“Acudo en este medio día simplemente a expresarles mi gratitud por su compañía estos ocho años, por su patriotismo, por su honradez, por lo que han hecho por Colombia.
Si yo buscara palabras para compensar debidamente en el idioma lo que ustedes han hecho, estoy seguro que no las encontraría.
Ministro (de Minas y Energía, Hernán Martínez Torres), ex ministro Luis Ernesto (Mejía), doctora Silvana (Giaimo, Viceministra), ex ministro Manuel (Maiguashca), lo que ustedes han hecho es extraordinario por Colombia. Por sus hechos los conoceréis.
Unos países que han tenido más fuentes energéticas que Colombia, menor cantidad de habitantes, con el mismo verano, en apagón. Colombia con un gran crecimiento de la generación de energía, sin exponer al fisco y sin exponer a las finanzas de la Nación.
Estábamos el doctor Luis Ernesto Mejía y yo conociendo, él me explicaba el sector —él lo conocía mucho— en 2002, y él, el equipo del Presidente (Andrés) Pastrana, el Presidente saliente de Ecopetrol, nos expresaban cómo había que preparar al país porque en el año 2008 se perdía la autosuficiencia.
Eso habría significado que en 2008 estaríamos produciendo menos de 224 mil barriles que se requieren; más o menos es lo que se gasta el país diariamente. Y yo informado por ustedes dije al Congreso que se veía ya una ruta corta de un millón, millón 200, millón y medio. Y hay una inversión muy entusiasmada con el país.
La transformación de la política petrolera
Si me pongo a hacer menciones a todos, incurro en omisiones. El agradecimiento es muy grande, muy grande. Lo he dicho varias veces; esa gran transformación de esa política petrolera.
Estábamos todavía entre la elección presidencial y la toma de posesión. Alcanzamos a ayudar para que se aprobara un proyecto de regalías que creaba un sistema escalonado de regalías y que lo reclamaba el sector. Diría yo que esa fue nuestra primera contribución a modernizar esta política. Tengo que reconocer que fue un gran acierto la Agencia Nacional de Hidrocarburos.
Yo que soy bastante temeroso a ese tipo de reformas, hice muchas preguntas, muchas objeciones, y ellos nos convencieron. Y fueron Luis Ernesto Mejía, Isaac Yanovich (ex presidente de Ecopetrol), quienes se impusieron y la sacaron adelante. Muchas gracias.
¿Y quién le recomendó a Armando (Zamora, Director de la ANH)? No lo recomendó por ahí, no vino de un directorio político. Qué gran labor, qué gran labor.
En todas esas agencias del Estado, y en Ecopetrol primero, qué suerte, qué suerte, encontrar unos patriotas como Isaac Yanovich y el doctor (Javier) Gutiérrez Pemberthy (Presidente de Ecopetrol). Y qué suerte y qué suerte, llevarse a Luis Fernando Alarcón para ISA (Interconexión Eléctrica S.A.). Que suerte tener al doctor (Luis Fernando) Rico en Isagén. Qué suerte encontrar a un hombre como Edicson (Pérez Bedoya, Director del Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas, Ipse, del Ministerio de Minas y Energía).
Yo recuerdo, Luis Ernesto, usted iba conmigo a nuestro primer viaje a Inírida, íbamos al primer Consejo Comunitario allá y la ciudadanía se atravesó en las calles. Yo siempre que he encontrado alguna manifestación de compatriotas inconformes he tenido por costumbre desmontarme de la buseta, bajar a hablar con ellos. Y allá en Inírida es que ‘no, mire Presidente: aquí no hay sino cuatro horas de energía’. Hoy con los mismos galones de combustible. Algo pasaba, porque les estoy registrando algo que vimos, que no es cuento, ni hay exageración.
Ya la semana pasada en un simposio internacional veíamos todo lo que ha logrado el Ipse, fundamentalmente con honestidad.
