“Ningún lugar mejor que Medellín, ninguna oportunidad más indicada que esta nueva versión de Inexmoda, para reconocer a un colombiano sobresaliente. La manera que tenemos para hacerlo es el legado del Libertador: la Cruz de Boyacá. Él la instituyó para los mejores hijos de la Patria.

No es fácil hacer un resumen sobre una vida pródiga de realizaciones en favor de la empresa privada, del terruño y de la Patria, como la del doctor Guillermo Valencia Jaramillo.

Yo me atrevería, intentando ese resumen, a expresar ante ustedes que al imponerle a é legado del Libertador, la Cruz de Boyacá, consideramos tres condiciones fundamentales en el doctor Guillermo Valencia Jaramillo: un gran empresario, un gran antioqueño, un gran colombiano.

Trabajador incansable y de todas las horas. Una actividad empresarial regida no solamente por las normas jurídicas, sino más allá, por esa norma ética que nos obliga a que todo aquello que hagamos busque realizar el bien del prójimo.

Un gran generador de empleo, de empleo de calidad, con afiliación a la seguridad social. Una expresión de responsabilidad social desde la empresa privada. Un gran antioqueño.

No es fácil que hubiéramos encontrado sus reemplazos, quienes hubieran dirigido la tarea que él dirigió, durante tantos años de dificultades. Las noticias se oponían a que alguien viniera a Medellín. De haber sido por las noticias, estos eventos habrían tenido 20 años de ostracismo. Se necesitó de un grupo que los dirigiera, que los sacara adelante, a pesar de todas las dificultades, contra todos los obstáculos. Y ese grupo lo dirigió el doctor Guillermo Valencia Jaramillo.

Cuando retrotraemos el examen de los acontecimientos, lo que hoy encontramos como común, en ese momento era excepcional. Qué difícil de lograr, cuando a la ciudad se le quería borrar de la lista de lugares del mundo a los cuales se podía visitar.

Ese tesón del gran antioqueño, esa disciplina del gran antioqueño, ese sentido de asociatividad, que ha sido un punto transversal en la historia de Antioquia. Y un gran colombiano.

Contribución a tratados de comercio

Tampoco es fácil encontrar un empresario que haya ayudado más a la internacionalización de la economía colombiana. Lo hemos visto allí, con toda la preparación, con todo el talento, con todo el compromiso local y la visión universal, ayudando a sacar adelante el G-3, hoy el G-2, tratado que integraba a México, Venezuela y Colombia.

Trabajando en todos los momentos de dificultades de la Comunidad Andina. En la administración del Presidente (George) Bush papá, ayudando a sacar la decisión en los Estados Unidos para la aprobación de las preferencias unilaterales para los productos andinos, en compensación a la lucha para eliminar las drogas ilícitas.

Después, en las sucesivas renovaciones. Un año muy difícil, 2001 y 2002, y él estuvo allí, con un liderazgo muy eficaz, hasta que el 6 de agosto de ese año se aprobó en Estados Unidos una nueva renovación con el nombre de Atpdea.

Ha estado en la primera línea, ayudándonos a sacar adelante el tratado entre la Comunidad Andina y Mercosur, que tiene dos contribuciones muy positivas a Colombia: primero, se cumple con un requisito para avanzar con otros tratados, y segundo, con una transición prudente integra unos mercados llamados a ser muy fuertes.

Creo que ese tratado nos pone a nosotros en el horizonte de hacer todos los esfuerzos para integrar esta economía con una economía como la del Brasil, con 196 millones de habitantes, una de las mejores fuentes de inversión para Colombia.

Chile se había retirado de la Comunidad Andina. Aquí destacábamos muchos aspectos de Chile, pero parecíamos estar muy lejanos. El doctor Guillermo Valencia Jaramillo da una gran contribución para que realicemos el tratado que nuevamente nos integra con Chile.

El tratado con los tres países de Centroamérica: con Guatemala, con El Salvador, con Honduras. El Tratado con Canadá. Un animador constante del tratado que hoy negociamos con la Unión Europea. De tratados que se vienen sacando adelante, como los tratados de desmonte de la doble tributación. Doble tributación que es un obstáculo a la inversión. Y tratados de promoción de inversiones.

