INAUGURACIÓN DE TRES NUEVOS EDIFICIOS
DE LA UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE PEREIRA
Enero 29 de 2004 (Pereira – Risaralda)
Compatriotas:
Acudo a este acto con particulares sentimientos.
Déjenme
confesar el primero de ellos: mi devoción por la universidad
pública. Soy hijo de la universidad pública. Ha vivido
la universidad pública en permanente debate. En ocasiones
con resultados ideológicos más adecuados. En ocasiones
con resultados ideológicos que han sido del caso rectificar.
Ha sido la universidad pública colombiana la caja de resonancia
a la cual llegan los problemas sociales de la Nación, el
laboratorio para procesarlos, discutirlos y devolverlos a la sociedad
con sugerencias. ¡Cómo ha contribuido a la ebullición
ideológica del país, el debate permanente de la universidad
pública!
Y da inmenso gusto registrar los logros
de la Universidad Tecnológica
de Pereira: ¡cómo ha crecido en cobertura, como ha
mejorado en calidad, cómo incrementa su productividad! Son
elocuentes las cifras que el Rector acaba de expresarnos y cómo
se ha integrado a la comunidad.
No es hoy un claustro encerrado. Es un
claustro interactuante con la comunidad, como tiene que se la
universidad pública.
Ha hecho un gran salto en cobertura de 4 mil a 7 mil estudiantes,
pero necesitamos que para el año 2006 tenga 10 mil, para
continuar contribuyendo a la revolución educativa.
Quiero expresar mi sentimiento de admiración al Rector. ¡Cómo
se resumen en él condiciones de batallador ideológico,
dialéctico que ajusta sus conceptos al ritmo de los tiempos,
condiciones de académico, condiciones de ejecutor y fundamentalmente
de colombiano comprometido!
Sabemos, Rector, que con todo el equipo
de trabajo que lo acompaña
en esta gran comunidad universitaria, usted le va a entregar al
país más y mejores resultados. Celebro muchísimo
cómo ha venido subiendo la relación entre estudiantes
y profesores de tiempo completo. Usted mismo es consciente que
ahí queda un espacio importante por lograr y lo van a lograr.
Celebro cómo han venido evolucionando también en
recursos propios, que cuando se propuso la tesis de que la universidad
pública tenía que aumentar los recursos propios,
algunos la entendieron en el equivoco de que sería sobre
la base de recargar a los sectores populares en matrícula.
No. Es sobre la base de ofrecer más y mejores servicios
a la comunidad, a los municipios, al sector privado para que eso
también retribuya en posibilidades de conocimiento a la
universidad y en ingresos.
Tiene la universidad que hacer investigación y contribuir
a aplicarla. Hay dos ejemplos en materia de investigación
que no debemos seguir.
En algunas décadas los Estados Unidos hizo investigación
exclusivamente en la universidad, se quedaron las universidades
sin apoyo del sector privado para esa investigación y por
falta de ese apoyo, parte de ese conocimiento se fue afuera de
los Estados Unidos.
En algunas épocas el Japón hizo todo lo contrario:
investigación exclusivamente en el sector privado, prescindiendo
de la universidad y eso produjo un gran atraso en la universidad.
Nosotros necesitamos para la investigación de vanguardia
y para la investigación aplicada, una profunda integración
entre la universidad y la comunidad. Y me parece que la participación
de la Universidad Tecnológica con la comunidad, como lo
acreditan muchas estadísticas, una de ellas el porcentaje
creciente de recursos propios, otra de ellas su contribución
a enormes desafíos de la región, son buenos indicios
de esa integración entre la comunidad y la universidad,
que requerimos para investigar y para aplicar resultados.
Y me parece de la mayor importancia los
esfuerzos que han venido haciendo para mostrar una universidad
más eficaz, con mayor
productividad. Juan Guillermo Angel, quien tanto quiere a la universidad,
me explicaba la lucha que tuvieron que dar para abrir los programas
de educación nocturna. Si quiera dieron esa lucha, lo celebro,
en una Patria con tan baja cobertura universitaria necesitada de
la revolución educativa, estos edificios no pueden dormir,
hay que mantenerlos trabajando las 24 horas. Por eso aplaudo ese
esfuerzo de la Universidad Tecnológica y ojalá se
le recargará la cuenta de energía, Rector, manteniendo
estos bombillos prendidos para el aprendizaje entre las 6 de la
tarde y la 6 de la mañana.
Hoy lo que necesitamos no es pensar en
las horas de descanso, sino fatigarnos más haber si esta Patria puede descansar
y la educación es el gran camino para la igualdad que habrá de
traerle reposo a la Nación. Sigan por esa senda Rector.
