“Doy un saludo lleno de afecto a todos ustedes.
En los años de la Presidencia he podido venir en dos ocasiones al Carmen del Darién. Hemos venido a Bojayá, a Acandí, a Capurganá y justamente a Riosucio no habíamos llegado.
En estos años hemos hecho un trabajo para recuperar las tierras de Jiguamiandó y Curbaradó. La recuperación jurídica está hecha; ahora falta el pasó de la entrega material que confiemos se dé antes de que concluya el Gobierno.
Me parece de la mayor importancia haber logrado la electrificación de la zona. Esa línea eléctrica la trajimos desde Caucheras al Carmen del Darién, a Ríosucio; ahora ya llegó a Murindó, río Atrato abajo. La idea es que llegue a Bojayá pasando primero por Vigía del Fuerte (Antioquia). Allá en Vigía del Fuerte la cruzamos a Bojayá.
Cuando el Gobierno nuestro empezó aquí no había Familias en Acción; hoy hay mil 641. No había Familias Guardabosques; hoy hay 744. Había 11 mil 802 ciudadanos en Régimen Subsidiado de Salud; hoy hay 31 mil 874. El Sena atendía apenas a 78 personas; el año pasado mil 354.
No existía el programa de alimentación para niños menores de 5 años; actualmente tiene 3 mil 351 niños. Los Hogares Comunitarios se han mantenido idénticos, con 785 niños. En restaurantes escolares hemos pasado de 2 mil 632 a 6 mil 428 estudiantes, con un gran aumento en los días atendidos. No teníamos el programa del adulto mayor; hoy tenemos 286.
No existía un principio de universidad; hoy hay un Ceres (Centros Regionales de Educación Superior), uno de los 150 de Colombia. Algo le ayudamos a la Alcaldía con unos recursos para la carretera. Le hemos girado los Conpes 115 y 123 de primera infancia; también los recursos de gratuidad de educación y unas platicas importantes para el tema de estas vías terciarias, eran 120, 140 millones al año.
Son apoyos, pero sabemos todo lo mucho más que la comunidad necesita.
Ahora se ha dado este incendio, que nos duele mucho. Yo tengo que confesarles que entre el sábado y el domingo, en la tragedia, sentí un descanso cuando me dijeron que no había víctimas.
Madera, zinc, casas se recuperan; la vida, el don preciado que nos ha dado el Señor, es el bien inestimable que no se puede perder. Vamos entonces a ver cómo se recuperan estas casas.
Yo propongo que de esta tragedia hagamos una oportunidad, que hagamos unas casitas decentes, dignas, bien hechas, que duren para mucho tiempo y que le agreguemos a eso un parquecito.
Le voy a pedir a Luz Amanda (Pulido, Directora de Gestión de Riesgo del Ministerio del Interior y de Justicia), al Alcalde (encargado de Riosucio, Jairo García), a Juan Guillermo (Ángel, Gerente Presidencial para el Chocó y San Andrés), que nos expliquen brevemente cómo vamos a proceder. Porque al Gobierno le queda muy poquito tiempo y lo que ha ocurrido aquí es una tragedia que afecta a un amplio sector de la comunidad.
Les doy un saludo lleno de cariño, con inmenso cariño y vamos a ver cómo avanzamos en estos temas.
Cuéntenme, Alcalde y Luz Amanda”. |