Cuando se propuso que las Américas se integraran en el Alca (Área de Libre Comercio de las Américas), el doctor Guillermo Valencia Jaramillo estuvo en la primera línea. Y cuando las dificultades políticas truncaron esa posibilidad, también con gran talento nos ayudó para que fuéramos dando el paso de los tratados bilaterales que, en su sumatoria, algún momento, van a integrar al continente, con gran visión.

La verdad es que nunca el país lo ha visto, por proteger intereses cortoplacistas de una empresa o de un sector empresarial, negando la integración de Colombia a la economía internacional. Al contrario, siempre le ha pedido sacrificio, reflexiones al sector privado, para darle luz verde a la integración de nuestra economía a la economía internacional.

En todos los momentos de dificultades en el empleo, de dificultades en la tasa de cambio, de dificultades en la tasa de interés, de dificultades en el control del contrabando, de dificultades en las regulaciones arancelarias, en él, el sector privado y el Gobierno hemos escuchado una voz reposada, que se impone con la tranquila y poderosa razón.

Estamos llenos de motivos para expresar nuestra gratitud a este ilustre compatriota, que honra a Antioquia y es una garantía para todos los colombianos.

A mí particularmente me recorre un aire de sentimiento patriótico al dejar colocada, en el pecho del doctor Guillermo Valencia Jaramillo, la presea creada por El Libertador, para distinguir a los mejores hijos.

Un gran empresario, un gran antioqueño, un gran colombiano. Muchas gracias, doctor Guillermo, por todo lo que ha hecho por nuestra Patria.

Avances en inversión

Vamos a examinar hoy algunos temas del sector, en un momento de nuevas dificultades. Los conversatorios de los años recientes siempre han servido de punto de conclusión de los anteriores y de punto de inicio de nuevos diálogos.

Después de la reunión del año pasado, nos reunimos, con mucha disciplina, durante varios martes en la Presidencia de la Republica, hasta que sacamos adelante una serie de decisiones. Diría que allí no hubo fanatismo aperturista ni fanatismo proteccionista. Buscamos equilibrios, como debe ser siempre.

Esas decisiones finalmente crearon tranquilidad. Yo recuerdo que cuando se propusieron en este mismo auditorio, en esta misma audiencia, generaron mucha controversia. Unos hablaban de unas protecciones arancelarias, otros las consideraban inconvenientes.

Y el diálogo que se surgió en la Presidencia de la República, nos llevó a mirar el tema más detenidamente, a desbrozar el camino, a mirar el sector suficientemente desagregado, y a examinarlo en compañía de otros sectores que tienen esa afinidad de ser una manufactura en la cual hay mucha especialización en Colombia, mucha historia, presente y futuro, y mucha generación de empleo.

Eso nos salió bien. Cuando estábamos concluyendo esas conversaciones empezó a recuperarse la tasa de cambio. Dijimos: no obstante esta recuperación de la tasa de cambio, hay que concretar las decisiones que hemos venido estudiando. Porque si las olvidamos, entonces solamente volverá a aparecer el interés de plantear estas discusiones cuando vuelva a empeorarse la tasa de cambio.

A pesar de que hubo alivio de la tasa de cambio, diría que concluimos con decisiones importantes, aquel ciclo de conversaciones.

Vino esta enorme dificultad, esta caída de la economía mundial, esta contracción de la demanda externa. Lo que fue el proceso inflacionario del año pasado, especialmente la inflación de alimentos. Las limitaciones que tuvo el Gobierno para el salario mínimo, dadas las dificultades fiscales, las dificultades pensionales, las dificultades inflacionarias que todavía se observaban. Y eso también contribuyó a una contracción de la demanda interna.

Diríamos que el eje más determinante ha sido la contracción de la demanda externa, pero que también se nos creó una afectación a la demanda interna, que estamos haciendo todos los esfuerzos por recuperar.

Nosotros tenemos confianza que lo que hace el Ministro Plata (Luis Guillermo Plata, Ministro de Comercio Industria y Turismo), en la compañía del sector privado, para promover la inversión en Colombia, y para promover la integración de la economía colombiana a la economía internacional, nos tiene que ayudar.