Yo quiero agradecerles, agradecerles a todos, lo de ese catastro minero. Mario (Ballesteros, Director de Ingeominas), muchas gracias y a todo el equipo. Y quiero agradecer esa inmensa recuperación de las electrificadoras. Gemsa. Yo creo que es muy importante, las electrificadoras que siguen siendo de propiedad de la Nación ya van todas con balances positivos. Muy, muy importante eso apreciados gerentes.
Un Estado al servicio de la comunidad
El Estado tiene que escoger si se pone al servicio del clientelismo o al servicio de la comunidad. Lo que nosotros hemos llamado el Estado Comunitario no es servicio al clientelismo, ni de la politiquería, sino al servicio de la comunidad. De ahí se desprende toda nuestra visión de Estado Comunitario, toda nuestra práctica de Estado Comunitario.
Por eso hemos reformado 464 entidades del Estado, sin desmontar el Estado. Cuando yo veo ese sector puede uno decir tranquilamente, que nuestras reformas no produjeron el efecto que decían mis críticos. Ellos decían ‘con esa reforma se va a acabar el patrimonio del Estado, Uribe va a acabar con el Estado, Uribe neoliberal, tal cosa’. Nosotros no aplicamos la receta neoliberal, ni permitimos la receta socialburocrática.
Ni desmontamos el Estado, ni dejamos que el burocratismo lo quebrara. Yo creo que ahí hubo una práctica de ese concepto que les propusimos a los colombianos, un estado al servicio de la comunidad.
Es que la empresa estatal es la empresa privada más importante, porque es de propiedad de toda la comunidad. Si uno está obligado a manejar su propia tienda con toda la diligencia, con cuánta más la empresa estatal, que es de toda la comunidad. Yo creo que mostrar ese balance que ustedes muestran es bien, bien halagüeño. Y ver que sin endeudamiento de la Nación, sin aportes del fisco, están construyendo esas obras tan importantes.
Despejado camino de hidroeléctricas del Vaupés, Sogamoso e Ituango
Yo veo contento a todo el país, desde el Vaupés, donde están haciendo la hidroeléctrica de Mitú, un sueño, un calvario de frustraciones. Y ahora me dice la ciudadanía del Vaupés ‘ahora sí la vemos avanzar’ y están contentos. Yo se los agradezco de corazón.
Ustedes no saben el sufrimiento mío por Hidrosogamoso. Por esto, porque Santander quería elegir al doctor Horacio Serpa (Gobernador y ex candidato) y con toda razón. Lo he apreciado mucho. Competí con él, gané la Presidencia. Yo sentía una obligación moral, moral: responderle a Santander. Yo no les oculto eso, no les oculto eso.
Y ustedes no saben lo importante que es eso para Colombia, para Santander, para todos esos municipios. Además en una zona sin objeciones ecológicas. Eso es un cañón que lo mandaron hacer para una hidroeléctrica. Cuando mi Dios dijo que iba a hacer ese cañón, dijo ahí para qué hacer una hidroeléctrica; ahí no hay limos orgánicos, hay no hay agricultura, ahí no se inundan poblaciones, ahí hay unas rocas parecidas a las de allá de Ituango (Antioquia); unas rocas ahí calladas, cortaditas con esmeril, para poder hacer una hidroeléctrica. Yo vivo muy agradecido con eso.
Vea, me voy muy agradecido. Cuando yo llegué a la Presidencia, me preguntaban mis coterráneos, me decían: ‘Álvaro Uribe ¿qué hubo de Ituango? ¿La vas a hacer o no? Allá hablamos parecidito. Yo les decía, hombre, yo no sé; esperemos a ver.
Saber que hoy quedó despejado ese camino, yo les agradezco de corazón.
Saber que queda despejado ese camino de El Quimbo para nuestros compatriotas del Huila, allá es más difícil. Eso tiene unas hectáreas buenas, allá hay inundaciones más delicadas; allá es más difícil, ha sido más difícil todo ese acuerdo con la comunidad, pero yo ya eso lo veo adelante.
