Palabras del Presidente Álvaro Uribe Vélez en el
lanzamiento de la campaña ‘Colombia territorio libre de drogas’

 
14 de mayo de 2010 (Bogotá)
 
 

“Quiero darles agradecimientos a todos, a Naciones Unidas, doctor Aldo (Lale-Demoz, Director en Colombia de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito), muchas gracias por confiar en Colombia, por acompañarnos en esta lucha y ahora en esta fase bien importante para la victoria final, que es el programa ‘Colombia territorio libre de drogas'.

Muchas gracias señor Ministro (del Interior y la Justicia, Fabio Valencia Cossio) por su entusiasmo. Se necesitó su dedicación, su compromiso, su convicción para que el Congreso de la República nos aprobara el acto legislativo que ilegaliza la dosis personal, que se había convertido en el camino de la corrupción, en el camino de la esclavitud.

Muchas gracias, señor Viceministro (de Justicia, Miguel Ceballos), muchas gracias doctor Omar (Figueroa, Director Nacional de Estupefacientes). Creo que el Gobierno se demoró, mi administración se demoró para reformar a Estupefacientes pero creo que lo vamos entregar bien reformado. Además, dedicado especialmente a unas funciones y la administración de los bienes, que ha generado tanta controversia, que ha generado, que generó tanto amiguismo, tantas dudas de corrupción. La administración de los bienes también se ha saneado entre Estupefacientes y la nueva agencia.

Apreciados compatriotas, a todos ustedes muchas gracias por esta gran campaña.

Libertad de consumo de drogas se convirtió en esclavitud

Permítanme empezar con algo con lo que quiero finalizar más adelante. La libertad para el consumo de drogas se convirtió en Colombia en un camino de esclavitud de la ciudadanía, la libertad para el consumo de drogas se convirtió en Colombia en un camino para someter los jóvenes a la esclavitud del crimen.

Hace muchos años, cuando mi generación estaba joven, oíamos en Colombia de los negocios de marihuana y de coca. Eso se desestimó. Se dijo que el país sería simplemente un país de tránsito, que no de producción, que no de consumo, que no de criminalidad. Y que por ese tránsito el país iba a ganar unos dineros grandes.

Con esas tesis que se oyeron en muchas partes, se desestimó el tráfico que empezaba a darse en Colombia para la coca que venía del Sur y que iba a los mercados del Norte.

Después se dijo que Colombia ya estaba produciendo pero que eran apenas 5 mil hectáreas, que eso no era problema. Llegamos a tener 400 mil hectáreas.

La Policía nos ha dicho que de haberse medido hace 11 años el hectareaje colombiano con las metodologías y el alcance de hoy, esas mediciones no habrían arrojado 170 mil, sino 400 mil hectáreas.

Qué cosa tan grave. Cómo se afectó la ecología, para no hablar de los otros daños. Las siembras de drogas ilícitas han destruido 2 millones de hectáreas de bosque en Colombia. Un país con una alta proporción de su territorio todavía en bosque, un país que tiene que proteger su bosque para aportarle a la lucha contra el cambio climático.

Mensaje a jóvenes universitarios

A los jóvenes universitarios yo les hago llegar un mensaje: si no trabajamos para que Colombia sea un país libre de drogas, Colombia no le va a poder aportar a la lucha contra el calentamiento global. Nuestra mejor contribución a la lucha contra el calentamiento global es preservar la selva y el mayor enemigo de la selva es el narcotráfico.

Dijimos ‘bueno, se está produciendo pero Colombia no va a ser un país de consumidores’. ¡Qué tristeza! ¡Cómo nos descuidamos!

El Ministro Fabio Valencia acaba de reiterar que estudios muy serio, en los cuales nos ha ayudado muy enormemente Naciones Unidas, muestran que hay 300 mil adictos y un millón 600 mil que reconocen haber consumido drogas.

¡Cómo ha crecido! ¡Qué daño! ¡Qué tristeza! Dijimos durante muchos años que aquí había producción y tráfico porque en los países industrializados había consumo. Hoy no podemos decir eso porque nosotros también tenemos un problema muy grave de consumo.

A mí me dio mucha tristeza esta semana al conocer la noticia de que nuestros universitarios son catalogados como universitarios en los cuales una buena, una alta proporción, un elevado número consume drogas. Dije ¿pero por qué? Y rechacé eso.