De hecho el país ha recuperado una senda de tasa de inversión muy interesante. Hemos paso de tasas de inversión del 13 (por ciento), 14 (por ciento), a tasas de inversión por encima del 25 (por ciento).

En el primer trimestre de este año, a pesar de la caída de la economía, la tasa de inversión se mantuvo en el 25 por ciento. Las cifras de la primera semana de julio indican que llevamos en el año, hasta la primera semana de julio, cerca de 4 mil 500 millones de dólares de inversión extranjera directa. Una caída del 11 – 12 por ciento en relación con el año pasado, pero un primer semestre muy superior, a los que había sido la totalidad de la inversión extranjera directa en los años completos de periodos anteriores.

Años de 500 – 700, picos de mil 700 – 2 mil millones de dólares. En los últimos años, 8 mil 500 en un año, el siguiente 6 mil 500, el siguiente 9 mil 28, el año pasado 10 mil 564, y en los primeros días de julio de este año, en medio de la crisis, casi 4 mil 500.

Y la tasa interna de inversión confiamos que también se mantenga. Y hacemos todo el esfuerzo para que el país no vea caer la tasa de inversión por debajo del 25 por ciento del PIB.

Relación de la inversión con la política social

Cuando nosotros hablamos de algo elemental en lo cual tiene que insistir el Gobierno, porque los Gobiernos y los pueblos necesitan compenetrarse con unas metas sencillas, aquello de construir confianza en Colombia sobre tres pilares: el avance de la seguridad, la promoción de la inversión y la política social, y le asignamos toda la importancia a la inversión, la vemos fundamental como factor de sostenibilidad de la seguridad y como factor de financiación de la política social.

Quiero proponerles a ustedes, mi coterráneos, esa elemental reflexión. En ausencia de una tasa elevada de inversión, no es sostenible la política de seguridad. En ausencia de una tasa elevada de inversión, no es financiable la política social.

He aquí, pues, la importancia de hacer toda la fuerza, de poner todo el énfasis en que, a pesar de la crisis, el país mantenga una tasa de inversión no inferior al 25 por ciento.

Todas nuestras dificultades pasan por una solución: mantener una tasa de inversión elevada y sostenida en el largo plazo. De resto es muy difícil que salgamos adelante, que superemos la pobreza, que financiemos la política social, que nos permita construir equidad.

Acuerdos de promoción de inversiones y desmote de la doble tributación

Y creemos que el avance en la integración con la economía mundial nos ayuda mucho.

Además de los acuerdos que se han hecho en los últimos años, que nos permitirán tener un país que pasa de una asociación con cinco países a una asociación con más de 45 países en breve, creemos que los acuerdos de promoción de inversiones y los acuerdos de desmonte de la doble tributación también van a contribuir mucho.

Uno de los obstáculos a la inversión es la doble tributación. Se paga en el país de origen y en el país de destino. Los acuerdos lo han venido corrigiendo.

Y las políticas de promoción y de seguridad bilateral de inversiones también las exige el mundo entero hoy para poder invertir.

El acuerdo reciente con China sobre promoción de inversiones es un buen logro. Y el que ya hemos cerrado en su fase de negociación con India. Ojalá este año podamos cumplir todo el cronograma previsto por el Ministro (de Comercio, Industria y Turismo), Luis Guillermo Plata.

Avances en política social

Estamos haciendo esfuerzos para reactivar la demanda doméstica. Creemos que nuestra política social es un gran reactivador de demanda doméstica. Por lo menos se convierte en un factor que frena la caída en picada de la demanda doméstica. La política social, además de sus muy claros objetivos de superación de la pobreza, de construcción de equidad, obra en esta etapa difícil de la economía como una política anticíclica.

Cuarenta y un millones de colombianos con seguro de salud, cifra a la que hemos llegado, eso ha logrado que en el país se reduzca sustancialmente el gasto en salud de los ciudadanos y se sustituya por el gasto en salud del sistema de aseguramiento.

Creo que la cifra más elocuente es aquella que se ha hallado en las recientes negociaciones entre almacenes Éxito y la Caja de Compensación Cafam de Bogotá. Cuando tuve la oportunidad de recibir a los representantes de almacenes Éxito y de la Caja de Compensación, me expresaban cómo el país ha dado ese giro. Este crecimiento en el aseguramiento ha logrado que se disminuya sustancialmente el gasto privado en salud y que sea compensado con creces por el gasto en salud derivado del sistema de aseguramiento. Y eso les permite a los colombianos tener mejores posibilidades para otros consumos básicos.

