DECLARACIÓN
DEL PRESIDENTE ALVARO URIBE VÉLEZ TRAS ATENTADO EN EL
NOGAL
Febrero
8 de 2003 (Bogotá- Cundinamarca)
El
país sufre nuevamente una terrible arremetida de esto
grupos. Quiero expresar a todos los heridos, a sus familiares
y a los familiares de quienes han fallecido todo nuestro sentimiento
de solidaridad, de dolor.
Quiero
decirle al pueblo de Bogotá, que todos los colombianos
estamos con nuestra capital. Es un momento de mucho dolor, pero
también tiene que ser un momento de mucho compromiso y
de mucho respeto.
Cuando
se tolera el terrorismo, el terrorismo simplemente tiene altibajos
estratégicos pero nunca desaparece. La decisión
que tiene que tomar Colombia es derrotar el terrorismo. Esta
noche llamó nuevamente a la Fuerza Pública y a
la Fiscalía a hacer un gran trabajo y a redoblar esfuerzos.
Ayer
--por unas capturas de la Policía en Bogotá, y
en Cundinamarca esta mañana con otras capturas que incluyen
los terroristas de la bomba de diciembre en contra de residencias
Tequendama--, habíamos tenido motivos de tranquilidad.
Sin embargo, esta noche el terrorismo ha vuelto a hacer un profundo
daño.
Vamos
a redoblar esfuerzos para no capturar a algunos, sino a todos.
Pido nuevamente el apoyo de todos los colombianos y de todos
los bogotanos para que colaboremos con la Fuerza Pública
y a ésta le pido que sea muy receptiva y que tenga la
mejor disposición para recibir información y la
ciudadanía proceda con mucha diligencia y determinación
a informar.
La
señora Ministra de la Defensa y el señor Alcalde
de Bogotá constituyeron, desde el mes de diciembre, un
fondo común para pagar recompensas. Acompañamos
la oferta del señor Alcalde de una recompensa de 500 millones
de pesos para que aquellas personas que den información,
tengan adicionalmente un elemento económico que les ayude
en el evento de tener dificultades económicas.
El
país sigue siendo azotado por estos grupos. Hoy más
que nunca debemos reiterar que con el terrorismo no se puede
jugar. Al terrorismo no se le puede contemplar. A la arrogancia,
a la ceguera del terrorismo no se le puede tener consideración.
El mundo no debe venir a Colombia a pedirnos consideraciones
con el terrorismo.
Necesitamos
que el mundo democrático venga a Colombia a ayudarnos
a derrotar el terrorismo. Necesitamos que así como se
está dando en Naciones Unidas una discusión sobre
el caso Irak, el mundo tome la decisión de ayudar a Colombia.
Necesitamos la tecnología de los países democráticos,
sus recursos técnicos, sus recursos financieros, sus sistemas
de transporte, para que le ayuden a nuestra Fuerza Pública
y a nuestra Fiscalía a derrotar los terroristas.
Esta
tragedia es hija de esa mezcla que es la droga y la violencia,
un nuevo padecimiento del pueblo colombiano. Mientras en muchos
países del mundo toleran el consumo de droga, toleran
el lavado de activos, fabrican insumos químicos que despachan
a Colombia, aquí arman a estos grupos violentos, introducen
tragedias como la que se registra esta noche en las calles de
Bogotá.
Por
favor: que el mundo no siga haciendo de esta tragedia de Colombia,
simplemente una noticia, que tomen decisiones para ayudar a Colombia
de verdad. Sé que los violentos han estado haciendo todos
los esfuerzos para doblegar la férrea conciencia de los
colombianos.
A
pesar del dolor que todos sentimos, a pesar de la magnitud del
dolor de los heridos, de la magnitud del dolor de los familiares
que han fallecido, pido a todos los compatriotas que no cedamos
ante el terrorismo, que no aflojemos en la decisión de
derrotarlo, que fortalezcamos esta noche los resortes morales
de la sociedad de Colombia, que la decisión sea un sola:
sin vacilación a derrotar a los violentos, a capturarlos
pero a todos.
Hay
muy poco que agregar. Este impacto de esta noche es la convocatoria
a la comunidad internacional. Algunos han sido demasiado consecuentes
con el terrorismo colombiano, los reciben en sus países,
les abren todos los canales de comunicación, los reconocen
como legítimos interlocutores y no saben que simplemente
los estimulan a cometer estos crímenes de lesa humanidad
contra el pueblo colombiano.
Por
favor: no más indulgencias, no más complicidad,
no más blandura con el terrorismo, nosotros lo que necesitamos
es derrotarlo. En Colombia tenemos toda la determinación.
El mundo, que ha ayudado a financiarlos con el negocio de la
droga, el mundo que ha ayudado a financiarlo con las instrucciones,
el mundo que les ha guardado su dinero en los bancos internacionales,
ese mundo debe cambiar hoy y ponerse del lado de las autoridades
y del pueblo de Colombia para derrotar el terrorismo.
Me
duele mucho tener que registrar estos hechos, desgarra el alma
esta tragedia. Mis condolencias a este gran pueblo bogotano que
ha sufrido tanto, a todos los compatriotas.
Sé que
tendríamos que ser más eficaces para no evitar
solamente dos o tres carros bombas sino para evitarlos todos.
Tenemos años que los marcan los terroristas, nos acaban
de hacer este daño tan grande pero si persistimos en la
determinación, si persistimos en la acción, si
persistimos a pesar del dolor y el desconcierto se tendrá que
repetir lo que siempre ocurre para bien del pueblo: el delito
hace mucho daño pero no triunfa, el triunfo finalmente
será de la democracia, del ordenamiento jurídico
de la gente de bien.
A
mis compatriotas, en medio del dolor, una voz de ánimo.
Colombia está en un momento único ideal para derrotar
el terrorismo y al mundo no más divagaciones, no más
debate estéril, al mundo democrático he pedido
determinación para que nos ayuden a superar este daño
tan grande que han ayudado a causar.
A
todos, en medio del dolor, un saludo con afecto y al mismo tiempo
una convocatoria para que unida nuestra Policía, nuestro
Ejército, nuestra Fiscalía, nuestras autoridades
civiles, nuestro pueblo con un apoyo que esperamos sea fervoroso,
eficaz y resuelto de la comunidad internacional, emprendamos
el camino definitivo de derrotar el terrorismo. |