Y me parece muy pertinente esta campaña, porque el 52, 54 por ciento de los universitarios de Colombia son mujeres y un alto porcentaje de ellas son madres de familia. Mujeres que tienen que trabajar, atender a sus hijitos, a su esposo y estudiar y ser universitarias.

Muchas de ellas en Colombia —y voy a mirar a esas cámaras para referirme a ellas— se levantan a las 4:00 de la mañana a despachar a su esposo y a despachar a sus niñitos. Van a clase a las 6:00, salen de clase a las 8:00. A las 9:00, se van a trabajar ocho horas y vuelven a clase hasta las 8:00, 10:00 de la noche. Unas mujeres con una gran disciplina para atender esos tres frentes: el hogar, la universidad y el trabajo.

Que no me vengan a decir a mí que esas mujeres son consumidoras de droga; esas mujeres lo que son es aportantes de disciplina, aportantes de orden, aportantes de lo mejor del pueblo colombiano. Pero entonces ahora, con este sambenito que nos ponen, van a aparecer como consumidoras de droga. Yo creo que los colombianos no nos merecemos eso. Por eso es muy pertinente que todos hagamos un gran esfuerzo.

Un gran esfuerzo a todos los niveles

Tenemos que hacer un gran esfuerzo en el Gobierno, en la comunidad internacional, un gran esfuerzo en todos los niveles.

Ojalá Ministro (del Interior), antes de que termine nuestro Gobierno esa Ley que implementa el acto legislativo se apruebe. Hoy, con el acto legislativo la Policía ya puede decomisar droga, cualquier cantidad. Se acaba ese problemita.

Hace año y medio recibí la noticia de que habían presentado un video mostrando a Cartagena como un lugar de narcoturismo. Me dio mucha tristeza. Pero nosotros haciendo todo el esfuerzo para que vengan los cruceros del Caribe —en esta temporada vinieron 500 mil personas a los cruceros del Caribe, no venían—, haciendo todos los esfuerzos para que vengan turistas del vecindario, de la comunidad internacional, de otros continentes, etcétera y ahora sale este video.

Y empezamos a trabajar con la Policía cómo enfrentar eso. Y la Policía me decía: ‘Presidente, no podemos, porque la mayoría de estos distribuidores de droga a los turistas, que hemos capturado, los jueces de garantía inmediatamente los ponen en libertad, porque lo único que les alcanzamos a decomisar es una dosis personal, no penalizable’. ¡Qué tristeza!

Entonces nosotros tenemos que hacer el esfuerzo con el acto legislativo y el esfuerzo para el desarrollo del acto legislativo.

Agradezco mucho a los congresistas que están comprometidos y me adhiero a la mención que ha hecho el señor Ministro (del Interior) del senador Hector Elí Rojas. Qué bueno, que en estos pocos días que le quedan a este Gobierno y a este Congreso, vamos a entregar esa ley que implementa el acto legislativo.

Un esfuerzo en el Gobierno, en el Congreso, en la Fuerza Pública, que ha hecho una tarea heroica.

Un esfuerzo de los padres de familia. Por favor, los padres de familia tenemos que ser proactivos; los padres de familia tenemos que crear una gran conciencia en el niño, en el hijo adolescente, en el joven, aún en el hijo maduro. ¿Por qué? Para abrir los ojos sobre este problema de la droga. Decirles: ‘hijos, ¿ustedes quieren ser libres?’ ‘Claro que si papá’.

Pues bien, consumir droga no es una expresión de que se es libre; es un amino para ser esclavo. Qué bueno campañas de estas al interior de los hogares: ‘Hijo, consumir droga no es una expresión de que se es libre; es un camino para ser esclavo’. Para ser esclavo de la enajenación, de la incapacidad de conducir nuestra propia psiquis, para ser esclavo de la criminalidad.

Un gran esfuerzo en los muchachos. Qué bueno que sean los universitarios colombianos los que ahora reaccionen y digan: ‘¿por qué nos van a catalogar como consumidores de droga’’. Que ellos mismos declaren esas universidades territorios libres de droga. Qué bueno.

Que nos ayuden los profesores, los rectores. En muchas partes del país veo los profesores, los rectores y estamentos estudiantiles universitarios muy comprometidos. Y yo sé que ellos van a ser actores muy importantes de esta droga, de esta lucha por Colombia, territorio libre de droga.

