PALABRAS
DEL PRESIDENTE URIBE EN CLAUSURA DEL CONGRESO DE ANALDEX
Bogotá, 3 oct. (CNE). - El siguiente es el discurso del
presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez,
durante su intervención en la clausura del décimo
quinto Congreso de la Asociación Nacional de Exportadores
(Analdex), realizada en la ciudad de Santiago de Cali.
Quiero saludarlos a todos muy afectuosamente, al entrar
a este hotel Intercontinental pues hice una de esas preguntas
de buen curioso que uno tiene que formular y la respuesta fue
buena, acompaña a trabajar. Me dijeron los directivos y
los trabajadores del hotel que se ha aumentado la utilización
del hotel en un 26 por ciento este año, indicador bueno
para la Patria, para el Valle del Cauca, para esta sultana Santiago
de Cali, que bueno que ustedes hayan escogido esta gran ciudad
para su Congreso Exportador año 2.003.
Quiero felicitarlos a todos, unirme a las palabras del doctor
Luis Guillermo Plata, cortas, concisas y de resultados. Me parece
que lo que él ha venido haciendo en Proexport hay que empezar
a transmutarlo ya, a muy buena parte de la Cancillería,
es una necesidad.
Yo creo que esta experiencia de Proexport va demostrando que es
el camino correcto y es lo que necesitamos que hagan nuestros
exportadores, eso es muy buen trabajo. Doctor Plata, honra Usted
a su generación y nos da mucha confianza a todos los colombianos.
Y quiero felicitar a los empresarios, él lo decía
las inmensas dificultades que se han tenido, él las repitió
y agradecerle inmensamente a Analdex esta confianza en Colombia,
esta manera creativa de empujar a todos sus directivos, al Presidente
ejecutivo, al Presidente de la junta y quiero referirme muy brevemente
a algunos de los temas que ha tratado el doctor Díaz Molina.
La Tasa de Cambio. Hay dos variables que se tienen que acompañar,
los esfuerzos de productividad de los empresarios como uno de
los requisitos para llegar a la competitividad y las acertadas
políticas macroeconómicas, los acertados resultados
macroeconómicos, que también se convierten en otro
requisito de competitividad.
Si hay un gran esfuerzo del empresario que se traduce en alta
productividad y no está acompañado por ejemplo,
con un buen resultado de tasa de cambio, esa productividad no
se traduce en competitividad.
Y si el Gobierno quisiera manejarlo todo basado en tasa de cambio,
hay una competitividad artificial y furtiva. Dura muy poco. Si
eso no está acompañado de un esfuerzo constante
de mejoramiento de productividad de parte del sector empresarial,
la tasa de cambio solita nada alcanza a hacer.
La verdad es que me parece muy importante que el país pueda
lograr una tasa de cambio estable pero a partir de que sea competitiva.
A principios de la década de los 90 se dijo y todos lo
entendimos que teníamos que hacer la modernización
empresarial, realizar un gran esfuerzo de incorporación
de maquinaria, transformar nuestras empresas, facilitar el acceso
de nuestros empresarios al crédito internacional dada la
estrechez del mercado financiero interno, estimular la llegada
de capitales foráneos.
Todo eso fue conduciendo a mantener una tasa de cambio estable,
así se perdiera competitividad.
En los primeros años hizo bien, porque se adquirió
crédito barato comparativamente, se le dieron unas señales
buenas al capital externo, se le facilitó a los empresarios
adquirir maquinaria, etc.
Pero eso después afectó críticamente nuestra
competitividad, y terminamos, como ustedes muy bien lo padecieron
con un peso altamente revaluado, un déficit fiscal muy
elevado, un endeudamiento muy elevado, por supuesto una tasa de
interés muy alta y todo eso produjo un desatraso cambiario
brusco.
Un desatraso cambiario brusco es muy dañino. Porque cuando
un empresario se endeuda en el extranjero con un peso revaluado,
se siente muy satisfecho pero no hace la cuenta del futuro.
Generalmente uno se pone muy contento porque compara la tasa de
interés que está pagando, al contraer ese crédito
en el extranjero contra la tasa interna de interés.
