Fotografía Audio Correo Presidencia Mapa de Sitio Noticias inicio Video

DISCURSOS AÑOS ANTERIORES

2007 - 2008 - 2009 - 2010

 
2009
   
Enero
Febrero
Marzo
Abril
Mayo
Junio
Julio
Agosto
Septiembre
Octubre
Noviembre
Diciembre
   
   
   
   
     
   
   
     
 
   
 

 

 
 

Palabras del Presidente Álvaro Uribe durante
el homenaje al senador Manuel Enríquez Rosero

Septiembre 10 de 2009 (Pasto)
     
 

“Esta reunión me hace evocar el más profundo sentido de Patria. La expresión de la gama amplia de la democracia, de todas las referencias del pensamiento político, en un acto cívico para rendir un homenaje a un compatriota que es un luchador honesto de la cotidiana vida democrática de la Nación: a Manuel Enríquez.

Nos reunimos aquí colombianos que tenemos muchas responsabilidades y provenientes de los más diferentes orígenes políticos, en un acto de amor a Colombia.

Quiero agradecer al comité organizador, quiero agradecer inmensamente las generosas palabras llenas de talento del maestro Darío Martínez. Manuel y yo tenemos con él una vieja amistad. La apreciamos, maestro Darío.

Nos sentimos muy contentos cuando lo escuchamos en sus apreciaciones sobre el presente y el devenir de la Nación, en sus juiciosos análisis, en sus criticas y en sus proposiciones.

Quiero agradecer la presencia de ese noble amigo, el Alcalde de Pasto (Eduardo José Alvarado). Lo vi formarse como médico en mi ciudad y en mi universidad.

Era un estudiante de medicina, y al lado de Leonardo Betancur, nuestro compañero, asesinado el mismo día que asesinaron a Héctor Abad Gómez, Eduardo Alvarado Santander se constituía en una de las luces más importantes que nos ayudaba a Manuel Enríquez, a Darío Martínez, a Laureano Alberto Arellano y a mí, a pensar en el tema de la seguridad social en Colombia.

Y quiero dar un gran agradecimiento especial, especial por muchas razones de la Patria: la presencia en este homenaje del señor Gobernador, Antonio Navarro Wolff, me obliga a rendirle a él un homenaje con el más profundo sentimiento de Patria.

Muchas gracias, Gobernador. Usted enaltece la democracia y aviva en nosotros las más positivas energías para pensar siempre en afecto superior por Colombia, por Nariño.

La verdad es que en una Patria que tantas veces se desgarra por la violencia, por el ácido enfrentamiento entre las diferentes maneras de apreciar la vida social, el curso económico, la vida política, unirnos para reconocer a los mejores le hace un llamado de atención al espíritu.

Hoy, Gobernador, reconozco que para mis compañeros de Gobierno y para mí, para el Alcalde de Pasto, ha sido muy grato poder trabajar en este periodo con usted como Gobernador de Nariño. Lo saludo con todo el afecto de compatriota. Y el noble gesto de acompañarnos esta noche, nos hace vibrar las más profundas energías del amor a Colombia. Muchas gracias, Gobernador.

Las condiciones del líder en el senador Manuel Enríquez Rosero

Los líderes tienen que tener unas condiciones. Uno de mis viejos profesores decía que el líder tiene que ser un estudioso de todas las horas, tiene que tener gran energía y tiene que tener total honradez. Que se requieren esas tres grandes condiciones.

Imaginen ustedes qué hace un hombre honrado, estudioso, pero sin energía, combatido por la pereza. Nada. No puede traducir, en aportes a la comunidad, sus conocimientos. Ni tampoco reflejar en el bienestar comunitario su honradez.

¿Qué pasa con un hombre que tenga energía, que tenga honradez, pero que carezca de preparación? Es un hombre que no puede concretar la visión, que se puede equivocar de camino, que por esa falta de visión y de conocimiento todos los días lo que le ofrece a la comunidad es un albur, un camino de incertidumbre.

¿Y qué pasa con un hombre preparado y dinámico, pero deshonesto? Un peligro enorme.

Por eso se requieren las tres condiciones: la honestidad, la preparación sin detenerse, y la energía, para dar todo lo mejor en cada nueva hora por la Patria.

Esas tres condiciones se congregan en el compatriota que apreciamos, que valoramos, alrededor de quien nos reunimos esta noche a rendirle un sentido homenaje. Esas tres condiciones están en Manuel Enríquez Rosero.

Es un combatiente de la democracia de todas las horas, pero depara heridas. El las bellas palabras de Darío Martínez nos decía cómo la política no puede inferir heridas incurables.

Manuel ha ido más allá. Su carrera política ha sido un gran compromiso, pero al mismo tiempo ha estado limitada con una patriótica prudencia. Ninguno de sus contradictores ha recibido de Manuel la más leve herida. Es un luchador político lleno de nobleza. Lo aplaudimos desde el alma.

