PALABRAS
DEL PRESIDENTE ÁLVARO URIBE VÉLEZ, CON OCASIÓN
DE LOS 50 AÑOS DE DELIMA MARSH
Cali,
30 abr. (SNE). - Las siguientes son las palabras del presidente
de la República, Álvaro Uribe Vélez, durante
el homenaje a la compañía DeLima Marsh por sus
50 años.
Vengo
a esta gran ciudad, por la que siento afecto entrañable,
en representación de todos los compatriotas, a expresar
un testimonio de admiración a DELIMA MARSH: a sus trabajadores,
directivos y socios; a esos dos señores de la rectitud,
el amor a Colombia, y de entrega al trabajo creador: los doctores
Ernesto de Lima y Jorge Alberto Uribe Echavarría.
El Estado colombiano ha instituido la Orden Nacional al Mérito,
para enaltecer a personas e instituciones que se hayan distinguido
por sus connotados servicios al país.
¡ DeLima Marsh sí que merece ese homenaje. Estábamos en mora!
Una compañía cuyo principal contrato ha girado
alrededor de la palabra clave de la Colombia de hoy: Confianza.
DeLima Marsh representa cincuenta años esparciendo seguridad
y confianza en Colombia. Cada paso de construcción de
Patria, de país, requiere empresas como DeLima: para ayudar
a tomar decisiones a los inversionistas, mantener el clima de
tranquilidad entre todos los agentes de las cadenas productivas,
decir a propios y extraños que Colombia es tierra fértil
para la creación de empresas.
Confianza, con la que asociamos el nombre de DeLima Marsh, es
la clave para recuperar nuestra economía. Confianza para
que los inversionistas instalen sus proyectos productivos y se
expanda el empleo. Para que los trabajadores no estén
asustados porque los van a despedir la semana entrante. Confianza
que se obtiene cuando hay hombres como los socios, directivos
y trabajadores de DeLima, que van por el mundo hablando bien
de Colombia, invitando al capital y a los trabajadores del mundo
a venir a emprender nuevas empresas.
Confianza
es eje fundamental para la Patria. Obtener confianza en Colombia
es tener Seguridad Democrática, administración
transparente en lo público y en lo privado, esfuerzos
sin claudicaciones, sin pausas por la reactivación económica
y social, para que este gran pueblo, el colombiano, disfrute
de los bienes y servicios de las sociedades modernas. Confianza
y cariño con la Patria. Confianza para invertir, hay
que ganarla con la acción del Estado, hay que ganarla
con el trabajo tesonero del sector privado, con el ejemplo
de DeLima. Cariño de la comunidad para con la inversión
privada. Cariño de la comunidad con la acción
de la empresa privada. El cariño que DeLima Marsh, ha
sabido ganar, proveniente de todos sus compatriotas.
El
equipo, Ernesto DeLima - Jorge Alberto Uribe, fue afectado
por decisión que reivindico, porque nos movieron a ella
los más altos intereses de la Patria, a fin de que el
doctor Jorge Alberto Uribe asumiera la noble y difícil
tarea de conducir el Ministerio de la Defensa.
Lo
hicimos por las virtudes que él personifica, por aquello
que he venido predicando, debe caracterizar a cada compatriota
integrante de la Fuerza Pública: limpieza, capacidad
gerencial y de liderazgo, austeridad, disposición a
trabajar en equipo, buena comunicación, vocación
de victoria, combatividad y volcamiento a las calles y campos.
Hemos
identificado esas virtudes en el señor Ministro, en
quienes fueron durante tantos años sus compañeros
en esa bella gesta de DeLima Marsh.
Ernesto,
ha servido durante tantos años al pueblo de Colombia,
está presente en toda actividad cívica, aporta
con sus luces, en cada empeño de interés patriótico,
está presente en cada evento de construcción
de ciudadanía, ha sido un ejemplo de aportar a lo público
desde lo privado.
Su
trabajo ilumina la vida colombiana con ejemplo de inteligencia,
solidaridad, laboriosidad, rectitud, transparencia y empuje
emprendedor.
Aprovechemos este cumpleaños de DeLima Marsh para seguir
predicando a los jóvenes el empresarismo, el que han practicado
con sabiduría todos quienes han estado vinculados a esta
gran tarea.
¡Hay
que desatar un proceso de empresarismo entre los egresados
de las universidades, politécnicos y tecnológicos!
Esa es la consigna. Colombia, necesita impulsar plenamente
la empresa privada, no podemos tener gobiernos vergonzantes
frente a la empresa privada. Necesitamos gobiernos y funcionarios
definidos a favor de la empresa privada, que entiendan y hagan
entender que la gran posibilidad de empleo, de expansión
económica, de recursos para la inversión social
deriva del fortalecimiento de nuestra empresa privada.
