“Antes de dirigirles unas palabras de agradecimiento voy a invitarlos a que guardemos un minuto de silencio por el fallecimiento, hace dos semanas, de la señora madre del doctor Jens Meza (Dishington, Presidente de la Federación de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma), quien nos acompaña esta noche. Que ella nos ayude desde el Cielo a los colombianos.

Queremos agradecer inmensamente la generosidad de ustedes, sus testimonios llenos de generosidad, las palabras del señor ex Ministro Orlando Cabrales, esta reunión.

De mi parte, les quiero hacer una confesión: muy afortunado haber podido ser Presidente de Colombia para contar con dos compañeros magníficos (el ex Ministro de Minas y Energía, Luis Ernesto Mejía, y el Ministro Hernán Martínez Torres). Estos señores Ministros, sus equipos de trabajo y el sector privado que ustedes representan, dos compañías excelentes, y las Fuerzas Armadas de Colombia.

Quien tiene que estar agradecido soy yo. No es fácil encontrar esas compañías, ministros de esta calidad, un sector privado de la calidad de ustedes y esa gana de las Fuerzas Armadas de Colombia de sacar al país adelante. Mis infinitos agradecimientos.

Ahorro en regalías

La verdad es que el sector que ustedes integran es muy promisorio para esta Patria. Hoy hay es miedo por el crecimiento, las regalías, la revaluación, etcétera. Confío que la Regla Fiscal, las medidas que se tomen en materia de regalías, disipen esos temores.

En estos años de Gobierno nosotros frente a las regalías hicimos lo siguiente: desmontamos la Comisión Nacional de Regalías, que era un factor de politiquería, de presiones, se le entregó ese manejo a Planeación Nacional, lo ha hecho mucho mejor.

Se desmontaron los contratos de interventoría, que fueron incapaces de detectar fenómenos de corrupción. Se establecieron unos sistemas de Planeación Nacional, que llamamos Auditorías Visibles. Y eso ha mejorado mucho, pero no pudimos que el Congreso nos aprobara las normas de ahora.

En estos años las regalías territoriales pasaron de 1,9 billones a 6 billones, y se proyectan para los próximos años a 12 billones.

Nosotros creemos que ya ese monto le quita cualquier escusa al Congreso de la República, y que ojalá se apruebe cuánto antes la norma que incluya varios aspectos.

Uno de ellos: un fórmula de ahorro. Uno segundo: una fórmula de redistribución. Y uno tercero: que le den al Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos esa herramienta que necesita para hacer un gran aporte al país, que él ha ofrecido ampliamente: dedicar un 10 por ciento de las regalías a proyectos de ciencia, investigación y tecnología. En esos montos eso puede ser una gran revolución para el país.

Cooperantes armados con celular

Tenemos mucha fe en todo lo que puedan hacer ustedes. Me parece que es bien importante cuidar todas esas normas de confianza de inversión, y mantener una estrecha relación entre ustedes y las Fuerzas Armadas.

En estos años de Gobierno nosotros llegamos a más de 4 millones de cooperantes, pero al mismo tiempo estuvimos desarmando al país.

Se pensaba que la promoción nuestra de que la ciudadanía le ayude a la Fuerza Pública, sería equivalente a armar a los colombianos; al contrario, hicimos grandes esfuerzos para desarmar ciudadanía. El arma que necesitan los cooperantes es un teléfono celular.

La Universidad de los Andes tiene un magnífico estudio. Me lo permitió mirarlo el doctor Santiago Montenegro, en el cual concluye cómo ha habido una relación directamente proporcional entre el aumento de las coberturas de la telefonía móvil y el mejoramiento de la seguridad.

Ustedes que están en unas regiones de la Patria que han sido bastantes maltratadas, es muy importante que mantengan una cercanía de todos los días, de todas las horas con la Fuerza Pública.

No hay que confiarse en ningún momento y el gran camino es la Fuerza Pública.

Precios de combustibles

Quiero agradecer a los equipos encabezados por Luis Ernesto Mejía y Hernán Martínez, nuestros dos ministros, todas esas reformas que introdujeron.

Yo mismo le discutí a Luis Ernesto su tesis, con Isaac Yanovich, de crear la Agencia Nacional de Hidrocarburos. Les hice 200 preguntas y los resultados les han dado enteramente la razón.

Confieso que lo que hicimos en materia de precios, a mí me daba pánico. Cada mes que me llamaban a que había que subir el precio, decía: ¿pero cómo vamos a sostener la gobernabilidad que se necesita para derrotar a los terroristas, con estos incrementos de los precios domésticos del combustible?

Le tuve enorme pánico a eso. Y la verdad es que eso que ellos me fueron forzando a hacerlo, deja un gran legado. Imagínense ustedes uno con todos esos colombianos secuestrados, manteniendo la firmeza de que no podíamos entrar a los engaños de la Farc; un país con tanta pobreza, tantos desequilibrios, y sumarle ese precio interno del combustible.

Yo decía ayer que nosotros dejamos un déficit del Gobierno Nacional Central del 4,5 (por ciento), dos puntos menos del que encontramos. Pero más de dos puntos del que habíamos logrado, porque lo habíamos dejado al 2,34 (por ciento).