Un día de 1986 me dijo Laureano Arellano, que en paz descanse ‘Joven Uribe, le quiero presentar una revelación de Nariño’. Y me presentó a un muchachito que estaba terminando una maestría de ciencias políticas en la Universidad Javeriana, que se había graduado en la Universidad Libre: Manuel Enríquez Rosero.

Al año siguiente, por unanimidad, lo elegimos Secretario de la Comisión Séptima del Senado de la República. Qué dedicación, qué decencia, qué capacidad de trabajo, qué compostura, qué dignidad, qué buen trato, qué prudencia.

Allí se consagró. Se convirtió en motivo de admiración y de confianza de todos los que tenían que ver con ese cargo de Secretario de la Comisión Séptima.

Años después, yo había concluido la Gobernación de Antioquia y estaba en la Universidad de Oxford, y me llamó y me dijo que tenía una posibilidad y que la iba buscar: que lo eligieran Secretario General del Senado de la República.

Yo dije: ‘Se consigue esa Secretaría’.

Manuel, con su prudencia, con su constancia, como una hormiguita que abre camino sólido pero que a nadie maltrata, se consigue esa Secretaría.

Llamé a uno o dos senadores y me dijeron: ‘Manuel es muy buena persona, pero esa Secretaría le queda grande’.

Y les dije: ‘Cuidado, que le queda chiquito el Senado de la República’.

Y se convirtió, con gran facilidad porque genera confianza, en Secretario General del Senado de la República.

Miren: en algunos casos lo que conocíamos es que algunos senadores, ya en el periodo del pensionamiento, al dejar la curul, buscaban su elección como secretarios del Senado.

Aquí fue al contrario. El Secretario del Senado ganó tanta confianza, que lo empezaron a llamar muchos compatriotas, muchos coterráneos de Nariño, para que aspirara al Congreso de la República.

¿Por qué se ganó la Secretaría de la Comisión Séptima? Porque generó confianza. ¿Por qué se ganó la Secretaria General del Senado de la República? Porque generó confianza. ¿Por qué se ganó la curul en el Congreso de la República? Porque generó confianza. ¿Por qué nos congrega hoy a tantos colombianos aquí en Pasto, a rendirle este mensaje por su elección como Presidente de la Comisión Segunda del Senado? Porque Manuel es un compatriota que inspira toda la confianza. Porque en sus manos se puede poner todos los intereses públicos. Y él responde bien por los superiores intereses de la Patria. Los colombianos, Manuel, lo admiramos mucho.

Relaciones internacionales de Colombia

Le preguntaba al Gobernador Antonio Navarro si yo debería hacer esta noche una referencia, en este Nariño de la frontera sur de la Patria y en este momento, a las relaciones internacionales de Colombia, dada la ocasión de un homenaje al Presidente recientemente elegido de la Comisión Segunda del Senado de la República.

Y entonces quiero decirles una cosa: la prudencia con que Manuel maneja los asuntos de la vida pública, y en esta ocasión como Presidente de esa Comisión tan importante, la rectora de las relaciones internacionales, es el mejor espejo para que nosotros en el Gobierno procuremos manejar con la misma prudencia las relaciones internacionales del país.

Por conducto del señor Gobernador, quiero repetir al hermano pueblo ecuatoriano y al Gobierno del Ecuador, toda nuestra voluntad para avanzar en el camino del mejor entendimiento entre nuestros pueblos y entre nuestros gobiernos.

Usted, señor Gobernador, lleve ese mensaje y ayúdenos, que el Gobierno, empezando por mi persona, estamos atentos a los buenos oficios que usted pueda adelantar. Y se los agradecemos inmensamente.

Cárcel para criminales de indígenas Awá

Y la palabra confianza que inspira Manuel es la que queremos que inspire Colombia, para todos los colombianos y para la comunidad internacional: seguridad para la confianza, confianza para la inversión, coberturas sociales para la confianza.

Hemos hecho, con el heroísmo de los soldados y policías de Colombia, un enorme esfuerzo para que el país supere la violencia.

Habíamos hecho una evaluación positiva en los últimos días sobre Tumaco. En marzo, abril, las circunstancias de Tumaco y del Pacífico nos crearon la mayor alarma. Se introdujeron nuevas acciones, se realizaron nuevos esfuerzos, veníamos viendo un comportamiento mejor de las cifras, teníamos esperanza y nos ha golpeado mucho la masacre reciente contra la comunidad Awá.

Reitero ante ustedes, mis compatriotas de Nariño, que este inmenso honor que me han conferido los colombianos, quiero responderlo de esta manera: que cuando yo sea ex presidente, pueda mirar a mis compatriotas a los ojos, con la consciencia tranquila de haber combatido todas las expresiones del crimen, sin cálculo en todos los momentos.