Acudo
a este cumpleaños de DeLima Marsh, a convocar a mis
compatriotas, desde Cali, para rodear plenamente los esfuerzos
de la empresa privada.
Esta
condecoración de hoy es una comprobación de que
Colombia tiene la fortuna de contar con una clase empresarial
fundida y templada en el crisol de las dificultades cotidianas.
Una clase empresarial que ha tenido que luchar, en buenos tramos
de la vida nacional, en medio de un contexto adverso.
A
los riesgos propios de toda inversión y a las desventajosas
condiciones de economías débiles, se suma el
tener que afrontar graves peligros en la seguridad personal,
familiar y patrimonial, en un escenario de violencia, que ha
sido asolado por todo género de organizaciones delictivas.
Pero en Colombia hay una gran vocación empresarial, por
eso, queremos luchar por un ‘País de Propietarios’,
un país donde todos tengamos esfuerzos que aportar para
el crecimiento de la empresa privada. Una empresa privada que
en esta patria ha sabido ser solidaria.
El
relato de Ernesto esta noche, nos ha mostrado un brillantísimo
caso de tenacidad, de perseverancia, un brillantísimo
caso de reconocimiento y conocimiento de todas las regiones
de la Patria. Un brillantísimo caso de descentralización
en el manejo empresarial, de saber compartir, de agregar socios.
Qué bueno
que las universidades, a partir del relato de Ernesto esta
noche, hicieran el caso de DeLima Marsh, que tanto necesita
que el país lo conozca para reproducirlo.
Nos
honra mucho a los colombianos, encontrar empresas como DeLima
que han convocado la confianza internacional. Sus socios internacionales
son orgullo para Colombia.
Quiero
destacar en estos 50 años de DeLima, su capacidad de
infundir confianza en Colombia allende las fronteras.
Esta
Nación tiene una empresa privada que concita la confianza
internacional. Los inversionistas internacionales tienen un
motivo para confiar en Colombia: aquí encuentran excelentes
socios. El caso de DeLima Marsh lo hace patente.
Colombia
cuenta con cada uno de los miembros de la gran familia DeLima
Marsh, para que sigan en ese apostolado de construcción
de Patria. De Patria sin odios y sin exclusiones. De Patria
con empresa social, con empresa pujante, con empresa ética,
con empresa generadora de riqueza, de bienestar para toda la
comunidad.
Qué bueno
Ernesto, que dentro de 50 años, quienes habrán
de sucedernos puedan reunirse en este mismo salón para
celebrar ese nuevo cumpleaños y que puedan estar disfrutando
una Patria en mejores condiciones de seguridad, una Patria
más justa, más solidaria, más próspera.
Estos
50 años y las ilusiones que usted siembra, nos invitan
a trabajar para derrotar sin vacilación el crimen, para
derrotar sin vacilación la corrupción, para construir
una Nación en la cual las nuevas generaciones puedan
vivir plenas de felicidad.
¡Muchas
felicitaciones, gracias por lo que han hecho por Colombia!
"Acudo
esta noche a esa tierra para traer el mensaje de millones de
colombianos que a esta hora se sienten compenetrados con el
gran pueblo vallenato cuando da inicio al Festival de la Leyenda.
Acudimos esta noche a felicitarlos a ustedes por este bellísimo
parque, solo sentimos la tristeza de que quien lo inspiró no
nos acompaña físicamente, pero alegra el alma
desde las colinas de la historia. Ella, una victima más
de la violencia que ha desangrado al suelo de la patria está hoy
feliz al constatar que su semilla esta germinando.
En
nombre de la señora Ministra de Cultura, María
Consuelo Araujo, quiero comprometer al Gobierno Nacional ante
ustedes para seguir colaborando con el señor Gobernador
y con el señor Alcalde hasta culminar plenamente este
Gran Parque de la Leyenda Vallenata. Acudo esta noche a sumar
mi testimonio al de ustedes para rendirle un homenaje a Consuelo
Araujo Noguera, al expresidente Alfonso López Michelsen,
a Nicolas Colacho Mendoza y al maestro Rafael Escalona. Encabezan
ellos una galería de los grandes conductores de esta
tierra, gestores de su pasado, inspiradores de su presente
diseñadores de su futuro, unos presentes con nosotros,
los demás mirándonos desde el cielo están
todos proveyendo por la grandeza y por el futuro del gran pueblo
del Cesar.