Creemos que la gratuidad en la educación también ha ayudado muchísimo. Además de haber aumentado sustancialmente las transferencias a las regiones, en un país que avanza muchísimo en descentralización, se han incorporado nuevos mecanismos de gratuidad y de promoción de la educación y de apoyo a la educación de los sectores más pobres.

Hoy el giro nacional para la gratuidad educativa vale 150 mil millones de pesos y está contribuyendo a que las regiones tengan mínimo 5 millones de niños en gratuidad educativa, lo que se opone a la deserción, garantiza que se completen los ciclos escolares y también les trae un gran alivio a las familias.

Hemos llegado a 2 millones 740 mil Familias en Acción, las familias más pobres que reciben hoy ese subsidio para poder garantizar todo el ciclo escolar de sus hijos.

Otro factor que ha estimulado la deserción ha sido la falta de alimentación. Nosotros estamos entregando hoy, con el liderazgo de Bienestar Familiar, casi 14 millones y medio de porciones alimentarias al día. Sobresale allí el salto en alimentación escolar. Hemos pasado de 2 millones 300 mil beneficiarios de los restaurantes escolares, y estamos llegando a 4 millones. Se atendían durante 122 días y se atienden durante 156 días.

El país ha visto que en cobertura de educación básica se ha pasado del 78 por ciento, y ya logrando en todo el país el ciento por ciento. Teníamos menos de un millón de estudiantes universitarios. Sumando los nuevos cupos de educación superior del Sena, estamos arribando a un millón 700 mil estudiantes universitarios.

El Icetex financiaba 60 mil estudiantes universitarios, ya ha pasado la barrera de 250 mil y se acerca a 300 mil. Creemos que el Sena ha recuperado inmensamente su afecto entre los colombianos: ha pasado de capacitar un millón 100 mil colombianos por año, a capacitar 6 millones. Se convierte en el líder de formación vocacional en toda la región latinoamericana.

Creo que en la presentación de la responsabilidad social de Colombia hay que anotar un punto: el país que compite con nosotros en formación vocacional es Brasil, pero la formación vocacional que financian los empresarios en Brasil es solamente para trabajadores de las empresas afiliadas. Eso contrasta con el Sena, financiado exclusivamente por los empresarios, pero abierto a todo el público.

El Sena no es como el del Brasil, que solamente ofrece oportunidades a los trabajadores de las empresas afiliadas. El Sena las ofrece a todos los colombianos.

Este año se apresta a un millón de colombianos estudiando inglés como segunda lengua a través de Internet, básicamente originado en San Andrés, donde nuestros compatriotas nacen con dos lenguas maternas: nuestra bella lengua castellana y el inglés. Esa transmisión hoy se está haciendo vía satelital, pero ya se contrató por el Ministerio de Comunicaciones la instalación de un cable submarino para hacer de San Andrés una gran potencia en informática.

Tenemos fe en que lo que se ha hecho en materia de pruebas, concurso de profesores, Pruebas Saber, el examen de los egresados universitarios, el avance en conectividad, la senda que el país lleve en eso, nos dé un gran mejoramiento en la calidad educativa, a lo cual se suma la nueva Ley de Ciencia y Tecnología. Y eso nos tiene que ayudar a salir delante de la crisis.

Por ejemplo, el Sena incorpora ahora para enfrentar esta crisis 250 mil cupos de técnicos y tecnólogos, básicamente orientados hacia las nuevas posibilidades de empleo que se avizoran en el país. ¿Por qué? Porque somos conscientes de que muchos de los empleos tradicionales reducen su intensidad y no se recuperará con la superación de la crisis, y que la superación estructural de la crisis nos obliga a pensar en los nuevos empleos.

Diría que por fortuna este Gobierno ha tenido conciencia de crisis desde el día cero de la administración, dada la situación fiscal, financiera, del país, la situación en muchos frentes de la actividad de la política social, y la situación de orden público. Eso nos ha ayudado a no tener que improvisar políticas anticíclicas.

