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Palabras del Presidente Álvaro Uribe Vélez en la
celebración de los 3 años de ‘Colombia es Pasión’

Junio 12 de 2008 (Bogotá)
     
 

“A todos, muchas gracias por el esfuerzo. Lo primero que celebro es que este haya sido un esfuerzo para largo. Ha cumplido tres años y se ha ganado un premio que podríamos asignarle: una camiseta de regularidad.

Uno de los problemas del temperamento latinoamericano ha sido el cortoplacismo: emprender y abandonar; no persistir. Aquí se ha creado ánimo de persistencia. Lo celebro y lo agradezco inmensamente a ustedes.

Y se ha creado una convicción colectiva: que esto ayuda a crear confianza en Colombia. ¿Por qué nuestro celo, nuestro afán por crear confianza en Colombia?

Era el año 99, el año 2000, el año 2001, el año 2002, yo participaba en la campaña presidencial que condujo a las elecciones del 2002 y preguntaba a muchos estudiantes universitarios, en los foros: ‘¿Ustedes quieren irse definitivamente de Colombia?’. Y me maltrataba muchísimo el sentimiento cuando una inmensa mayoría de ellos levantaba las manos.

En las regiones colombianas tenía la gente que estar sometida a la guerrilla, en otras, a los paramilitares y en muchas, a ambos, y se percibía, en regiones colombianas, que muchos ciudadanos habían perdido la fe en las instituciones, la confianza en las instituciones. Querían buscar la solución a los problemas por su propia cuenta.

Eso nos produjo la reflexión de que el país necesitaba profundizar la confianza de propios y extraños.

Y esa confianza la hemos querido sustentar en tres pilares: la seguridad desde la democracia -eso sí que es importante repetirlo, por lo procesos que vivió América Latina de seguridad desde la dictadura, que llevaron a denominar al Estado terrorista y a ser totalmente indulgentes con las insurrecciones de esos países-. La nuestra: seguridad desde la democracia.

Inversión desde la responsabilidad social; cohesión social, a partir de las libertades y de la prosperidad.

Y están profundamente relacionados: la seguridad y la confianza inversionista son presupuestos necesarios para la prosperidad, sin la cual la cohesión social se queda simplemente en el discurso, es imposible convertirla en realidad. Y si no se va construyendo cohesión social, en un Estado de opinión no se puede legitimar el esfuerzo por la seguridad, el esfuerzo por la confianza inversionista.

‘Colombia es Pasión’, el trabajo de ustedes, la persistencia de todos ustedes, contribuye enormemente a crear confianza en Colombia, a mostrar un país que tiene dificultades, pero que tiene esa gran fuerza que es la pasión para superar esas dificultades.

Yo pienso que el mundo mira más la determinación de un país para superar dificultades, que los resultados que se van obteniendo en el corto plazo. Y si el mundo ve que aquí hay una determinación, sustentada en una gran energía, que es pasión para superar dificultades, el mundo aprecia más eso que la falta de resultados en el corto plazo.

Y ese compromiso de energía, que ustedes llaman ‘Colombia es Pasión’, ese compromiso de energía da mucha confianza al mundo entero sobre nuestro país.

Hay algunos temas que se han venido revaluando en el mundo. Por ejemplo, primero se revaluó el tema del delincuente nato; después se llegó al otro extremo, al extremo del delincuente por razones sociales que también revaluó.

Se ha revaluado el tema del liderazgo nato y se ha revaluado el tema del comunicador nato.

Quienes han revaluado el concepto del liderazgo nato y del comunicador nato, han desarrollado teorías muy convincentes, validadas en la práctica, de que el liderazgo y la comunicación se construyen, se construyen con preparación, se construyen con entrega.

La comunicación es un tema de preparación, de persistencia. El liderazgo es un tema de competencia, de credibilidad, de consistencia, de congruencia, de relaciones humanas.

Y todo eso necesita una gran disciplina y esa disciplina no se da sino con la pasión. La pasión ayuda a crear aquello que necesita la sociedad, que antes se consideraba que era un don nato y que hoy se acepta que es un valor que puede crear el ser humano.

Y, además, esa pasión es lo que ayuda a tener la energía suficiente para superar todas las dificultades, para alcanzar los logros que a primera vista son imposibles, para cohesionar un país en medio de la diversidad, en medio del debate de todos los días.

Se necesita esa energía, esa pasión para todo: para resolver problemas, para conquistar metas, para emprender, para las relaciones humanas, para el deporte, para la disciplina del trabajo. Todo necesita esa energía.

Y esa energía se inocula. Uno mismo la puede inocular a su propio temperamento; puede prender el motor de su disciplina con esa energía; puede pasar de la pasividad al entusiasmo, inyectándose esa energía.

Y lo mismo ocurre con el colectivo. Ustedes están creando una inyección de energía para despertar en el colectivo colombiano esa dosis muy grande que nuestra Patria muestra, que es pasión para todo lo que se necesita.