Qué bueno, toda esa batalla contra el narcotráfico, la narcoguerrilla, el narcoparamilitarismo, y poder dejar esa obra de allá de Puerto Libertador, la térmica.
Y qué bueno que hubieran subido un poquito la presa de Urrá. Vamos a ver en esta inundación cómo se comporta ese río Sinú. Qué bueno que hubieran hecho eso, qué bueno que estén haciendo La Miel, el trasvase, la nueva etapa de La Miel.
Más de 4 millones de kilovatios nuevos sin peligro para el fisco
Qué bueno que el país esté instalando más de 4 millones de kilovatios, sin que corra el riesgo el fisco y sin comprometer el endeudamiento de la Nación.
Cuando empezó esta crisis de la economía, uno empezaba a preguntarle a los economistas, cosas, cosas. Un método de conocimiento que uno tiene que tener es preguntar, es fundamental en el método de conocimiento preguntar. Y yo encontré dos enormes preocupaciones, desde la precrisis por lo que podría ser la postcrisis, que se creciera nuevamente el endeudamiento público a niveles exorbitantes, y que sobreviniera una crisis de energéticos.
Colombia logró manejar el endeudamiento público. Miren lo que ha pasado. Que en Grecia, que en Portugal, la misma situación de España, etcétera. Y yo creo que Colombia sale muy bien librada en materia de energéticos. Gracias a todos ustedes, eso se los debe el país a ustedes y a todo este equipo que cercanamente ha acompañado primero al Ministro Luis Ernesto y ahora al Ministro Hernán Martínez. A todos mis agradecimientos.
Además, que me acompañaron cuando no iba el uno iba el otro, o cuando no iban dos, iban otros dos a los consejos comunitarios, que no fueron sino 306. O a los consejos de empleo, más los llamados que nos hacían a las regiones para una cosa, la otra. Muchas gracias.
Los frutos del diálogo comunitario
De ese diálogo comunitario yo destaco esto: el segundo Consejo Comunitario nuestro fue en La Guajira. Ese día la ciudadanía del Caribe en La Guajira dijo ‘vamos a quemar las electrificadoras’. Ustedes saben, el ex ministro Orlando Cabrales (ex ministro de Minas) hizo una cosa, en mi concepto valerosa y buena para Colombia, heroica, que fue que vendió todos esos pulpos de corrupción, que eran esas electrificadoras.
Cuatro años después llega nuestro Gobierno ¿y qué encontré yo? La comunidad incendiando esa empresa, y los españoles nos dijeron ‘nos vamos a ir de aquí, perdemos la inversión’.
Empezó un proceso de diálogo comunitario. Diálogo, diálogo, a buscar soluciones. No se ha resuelto todo, pero cómo se ha avanzado, cómo se ha avanzado.
También ese diálogo ha ayudado mucho en el sector minero. Si no hubiéramos tenido ese diálogo ¿qué hubiera pasado allá en La Jagua y en La Loma?
Ustedes saben que el desiderátum de esos procesos es llegar a que unos gobiernos, en un proceso de esos de protesta de la comunidad repriman a la comunidad y los gobiernos de otra visión hagan demagogia y expulsen a las empresas. Aquí no se dio ni lo uno ni lo otro; un diálogo promovido por el Ministerio de Minas, en el parque principal de La Jagua de Ibirico, extenuante. Todos ahí sentaditos, la empresa, la comunidad, el sindicato, el Gobierno Nacional. Buscar acuerdos, pero no dejarlos ahí, levantarlos en acta y hacerles seguimiento.
Un país que avanza con estos desarrollos mineros, este país es muy densamente poblado, uno cree que no. Pero es que uno le tiene que restar a un millón 160 mil kilómetros cuadrados de Colombia 600 mil kilómetros de bosque y unas pendientes andinas inhabitables.
