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FIRMA DEL CONVENIO NACIÓN – BOGOTÁ
PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL TRANSMILENIO
Noviembre 29 de 2002 (Bogotá, Cundinamarca)

Compatriotas:

Bogotá le ha venido dando un ejemplo al país en transformación, en buena administración, en transparencia, en cultura ciudadana. Los colombianos de todas las regiones tenemos que mirar hoy en Bogotá un punto de referencia muy importante de administración local.

La transformación causada por el Transmilenio, es de gran importancia como lo acaba de señalar el señor Alcalde (Antanas Mockus). Es una obra que además de transformar la ciudad, en su momento de ejecución genera muchos empleos directos y más que eso, tonifica de manera general, toda la economía. Además cómo incide en la calidad de vida.

Ahora que escuchaba al señor Alcalde referirse al tema y citar al profesor de la Universidad Nacional, recuerdo cuando inauguramos el Metro de mi ciudad, que conversábamos con sus usuarios y algunos me decían: ‘yo, antes, tenía que tomar el bus hora y media al día, ahora hago ese viaje en 20 minutos, el resto del tiempo lo dedico a la familia’, el otro me decía: ‘estoy estudiando, estoy tomando una materia más en la universidad’. Eso es calidad de vida, transformación del tejido social.

La Nación ha querido forzar la marcha para comprometerse hondamente con Bogotá, a fin de que Bogotá pueda acelerar su transformación.

Estamos en un momento muy difícil de la vida económica de la Nación, un déficit fiscal del 4.2 por ciento (del PIB), un endeudamiento muy alto –el año entrante, de un presupuesto de 67 billones de pesos, tenemos que dedicar a servicio de deuda 27 billones de pesos-, la situación pensional es dramática –las reservas del Seguro Social valen hoy 3.6 billones de pesos y se pueden consumir en dos años-, el desempleo es muy alto, la pobreza, la miseria, pero vamos a salir adelante, que no quepa la menor duda.

El Gobierno tiene tres grandes compromisos: trabajar en el camino de la Seguridad Democrática, trabajar en el camino de la transformación de la política, de la derrota del estado burocrático y trabajar en el camino de la reactivación económica, de las reivindicaciones sociales.

El tema económico y social tiene cinco capítulos: el capítulo del gasto, el capítulo del ingreso, el capítulo de la reforma del Estado, el capítulo de la reactivación económica y el capítulo de la recuperación social.

El tema del transporte masivo une profundamente el capítulo de la reactivación económica con el capítulo de la reivindicación social, pero lo que hoy estamos formalizando tiene que ver con los cinco capítulos de recuperación ¿por qué? La Nación le está entregando unas vigencias futuras a Bogotá, esas vigencias futuras obligan a la Nación en 987 millones de dólares (dólares constantes de hoy), Bogotá utilizará esas vigencias futuras para respaldar sus compromisos de endeudamiento y poder hacer la obra dentro del cronograma que nos ha expresado el señor Alcalde.

Quiere eso decir que, con unos compromisos que la Nación contrae hasta el año 2016, Bogotá hace una obra que, por tarde, deberá estar lista a mediados del 2004. Eso es de gran importancia.

¿En qué van a confiar quienes financien la obra?: van a confiar en la solidez de la economía colombiana, en la capacidad de la Nación de honrar esas vigencias presupuestales futuras, en el buen manejo del Distrito, en su solidez y en su capacidad de pagar ese compromiso que es su contrapartida local, cuya cifra está inserta en este documento.

Eso nos exige buen maneja económico y eso nos exige actuar sobre los otros tres capítulos, sobre el capítulo del control y la reducción del gasto, sobre el capítulo del aumento de los ingresos y sobre el capítulo de la transformación de la estructura administrativa de la Nación.

Quiero poner de ejemplo esto que ha hecho Bogotá y este convenio que se formaliza hoy para las otras ciudades colombianas.

Con su apoyo, señor Alcalde, con el apoyo de sus funcionarios, con el apoyo del Gobernador de Cundinamarca (Álvaro Cruz), con la decisión del señor Alcalde de Soacha, aspiramos que en pocos días le estemos entregando a Soacha, las vigencias presupuestales futuras para que esta obra no vaya, solamente hasta el Apogeo sino hasta Soacha, queremos hacerlo antes de que termine el año.

Ayer hubo una reunión muy importante, ahí estamos en ese proceso y confiamos que rápidamente se despejen unos aspectos que faltan y que se pueda cumplir con esa meta.

Y confiamos cumplirle las vigencias futuras a Cali, a pesar de las dificultades presupuestales, cumplirle a Cali para que tenga su transporte masivo.

El 3 de diciembre tenemos una reunión con los alcaldes de las diferentes ciudades interesadas en el esquema de transporte masivo. Hemos invitado, muy especialmente, al señor alcalde de Barranquilla, al señor alcalde de Cartagena, al señor alcalde de Bucaramanga, a la señora alcaldesa de Pereira, al señor alcalde de Armenia y lo del alcalde de Cali está definido –nos toca es que ellos aceleren la apertura de las licitaciones. Nosotros ya tenemos los compromisos presupuestales y los vamos a honrar- y al alcalde de Medellín.

¿Qué queremos?: que rápidamente esas ciudades empiecen sus sistemas de transporte masivo y que Medellín pueda avanzar a dotar de un sistema de buses articulados de transporte masivo, las áreas de la ciudad y el Valle de Aburrá que no quedaron beneficiadas con el Metro.

Y les hemos propuesto a todos un convenio semejante al que hoy firmamos con Bogotá. Los quiero invitar, desde acá, a los alcaldes y a las autoridades de estas ciudades de la Patria, para que rápidamente podamos formalizar lo que hoy estamos formalizando con Bogotá.

Quiero saludar muy afectuosamente a los funcionarios, operadores de Transmilenio que nos acompañan, es emocionante registrar la calidad de ese servicio, lo que ha significado para Bogotá, quiero agradecer la presencia de los congresistas, de los concejales.

Quiero recordar, muy afectuosamente, a los congresistas que para poder hacer obras buenas como el Transmilenio, necesitamos –también- los otros proyectos. Si no hacemos la reforma tributaria, no podemos pagar esto. Si no adoptamos las normas de reducción de costos del Estado, no podemos pagar esto. Si no hacemos la reforma de la administración no podemos pagar esto.

Es una oportunidad de decirle a los colombianos: ¿qué quieren, burocracia o transmilenios?, ¡es una gran oportunidad!

Déjenme decir una cosa: ¡qué bueno, porque es muy bueno tener interlocutores de la transparencia del alcalde de Bogota!, ¡qué bueno!, lo digo al oído de los congresistas, por supuesto, con todo el respeto. Pero, ¡qué bueno que saquemos esto adelante, lo felicito a todos.

Mil gracias.

 
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