Yo creo que muchos colombianos no nos hemos dado cuenta que este país tiene una gran posibilidad en su pasión, en su energía, en sus vibraciones. Y ustedes están contribuyendo a que se cree conciencia sobre esa virtud que se puede desarrollar ampliamente en Colombia, para bien de nuestro país.

Quiero agradecerles este esfuerzo.

Por ejemplo, tenemos un momento de dificultades por esta economía mundial, el precio del combustible, la inflación, especialmente la inflación de alimentos.

Un país que estaba acostumbrado a tener 700 millones de dólares, mil millones de dólares, mil 500 millones de dólares, 2 mil millones de dólares de inversión extranjera directa. Y que los tenía de pronto sí, de pronto no.

Que lleva tres años, primero, con una inversión de más de 10 mil millones de dólares, al año siguiente de más 6 mil, el año pasado de 9 mil 28 y este año, en medio de las dificultades, ante la oportunidad, ante la posibilidad de superar esa meta, es un país que empieza, que ha venido sufriendo una revaluación por causas externas y, también, por su propia capacidad de atraer inversión, que nos crea problemas en sectores exportadores e intensivos en mano de obra.

Tenemos dificultades con la inflación. Esperamos que no sea tan severa como ha sido en otros países. Estamos haciendo un gran esfuerzo para responder con producción de alimentos. Y cómo cambian estas cosas, por eso hay que ser persistente: los sectores que hace dos años se oponían, por temor a la competencia en productos agrícolas, al TLC con los Estados Unidos, hoy reclaman los TLC porque ven una gran posibilidad de que el país sea un país que salga adelante en producción de alimentos y que ese temor por la competencia de otros países productores se pueda convertir, hoy, en una gran oportunidad para ser un exportador agrícola de primer nivel de importancia.

Pero reconocemos esas dificultades. Y entonces hay mucha discusión, por ejemplo, por temor a que se pierdan los empleos del banano, los empleos de las flores, los empleos del plátano, los empleos de las confecciones, los empleos de los textiles, los empleos de la piscicultura, los empleos de los camarones. Entonces se toman medidas para tratar de frenar la revaluación y algunos dicen: ‘no han servido’ y otros dicen: ‘habría sido peor si no se toman’. Y otros dicen: ‘bueno, han tomando esas medidas para proteger unos sectores, pero han afectado, eso se entiende como controles de capital, van a afectar la confianza inversionista que se venía construyendo...’.

Todo eso es un tema de discusión en un momento donde tenemos que entrar a despejar unas dificultades que han aparecido en el horizonte. Pero lo importante es enfrentar todo eso con pasión para salir adelante.

No hay cosa que se identifique más con la pasión como fuerza para resolver las dificultades, que el amor, como el sentimiento que jalona la determinación para conseguir metas, para servir, para resolver problemas, para superar dificultades.

Cuando yo leo esa marca que ustedes han obtenido y defendido para Colombia, ‘Colombia es Pasión’, y veo el amor con que muchos de los compatriotas, las grandes mayorías nacionales, se enfrentan a superar dificultades, me hago este raciocinio:

La pasión de los colombianos se expresa en su amor para lograr las cosas difíciles, aquellas metas que parecen imposibles.

Con pasión por esta Patria, con amor por esta Patria, saldremos adelante a pesar de todas las dificultades.

A todos ustedes, muchísimas gracias por este empeño. Perduren, perduremos.

El filósofo inglés Bertrand Russell, matemático, por ahí en los años 50, en una conversación con un científico asiático, cuenta Russell -otros dicen que se han presentado casos de conversaciones semejantes en la humanidad-, él lo narra de manera muy pedagógica: estaban hablando de las diferencias entre occidente y oriente, el cortoplacismo y la visión de largo plazo. Entonces, él le preguntó al asiático su opinión sobre la Revolución Francesa. Era por allá por los años 1950 y el asiático le dijo: ‘Es muy temprano para emitir un juicio’.

Ese tema de acometer y ahí mismo retroceder, hace mucho daño. Hay que acometer, ajustar sin retroceder. Como regla general, el retroceso debe ser solo por excepción. El ajuste, dentro del proceso de acometer, evita retroceder. Un ajuste de todas las horas, acometer todas las horas, pero perseverar y tener una visión de largo plazo.

Tres años con este entusiasmo que ustedes le han puesto al tema de ‘Colombia es Pasión’ anticipa que en el tema se va a perseverar y que habrá un momento, en el mundo, donde a nadie hay que llevarle este escudito; todo el mundo lo va a reclamar.

Si perseveramos, ya nosotros no tendremos que decir ‘Colombia es Pasión’, sino que en el mundo se dirá: ‘Quiero ir a la tierra de la pasión’.

Muchas gracias”.
 
     
 
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
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