Nosotros tenemos 46, 47 millones de habitantes, diría yo que en 350 mil kilómetros útiles. Esto no es fácil.
Entonces, un país, ahí tienen ustedes una prueba, la densificación del plan del Cesar y lo que se dificulta para avanzar con esos desarrollos mineros. No hay más camino que ese gran diálogo, ese gran diálogo para que la comunidad entienda que se necesita esa minería, y esa minería entienda que tiene que proteger mucho el bienestar de la comunidad.
Nunca imploramos diálogo a bandidos
Yo creo que estos años y con la ayuda de ustedes, dimos una reorientación al diálogo colombiano. Nunca les imploramos diálogo a unos bandidos que no han querido dialogar sino han aprovechado el diálogo para engañar, pero sí dialogamos intensamente, incesantemente con nuestros compatriotas.
Yo creo que eso ha sido bueno, ustedes han ayudado mucho, yo se los agradezco enormemente.
Ustedes dejan un avance enorme en fondos para electrificar, en energías alternativas, dejan unas grandes semillas; dejan un avance enorme en fondos para poder recuperar zonas deprimidas, para normalizar áreas subnormales.
Dejan un avance enorme en visión internacional. Yo creo que los pasos de ISA y de Ecopetrol en visión internacional son importantes. Se lo he dicho con todo afecto al doctor (Federico) Restrepo, el Presidente de EPM (Empresas Públicas de Medellín), que es muy importante seguir esos pasos de internacionalización, que es la única manera. El que no compita con concepto de aldea global, terminan desplazándolo.
Internacionalización de las empresas colombianas
Entonces esa visión de internacionalización de ISA, de Ecopetrol, en la cual nos han dado ejemplo es muy, muy interesante y he visto ya con contratos. Le contaba al Presidente de Guatemala (Álvaro Colom) y me decía la Presidenta de esa empresa, que la Empresa de Energía de Bogotá (Astrid Martínez), tiene hoy un contrato muy importante en Guatemala.
Ese es otro legado que ustedes le dejan al sector, bien importante.
Miren, Ministro Hernán y Ministro Luis Ernesto: yo ayer reconocí esto en Cartagena. Primero, le tengo que agradecer a todos los cartageneros, encabezados por una luchadora por su tierra, que es la doctora Alicia Arango (ex secretaria Privada de la Presidencia), que me ha acompañado diez años con una lealtad inquebrantable, de todos los momentos. La pelea por la Refinería de Cartagena.
Ayer les tenía que decir allá viendo esa obra les dije: miren, esta refinería yo no creo que sea producto hoy de la lógica, sino del esfuerzo de todos los que la hicieron posible y les voy a decir por qué. Cuando se proponen la refinería, se dicen que vale 600 millones de dólares; hoy vale 4 mil. Les estoy hablando 2002-2003 contra 2010, cuando el peso se ha —infortunadamente— revaluado tanto.
Segundo. Si era imposible hacerla con 600 millones dólares ¿cómo la estamos haciendo con 4 mil? Y está para adelante, eso ya no tiene reversa; tiene más reversa un paracaídas, tiene más reversa acabar con el terrorismo en Colombia. Era importante empezar a hacer esa comparación, que ahora hablamos de la relación de la seguridad y este sector.
Y yo recuerdo las discusiones en los consejos de ministros, todo el mundo tenía razón. Allá llegaba Luis Ernesto e Isaac Yanovich: ‘hay que hacerla por esto, esto y esto’. Decían los ministros de Hacienda ‘no tenemos manera, porque no hay espacio fiscal con este déficit; no hay capacidad de endeudamiento y no le podemos dejar las utilidades a Ecopetrol, porque ¿cómo financiamos la Nación?’