Vivienda

Creemos que todo esto nos debe defender de una mayor caída del consumo interno. Y confiamos en la recuperación de la construcción. Tenemos un modelo para presentarle al país, que es el convenio con Comfama aquí en Medellín, para que a través de unos fondos provenientes del Banco Agrario y de unas garantías del Fondo Nacional de Garantías, financiadas por el Frech (Fondo de Reserva para la Estabilización de la Cartera Hipotecaria), se haga un gran programa de préstamos a los sectores populares para mejoramiento de vivienda.

Esperamos que Comfama pueda mostrar resultados en breve y que eso lo podamos presentar como un punto de referencia ante todo el país.

Hace una semana, en la muy honrosa compañía del doctor Luis Carlos Villegas, propusimos el acuerdo a la Caja de Compensación de Risaralda. Y tenemos fe de que en una ciudad como Pereira, con ese índice de desempleo tan elevado, eso nos pueda ayudar.

En un país con un déficit cualitativo de vivienda tan alto, apreciados compatriotas, el préstamo de vivienda, el préstamo de dinero en condiciones razonables para mejoramiento de vivienda, puede producir dos efectos: superar esa barrera cualitativa de calidad de la vivienda y ayudar a tonificar la economía.

Entre los ahorros de este Gobierno está la circunstancia de nunca haber tocado los recursos del Frech, el Fondo de Estabilización de Cartera Hipotecaria. Solamente, de acuerdo con el Banco de la Republica, vamos a proceder ahora a gastar recursos del Frech.

El más importante destino de esos recursos es la financiación de un subsidio de la tasa de interés para reactivar la construcción de vivienda de valor hasta 167 – 170 millones de pesos. Para aquellas viviendas del rango menor, hasta aproximadamente 67 millones de pesos, el subsidio es de 5 puntos de la tasa de interés durante 7 años. Para aquellas viviendas entre 67 y 130 millones de valor, el subsidio es de 4 puntos. Y para aquellas viviendas entre 130 y 167 millones de pesos de valor, el subsidio es de 3 puntos.

Los recursos, adicionados con unas vigencias futuras del Gobierno, nos permiten financiar aproximadamente 80 mil créditos. De esos 80 mil créditos, 20 mil se dedican a liquidar los inventarios. Aquella vivienda que estaba construida, que no se había podido vender, o la que estaba en proceso de construcción, sin concluir y que no se había vendido.

Las cifras nos indican, los informes nos indican que ese inventario ya se está liquidando. Y de los 80 mil créditos, en eso nos tenemos que gastar 20 mil. Los otro 60 mil son para financiar la construcción de vivienda hasta este tope de 167 millones, desde cero. Lo que nos debe ayudar en este proceso de reactivación de la economía interna.

Obras públicas

Confiamos que el plan de obras publicas es de gran trascendencia. Todas las concesiones de primera generación que estaban en pleito, los pleitos están superados y esas concesiones están trabajando. Todas las concesiones adjudicadas por este Gobierno están trabajando.

Diría que carreteras de gran importancia, como la carretera en el tramo colombiano de Caracas a Buenaventura está en plena marcha. Se ha rectificado el pavimentado el gran porcentaje de lo que corresponde a Arauca. Está contratado para iniciar obra el tramo que corresponde del Piedemonte a Sogamoso. Se han construido 120 kilómetros de la doble calzada de Sogamoso a Bogota. En plena construcción y muy avanzada la doble calzada de Bogota a Girardot. Con el Túnel del Sumapaz –que hemos pedido que se llame Túnel Guillermo León Valencia, para honrar la memoria del gran Presidente, ese patriota sin tacha tan comprometido con la seguridad que fue el Presidente Guillermo León Valencia–, avanza a muy buena velocidad el tramo que va de Ibagué a Girardot.

Se construyó la parte básica del Túnel de la Línea. Y desde este yúnel básico se está construyendo ya el túnel de transporte. Ya se ha empezado la obra. Les proponemos a los colombianos que se llame el Túnel del Segundo Centenario.