Pero esa euforia no deja ver el riesgo que puede sobrevenir cuando
se llene la represa y la represa rompe el dique. Entonces ahí
esa represa al romper el dique se lleva todo lo que encuentre
aguas abajo y se hace un daño.
A mí me parece que lo mejor es no permitir esos cambios
bruscos, que lo menor es poder tener una tasa de cambio que sea
estable pero a partir de que sea competitiva.
En una reunión con la Junta Directiva del Banco de la República
en la segunda o tercera semana de enero del año en curso,
con el entonces ministro Roberto Junguito, hablamos muy claramente
que el Gobierno haría todo el esfuerzo para ayudar a tener
una tasa de cambio estable.
¿Por qué?. Porque apreciamos que entre julio y diciembre
habíamos hecho el desatraso, habíamos logrado un
nivel satisfactoriamente competitivo. Y el Gobierno viene por
mi conducto esta noche a reafirmar ante ustedes ese compromiso.
Cada vez que se empiece a revaluar el peso en el Gobierno sentimos
profunda preocupación porque miramos lo que ha ocurrido
con nuestros vecinos. Una cosa es hacer cuentas desde Bogotá
y otra cosa es ver la situación de la frontera con Venezuela.
Una situación tan dramática, tan difícil.
Hoy nadie discute que este es un tema fundamentalmente del mercado
pero todo mundo tiene que aceptar que no es del todo del mercado.
La circunstancia de que el poder final lo tiene el Banco Central,
es la prueba clara de que es un tema que no es del todo del mercado
un acuerdo.
Y este es un tema donde el banco central tiene unos márgenes
y esos márgenes ayudan más en la medida en que el
Gobierno sea responsable.
Por eso, además de preocuparnos nosotros permanentemente
por tener una tasa de cambio competitiva hemos querido ayudar.
Por eso nuestro interés en sanear las finanzas públicas,
nuestro interés en quebrar la espiral del endeudamiento
colombiano, por eso nuestro interés en introducir todas
las reformas para que el próximo Gobierno encuentre una
situación fiscal menos difícil.
Y ahí entra a jugar el impuesto patrimonial del año
pasado, la ley de pensiones del año pasado, la reforma
tributaria del año pasado, la ley de responsabilidad fiscal,
el Referendo, lo que tenemos que hacer ahora en materia de disposiciones
complementarias en pensiones, en impuestos, en antievasión,
etc.
Pero déjenme decirles a ustedes que necesitamos una tasa
de cambio competitiva, que eso tiene que ser un gran empeño
nacional, que lo peor que le pasa a los importadores es tener
la euforia de una revaluación cuando eso desemboca en el
guayabo de una devaluación brusca.
Para todo el mundo lo mejor es que eso vaya siempre en un nivel
competitivo sin oscilaciones bruscas.
Qué bueno que el mercado con el Banco de la República
y el Gobierno, porque ahí el matador es el Banco de la
República, el Gobierno está en la cuadrilla, es
ayudante, qué bueno que el mercado con el Banco de la República
como matador principal y el equipo del Gobierno que es la cuadrilla
del Banco de la República, lograran un efecto parecido
a aquel que se dio como consecuencia del Estatuto del Presidente
Carlos Lleras Restrepo, donde el país tuvo certeza de que
podía avanzar en su proyecto exportador.
Los tiempos son otros, pero la necesidad de tener reglas claras
y estables es la misma y la necesidad de poder tener el estímulo
de ser competitivo para conquistar los mercados también
es la misma. Vamos pues a seguir en esa tarea.
El tema de las negociaciones internacionales. Confiamos que no
pase mucho tiempo para que el Gobierno de Estados Unidos pueda
anunciar formalmente el inicio de negociaciones con Colombia.
Hay una reunión ministerial en el mes de noviembre en la
ciudad de Miami y vamos a hacer todo lo posible para que en esa
fecha se de un paso trascendente. Sabemos que por disposiciones
internas de los Estados Unidos una vez el presidente anuncia formalmente
el inicio de negociaciones, no puede empezarlas hasta que hayan
transcurrido tres meses para dar la oportunidad al Congreso de
agotar otra etapa. Entonces por eso ya en octubre nosotros tenemos
que estar focalizados completamente a que ese anuncio se de en
cualquier momento.