Confío en que podamos llevar a la cárcel a los asesinos de nuestros compatriotas indígenas de la comunidad Awá. Y confío que podamos devolverle a Nariño plenamente la tranquilidad. Y que todo este trayecto de Túquerres, Llorente, Junín, Gutiérrez, ese largo trayecto de esa bella porción de la Patria hasta Tumaco, recupere plenamente la tranquilidad.

Tenemos toda la determinación. Estén seguros de una cosa: que mientras el Creador nos mantenga la energía, se cansarán primero diez veces los criminales antes de que nosotros mostremos signos de fatiga para combatirlos.

Proyectos de infraestructura para Nariño

Confío, señor Gobernador, señor Alcalde, doctor Manuel, que pueden surgir los nuevos proyectos productivos de inversión en Nariño, la nueva concesión portuaria de Tumaco, los decretos de zonas francas, los esfuerzos para habilitar el Aeropuerto de Ipiales como un aeropuerto internacional que le dé un gran soporte a la competitividad de Nariño.

Confío en la modernización del sistema de transporte de Pasto. Esta mañana se firmó el decreto. Hoy es jueves. Y el lunes, al llegar a la oficina, llamé a compañeros de Gobierno y les dije: ‘El Alcalde de Pasto no me recibe el jueves si no llego con el decreto del sistema de transporte masivo’.

Sabía, señor Alcalde, que requería un pasaporte hoy para que me admitieran en Pasto: el decreto del sistema de transporte masivo. Y si quiera pude traer ese decreto para pasar el filtro de inmigración y ser aceptado esta noche en esta ciudad de Pasto.

Es difícil. Hacemos unos kilómetros del Plan 2.500 y quedan faltando otros. Esta tarde me decía ese buen colombiano Franco Salazar: ‘Presidente, es que faltan tres kilómetros en Consacá’. Bueno, sí hemos avanzado mucho, pero faltan esos kilómetros.

Y después me decían: ‘Presidente, está muy bien la contratación de la carretera de La Unión, El Empate, que ya está empezando la obra, con un costo de alrededor de los 60 mil millones, pero nos quedan faltando muchas vías en Nariño’.

Y hacía un repaso con el Alcalde y me decía: ‘Se ha arreglado un pedacito del Paso Nacional por Pasto, pero el otro tramo está destruido’.

Y el Gobernador me decía: ‘No hay manera para subir de Pedregal a Túquerres, la carretera está levantada’.

Y avanzamos en la carretera que va al Encano, a Santiago, al Valle del Sibundoy, pero queda faltando esa gran variante de competitividad para poder bajar de San Francisco a Mocoa.

Nuevo documento Conpes

En una Patria con dificultades fiscales y financieras queremos responder a todo esto. El próximo lunes 14 de septiembre, con la ayuda de Dios, maestro Darío Martínez, se aprobará un documento Conpes, por 830 mil millones de pesos, para poder avanzar en el mejoramiento de la carretera Tumaco – Pedregal, para avanzar en todo el corredor de Pasto – El Encano – Santiago, la variante San Francisco – Mocoa, y para avanzar en otras obras de infraestructura de gran importancia del departamento de Nariño.

Estamos preparando un presupuesto con muchas dificultades, porque se nos ha caído este año el recaudo. Pero hay una prioridad, y no queremos fallar: poder incluir en el presupuesto la primera de las dos partidas para que el Aeropuerto de Ipiales tenga una pista de condiciones de pista de aeropuerto internacional.

El Gobernador me hablaba de una zona franca agroindustrial, que va a requerir esa infraestructura. Ese es un compromiso del alma para la competitividad de Nariño.

Y esta noche, la señora Presidenta de Fedepapa, la doctora Sonia, me decía cómo están sacando adelante ya la parte de industrialización de este producto, todo lo cual requiere mejor soporte logístico y de infraestructura en el departamento de Nariño.

La concesión avanza no al ritmo que quisiéramos, pero se pudo adjudicar y financiar. Se han resuelto problemas como el peaje de Chachagüí. Se ha reconstruido bastante la carretera entre Pasto y Chachagüí. Y al llegar esta tarde al Aeropuerto Antonio Nariño, observé que ya hay una pequeña extensión con movimiento de tierra para configurar la doble calzada.

Ya se dio la licencia para el túnel. Y espero poder venir a Nariño en los próximos meses a ver que ya estén efectivamente trabajando en la construcción del túnel, para darle toda la modernidad de infraestructura a esta gran ciudad.