En las Autopistas del Café hemos superado los viejos pleitos, se reanudó ya hace varios años la marcha de esas autopistas, se generaron nuevos ingresos provenientes del Gobierno Nacional. Y podría decirles que hoy ustedes, si hacen el recorrido Manizales-Santander de Quilichao, lo hacen casi en su totalidad por una autopista de muy buenas especificaciones, nuevecitas. Hemos contratado la totalidad de los trayectos de Buga-Buenaventura, en doble calzada, la totalidad de los trayectos, y están en plena ejecución.

Creemos que, para hablar solamente de una obra, esa carretera muestra cómo venimos en este trabajo para que un país que tiene tantas dificultades de infraestructura, se desatrase.

Yo admiro mucho a mis coterráneos. En cada ocasión en que vamos a aterrizar en Medellín, les digo: ‘Asómense por esta ventana, miren estas pendientes, lo único que explica que haya florecido una civilización tan importante es el tesón, la laboriosidad de mis paisanos’.

Ha sido sorprendente, yo llamaría que esto es un milagro: a esta distancia del mar, que tuvo el primer desafío serio para romperla en los ojos visionarios de Don Gonzalo Mejía.

Nosotros confiamos en que saquemos adelante Autopistas de la Montaña, además de todos los esfuerzos que se vienen haciendo en Antioquia con las viejas concesiones, con aportes del Gobierno Nacional, con carreteras como la carretera alterna a Ventanas, el tramo que faltaba, que es el tramo Segovia-Zaragoza está contratado por el Gobierno Nacional en su totalidad. Eso va a dar una gran alternativa a Ventanas.

Parece que el acuerdo que se ha hecho con el señor Gobernador, con el señor Alcalde, el señor Ministro, para Autopistas de la Montaña, es un acuerdo excelente.

La Gobernación de Antioquia aporta 600 mil millones, la Alcaldía de Medellín 400 mil, el Gobierno Nacional 1 billón, vigencias futuras a quince años. El contrato se hace con ISA, una empresa que tiene un gran capital de confianza, un contrato a libro abierto, un contrato con libros de confianza donde la Nación sabe que no corre un solo riesgo, ISA no correrá riesgos. El Gobierno remunerará esa concesión por cualquiera de las modalidades existentes.

A Autopistas de la Montaña le tenemos que sumar, en lo que falta de contratación del año, la fusión de las diferentes concesiones del Caribe, en lo que se llama la Gran Transversal de las Américas.

Este Gobierno encontró una concesión en el Caribe, la que se entregó en el pasado para la doble calzada Barraquilla-Santa Marta, se amplió simplemente la calzada existente. Esa concesión la convertimos ahora en la concesión para poder hacer toda la variante Santa Marta, que aspiramos a entregar por tarde en diciembre.

Y hemos adjudicado otras seis concesiones en el Caribe colombiano, que están todas en marcha. Ahora el paso es fusionarlas en una concesión que le agregue a estas concesiones los trayectos todavía no incorporados, que le garanticen al país una carretera de excelentes especificaciones entre Palo de Letras en la frontera con Panamá y Paraguachón en la frontera con Venezuela.

Va bastante adelantado el proceso para culminar el año con el contrato perfeccionado de la Ruta del Sol, la gran carretera de las mejores especificaciones entre Bogotá y Santa Marta, de doble calzada. Diríamos que entre Villeta y Santa Marta porque está contratado y en plena marcha el tramo Bogotá-Villeta. Ahí tuvimos un pleito de 10 años. Es una de las tantas disputas que hemos superado.

Tenemos el compromiso de sacar adelante, en un kilometraje básico, la doble calzada de la Autopista al Llano. Esto se suma a los 1.500 kilómetros de corredores de competitividad que hemos contratado en los últimos días, contratos perfeccionados. Hoy están los contratistas moviendo maquinaria, identificando ya cómo empiezan a extraer materiales en las canteras, etcétera.

Y creo que da alguna respuesta al sector privado, porque en un país donde falta de todo, pues todo el mundo tiene que reclamar, y todo reclamo es justo. Yo les he dicho muchas veces a mis compatriotas, voy a una asamblea gremial y me dicen: ‘Presidente, ¿para qué el Plan 2500? Necesitamos es corredores de competitividad’. Tienen razón en la necesidad de corredores de competitividad.

Y al otro día acudo a una reunión de alcaldes y me dicen: ‘Presidente, el Plan 2.500 es muy bueno pero totalmente insuficiente’.