Se logró la reforma de Ecopetrol
Entonces después cuando dijimos bueno, entonces hay que desprenderla del Gobierno Central, de Ecopetrol de la matriz, empieza la discusión con el sindicato de Ecopetrol. Yo participé en muchas de esas discusiones. Fue muy difícil, en ese momento teníamos tres dificultades enormes con el sindicato de Ecopetrol: lo de la refinería, la reforma laboral y la reforma pensional.
Y Colombia no tenía sino un antecedente, Colombia no tenía sino un antecedente de una denuncia de la convención de Ecopetrol. ¿Cómo se llama aquel ilustre santandereano que fue Presidente de Ecopetrol? El doctor (Juan Francisco) Villarreal. Él denuncio la convención y el Gobierno de entonces (1974-78) echó para atrás la denuncia y le aceptó la renuncia al doctor Villarreal.
Esa es la historia. Aquí se mantuvo la denuncia de la convención de Ecopetrol, se llevó a un tribunal, se sostuvo eso hasta que la Corte Suprema de Justicia en la Sala Laboral, homologó el arbitramento.
Yo creo que eso es un paso muy importante. Y después se sacó adelante esa refinería de Cartagena. Me voy adelante —me cuenta el Ministro (de Minas y Energía) Hernán—, se hizo un proceso totalmente transparente; todos los que iban a la oficina se les decía: ‘los invitamos a participar’. Que iba Petrobras, que iba el uno y el otro. Se lo ganó Glencore. Y entonces, Glencore se nos quitó; nos resultó muy animado para buscar la licitación y muy débil para hacer la obra.
Yo recuerdo que el Ministro Hernán me dijo con claridad todo lo que pasaba. Yo acordé con él esto y fui y cumplí la tarea en Suiza, en Davos. Le dije a Alicia Arango, al Canciller (Jaime Bermúdez) y a Luis Guillermo Plata (Ministro de Comercio, Industria y Turismo), ustedes son testigos de lo que voy a decir aquí, estas cosas no se pueden decir sin testigos. Y le dije al Presidente de Glencore: vea, nosotros en Colombia hemos impulsado la inversión por patriotismo, porque es útil al bien superior de los colombianos, pero no se le olvide que lo hemos impulsado con transparencia; en nosotros no hay asomo de corrupción. Por eso le quiero decir o usted arregla y facilita esto a Ecopetrol, o aprovecharé el resto que me quede en la Presidencia para sacar a Glencore de Colombia. Se lo dije delante de testigos y les dije a mis compañeros: mire, Alicia, apunte eso, téngalo en una libreta, mis palabras textuales, que quede aquí una constancia.
Y volvió eso a Ecopetrol. Yo creo que quedó bien el arreglo, y hoy va para adelante. Yo creo que hoy el problema no es Ecopetrol buscar socios, sino los interesados buscar que Ecopetrol les deje participar. Eso se cambió, se cambió el interés.
Volvamos a lo laboral. Era imposible pensar en esas reformas laborales de Ecopetrol; se hicieron. Isacc y Luis Ernesto me insistieron mucho a mí al final en la capitalización, y yo les dije ahí mismo. Yo tengo muy presente lo de (Abraham) Lincoln; uno no puede de dar todas esas batallas al mismo tiempo; esperemos esta batalla. A mí me tocó hacer en el Congreso unas leyes muy difíciles, unas reformas del Estado muy difíciles.
En la Gobernación de Antioquia una desburocratización muy difícil. Uno conociendo todo ese fundamentalismo ideológico en contra de estas reformas, le digo, hombre, muy difícil la capitalización.
La capitalización de Ecopetrol e ISA
Y ya se había terminado todo el otro proceso laboral y vino la capitalización, y la maneja el Ministro Hernán Martínez con destreza total en el Congreso de la República. Un goleador, un goleador. Y enseguida tiene ese éxito enorme el doctor Javier (Genaro Gutiérrez) en la Bolsa. Casi medio millón de colombianos ahí. Eso es un ejemplo.
