DISCURSO
DEL PRESIDENTE URIBE AL CONDECORAR A SANTIAGO BOTERO
Bogotá,
31 oct (cne).- La siguiente es la intervención del Presidente
de la República, Alvaro Uribe Vélez, durante el
acto de condecoración del ciclista colombiano Santiago
Botero..
Hay
consenso en que, de todos los deportistas, los ciclistas son los
más esforzados. Sus virtudes parecen la descripción
del estoicismo: capaces de soportar un alto grado de sufrimiento,
tenaces y valerosos.
Pero,
además, los ciclistas deben aplicar las mejores virtudes
derivadas del compañerismo, si quieren alcanzar sus fines
personales o colectivos.
Al
contrario del hombre común, para ustedes, los accidentes
geográficos y las inclemencias meteorológicas son,
en lugar de obstáculos, alicientes en sus carreras.
¿Por
qué Colombia es una potencia ciclística en el mundo?
Los
textos especializados dicen que nuestra Vuelta merece un lugar
prominente al lado del Tour, del Giro y de la Vuelta a España.
¿Tendrá
ese carácter -el de ser la tierra de los mejores ciclistas
escaladores de montañas que ha producido el mundo-, algún
significado como presagio?
Cuando usted ganó la medalla mundial como el mejor contra-relojero
del mundo, su portentosa hazaña nos permitió pensar
que Colombia debiera pedalear como Botero.
¡Ojalá!
Colombia debe aprender a conocer su meta; estudiar el trazado,
cronometrarse segundo a segundo; regular el paso; planear el esfuerzo
de acuerdo a los premios de montaña.
Colombia
debe levantarse todos los días a las cuatro de la mañana;
estudiar concienzudamente; entrenar sin pereza; recorrer sus carreteras;
alimentarse con método y sin gula.
Si
la prueba del día es recorrer una etapa de 40 kilómetros
en solitario, en un tiempo máximo de una hora y siete minutos,
los colombianos debemos tomar el paso sin desespero y con el propósito
de llegar a esa meta primero que todos los demás.
Este
país lo que necesita es Santiago Boteros, Ramón
Hoyos, Pajarito Buitragos, Hernán Medinas, Cochises, Ñato
Suárez, Niños, Herreras y Parras.
Por
ejemplo, en esa lista, que es larga, se quedaron por fuera muchos
héroes de regiones: que Pedro J. Sánchez, El León
del Tolima, que Alfonsito Flórez de Santander; que Carlitos
Montoya del Valle, que Efraín Forero de Cundinamarca, que
Rubén Darío Gómez, el del viejo Caldas...
Queremos
que así ocurra en todos los frentes: que se destaquen en
el mundo centenares de colombianos: ingenieros, médicos,
industriales, científicos escritores...
Uno
de los mejores manuales de Historia de Colombia, el de David Bushnell,
tiene un título inquietante: Colombia, una Nación
a pesar de sí misma. Momentos estelares como los que nos
han hecho vivir los ciclistas, ver a un compatriota nuestro, con
su figura mestiza y pequeñita; o rubia y fornida, como
la suya, es lo que nos hace pensar que sí somos una nación,
que nos espera un sitio grande entre las naciones.
Este
Gobierno tiene un propósito: recuperar la confianza en
nosotros mismos. Usted, Santiago, es el más grande, el
mejor, el más rápido, el más fuerte. Nosotros,
Colombia, somos grandes, nada ni nadie nos arredrará.
Estamos
en una situación económica bastante difícil,
pero nuestra determinación es que de esta Reforma Tributaria
que está en curso en el Congreso de la República,
salgan recursos para financiar el deporte colombiano.
El
deporte es uno de los mejores instrumentos para crear lazos de
solidaridad, para crear elementos vinculantes que nos construyan
más como Nación. Santiago, gracias por su hazaña,
gracias por hacer quedar bien el nombre de Colombia y sobre todo
gracias por darnos buen ejemplo, que necesitamos los colombianos.
Siga
cosechando muchos triunfos para que nuestra patria, gracias a
su esfuerzo, viva momentos de regocijo. Muchas gracias.