Quiero
reiterar mi compromiso para lograr un departamento del Cesar
sin guerrillas y sin paramilitares. Este Gobierno empezó el
siete de agosto a las 4:00 de la tarde y el ocho de agosto
a las 6:00 de la mañana el Presidente de la República
con los Ministros, las Fuerzas Armadas y el Procurador ya estaba
en Valledupar para emprender la tarea de reconquistar la libertad
de nuestros ciudadanos de movilizarse por las carreteras que
las encontramos así el siete de agosto: hechas prisioneras
por los bandidos.
Hemos
reducido sustancialmente el secuestro y el asesinato pero no
nos conformamos hasta que en estas tierras se enseñoree
plenamente la paz. Hemos ofrecido a los grupos violentos la
posibilidad del dialogo y la solución negociada pero
lo fundamental es la paz a las buenas o a las malas. No es
hora de quejumbres, no es hora tampoco de triunfalismo y jamás
será hora de temblores, siempre hora de firmeza para
que podamos recuperar la armonía. Reasumiré personalmente
como lo hice en las primeras semanas de Gobierno la dirección
de los Consejos de Seguridad en Valledupar para desterrar a
los sicarios que han venido produciendo muertes selectivas
en esta ciudad.
Reafirmo
ante ustedes el compromiso de recuperar el agro. Una de las
primeras medidas que este Gobierno tomó fue prohibir
la importación de leche, porque encontramos al sector
agropecuario, a los lecheros no solo derrotados por los violentos
sino por las masivas importaciones desleales. Esperamos recuperar
el cultivo de algodón. Vayan preparando las tierras
porque el Gobierno ya ha pedido semillas transgenicas para
30 mil hectáreas y tenemos toda la voluntad para garantizar
el precio.
Creo
que lo que acaba de ocurrir con un pequeño hervor de
recuperación es una buena señal y lo mismo queremos
hacer con la palma africana. Invito a los congresistas del
Cesar para que el 20 de julio presentemos una nueva exención
tributaria a consideración del Congreso a fin de darle
tratamiento libre de impuestos al diesel que se pueda producir
del aceite de palma y generar en estos departamentos empleo
agrícola masivo. Reitero mi compromiso con otros cultivos
como el cacao tan importante para la población campesina.
El
año pasado el Sena paso de 16 mil a 32 mil estudiantes
formados en el Cesar, pero este año necesitamos que
sean 38 mil. La Universidad Popular del Cesar ha venido presentando
unos buenos resultados y estamos dispuestos a darle todo el
apoyo para que las nuevas generaciones de este departamento
tengan allí todas las oportunidades posibles.
Este
año, con la ayuda de Dios, 60 mil cesarenses pobres
ingresarán al régimen subsidiado de salud. En
un mes la señora Ministra de la Cultura va a poner en
marcha una disposición de las primeras aprobadas por
el Congreso a iniciativa del Gobierno para darle tratamiento
preferencial en seguridad social subsidiada a los artistas
pobres. Ministra que dentro de un año, si el creador
nos mantiene con vida y salud, aquí podamos dar cuenta
de cuantos artistas que tanta alegría le han dado a
la patria y que han sido abandonados por la fortuna están
protegidos debidamente por el régimen subsidiado de
salud.
La
tarea de la Patria es difícil pero con alegría,
con amor entrañable al pueblo, con valor civil, con
determinación sin quejumbre y sin amargura la vamos
a lograr para que las nuevas generaciones puedan vivir felices
en el suelo de Colombia. En el más castizo lenguaje
el vallenato interpreta con ingenio aquellas vivencias elementales
que producen las vibraciones del alma. Con el corazón
que se muda al acordeón, el vallenato hace regresar
el curso de la vida para rescatar un amor, destruye barreras
entre el hombre, los animalitos y los árboles para narrar
diálogos imaginarios, hace del cuento de las angustias
un cuento amable de la vida con la caja y las guacharacas.
El vallenato da vida a los espíritus que han resignado
morirse. El vallenato convoca de manera universal a todos los
ciudadanos, carece de sesgo e inconforme con unir la condición
humana también la une con los ríos, las nubes,
las hormigas, el arco iris, las mariposas y las flores.
Es
el vallenato la creatividad de esta tierra que expresa el torrente
de solidaridad de cada uno de sus hijos, es el vallenato la
alegría como exteriorización del orden, como
rebelión contra la violencia, el vallenato nos inspira
una Nación sin exclusiones y sin odios, una Nación
alegre y fraterna semejante a la semana que aquí se
vivirá, la semana que se vive cada vez que la monotonía
es rota por los acordeones. ¡Que viva esta gran tierra
de la patria!".