“Quiero repetir la gratitud de los colombianos a doña Ana Milena Muñoz de Gaviria, esposa del señor ex presidente César Gaviria, quien, como Primera Dama de la Nación, dio todo el impulso a esta gran idea.

Quiero expresar la gratitud de los colombianos, del Gobierno, la propia, al doctor Luis Carlos Sarmiento Ángulo, por su entusiasmo y devoción por este gran programa.

Quisiera darles solamente un pequeño testimonio: pacientemente, él, con sobriedad republicana, pide una cita en la Presidencia de la República. Yo lo llamo y le digo: ‘Aquí se demoran las citas, esta agenda se mantiene muy congestionada, cuénteme. Dice: ‘Necesito hablar con usted, con el Ministro de Hacienda y con la Directora del Icetex, es el temita que usted sabe’.

Y cuando me llama, digo: ¿Qué problema habrá en al sector financiero? Nunca me habla de problemas del sector financiero. Su problema, su obsesión, es el bienestar de Colfuturo.

Y haya o no haya dinero, con crisis o sin crisis, él hace, a través de dar todos los argumentos, que el Gobierno Nacional cumpla los compromisos contraídos en esta administración con Colfuturo. Quiero expresarle toda la gratitud por aquello de la perseverancia y la devoción a este gran programa.

Todos los agradecimientos a quienes participan en la junta directiva, en una tarea de patriotismo, de desprendimiento. Al doctor Jerónimo. A las personas que trabajan en la organización.

Quiero felicitar a los beneficiarios, a los compatriotas que acceden a estos créditos, a sus familias, a todos aquellos que lo han podido hacer a lo largo de estos años. Y a este grupo tan importante que emprende una nueva etapa profesional en su existencia.

El crecimiento es muy importante. De las 1.218 solicitudes de este año, se han aprobado 854. Un salto de 120 por año, a 854. Y destaco la circunstancia de que provienen de 81 universidades, de 27 regiones de Colombia. Como decía el doctor Luis Carlos Sarmiento, todas las regiones de Colombia empiezan a tener acceso a este bellísimo programa.

Me siento muy emocionado de que 19 oficiales de nuestras Fuerzas Armadas, en franca lid, sin ninguna ayuda que les facilitara el éxito en el proceso, concursando, hacen parte de este grupo de 854 colombianos seleccionados.

Diría que este es un gran estímulo para las Fuerzas Armadas de Colombia y un gran estímulo para las mentes jóvenes, con gran inteligencia para participar en las Fuerzas Armadas de Colombia. Y nos sentimos muy orgullosos de la calidad de nuestros oficiales, lo que se ha puesto de presente al tener tanto éxito en esta rigurosa selección. Muchas felicitaciones, apreciados oficiales.
Y por supuesto, ellos no vienen de una total dedicación al estudio. Muchos de estos 19 oficiales tienen en su cuerpo las cicatrices del heroísmo por la Patria, de su exposición al riesgo en la batalla de derrotar el terrorismo y la violencia, que tanto han afectado a nuestros compatriotas.

Seguridad Democrática ha avanzado junto con confianza inversionista y política social

Hemos procurado, apreciados compatriotas, adelantar una política no de izquierda, no de derecha. Una política de ajustado equilibrio democrático.

Cuando empezaba nuestro Gobierno, se decía: ‘Uribe va a dedicar los recursos de un Estado fallido a financiar la guerra, y lo social irá al canasto del olvido’.

Nada de eso ha ocurrido. A lo largo de estos años se ha podido adelantar una política balanceada. Para buscar confianza en Colombia, con un balance entre la seguridad, la promoción de la inversión y la política social. A tiempo que hemos avanzado en la seguridad, hemos podido avanzar en las coberturas sociales.

A tiempo hemos podido avanzar en la promoción de la inversión. El país se ha puesto de moda, es uno de los destinos hoy que más cautiva a la inversión extranjera y ha recuperado una gran tasa de inversión doméstica, gracias a lo cual hemos podido sortear tantas dificultades, y esperamos superar esta inmensa crisis de la economía.

A tiempo que se ha trabajado para promover la inversión, para lograr altas y sostenidas tasas de inversión, que es lo único que nos lleva a superar la pobreza y a construir equidad, hemos avanzado en la política social.

Esos tres elementos: la seguridad, la promoción de la inversión y la política social tienen una relación bien importante, recíproca, transitiva, entre todos ellos.

La seguridad y la promoción de la inversión constituyen las únicas fuentes de las cuales irradia un marco de prosperidad en el largo plazo, que permite financiar las políticas sociales. Y a su vez, las políticas sociales, en una democracia de opinión, se constituyen en el factor que finalmente convalida la necesidad de las políticas de seguridad y de promoción de inversiones.