También habíamos hecho una pequeña capitalización ahí en Isagén. ¿Qué porcentaje, doctor (Luis Fernando) Rico? 20 por ciento.
Es sorprendente lo que valen hoy esas empresas, todas. ISA que, ISA nosotros mantuvimos la inercia; en ISA no introdujimos reformas, ISA la encontramos excelente y yo creo que la entregamos excelente. Sin embargo, todo este proceso de Colombia le ha crecido mucho el valor a ISA; creo no equivocarme.
A Isagén además le ayudamos a quitar ese problema que tenía con EPM. Que José Roberto Arango en la Presidencia, le representó para arreglar el problema del Metro de Medellín. Se les dijo, se les va a arreglara el problema, pero le quitan la demanda a Isagén. Y eso fue el arreglo.
Y entonces después usted les consiguió un crédito a Isagén con el Opic. Y vemos hoy a una Isagén tan fortalecida que está haciendo Sogamoso (hidroeléctrica).
Y esas subasta, Ministro Hernán, la concepción de esas subastan para asignar esos contratos de generación muy, muy importantes. Un modelo para el mundo. Qué cosa tan importante. Los estímulos tributarios, que hoy es el sector que menos los necesita. Esto ha crecido mucho.
La minería. Ustedes tenían explorado un 13 por ciento del territorio cuando nosotros llegamos. ¿Hoy dejan en exploración un 40?
Ministro de Minas, Hernán Martínez: ¿Como minería?
Presidente Álvaro Uribe Vélez: En general en Colombia, exploración para hidrocarburos y minería.
Ministro de Minas, Hernán Martínez: Queda con el 50 por ciento, Presidente”
Presidente Álvaro Uribe Vélez: Eso es sumamente bueno. A mí me parece que ustedes hicieron un manejo con toda la destreza y el patriotismo en este (fenómeno del) Niño. Los colombianos urbanos no sintieron el niño; lo sintió la agricultura pero los colombianos urbanos no sintieron el Niño.
Les ha tocado a ustedes una discusión importante, difícil pero importante con ambiente. Solamente en la deliberación es que se logran esos acuerdos. Luis Ernesto decía en estos días algo muy importante: ‘eso no se puede mirar como una contradicción, tiene que ser una convergencia’.
Pero en la misma cordillera andina del Perú y de Chile, por qué nosotros no tenemos los minerales que ellos sí han tenido. O sea que es muy importante todo lo que ustedes han hecho. Ustedes han hecho un sector estrella, estrella. Yo quiero darles los agradecimientos totalmente.
En estos días me atreví a decirle al Ministro de Hacienda (Óscar Iván Zuluaga): Yo creo que como va el país no necesitan vender a Isagén, ni a ISA, ni a ningunos; de pronto un pedacito de Ecopetrol para hacer esas carreteras que faltan’.
No descuidar la seguridad
Muchas gracias. Muy importante tener conciencia de seguridad. Esto también se ha podido hacer por la Fuerza Pública colombiana. Es muy importante seguir en eso.
Yo vengo de dar mis agradecimientos al Ministerio de Defensa y les dije: ‘No vayan a aflojar, no vayan a aflojar, porque por allí hay unos que ya están... Ustedes saben que cuando la culebra se siente muy ahorcada por la horqueta, aquí está la horqueta en la culebra, aquí está. Entonces la culebra deja de amenazar y empieza es a mirar con ojitos angelicales para que le levanten la horqueta.
Ahora ya nos están hablando de procesos de paz. Nosotros hemos un proceso de paz que ha permitido la reinserción de 53 mil. Que no nos vengan a enseñar de procesos de paz. Al pueblo colombiano le da mucho temor que nos vuelvan a engañar, que eso sea ahora un ardid de la culebra, un ardid internacional de la culebra para que le aflojemos la horqueta y se vuelva a oxigenar, vuelva a coger fuerza y nos vuelva a envenenar.
