“Agradecemos inmensamente la confianza de ustedes en Colombia: el haber instalado esta magnífica inversión en Santa Marta. Cuando a la entrada de los Ministros y mi persona saludábamos a los operarios y trabajadores, en ellos veíamos seguridad, veíamos un gran compromiso profesional, una gran tranquilidad de espíritu por la oportunidad que aquí han encontrado.

El mundo está en una crisis. Ustedes saben que Colombia da todas las garantías para invertir. Necesitamos que sigan creciendo.

Este es un país que ha hecho un gran esfuerzo por la seguridad. Todos los días nos proponemos nuevos retos. Mientras que haya un solo colombiano asesinado, un solo colombiano secuestrado, no podremos dormir ni estar tranquilos en el día.

Este es un país que entiende que la prosperidad tiene una gran relación con la empresa privada con responsabilidad social. El Japón, con esa institución legendaria que se ha llamado el ‘lifetime employment’ ha dado un gran ejemplo al mundo de fraternidad laboral.

Sé que cuando ya esté muy viejo y pueda venir a visitarlos, aquí ya van a encontrar con el pelo blanco a muchos de los operadores que hoy están jovencitos, porque aquí van a tener el ‘lifetime employment’, que es esta institución de estabilidad laboral tan importante en el desarrollo del Japón.

En el Japón del milagro de la posguerra, la estabilidad laboral ha sido un gran ingrediente causante de elevados niveles de contribución de productividad. Por supuesto, uno piensa en el Japón. Y mucho hay que aprender.

En 1863 ya el Japón había eliminado el analfabetismo y había desarrollado un alto nivel de conocimiento en matemáticas. Y ese es un punto de referencia para nuestra Revolución Educativa de capacitación. Eso nos interesa mucho: la permanente integración entre Odin y el Sena.

Colombia es un país que puede obtener más créditos en el mercado internacional, porque es un país con buena reputación. Nunca ha desconocido la deuda. Por eso, en medio de estas dificultades, ya nuestro Gobierno ha financiado los requerimientos de deuda pública de 2009. Además salimos con éxito al mercado el 6 de enero. Y ahora estamos buscando tener financiaciones adicionales para poder ayudar a la empresa privada.

Claro que nos preocupa que muchos proyectos de inversión en Colombia puedan tener demoras o dificultades por falta de créditos para los inversionistas. Pero vamos a hacer todo el esfuerzo con crédito de Bancoldex para ayudar a las Mipymes, a fin de que no se les seque la caja en este momento tan difícil de la economía mundial.

Debo recordarles lo siguiente: el endeudamiento neto de Colombia llegó a alcanzar niveles casi del 50 por ciento. Terminamos el año pasado con el 22. Creo que ahí hay un gran ahorro.

En 1997 la empresa privada colombiana en deuda en moneda extranjera más de 17 mil millones. En diciembre del año pasado menos de 17 mil. Y en ese período había más que duplicado su tamaño. El sistema financiero colombiano está en mejor situación. Antes tenía 39 centavos de cobertura por cada peso de deuda morosa. Ahora tiene 1,10. Antes teníamos 400 millones de dólares de seguro de depósito, ahora 3 mil, un gran ahorro.

Todo eso nos da a nosotros facilidades, o menos dificultades para obtener los créditos que el país requiere en esta época de dificultades.

Con la ayuda de Dios, vamos a colocar este año no 3,3 billones que estaban presupuestados, no tres 900 que se prestaron el año pasado, sino 5 billones en Bancoldex, para estimular la caja de la Pymes y contribuir a defender esta economía de esta época de dificultades.

La situación del fiscal del país también ha mejorado. No vivimos en un paraíso, pero hemos avanzado.

Si ustedes ven las estadísticas oficiales encontrarán que el déficit que se reconocía en el Gobierno Nacional central por allá en el 2002 era de 6,2. Pero si a eso le suman 1,5 de necesidad de pagar pensiones que no se habían contabilizado (porque entonces se contaba con las reservas del Seguro Social, que se agotaron en el 2003), ese déficit era de más del 7 y medio. El año pasado terminó en 2,6. Todavía no se ha confirmado la cifra, pero confiamos que esté por ahí.

Este año lo tenemos que aumentar, para poder ayudar a que no se frene, a que la economía no colapse.

Hemos hecho un gran esfuerzo en reformas estructurales. Ustedes saben que muchos países del mundo no han podido hacer la reforma pensional, ni la de transferencia a las regiones, que Colombia ha hecho.

Colombia por varios años consecutivos se ha ganado el premio en el Banco Mundial por ser el país que más reformas viene introduciendo. Y nos lo queremos volver a ganar.

La reforma administrativa nuestra creo que le ha ayudado mucho al Estado. Hemos reformado 411 entidades del Estado. ¿Qué sería si no hubiéramos reformado a Ecopetrol, a Telecom? Todas esas instituciones que ha reformado el Ministro de Agricultura.

¿Qué sería si no estuviéramos reformando las clínicas del Seguro Social? Las clínicas del Seguro Social ahora le estarían pidiendo al Estado un subsidio de un billón de pesos al año.

Vamos a seguir en esta tarea. Reformas estructurales, de los niveles legal y constitucional, y reforma administrativa.

Hemos introducido una serie de incentivos importantes. El Grupo Odin, por estas empresas que ha construido, puede deducir de la renta líquida gravable un 40 por ciento.

Les quiero dar este detalle: si no alcanzan a hacerlo en el primer año, porque la deducción sea muy superior a la renta líquida, por ejemplo, que la renta líquida es 50 y pueden deducir 80, no quiere decir que van a perder los 30. Quiere decir que en un año deducen 50 y los otros 30 en los años subsiguientes, a medida que pueda.