Pero el contexto es mejor, porque es una economía en recuperación; ayer me decía Esteban Piedrahíta, el Director de Planeación, que es un hombre moderado, que no se deja halagar de tantos optimistas, me llamó por la mañana y me dijo: ‘¿Usted va a hablar de crecimiento en el discurso?’. Y le dije: ‘Voy a mencionar que la economía se está recuperando más rápido de lo previsto.

Y me dijo: ‘Todos los datos que tiene Planeación Nacional indican que este año la economía va a crecer por encima del 4 (por ciento), dígalo, creo que eso es un contexto que ayuda’.

Ayuda mucho haber reformado 464 entidades del Estado, a pesar de que faltan reformas; por ejemplo, a Telecom le falta la tercera reforma.

Ayuda muchísimo esa confianza de inversión en Colombia. El Ministro Hernán me dice que este año el sector de ustedes bate récord. Entonces si el año pasado el sector de ustedes en inversión bruta fue del orden de 8.500 millones (de dólares). Y si bate récord, quiere decir que la inversión bruta en Colombia este año puede superar los 10 mil 500 millones de dólares.

Creo que eso sostenidamente es muy importante para el país. Y en ese contexto está el desmonte de los subsidios al combustible.

¿Qué sería del país que tuviéramos que pagar este año seis billones de subsidios al combustible, de no haber hecho ese desmonte, cuando tenemos que pagar alrededor de un billón 300 para el subsidio de energía?

El subsidio de energía, que es un subsidio mucho más progresivo; el del combustible es bastante discutido. O sea que unas reformas bien importantes.

Reformas de Ecopetrol

Nosotros llegamos al Gobierno con la convicción de hacer dos reformas en Ecopetrol: la reforma laboral y la pensional.

A mí, que me había tocado en el Congreso la Ley 50, la Ley 100; que me ha tocado toda la vida una pelea política contra el radicalismo de izquierda; que me había tocado hacer, en medio de una tremenda oposición, la desburocratización de la Gobernación de Antioquia, el desmonte de unas empresas del Estado muy ineficientes, si ustedes me hubieran preguntado hace ocho años si estábamos en condiciones de abrir Ecopetrol a la capitalización de los particulares, les habría dicho que no, por las dificultades políticas que uno advertía.

Y además el medio latinoamericano. Un medio latinoamericano con un discurso bien incendiario, de apología de la exclusividad de los monopolios estatales. La reforma nuestra iba en contravía de esa política latinoamericana.

Esa reforma de Ecopetrol era muy difícil, no sé cómo la lograron. Es que fue muy difícil la discusión sobre la refinería, porque ahí había dos elementos.

Un elemento, la situación fiscal financiera. Los ministros de Hacienda decían: ‘Es que yo necesito las utilidades de Ecopetrol, y no tenemos espacio fiscal para esa inversión’. El Ministerio de Minas y el doctor Yanovich, antecesor del doctor (Javier Genaro Gutiérrez Pemberthy, Presidente de la Empresa Colombiana de Petróleos Ecopetrol) decía: ‘Es que hay que hacer la refinería, miren la situación’.

Entonces esa fue una discusión muy difícil por el espacio fiscal, por la necesidad de la Nación de contar con todas esas utilidades.

Y después la discusión política. Recuerdo largas horas, sentados en la Presidencia, Luis Ernesto, el doctor Isaac Yanovich, el sindicato de Ecopetrol y mi persona. Largas horas discutiendo por qué había sido necesaria esa reforma laboral. Ese pleito nos demoró tres años, hasta que vino el fallo de la Corte sobre el laudo que lo aprobó. El laudo fue demandado.

Y la resistencia enorme, enorme, a la propuesta de que había que convertir la refinería en una entidad autónoma. Creímos que nos iban a incendiar el país con el discurso de que estábamos privatizando Ecopetrol.

Y después vino la otra reforma: la reforma para la vinculación de ciudadanos como accionistas de Ecopetrol. La verdad es que estos señores Ministros, el Congreso y la opinión pública permitieron hacer esas reformas. Eso necesita garra, garra de combatientes por los intereses superiores de la Patria.

Quedan unas cosas buenas, también quedan unas preocupaciones. Esa relación entre minas y medio ambiente, es una relación que todos los días genera conflicto, y no es fácil, y todos los días va a ser más difícil por la evolución del mundo.

Cuando uno llega de la Conferencia Mundial contra el Cambio Climático, dice: ‘En Colombia las cosas están bien, porque aquí fluyen mejor y más rápidamente de la tendencia del mundo’.

Creo que eso que es un conflicto de todos los días, una contradicción de todos los días, se manejó relativamente bien. Creo que ustedes lograron, con los Ministros de Medio Ambiente, mucha más agilidad de la que esperábamos. Unos temas bien, bien difíciles, y que hoy tienen al mundo mirando cualquier decisión.

Alguien me decía muy acertadamente, hace pocos días, que a medida que no haya quejas de derechos humanos en Colombia, la queja de las Ong internacionales va a orientarse a denunciar el tema ambiental. O sea que ahí se anticipa un asunto de muy delicado manejo.