Y se quedan callados los alcaldes de los municipios de que han recibido los planes, los beneficios del Plan 2.500, y levantan la mano y piden la palabra todos que siguen conectados con una carretera muy mala. O sea que es un país que tiene muchas necesidades y hay que atenderlas todas.

Confío que estas tres obras que nos falta contratar, que nos falta definir ya la parte final de la contratación: Autopistas de la Montaña, la Transversal de las Américas y esos kilómetros básicos de la Autopista del Llano, lo podamos hacer en los meses que vienen.

Ecopetrol

Y me obligo a hacer desde Medellín esta aclaración: ¿las reformas de Ecopetrol qué incluyeron? La reforma laboral, la reforma pensional y la capitalización en algo más del 10 por ciento. Hay autorización legal para capitalizar hasta el 20 por ciento.

Yo diría que eso ha ayudado mucho. Ecopetrol ha pasado de tener una capacidad de inversión de 600 millones de dólares a tener una capacidad de inversión de 6 mil millones de dólares año. Eso ha ayudado enormemente.

¿Qué sigue? El Gobierno le cumplió al país. El dinero fue para capitalizar Ecopetrol, para crecer los activos de Ecopetrol. El Gobierno no está en la idea de vender Ecopetrol. Y me obligo a lanzar esa aclaración desde Medellín

Estamos buscando opciones, las están buscando Planeación Nacional y el Ministerio de Hacienda, dado ese enorme crecimiento patrimonial de Ecopetrol, patrimonio del cual la Nación es dueña de más de un 89 por ciento. Buscar cómo se crea un mecanismo para que utilidades de parte de esas acciones de la Nación en Ecopetrol, durante los años que vienen, respalden la financiación de estas grandes obras de infraestructura que están en marcha.

O sea que no hay venta. Lo que hay es un mecanismo para que ese gran incremento patrimonial, en un porcentaje de lo que corresponde a la Nación, respalde los recursos que se requieren para completar la financiación de estas grandes obras de infraestructura, a ver el país cómo se va desatrasando.

Isagen

Ustedes saben que con Isagen, y creo que el lugar indicado es Medellín, por ser Antioquia el departamento donde está la mayor presencia de las centrales de generación de Isagen, con Isagen se ha surtido este proceso:

Primero, se le quitó la gran contingencia, que era la demanda de Empresas Publicas de Medellín, que en 2002 debería tener, si la memoria no me falla, una aspiración nominal superior a los 600 mil millones.

¿Cómo se logré el desistimiento? Como contraprestación a la refinanciación por parte del Gobierno Nacional de la deuda del Metro. Creo que eso fue bueno para Antioquia, para Medellín y para el país, y creo que fue equitativo.

Antioquia, la ciudad de Medellín y Empresas Publicas desistieron de esa reclamación, y el Gobierno Nacional refinanció a 80 años la deuda del Metro.

Se le quitó esa contingencia tan grave para Isagen. Y después se hizo una refinanciación de su gran deuda a través de un crédito fresco con la Opic, una organización financiera diría que muy exclusiva, milagrosamente pudimos acceder a ella. Creo que fue muy bueno para el país y para Isagen.

El proceso de democratización de Isagen salió bien. Entonces, ¿qué quiero comentarles a mis compatriotas desde Medellín? Esa es una empresa muy buena, en un momento muy importante. Se ganó el año pasado, entre las obras que se ganó, se ganó la construcción y operación de la Hidroeléctrica de Sogamoso en el departamento de Santander.

Cuando el mundo tiene que venir por las energías limpias, pues esta base de generación hidroeléctrica de Isagen es un gran activo.

Nosotros creemos que se debe explorar la posibilidad de que Empresas Públicas de Medellín, que es propietaria del 12 por ciento, busque adquirirla, o por lo menos en una altísimo porcentaje.

Y hay que sentarse a conversar, se lo hemos dicho al Alcalde, hemos encontrado toda la receptividad, al señor Gobernador, al Gerente de Empresas Públicas de Medellín, porque ustedes saben que había una limitación: las regulaciones impedían que un generador aportara más del 25 por ciento de las necesidades del mercado. Ese tope lo removimos a través de la Comisión de Regulación, pero con una condición: que cuando un generador vaya a sobrepasar el 25 por ciento del mercado, lo haga por instalación de nuevos proyectos de generación, no por adquisición, que es lo que realmente estimula la ampliación de la generación en el país.

