“A todos un saludo muy afectuoso.

Primero doy mis excusas por haber llegado tarde. Estaba en tierra desde muy temprano, pero amanecí en la ciudad de Montería y el aeropuerto estaba ‘enneblinado’ y se demoró bastante para poder salir el avión.

Tuvimos una reunión previa con familias de los secuestrados, de aquellos compatriotas que permanecen secuestrados.

Es una situación desgarradora, ellos están en la ciudad de Medellín hoy. Entonces me pidieron que repitiera ante el país lo siguiente: el Gobierno Nacional ha cumplido todas las exigencias y reitera la seguridad de todas las garantías para la liberación de todos los secuestrados. Es lo que muy escueta y contundentemente debo decir, atendiendo las conclusiones de la reunión que acabamos de tener con las familias de los secuestrados.

¿Qué hemos procurado hacer en Medellín? Una integración de política social y de política de orden público; van de la mano. Si no hay política de orden público, no hay inversión, no hay prosperidad de la economía, no hay manera de obtener los recursos para la política social. Y si no hay política social es imposible remontar totalmente los problemas de orden público.

Entonces hemos querido, de cara a la comunidad, avanzar en la tarea de orden público y en la tarea social. Más compromiso, más eficacia con toda la transparencia de la Fuerza Pública, y un programa de política social, en el cual, todas las entidades que están interviniendo en política social –municipales, departamentales y nacionales–, deben comprometer a los beneficiarios de esos programas a que cada uno de esos beneficiarios sea un promotor de vida. Ese es el tema que cada uno sea un promotor de vida.

Yo quisiera, después de consultar con el señor Alcalde (de Medellín, Alonso Salazar) y el señor Gobernador (de Antioquia, Luis Alfredo Ramos), darle este curso a la reunión. La reunión es una reunión de seguimiento a ver cómo vamos.

 Entonces nosotros hemos tenido aquí cuatro delegados: el doctor Melguizo de la Alcaldía (Jorge Melguizo, Secretario de Desarrollo Social), el doctor Jaramillo de la Gobernación, Frank Pearl del Gobierno Nacional (Alto Comisionado para la Paz y Consejero para la Reintegración), y mi general Oscar Naranjo (Director de la Policía Nacional). Y dos viceministros han tenido la encomienda de parte del señor Ministro del Interior (Fabio Valencia Cossio), del señor Ministro de Defensa (Gabriel Silva Lujan) y de mi persona, de visitar periódicamente a Medellín para ver cómo va el tema de la policía, la coordinación con la Fiscalía, etcétera.

Entonces yo procedería, porque esta tiene que ser una reunión corta y ser muy al grano. Vamos a dividirla en dos: primero este informe de la parte de orden público, a cargo de las instituciones armadas de la República, de la Fiscalía, y después, muy brevemente, unos voceros sociales nos dicen en qué va la tarea de que todos trabajen para que cada uno sea un gestor de vida en nuestra ciudad de Medellín.

El sábado, Dios mediante, tendremos un Consejo Comunitario en Florencia, Caquetá, que tendrá en simultáneo un Consejo de Seguridad. Y el domingo vamos a empezar este experimento en Cali de la integración de la política social con la política de orden público. Esto no da resultados de la noche a la  mañana, en esto hay que ser muy perseverante.

Esta Patria nuestra en 200 años de vida independiente solamente ha tenido escasos 47 años de paz. Tuvo siete años de relativa paz en el siglo XIX, alrededor del gobierno de Núñez (Rafael Núñez), y en el Siglo XX apenas unos 40 años de paz, entre 1902 cuando se firmó el pacto que le puso fin a la última guerra civil declarada de aquella época, y los años 1940, cuando empezó la violencia partidista.

Vinieron la guerrilla marxista, los paramilitares, el narcotráfico. Y las generaciones vivas, desde 1940 hasta la fecha, no han vivido un día completo de paz. Pero la vamos a conseguir con perseverancia.

Entonces procedemos de la siguiente manera: Alejandro Arbeláez, Viceministro de Defensa, nos cuenta decisiones que han venido tomando. Cómo va la reunión semanal en Medellín. Si Miguel Ceballos (Viceministro de Justicia) quiere complementar algo, bien. Y entonces entraríamos al señor coronel Martínez (Luis Eduardo Martínez, Comandante de la Policía Metropolitana de Medellín).

 Yo anticipo lo siguiente; en comparación con el año pasado, seguimos todavía con un crecimiento del homicidio. Pero si uno compara las últimas semanas contra semanas anteriores, ha venido presentándose un decrecimiento.

Le doy la palabra al Viceministro de Defensa para que sea una reunión de informes y de ajustes, que ayude.

Querida comunidad, a todos, muchas gracias.

Bandas del narcotráfico

Nosotros tenemos este problema de bandas del narcotráfico. Yo diría que esta política de seguridad en Colombia ha sido útil, no ha producido todos los frutos, falta; pero ha sido útil. Hemos debilitado a la guerrilla, hemos desmontado el paramilitarismo, hemos recuperado el monopolio del Estado para combatir a los criminales.

La palabra paramilitar surgió en Colombia para denominar bandas privadas criminales cuyo objeto era perseguir a otros criminales. Eso esta desmontado en Colombia.

Hoy tenemos guerrilla narcotraficante y esas bandas del narcotráfico.

De estas bandas nosotros hemos desmontado cabecillas de todas esas organizaciones del narcotráfico. Nos quedan unos señores que se llaman ‘Los Combas’, que el ‘Cuchillo’, que el ‘Loco Barrera’, etcétera. Encima de ellos estamos.

Y hay una cantidad de narcotraficantes tratando de posicionarse.

Hoy la Fuerza Publica colombiana ha recuperado el monopolio del Estado para combatir a los criminales y la justicia ha recuperado su monopolio.

En muchas partes del país no dejaban actuar a los fiscales ni a los jueces; eran reemplazados por cabecillas del paramilitarismo, por cabecillas de la guerrilla. Hoy fiscales y jueces cumplen sus obligaciones en todo el país.

Yo diría que estas bandas del narcotráfico toman hoy importancia en la vida nacional por dos cosas: porque hay una política de orden público persiguiéndolas, que ha producido un resultado muy bueno, que es el segundo aspecto, una ciudadanía que hoy se conmueve ante cualquier criminal.

Hace algunos años esto hubiera pasado desapercibido. Asesinen y secuestren y produzcan coca, y esto relativamente desapercibido; hoy no. Porque hoy la ciudadanía es mas exigente, esta más consciente y el Gobierno totalmente comprometido a derrotarlos. Estos bandidos los derrotamos y en eso no puede haber vacilación. Hemos avanzado mucho y vamos a lograr el avance de derrotar estas bandas.

Yo diría que es la primera vez del país que –antes se conocían unos carteles y unos jefes de carteles–, es la primera vez de la Colombia sufrida por el narcotráfico cuando tenemos relativamente contabilizados los narcotraficantes.

Hay unos 2.700 en estas bandas del narcotráfico que tienen aliados, unas 1.500 personas aliadas que los ayudan; detrás de todos estamos. Y tienen alianzas mafiosas con las guerrillas para repartirse ese negocio del narcotráfico. O sea que es muy importante tener absoluta claridad en esta materia.

A ver, joven Alejandro”.