Palabras del Presidente Álvaro Uribe Vélez a la Asamblea de Familias en Acción en Bogotá

 
29 de junio de 2010 (Bogotáa)
 
 

“Deploro no haber podido asistir a esta reunión esta tarde, como era toda mí voluntad.

He interrumpido en este momento en Consejo Nacional de Política Criminal para darles un saludo a ustedes por este medio.

Quiero saludar a todas las Familias en Acción de Bogotá con afecto, despedirme ya en la hora final de este Gobierno, decirles que Familias en Acción tiene que ayudar a que puedan graduar los hijos y a que puedan salir de la pobreza.

Quiero agradecer inmensamente a quienes han dirigido este programa, encabezados por Luis Alfonso Hoyos, actual Embajador de Colombia en la Organización de Estados Americanos, y Diego Molano, hoy Alto Consejero para la Acción Social.

Doy un aplauso desde el fondo del corazón a todos los compañeros de Acción Social que han realizado este trabajo en el país: a Rita Combariza (Directora Nacional de Familias en Acción), a Carolina Quevedo (Coordinadora Distrital), a quienes manejan Familias en Acción en Bogotá.

Quiero agradecer porque este programa se ha hecho con transparencia. Nosotros hemos vinculado familias al programa Familias en Acción porque son de estrato uno, o porque son desplazados; sin trampas. Este programa se ha hecho sin politiquería, se ha hecho sin patriotismo.

A las Familias en Acción quiero decirles que nos perdonen cualquier error que hayamos tenido, pero yo creo que ha sido importante dejar el país con más de 2 millones 660 mil Familias en Acción.

Quiero también que el doctor Diego Molano, con la ayuda de ustedes, pueda tener un memorando sobre lo que debe hacerse para mejorar el programa, a fin de entregarle ese memorando en el empalme al nuevo Presidente de los colombianos, al doctor Juan Manuel Santos Calderón.

En estos años nosotros hemos avanzado en la Seguridad Democrática, pero también hemos avanzado en la política social. Los sectores más pudientes de Colombia han pagado el Impuesto al Patrimonio, que nos ha permitido financiar la política de seguridad y al mismo tiempo, avanzar en la política social.

Quiero amigos, compatriotas de Bogotá, invitarlos a esta reflexión: la política de seguridad y la política social tiene que ir de la mano, son inseparables, son compañeras que cada una alimenta la otra.

¿Cómo alimenta la seguridad la política social? La seguridad crea condiciones de inversión. Y cuando hay inversión, hay recursos y esos recursos se pueden llevar a política social.

Un país que quiera tener Familias en Acción, un país que quiera tener un buen servicio del Sena, una gran Red Juntos con Bienestar Familiar, con Régimen Subsidiado de Salud, con Restaurantes Escolares, con alimentación de niños y ancianos, es un país que tiene que preguntarse de dónde van a salir los recursos. Y esos recursos se originan en la inversión y la inversión necesita una política de seguridad.

Al despedirme de las Familias en Acción de Bogotá hoy con inmenso afecto y pedirles que nunca me olviden, que me lleven en sus oraciones, quiero dejarles muy claro esta reflexión: Colombia requiere política de seguridad, política de promoción de inversiones y política social. Nosotros apenas dejamos unas semillitas. Estos largos ocho años han servido para un semillero, pero todavía las soluciones de fondo a penas vienen en camino. Entonces por eso hemos hablado mucho de la necesidad de cuidar esas políticas.

Cuando yo era joven nunca se hablaba en Colombia de la política de seguridad; hoy los colombianos aceptan que la política de seguridad es un gran imperativo. Cuando yo era joven siempre se hablaba de la política social, pero no se hacia la pregunta de dónde salen los recursos para la política social.

Hoy los colombianos sabemos que la política social necesita presupuesto, financiamiento, que esos recursos salen de la inversión y que uno de los fundamentos de la inversión es la política de seguridad.

Invito a mis compatriotas de Bogotá, a través de Familias en Acción, a perseverar, a mejorar todos los días el tema de la seguridad, el tema de la inversión y el tema de política social.

Me da mucha tristeza no haber podido estar esta tarde con ustedes, pero le he pedido una licencia de 10 minutos al Consejo Nacional de Política Criminal para poder dirigirme a ustedes.

Mando a cada uno de ustedes un saludo desde el corazón.

Que peguen un gritico, para oírlas, las mamás que están allá.

A todas esas mamás quisiera darles un abrazo a cada unas de esas mamás. Un beso de compatriota, de afecto, del alma y decirles: Cada vez que ustedes gradúen un hijito, vamos a sentir los colombianos una gran felicidad, porque un hijito de ustedes que gradúen es un paso a delante para superar la pobreza y para construir un Patria equitativa.

Familias en Acción, una despedida al terminar este Gobierno, con todo el cariño. Diego, a usted y a su equipo, muchas gracias.

A todos un saludo afectuoso.
 
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