Pues bien, al adquirir Empresas Públicas a Isagen, rebasaría ampliamente el 25 por ciento que le permite la ley, y lo rebasaría no por agregación de nueva generación sino por adquisición de generación existente.

Ese es el obstáculo que tenemos que remover. Creemos que se puede remover. ¿Cómo? En el diálogo, buscando opciones, para que aquello que sitúe a Empresas Públicas de Medellín, en la hipótesis de que avance en adquisición de Isagen, por encima del 25 por ciento de la oferta nacional de energía, lo que supera el 25 por ciento, a fin de que no haya posiciones dominantes, no lo determine la empresa en los precios al consumidor.

Hay que buscar un mecanismo. Hemos hablado de varios, pero no me atrevo a llegar sino hasta aquí, a la idea general. Y estoy seguro de que con diálogo, como el que hemos tenido durante estos años con Empresas Públicas de Medellín, que ha sido tan fructífero, que nos ha llevado a resolver tantos problemas del país, eso lo podemos resolver.

Esa es la invitación, qué bueno en presencia del señor Alcalde, el mensaje a Empresas Públicas, es la voluntad del Gobierno Nacional, a ver cómo encontramos ese camino. Que sería un camino muy bueno, le da un alivio fiscal al Gobierno Nacional, que le permite avanzar en estas obras, cumplir unos compromisos de presupuesto, continúa lo básico, lo fundamental en el sector público, en la región, que es epicentro de estas hidroeléctricas, y en cabeza de una empresa querida por todos los colombianos, que es Empresas Públicas de Medellín. Y que acude y ha acudido cada vez que la hemos llamado a que nos ayude a resolver un problema en alguna región de Colombia. Empresas Públicas de Medellín ha acudido con diligencia. Y eso hay que reconocerlo y agradecerlo.

Figura de la zona franca

Además creo que hay unos estímulos tributarios bien importantes ahora. Por ejemplo para sacar adelante estas nuevas hidroeléctricas, se puede aplicar la figura de la zona franca.

La figura de la zona franca los libera de pagar aranceles. Esos equipos son muy costosos. Tienen unos aranceles que no obstante que nominalmente tienen unas tarifas bajas, finalmente por el costo del equipo cuestan mucho.

La zona franca los libera de pagar IVA para la importación de esos equipos, y la zona franca les permite a esas nuevas hidroeléctricas, como será el caso de Pescadero en Ituango, no pagar una tasa de renta, que es la ordinaria en Colombia, hoy del 33 por ciento, después de la reducción, sino una tasa especial de renta del 15 por ciento, y tener un acuerdo de estabilidad de reglas de juego a 20 años. Confiamos, pues, que esto se pueda superar.

Y estamos discretamente empeñados en que podamos lograr rápidamente la transacción o conciliación final en las viejas disputas del Metro de Medellín. Confiamos que la ciudadanía en breve pueda tener una buena noticia, que tanto ayuda a despejarle todo el camino al Metro y nos ayuda a recomponer también algunos elementos de la política internacional.

Hay elementos de la política internacional que hoy ayudan mucho. Hemos logrado un gran interés del Gobierno de España, de Su Majestad el Rey de España, que es gran amigo de esta ciudad, de Colombia; hemos notado el más positivo interés de la señora Canciller de Alemania, la señora Ángela Mérkel, y aquí hay todas las razones, en los directivos del Metro, toda la buena argumentación, toda la sana imaginación, toda la capacidad de anticiparse al futuro, o sea que vemos eso con confianza.

Sé que tenemos muchas preocupaciones en este sector. Entonces quisiera pasar de estas generalidades, que me veo en la obligación de entender que esta audiencia que ustedes integran es de gran importancia nacional en nuestra ciudad de Medellín, en el momento de Inexmoda, que convoca toda la atención nacional e internacional, que me he visto obligado a hacer estos comentarios, y entonces los invito a que veamos los últimos puntos que el Gobierno ha venido examinando con el gremio sobre la difícil situación del momento”.