Avances en Revolución Educativa

Solamente un esfuerzo sostenido en una Revolución Educativa permanente, logra que el país mejore la productividad, haga un tránsito hacia mayores niveles de formalización de la economía, supere la pobreza, construya equidad, sea más competitivo, incremente el ingreso, dé más oportunidades de emprendimiento y cree empleos de buena calidad y con afiliación a la seguridad social.

A lo largo de estos años hemos pasado en cobertura de educación básica del 78, y en muchas partes del país ya tenemos el ciento por ciento. En cobertura de educación media del 57 y estamos llegando al 80 por ciento.

Teníamos, apreciados compatriotas, cuando empezó este Gobierno, menos de un millón de estudiantes universitarios, y hoy tenemos más de millón y medio. Y si sumamos los nuevos esfuerzos del Sena en programas técnicos y tecnológicos, que engranan con las universidades, pronto estaremos en un millón 700 mil.

Nuestra cobertura en educación superior era del 22 por ciento, está superando el 35 por ciento. Teníamos 60 mil estudiantes colombianos con créditos del Icetex, hemos superado los 250 mil y aspiramos llegar a 300 mil estudiantes con créditos del Icetex.

Los profesores se escogían en la educación pública por recomendación, hoy por concurso. Solamente teníamos un escalafón, hoy hay uno nuevo, que premia la mejor calidad, la mayor capacitación y por supuesto da una remuneración más equitativa. Tenemos ya 60 mil profesores en el nuevo escalafón.

Teníamos únicamente la prueba para los egresados de bachillerato, hoy tenemos periódicamente las pruebas Saber, que van midiendo en las diferentes escalas de la educación las competencias en el idioma, en las matemáticas, etcétera.

Ya también se someten a examen los egresados de los diferentes programas universitarios: las pruebas Ecaes. Y también tenemos el observatorio de egresados de las diferentes universidades y de los diferentes programas, para poderles dar una indicación a estudiantes y padres de familia sobre el grado de conexión entre la oferta universitaria y las necesidades del país.

Estamos logrando que todos los programas universitarios tengan la certificación básica de calidad. Y aspiramos que en el primer semestre del 2010 se pueda decir que más del 30 por ciento de los programas universitarios han obtenido la certificación de excelencia.

Un país que ha avanzado mucho en nutrición infantil, hoy entrega el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar 14 millones 156 mil porciones alimentarias al día.

El avance en nutrición infantil y de escolares es bien importante, no así la cobertura educativa para la primera infancia.

Si ustedes me preguntaran por deficiencias en este programa educativo, les diría que en los sectores populares apenas hemos empezado un proceso para la cobertura de primera infancia, que este año nos debe llevar a 300 mil niñitos y el año entrante a 400 mil niñitos.

Algunas ciudades como Bogotá y Medellín han avanzado mucho en instalaciones escolares, en la mayoría del país tenemos un gran rezago, la cobertura ha desbordado la infraestructura. El país se desatrasó en telefonía celular, pero ha registrado un gran atraso en conectividad. Confiamos que el año entrante logremos que un 80 por ciento de la matrícula educativa pública tenga acceso a banda ancha.

Se ha dado un gran salto en el Sena, capacitado en formación vocacional a un millón 100 mil colombianos, el año pasado alcanzó seis millones, este año repetirá esa cifra.

Tenía 41 mil colombianos matriculados en programas técnicos y tecnológicos, hoy tiene 295 mil. Y como parte de la política anticíclica, el Sena se propone vincular a otros 250 mil colombianos –ya ha hecho la primera convocatoria, en los próximos meses tendremos los primeros 120 mil, ya muchos de ellos han empezado–, en programas técnicos y tecnológicos relacionados con los nuevos empleos, con las nuevas oportunidades de emprendimiento, porque aceptamos el desafío, apreciados compatriotas, porque esta crisis de la economía sepultará en todo el mundo muchos de los viejos oficios.

Más de 30 mil de esta nueva cohorte de 250 mil colombianos, reciben un apoyo de transporte y de subsidio alimenticio por parte del Sena.

El Sena les está llegando a un millón de colombianos al año en programas virtuales. Y se ha convertido en el gran factor para masificar la enseñanza del inglés como segunda lengua en nuestro país. Este año debe llegar a un millón de colombianos estudiando inglés en internet. La mayoría de los profesores de nuestro archipiélago de San Andrés y Providencia, donde nuestros compatriotas nacen como el inglés como lengua materna, que acompaña a nuestra bella lengua castellana.

Hoy el esfuerzo se hace a través de transmisión satelital. La señora Ministra de Comunicaciones (María del Rosario Guerra) ha adjudicado la instalación del cable submarino para hacer de San Andrés una gran potencia de informática.

Ciencia y tecnología

Se aprobó la nueva Ley de Ciencia y Tecnología y confiamos que vaya ayudando para que el país pueda avanzar en esa materia.