Yo le acabo de decir a las Fuerzas Armadas: en lugar de aflojarles la horqueta de la nuca, del pescuezo, hay que ponerle otra horqueta en la mitad y otra en la cola. Pero hasta que Colombia se libere de esta pesadilla. O si no ¿cómo nos salimos de esa pesadilla? 153 años sufriendo violencia en 200 años de vida independiente? Este sector sí que lo siente.
Y esto ha sido democrático. Yo veo por ejemplo las relaciones laborales del sector mucho mejor, hoy que hay seguridad. A mí me sorprendió en todas partes cómo lograron una convención a 5 cinco años en Ecopetrol. Yo lo aplaudo, es una maravilla.
Un sindicalismo más responsable
Yo veo hoy un sindicalismo más responsable en una Colombia más firme en materia de seguridad. Creo que todo eso es bueno y por ese camino hay que seguir. El sindicalismo no puede ser para destruir empresa ni para frenar su desarrollo; tiene que ser para revindicar los derechos de los trabajadores en el conjunto general de la democracia, teniendo en cuenta que se necesita sacar adelante esas empresas.
Eso que han hecho ustedes de sindicalismo de participación en el sector de energía es muy, muy interesante. En Popayán. Los de Amazonas, la semana pasada que estuvimos reunido con ellos, muy contentos porque el nuevo operador va a trabajar con ellos.
Lo de Cedelca (Centrales Eléctricas del Cauca), la nueva asignación que se ha hecho de operador, trabaja también con lo trabajadores. Yo creo mucho en ese sindicalismo de participación. Ustedes tienen que mostrar un balance no solamente en su sector; este un sector para mostrar un balance en el avance de seguridad. Es un sector para mostrar el balance también en el tema de nuevo entendimiento con los trabajadores.
Mi gratitud inmensa. Yo pido que cada uno lleve un mensajito a las familias de ustedes de mis agradecimientos. ¡Qué bueno haber trabajado con ustedes! Con personas tan capaces, empezando con este par de ministros; tan capaces. Sentido común, rapidez, poquitas palabras, al grano, capacidad de golear; eso es muy bueno.
Yo felicito todo este equipo que ustedes han integrado. Muchas, muchas gracias. Y es muy bueno para Colombia. Muchos países quisieran un equipo como el que ustedes integran. No es fácil de encontrarlo en países de este nivel de ingresos, todavía con los problemas de Colombia. Es un equipo excepcional.
Los felicito, les agradezco mucho y me llevo un recuerdo de admiración y de gratitud por ustedes. Y sé que los colombianos vamos a seguir siendo testigos de esos grandes avances, que los colombianos esperamos, esperanzados, que ese país llegue a millón y medio de barriles de petróleo, que este país incorpore reservas al infinito.
Que este país un día pueda decir que ya le tiene gas no a 5 millones 200, sino a los 10 millones de hogares de colombianos. Que este país sigue ese gran avance en energías alternativas, en el tema eólico, en el tema de biomasa, en el tema de etanol, en el tema del biodiesel, etcétera. Toda esta gran obra de ustedes. Vamos a seguir mirando desde el bello oficio de simple ciudadano de Colombia el avance de esa gran obra de ustedes, muy apreciados funcionarios del Ministerio.
Muchas, muchas gracias. Gratitud infinita. Y muchas gracias por el vallenato. Me da mucha pena, me da mucha pena Ministro, es de la carbonera y la esmeraldera. Mucha pena Ministro, me da mucha pena, Ministro.
Vea, la verdad es que el cariño de los músicos nos acompaña en esta hora final del Gobierno. Muchas gracias, maestro Ciro Meza, muchas gracias a Carlos Mario Zabaleta y muchas gracias a ustedes. Esta banda tan interesante ¿dónde opera? ¿En Bogotá?
Muchas gracias. A todos, muchas, muchas gracias. Sigan con sus éxitos”. |