Avances en salud

Cuando empezamos, algunos colombianos decían: ‘Lo de Uribe va a ser guerra, no va a haber nada en lo social’. Esta tarde, cuando asistíamos a la inauguración de las obras magníficas que avanzan en el Hospital Departamental de Nariño aquí en Pasto, hospital que pone de presente que en el Estado muchas veces se requiere mejor administración que más cantidad de recursos, recordábamos también cómo hemos avanzado en las coberturas.

Colombia se debe sentir honrada. Se ha avanzado en seguridad pero al mismo tiempo en coberturas sociales, reconociendo todo lo que falta.

Cuando empezó nuestro Gobierno, teníamos 698 mil nariñenses afiliados al régimen subsidiado de salud, y hoy hay 1 millón 150 mil.

Sabemos que tenemos problemas. La vida pública es un proceso dialéctico. Uno despierta antes del despuntar del sol de cada mañana, se propone realizar mil esfuerzos y logra un pequeño resultado.

Esa es la vida pública: un resultado por cada mil esfuerzos. Pero por eso hay que proceder en la vida pública con la disciplina de los obreros de la Revolución Industrial Inglesa. Trabajaban a toda hora, y lo único que hacían era tener unos minutos de sueño para reponer la fuerza de trabajo y madrugar al siguiente día a trabajar.

Así tenemos que proceder. Es la única manera de sacar adelante a Colombia. Y sabemos todos los esfuerzos adicionales que debemos realizar en salud.

Hemos tenido muchos avances, pero los departamentos están desfinanciados para poder pagar lo que es el sistema vinculado, la atención que excede del Plan Obligatorio de Salud. Estamos enfrentados al reto de poder superar ese obstáculo.

Índice de oportunidades

Si hay algo que me duele a mí, y no lo puedo ocultar, algo que me duele, que me mortifica, es que esa actividad criminal de las ‘pirámides’ hubiera avanzado tanto y hubiera eso ese daño. Y no puedo ocultar el tema, mirando a los ojos a mis compatriotas de Nariño.

En diciembre, en medio de esas dificultades, nos propusimos acelerar la cobertura de Familias en Acción en Nariño. Lo hemos cumplido.

El departamento, en términos de Familias en Acción como proporción al total de habitantes, es líder hoy en Colombia. Estamos llegando a 170 mil Familias en Acción en Nariño. Un programa muy bueno, porque les garantiza a las familias más pobres el ciclo escolar completo de sus hijos. Y este país, para poder superar la pobreza, construir equidad, mejorar la distribución, tiene que mejorar el índice de oportunidades.

Mañana me referiré ampliamente en Bucaramanga a lo que es el índice de oportunidades.

Con esfuerzos como Familias en Acción, como todo el proceso de la Revolución Educativa, Bienestar Familiar, el Sena, el Icetex, se crean mejores oportunidades para los colombianos, ya reconocidas por los bancos multilaterales, que dentro de unos años se van a traducir en mejor ingreso para los sectores populares de Colombia.

El índice de distribución del ingreso solo mejora a consecuencia de haber mejorado previamente el índice de oportunidades. Y el índice de oportunidades empieza con un gran esfuerzo educativo, que tiene en este Gobierno, como uno de sus ejes, el programa de Familias en Acción.

Trabajar en estos tres frentes: la seguridad, para mejorarla todos los días; el estímulo a la inversión con responsabilidad social, y las coberturas sociales, perseverando con amor a Colombia, puede hacer la diferencia para tener una Patria más próspera, más amable, más equitativa.

Nos sentimos orgullosos de Nariño

Al llegar hoy a Pasto asistimos a la Misa conmemorativa de los 150 años de la creación de la Diócesis de Pasto. Leyendo su historia, nos ha dado nuevos motivos para sentirnos orgullosos de esta gran región de la Patria. La Diócesis de Pasto fue la primera en Colombia en incursionar con toda fortaleza en el tema de la salud.

Nos sentimos muy orgullosos al examinar todas las expresiones de capital social de este pueblo que es símbolo de lealtad a las instituciones democráticas, como usted lo decía, doctor Darío Martínez.

Compatriotas de Nariño, mis compatriotas de Pasto: un saludo lleno de afecto. Gratitud inmensa por esta reunión para aplaudir a un gran nariñense: un hombre juicioso, del estudio, del trabajo de todas las horas, de manos puras como el oro y firmes como el acero. Ese gran nariñense que a todos nos inspira confianza para depositar en él los mejores intereses de la Patria, es Manuel Enríquez Rosero. Le rendimos un homenaje desde el corazón y desde la razón.

Mis compatriotas de Nariño: siento toda la admiración por ustedes, toda la fe en esta tierra. Y en esta tierra, esta tarde, cuando caía el sol y estaba despejadito el Galeras, miraba hacia allá para llenar el corazón de energía para luchar por Colombia.

Muchas gracias”.
 
     
 
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
   
Imprimir