Discurso del presidente Uribe desde Cúcuta

VAMOS A SUPERAR LA DIFÍCIL SITUACIÓN DE LA FRONTERA

Cúcuta, 1 sep (CNE). El presidente Álvaro Uribe Vélez destacó el empuje de los habitantes de la frontera con Venezuela, especialmente ante la difícil situación económica por la que atraviesan.

En su primera intervención durante los dos días de Gobierno desde la capital de Norte de Santander, el Presidente de la República resaltó el optimismo de sus gentes, al tiempo que se dispuso a escuchar las principales inquietudes de la comunidad para dar respuesta con los funcionarios del Gobierno Nacional.

Estas fueron sus palabras:

“Visito a Cúcuta en una época particularmente difícil para toda la zona de frontera: un desempleo muy alto, una situación cambiaria que dificulta la competitividad de la producción colombiana, el mercadeo de los productos colombianos. Mucha pobreza, una violencia que ha golpeado tanto a Norte de Santander, pero que la tenemos que superar.

Y lo que más me impresiona es que en medio de las dificultades que ustedes padecen, mantienen este gran optimismo patriótico, esta alegría, esta espontaneidad nortesantandereana. Por eso no podemos quedar mal. Tenemos que seguir adelante.

En estos dos días vamos a examinar con la comunidad, con el Gobernador, con el Alcalde, con los congresistas, con los concejales, con los diputados, con el sector privado, una serie de puntos, para ayudar a que Norte de Santander salga adelante. Evento tras evento, los iremos anunciando a medida que haya conclusiones.

A esta hora la señora Ministra de Defensa y los altos mandos adelantan un Consejo de Seguridad para evaluar la situación de seguridad en Norte de Santander.

Yo diría que allí hay dos aspectos: uno negativo y otro positivo. ¿Cuál es el aspecto negativo? Se han seguido presentando crímenes selectivos que golpean mucho: el crimen del doctor Tirso Vélez, el crimen del Veedor.

Y en lo negativo también está la presencia de los cultivos de drogas en un área del departamento. Allí tenemos la Brigada Antinarcóticos aportando un gran sacrificio. Ayer los terroristas, con minas quiebrapatas, nos asesinaron a seis compatriotas de la Fuerza Pública.

Por eso, queridos amigos de Norte de Santander, aquí, en la tierra de uno de los Padres de la Patria, que puso su espada al servicio de la ley para que el cumplimiento de la ley nos garantizara la libertad, tenemos que reasumir el compromiso con Colombia de avanzar hasta el final, haciendo todo el sacrificio que de nosotros se demande para derrotar el terrorismo.

En todos los lugares de Cúcuta, hoy y mañana, diré lo mismo: sacrificio hasta el final, el que sea necesario, para quitarle al pueblo la pesadilla de la violencia.

El otro tema que tenemos que derrotar en Colombia totalmente es el de la politiquería y el de la corrupción. Dos millones de hogares de Colombia necesitan vivienda social. Esta es una respuesta pequeñita: 184 casas que se entregan hoy, la expectativa de otras 700 que están en curso, pero dos millones de hogares de la Patria requiriendo su solución de vivienda. Hay que escoger: la platica a la politiquería y a la corrupción, o la platica a lo social, como la vivienda.

Con el mismo entusiasmo, con la misma devoción con que nos tenemos que aplicar a derrotar a los terroristas, hay que derrotar la politiquería y la corrupción, para que los dineros del pueblo colombiano resuelvan las grandes angustias sociales de la comunidad.

El Referendo no lo va a resolver todo, pero es un paso en la dirección correcta. Uno de sus artículos propone que las personas condenadas por corrupción contra el patrimonio del Estado no puedan volver al Estado, ni por nombramiento, ni por elección, ni por contrato, paso necesario para derrotar la corrupción.

Otro de los artículos propone que no haya auxilios parlamentarios en el Congreso, ni en las asambleas, ni en los concejos, que tanto han servido para la corrupción, para el enriquecimiento ilícito de grupos favorecidos de la politiquería.

¿Pero qué propone otro de los artículos? Que en lugar de que la platica del Estado se canalice en componendas, en francachelas, entre el gobernante de turno y la clase política, que las prioridades se definan en audiencia pública, con vibrante participación democrática del pueblo.

Y vamos a disminuir el tamaño del Congreso para que haya austeridad. El pueblo colombiano vive muy pobre. No podemos tener un Congreso que dé mal ejemplo. Por eso desde la campaña propusimos reducirlo. Y si bien no va a ser factible reducirlo tanto cuanto queríamos, de todas maneras hay un buen paso, porque por numero de habitantes Colombia debería tener hoy 320 congresistas y seguiría subiendo el tamaño del Congreso a medida que aumente el tamaño de la población. El Referendo propone 218 y lo congela. Independientemente de cómo crezca la población, el Congreso no crecerá más.

Pero ahí no nos quedamos: el sueldo del Congreso, de los altos funcionarios del Estado, como magistrados de las altas cortes y Presidente, se congela durante 4 años.

Eso es justo. Eso es justo, porque mientras el pueblo colombiano padece y padece, año tras año al Congreso y al Presidente se les ha pagado cumplidito, y año tras año se les ha hecho el reajuste.

Hay que hacer un esfuerzo a ver si este país es solidario. Por eso voy a apelar a la base popular de la Nación, para que la base popular de la Nación haga una gran reflexión y nos ayude a sacar adelante este Referendo. No resuelve todos los problemas, pero es un paso en la dirección correcta.