Lo del ALCA. En alguna forma lo vemos sin suficiente celeridad
por eso creemos que la negociación bilateral con los Estados
Unidos, en lugar de fundirse con ALCA, en las circunstancias actuales
de desaceleración del proceso de ALCA, esa negociación
bilateral se puede convertir en un factor que le recupere celeridad
al ALCA. Es el planteamiento que yo le he hecho al Gobierno de
los Estados Unidos, mire: no hay que pensar que por tener un acuerdo
bilateral con Colombia se va a dar una señal en contra
del ALCA, al contrario, puede ser un factor que le recupere la
celeridad perdida al ALCA.
El tema MERCOSUR. Con el ALCA necesariamente no lo podemos asociar
exclusivamente a la negociación con los Estados Unidos.
Con el ALCA estamos negociando con MERCOSUR y con todos los países
de la región. Me parece que nosotros con todos los cuidados
que sugiere el sector empresarial, no podemos negarnos a negociar
con MERCOSUR, más tarde más temprano, allá
vamos a llegar a través del ALCA. Además esto necesita
también unas señales políticas, nosotros
estamos en este continente, no podemos darle la espalda a nuestros
vecinos sudamericanos.
Pienso que lo que se dijo en Rionegro, en la reunión de
presidentes de la Comunidad Andina, tiene toda la validez. al
interior de misma Comunidad Andina hay unas diferencias sobre
las economías, que al comparar la Comunidad Andina con
MERCOSUR indica que unas economías andinas pueden ir más
rápidamente y más profundamente al MERCOSUR y las
otras tienen que ir más lentamente en relación con
MERCOSUR pero finalmente todas tenemos que llegar.
Todas estas negociaciones tiene que hacerlas el Gobierno en sociedad
con el sector privado. Nosotros vamos a ser muy celosos en ese
tema. Que el Gobierno no tome una sola medida, una sola decisión
sin haberla discutido previamente con el sector privado.
Cancún indica que el mundo va a tener que hacer un replanteamiento.
Temo que si no se le da un timonazo a ciertos aspectos de las
negociaciones de libre comercio, irá tomando fuerza lo
que parece resurgir como ola proteccionista en buena parte del
mundo. La misma campaña de los Estados Unidos va ser bien
difícil. Todos los precandidatos demócratas, quién
más agita la bandera del proteccionismo. Entonces Cancún
tienen que dejar una reflexión y a mi juicio es que todo
el mundo se revise para que los tratados internacionales a través
de ser justos le den confianza a las comunidades de los diferentes
países. En fin, tenemos todo el interés en esta
materia, se nos ha atrasado el tema con Canadá.
Yo le pido al ministro Botero que toquemos nuevamente las puertas,
ese tema pareció avanzar muchísimo en julio del
año pasado todavía no me había posesionado
tuve oportunidad de hablar con el Primer Ministro, se mostró
muy dispuesto, avanzó y avanzó y de pronto se nos
congeló. Se dijo que por el tema de Nortel, los problemas
que hemos tenido con las asociadas de Telecom, hemos dado todas
las explicaciones en el sentido de que creemos que con la figura
decidida por los directivos de la nueva Telecom vamos a llegar
a un punto de equidad y de confianza no sólo para los inversionistas,
sino para la ciudadanía. Tema difícil pero lo hemos
superado. Ahí vamos trabajándolo con todas dedicación
y ojalá podamos recuperar el ritmo con Canadá también
con Centroamérica.
Pienso doctor Zarruk y Doctor Luis Guillermo que esa puerta la
tenemos que tocar, es una necesidad. Yo los veo a ellos muy focalizados
al acuerdo con los Estados Unidos y lo nuestro hay que empujarlo
allí.
Quisiera oír algunas preocupaciones, algunas preguntas,
algunas sugerencias de ustedes qué podemos en estos momentos
donde hay ilusiones por un lado, dificultades por otro a ver cómo
mejoramos el panorama exportador que es panorama de empleo, que
es panorama de ingresos, que es panorama de calidad de vida. Al
agradecerles pues inmensamente este esfuerzo que ustedes hacen
por la patria les ofrezco la palabra.