Muy importante, César Mauricio (Velásquez, Secretario de Prensa) que ellos, las universidades que ahora se vayan a declarar territorio libre de droga, los colegios, etcétera, este canal institucional les dé espacios.

Ojalá encontráramos, doctor Omar Figueroa, Viceministro (de Justicia), los primeros casos. Mostrarle al país una universidad que diga: ‘aquí nos declaramos territorio libre de droga’. Y que todos se comprometan a que esa universidad sea libre de droga. Colegios que se declaren colegios libres de droga. Ojala, sería bien interesante.

Esas pequeñas victorias son las que van abriendo el camino para la gran victoria, la que soñamos final, algún momento que podamos decir: Colombia, territorio libre de droga.

Avances con grandes sacrificios

El país ha hecho un esfuerzo muy grande en la lucha contra los cultivo. En este Gobierno hemos avanzado, pero con qué sacrificios.

Esta Gobierno introdujo hace unos años la erradicación manual, y esa erradicación manual ha ayudado. Pero hoy que conmemoramos los 70 años de la Escuela de Policía General Santander, tuvimos que reconocer esto: durante el tiempo que hemos tenido la erradicación manual, han muerto 65 policías asesinados por cuidar a los erradicadores y hay 45 policías mutilados.

Los explosivos que han plantado contra ellos en los campos de droga, donde ellos se tienen que mover para proteger a los erradicadores, han causado mutilaciones en 45 policías de la Patria.

Este ha sido una lucha muy grande de Colombia. Nosotros siempre veíamos un gran desequilibrio, Colombia en una enorme lucha contra la producción, contra el tráfico, una enorme lucha extraditando, confiscando bienes en los últimos tres años, 13 mil bienes confiscados. Se les ha aplicado la normatividad de extinción de dominio. Colombia es un ejemplo en eso.

Pero al mismo tiempo ese desbalance. Mientras se hacían todos esos esfuerzos, se pagaban esos costos, se aportaban esos sacrificios, esa permisividad con el consumo.

Muy, muy interesante, un país comprometido a ser territorio libre de droga. Y lo podemos. Si hemos dado esa batalla exitosa contra producción del tráfico ¿por qué no vamos a ganara la batalla al consumo? Ganando nosotros la batalla al consumo nos da autoridad moral para decirle al mundo, bueno, pónganse las pilas en todas partes.

Es que además nos han engolosinado con el cuentico de que si la droga se legaliza se acaba la actividad criminal. Pues si la han tenido legalizada, la tuvieron legalizada muchos años. Quince años legalizada con la legalización de la dosis personal. Y ¿qué paso? En lugar que haber acabado la criminalidad hubo más criminalidad. Eso fue lo que paso.

Yo creo que el mundo está equivocado al decir que hay que legalizar la droga. Aquí la tuvimos legalizada quince años con la legalización de la dosis personal y lo que hizo fue aumentar la criminalidad, lo que hizo fue hacer daño.

Respeto internacional a Colombia

A Colombia la respetan en el mundo entero hoy por la lucha contra la producción, el tráfico, la disminución del hectareaje, la disminución de la productividad, la disfunción de la producción, la disminución de envías a los mercados.

Un país que llegó a producir mil toneladas de coca. Ahora está produciendo 300, pero está decomisando 200. Es un país que ha disminuido bastante el envío de coca a los mercados internacionales. Y eso le ha ganado a Colombia respeto. Ganemos el mayor respeto de todos: Colombia territorio libre, libre de drogas.

Mi llamado a los papás, a las mamás. Hagamos ese esfuerzo de hablar a toda con nuestros hijos y de decirle, ´hijo, si crees que una prueba de tu libertad es poder consumir drogas, estás equivocado. No lo vayas a hacer, porque por ese camino simplemente entras a ser esclavo´.

Los felicito a todos. Muchas gracias y esto es un paso muy bueno para el país. Empecemos a mostrar ejemplos.

Búsquense la primera universidad que se declare territorio libre de droga, el primer colegio, el primer barrio. Y los buenos ejemplos hay que divulgarlos, porque recuerdo a uno de mis profesores que decía ´las grandes metas solo se logran en la medida que se vayan ganando las pequeñas victorias´.

A todos muchas gracias”.

 
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