Por ejemplo, elimina las contralorías departamentales y municipales. Salvo excepciones, han servido para votar plata y hacer politiquería. Que esa platica se la ahorren los departamentos y los municipios y la lleven a la educación, que tanta necesidad hay en nuestro pueblo.

Cada uno de ustedes, a partir de esta mañana, es jefe de debate para sacar adelante el Referendo.

En el día de hoy y mañana analizaremos con sus autoridades cómo vamos en régimen subsidiado de salud, cómo vamos en madres comunitarias, qué le va a pasar a Norte de Santander en este segundo semestre en ampliación de cupos de Bienestar Familiar para nutrición de niños menores de 5 años.

Cómo vamos con la revolución del Sena, cómo vamos en educación primaria y secundaria, en educación universitaria, cómo vamos con el tema agrícola, cómo vamos con el tema de los servicios públicos. Y allí nos detendremos en el tema de la Empresa de Acueducto, que queremos revolucionar.

Esperamos poder anunciar la vinculación de un socio importante con capital que nos ayude a sacarla adelante, y la creación del fondo de capitalización social, para que toda la comunidad participe como socia directa o indirecta en el rescate de la Empresa de Acueducto.

Y confío también que nos podamos detener en el tema del microcrédito y de la vivienda. Exhorto a todos los colombianos a que hagamos un esfuerzo grande por la vivienda. La señora Ministra les ha anunciado que la tercera etapa de Torcoroma se le entrega también a la municipalidad para avanzar en programas de vivienda.

¿Cuántas soluciones suman las tres etapas? Serían 3.600. Ahí hay que hacer un poquito de recorte para espacio público. ¿Cuántas llevamos hasta hoy? Hay 184 prácticamente entregadas, 700 en construcción, son 884. Faltarían 1.570 lotes y nos vamos a poner a la tarea de que esa solución sea una realidad.

Quiero agradecerle el esfuerzo enorme a la señora Ministra, a su equipo de colaboradores, al señor Alcalde. Alcalde, muchas gracias por todo su esfuerzo. A Metrovivienda. Y quiero agradecer a la doctora Elvira Forero, de Fonade, quien ha tenido a cargo la contratación. ¿Sabe por qué le quiero agradecer? Porque ha sido una contratación pulcra, transparente, honrada, sin corrupción, como se requiere en Colombia.

Vamos a buscar una platica grande para vivienda. A nosotros nos ha tocado, a mí no me gusta quejarme, no digamos que difícil, nos ha tocado escasos de plata. Este año en el Gobierno nos ha tocado con una chequera delgadita, en rojo, pero reitero hoy desde Cúcuta lo siguiente:

Que se apruebe por parte del Congreso un artículo en el Presupuesto para que las mayores utilidades que llegare a generar el Banco de la República el año entrante, por encima de las ya programadas, las podamos dedicar a vivienda social en toda la Patria.

Algunos dicen que eso es populista. Entonces cuando no hay inversión social, se quejan de que no hay inversión social. Y cuando el Gobierno empuja para buscar recursos para inversión social, se llenan de celos de que este Gobierno tenga éxito en lo social y dicen que es populista. Eso no es populismo. Es un imperativo de la sociedad colombiana.

Primero, hay que pedirle al Banco de la República que genere más utilidades. Ellos son capaces de hacerlo, que hagan el esfuerzo adicional.

Segundo, al Congreso, que en lugar de gastarla en otro objetivo, lo gastemos en una prioridad de nuestro pueblo, que es la vivienda social. Y tercero, las hacemos con honradez y con transparencia. En esa batalla vamos a continuar. El país le tiene que perder el temor en hacer una gran esfuerzo de aplicación de recursos a la vivienda social.

Miren, lo digo al oído de la opinión de los economistas: aquí tenemos los materiales de construcción, aquí tenemos la tierra, aquí tenemos la ingeniería y tenemos la necesidad popular. Lo único que hace una construcción masiva de vivienda social, como la que estamos proponiendo para los próximos años, es tonificar la economía y resolverle los problemas a la base social de nuestra comunidad.

Una de las adjudicatarias me decía aquí: ‘Me salvaron, tengo cinco hijos, soy madre cabeza de familia, paso en la casa cuidándolos, y en la casa vivimos porque una niñita nuestra tiene una tiendita’.

Eso se repite en muchos lugares de Colombia. Eso es superior a cualquier discusión de los economistas para frenarnos un presupuesto masivo en inversión de vivienda social. Y eso lo tenemos que definir en Bogotá, pero lo vamos a presionar con la base popular de la Nación empezando por Torcoroma hoy en Cúcuta.

Confiamos que en las próximas semanas, Findeter le anuncie definitivamente al país su contribución al Fondo de Garantías para capitalizarlo, a fin de que el Fondo de Garantías pueda comparecer como fiador, en favor de miles de colombianos que necesitan crédito para su vivienda y que no tienen acceso al crédito por falta de garantías.

Vamos a anunciar la destinación de unos recursos cuantiosos para financiar subsidios de vivienda social, y confiamos que la exención tributaria, aprobada por el Congreso en el Plan de Desarrollo, sea finalmente atractiva del sector privado, para que el sector privado invierta en vivienda social.

Los saludo muy afectuosamente a ustedes, a los niños de la Banda Sinfónica Juvenil de Cúcuta. Bien lo recordaba el señor Alcalde: cuando un niño abraza un instrumento musical, jamás abrazará un fusil contra el prójimo”