Creemos que el dúo entre Colciencias, en una investigación con recargo en la parte académica, y el Sena, con una investigación con énfasis en la aplicación, más todos los esfuerzos del sector privado y los nuevos esfuerzos como la Ley Agro Ingreso Seguro, que anualmente está dedicando una porción importante a promover programas de investigación, nos ayuden a que el país vaya dejando atrás ese rezago.

Falta mucho, apreciados compatriotas, pero quiero decirles algo sobre este tema. Y ustedes, por su calidad académica, lo asimilan y creo que lo comparten: en Colombia siempre se habla de todo lo que falta en presupuestos de investigación, pero generalmente no se habla de lo que rinde la investigación en Colombia.

Yo creo que no solamente hay que hacer el estudio comparativo de cuánto es el monto presupuestal en investigación, cuánto significa como cifra relativa en relación con el PIB, su comparación internacional; hay que hacer otro estudio, apreciados compatriotas: cuál ha sido el rendimiento de la investigación en Colombia por cada peso invertido. Ha sido muy alto.

Cuando uno ve los resultados en las investigaciones médicas, los resultados en las investigaciones en la caña de azúcar, los resultados en las investigaciones del café, los resultados en las investigaciones del cacao, encuentra que con unos pocos pesos se han obtenido grandes resultados.

La capacidad humana de los colombianos muestra unos resultados extraordinarios en la productividad de los recursos de investigación. Eso nos genera mucho entusiasmo.

El futuro de las Fuerzas Armadas

Quiero destacar con visión de futuro a estos 19 oficiales de nuestras Fuerzas Armadas. Muchos colombianos me preguntan: ‘Presidente, en algún momento tenemos que derrotar todos estos actores de violencia. ¿Qué será de nuestras Fuerzas Armadas?’.

Creo que estamos en la obligación de definir con ellos un gran futuro de contribución a los usos civiles, y en muchos campos.

Nuestras Fuerzas Armadas hoy empiezan a crecer muchísimo en la ingeniería. Por ejemplo, un buen tramo de la carretera Tame – Arauca, donde estaremos el 20 de Julio, allí será el epicentro del Gran Concierto Nacional que ya hoy ha vinculado a 200 mil artistas y alrededor de mil municipios, ese tramo ha sido construido por las Fuerzas Militares.

Acabamos de convenir con las Fuerzas Militares la construcción de la vía La Soberanía, Arauca – Cubará (Boyacá), que empieza en el río Magdalena y cruza la meseta, llega con un pedacito de su territorio a Venezuela, y después Norte de Santander.

Acabamos de convenir con las Fuerzas Militares otra carretera de gran importancia para el país: la carretera de La Uribe (Meta) a Colombia en el Huila, que hace parte de la gran vía para comunicar los Llanos Orientales con el río Magdalena, el río Cauca y el Pacífico colombiano.

En las obras civiles vemos todo el presente y todo el futuro de nuestras Fuerzas Armadas. La Armada Nacional, con mucho valor agregado en investigación y en ejecución, ha construido embarcaciones muy importantes en los últimos años, con un costo igual al 40 por ciento de lo que costaría adquirirlas.

Colombia tiene aproximadamente 16 mil kilómetros de vías navegables, antes vigilábamos 3 mil kilómetros, hoy casi 14 mil, y todos esos equipos han venido siendo construidos por la Armada, con un gran agregado en investigación.

La Armada también empieza a ofrecer la gran posibilidad de reparación de embarcaciones civiles. Y estoy seguro que en los próximos tiempos de construcción de embarcaciones civiles.

La Fuerza Aérea ha hecho un gran acuerdo con el Brasil para desarrollar nuevos aviones. Y confiamos que la Fuerza Aérea Colombiana se constituirá en una de las más importantes del mundo en agregados tecnológicos para los nuevos desarrollos de la aviación. Este paso con el Brasil, hacia allá la prospecta.

La participación de estos 19 colombianos, de nuestros oficiales, de nuestros héroes en este programa, nos crea muchas ilusiones para el futuro de nuestras fuerzas y su contribución a los grandes usos civiles que requiere nuestra Patria.

Nada mejor en un momento de dificultades económicas que persistir en la Revolución Educativa. Solamente el avance en los conocimientos traerá una solución estructural a esta crisis tan severa, que ojalá no dure tanto como algunos negativamente han presagiado.

De nuevo mis felicitaciones a todos ustedes. Doctor Luis Carlos: los colombianos no tenemos con qué agradecerle su devoción patriótica para sacar este programa adelante. A usted, a todos aquellos que lo acompañan en Colfuturo, nuestra gratitud infinita.

A los papás y a las mamás de los beneficiarios de este programa, un saludo lleno de afecto. Me imagino cómo estarán de felices. Y a todos ustedes, que emprenden esta nueva oportunidad, nuestras felicitaciones. Y Colombia los espera dentro de unos años, con los brazos abiertos, para que sigan dando su contribución a fin de que las nuevas generaciones de colombianos vivan felices en el fecundo suelo de la Patria. Muchas gracias”.