Creo que es una de las bondades de la reforma tributaria: permitir que la deducción del 40 por ciento se pueda hacer en un número indefinido de años.

Si el Grupo Odin quiere ser zona franca y no pagar arancel ni IVA por los equipos y materias primas, no pagar renta de 33 por ciento sino de 15, puede hacer una nueva empresa aquí. Y si esa empresa, la nueva, ella solita, la nueva, cumple los requisitos de zona franca, esa empresa puede quedar como zona franca.

Me mostraban ahora los laboratorios. El Ministro de Minas decía: ‘Esa máquina, un cromatógrafo, puede valer ciento y tanto mil dólares, chiquitica’. El Ministro de Agricultura preguntaba, con mucho entusiasmo, cómo chequean el aceite que entra y cómo van mirando en el laboratorio cada una de las etapas del proceso.

Les dije: ‘Yo cierro los ojos, esto está todo bien hecho. Estos japoneses trabajan muy bien, y los criollos no se les quedan atrás’.

Yo vine aquí es a otra cosa, a invitar al señor Mamoru Saito a que haga otra planta. Vine fue a eso. Lo necesitamos. Qué bueno, el país lo necesita. A eso hemos venido. Confiamos en ustedes. Les agradecemos que hayan confiado en Colombia.

Cuando empezábamos, las relaciones estaban difíciles con Japón. No venían por miedo al secuestro. Había sido asesinado un empresario japonés en Colombia. Y teníamos muchas disputas legales con empresas japonesas, empezando por las del sector de telecomunicaciones. Hoy están todas resueltas.

El año pasado celebrábamos los 100 años de relaciones con el Japón. Y vino el Canciller. Nosotros tuvimos el gran honor de ver al Primer Ministro en la reunión de Lima. La la asociación de empleadores y la Andi han avanzado mucho.

Esta inversión del Grupo Odin es una muestra del restablecimiento de la confianza japonesa en Colombia. Hemos expresado ya nuestra disposición de negociar y suscribir con el Gobierno del Japón lo que ellos llaman ‘el Acuerdo de Asociación para la Promoción Económica’. Queremos hacerlo cuanto antes.
Porque necesitamos mucha inversión japonesa aquí y talento japonés, como el del señor Mamoru Saito y todos sus compañeros.

Fortalezas y debilidades

Explicaba en un evento anterior que nosotros tenemos fortalezas y debilidades frente a esta crisis, y que tenemos una política para contrarrestar la fase negativa del ciclo económico.

Un esfuerzo para invertir 55 billones en infraestructura. Un esfuerzo para entregar millón y medio de microcréditos este año a los sectores más pobres. Un esfuerzo para llegar a más de tres millones de Familias en Acción para los más pobres. Un esfuerzo para que 41 zonas francas aprobadas avancen en inversión. Un esfuerzo para entregar los créditos de Bancoldex –cinco billones-. para financiar las vigencias 2009, 2010 y 2011 en construcción de infraestructura, de educación. Si el Gobernador nos presenta los proyectos, le aprobamos eso. Un esfuerzo para financiar a los alcaldes las vigencias 2009, 2010 y 2011 en vías terciarias, para mejorarlas.

La crisis de la economía hay que andarle a tiempo. Es como cuando uno siente un virus. Si uno se aplica oportunamente la medicina, puede evitar los efectos más graves de ese virus. Si se demora, puede tener mucho más sufrimiento, demorar más el restablecimiento.

Nosotros creemos que ese sistema especulativo del capitalismo, las ‘pirámides’ de Nueva York, le dieron un mal ejemplo al mundo. Lo que ha sido ese mercado especulativo de los derivados secundarios. Creemos que la flexibilidad, la permisividad en el mercado de hipotecas.

Pero creemos también que se hubiera podido evitar el efecto dominó, si se inyectan unos recursos más temprano, para que no colapsaran unas empresas, que han jalonado el colapso de las otras. Experiencia: no dejar que colapse nuestra economía en Colombia.

Ahora, muchos dicen: ‘Es que es más de lo mismo’. No. Lo que pasa es que nosotros no estamos improvisando planes. Nosotros veníamos en una senda de crecer inversión para crecer competitividad del país, que ahora va operar como una política anticíclica.

Nosotros no tenemos ahora que responder: ‘Sí, nos vamos a ir a hacer ya parquecitos de pico y placa, a destruir andenes y a construir andenes, para generar empleo’. No. Nosotros estamos con unos programas serios de competitividad, que no se han improvisado, que veníamos lanzando desde hace algunos años.

Vamos a ver cómo recorremos ahora todo el país con los pequeños empresarios, Bancoldex y el Fondo de Garantías.

Ese recorrido, le pido a la doctora Alicia (Arango) que nos ayude, pequeños empresarios, Bancoldex y Fondo de Garantías. Una libretica, a colocar crédito en todo el país para introducirle capacidad a la pequeña empresa colombiana, ponerle anticuerpos, a fin de que pueda salir avante en este difícil reto de la economía mundial.

Me decían: ‘Presidente, es que usted es muy optimista’. Estamos trabajando. Nosotros no nos podemos quedar ahora de analistas de cafetín, a hacer pronósticos negativos a toda hora. Hay que trabajar con entusiasmo. El optimismo tiene que ser compañero del trabajo. El que está trabajando con moridera, es mejor que se quede en la casa hasta que se alivie. Si sale a trabajar, tiene trabajar con optimismo, como lo hace el señor Odin.

Piense, señor Odín, yo ya he venido dos veces a visitarlo a Santa Marta. Háganos una visita en la Casa de Nariño, se toma allá un cafecito y nos anuncia la construcción de nuevo emprendimiento de ustedes”.