de internacionalización en la prestación de los servicios de salud
Si algo importante se observa en la Clínica Medellín, es que todo paso que ha dado, ha estado soportado en un nuevo escalón científico.
Me gusta mucho, pensado en los superiores intereses del país, el nuevo proyecto de ustedes, de hacer una clínica del más alto nivel internacional.
Habría querido traerles un decreto esta noche, pero están ultimándolo el Ministro de Hacienda, el Ministro de Comercio y el Ministro de Protección Social.
El Congreso de la República, dentro de nuestras propuestas legislativas para estimular la confianza inversionista en Colombia, nos aprobó la Ley que prueba las nuevas zonas francas especiales.
Esas zonas francas especiales no tienen que estar vinculadas en su producción o prestación de servicios solo al mercado externo, pueden hacerlo para el mercado interno. Hay unos requisitos de empleo y unos requisitos de inversión, y en el decreto reglamentario -que aspiro salga en las próximas horas y que me parece que es muy oportuno para la programación de clínica internacional que tiene la Clínica de Medellín- en el decreto reglamentario se incluye al sector salud.
Si las nuevas clínicas, los nuevos hospitales del sector salud, cumplen con unos requisitos de inversión, de certificación científica, de empleo, entonces, pueden gozar los beneficios tributarios de esas zonas francas especiales.
¿Cuáles?
Tarifa de renta: no será del 33 por ciento, en lo que debe quedar la tarifa ordinaria, sino del 15 por ciento. Además, podrán ingresar los equipos al país sin arancel y sin IVA, independientemente de que los equipos se dediquen a atender servicios a nacionales o a la comunidad internacional.
Tengo mucha fe que eso le ayude a ciudades como Medellín, que constituyen un verdadero cluster, un verdadero centro de oferta de servicios de salud de gran reconocimiento internacional, y a otras ciudades de la Patria.
Tengo mucha fe que la aplicación de ese decreto les facilite dar los saltos que ustedes vienen considerando, no solamente en la Clínica Medellín, sino en todo el sector salud de la ciudad.
Ese decreto está próximo a ser expedido. Y se viene estudiando el decreto de planes Vallejo para el sector salud
No me comprometería con la fecha, porque cuando nos proponemos sacar un decreto de esos en semanas, se demora meses, y a pesar de que uno se angustia a mañana, medio día y tarde, y ponga ese teléfono celular a funcionar para un ministerio y otro, a mortificarle la vida a un compañero de gabinete o a otro, a veces se acelera la expedición de ese decreto, siempre hay una disculpa para demorarlo.
¿Cuál es la idea? Que aquellas nuevas clínicas que no puedan reunir los requisitos para beneficiarse de los incentivos tributarios, de zonas francas, reuniendo otros requisitos, como la prestación de servicios a la comunidad internacional, tengan todos los beneficios del Plan Vallejo, que les ayuda inmensamente, por cuanto les evitará el pago de aranceles y de IVA a los equipos, bien costosos en el sector salud.
Confío, doctor Daniel, que en las próximas horas tengan el decreto de las Zonas Francas, y ojalá en las próximas semanas el decreto de los planes Vallejo de salud, para que allí tengan otro aliciente más en esos nuevos 60 años que empiezan ahora, y que nos permiten a los colombianos y a sus paisanos antioqueños, sentirnos muy orgullosos como siempre nos hemos sentido, con cada nuevo avance de la Clínica Medellín.
La historia de la Clínica Medellín y su futuro, es un calendario de progreso ininterrumpido en favor de la comunidad nacional y de la comunidad de nuestros coterráneos.
Muchas felicitaciones, y ojalá rápidamente nos invite doctor Daniel, y muy apreciado cuerpo médico, funcionarios, asociados de la Clínica Medellín, nos inviten a la inauguración de la Clínica Internacional, que nos hará sentir muy, muy orgullosos.
Felicitaciones a todos”. |