Todo lo que podamos ayudar, lo haremos.
Y acudo con otro sentimiento: el de mi
admiración a la
región y a sus gentes. Quiero compartir con ustedes la emoción
de haber presenciado la imposición de la condecoración “Jorge
Roa Martínez” a Luis Carlos Villegas Echeverri, un
singular servidor de la Patria, ajeno a las atracciones del poder.
En Luis Carlos Villegas hemos encontrado,
fundamentalmente, vocación
de servicio, ajeno al delirio del protagonismo. ¡Qué bueno
que esta región de inteligencia, de capacidad ejecutiva,
siga produciendo líderes de las condiciones de Luis Carlos
Villegas! ¡Qué bueno ver en Pereira al presidente
de la Asociación Nacional de Industriales recibiendo la
máxima condecoración de la universidad pública! ¡Qué bueno
constatar que hemos venido superando el antagonismo entre la universidad
pública y la empresa privada, que la universidad pública
entiende hoy su función frente a la empresa privada y la
empresa privada su compromiso con la universidad pública! ¡Qué bueno
que los colombianos podamos contar con pereiranos como Luis Carlos
Villegas Echeverri!
Y quiero felicitar a todos quienes participaron
en esta obra. No he dejado de defender la acertada concepción del Presidente
Andrés Pastrana, cuando se definió el mecanismo del
FOREC. Una manera ágil para que confluyeran recursos nacionales
e internacionales públicos y privados y una manera eficiente
para aplicarlos. El problema fue muy grande, antes la contradicción
fue pequeña.
Cuando visitaba, por esas épocas, esta tierra bendita de
la Patria, les decía en Armenia: es que el problema que
se presentó aquí ustedes no lo han medido todavía
en su gravedad, porque ustedes son los actores que lo han vivido.
Es un problema de magnitud infinita, que dada su profundidad se
ha venido resolviendo con menos traumas de los que pudieron presentarse
y ello gracias al FOREC. Y gracias a que lo dirigieron manos pulcras,
como las manos de Luis Carlos Villegas.
Y acudo también a felicitar a todos quienes intervinieron
en la obra: ingenieros, consultores, trabajadores, comunidad universitaria.
Y a decirles, en nombre de la Ministra de Educación (Cecilia
María Vélez) que estamos atentos a seguir apoyando
la universidad con todo nuestro afecto para que la universidad
siga contribuyendo a esta revolución educativa.
A ratos me he dedicado a pensar cómo nos relacionamos los
habitantes de esta región integrada por el Quindío,
buena parte del Tolima, Caldas, Risaralda, Antioquia, buena parte
del Valle del Cauca. Y he dicho que los risaraldenses frente a
nosotros los antioqueños son unos hermanos con más
agudeza pragmática. Por eso hoy, en presencia de las autoridades
locales y regionales, de los parlamentarios que tanto y permanente
esfuerzo han hecho en la gestión de los intereses de la
región, no puedo dejar de referirme a temas acuciantes.
Celebro, en primer lugar, que se haya logrado
un acuerdo con las autoridades de Dosquebradas para darle vía libre al sistema
de transporte masivo. El Gobierno Nacional reitera todo su compromiso
de aportar el 70 por ciento del valor de la obra y aspiro que en
los próximos días el Concejo de Dosquebradas haya
aprobado ese acuerdo para poder entrar a abrir las licitaciones
y a ejecutar la obra.
Sé la preocupación de ustedes, que es la nuestra,
por las dificultades y obstáculos de la doble calzada cafetera.
Con la Directora de INVIAS (Alicia Naranjo) y el Director del Instituto
de Concesiones hemos venido trabajando y encontramos inicialmente,
un problema de gran magnitud por la diferencia entre los ingresos
proyectados y los ingresos realmente percibidos por los concesionarios.
Hemos estado trabajando permanentemente con los concesionarios
y hemos llegado a unas conclusiones que quiero compartir con ustedes
y comprometerme con ellas en Pereira. Vamos a hacer todos mayores
esfuerzos, empezando por el Gobierno Nacional.
¿Qué esfuerzo adicional hace el Gobierno Nacional?:
primero, se compromete para entregar el peaje nacional de La Manuela
en la salida de Manizales a La Pintada, cuyos recursos percibe
hoy el Instituto Nacional de Vías. El Gobierno Nacional
lo cede a la concesión para ayudar a cofinanciar la concesión.
Segundo, en la misma dirección, el Gobierno Nacional cede
el peaje de Corozal en la vía de Armenia al Valle del Cauca,
en la carretera del Alambrado. Esos recursos que hoy los percibe
INVÍAS, quedarán cedidos a esta vía, a la
doble calzada cafetera. Hasta allí estimamos que hay una
cesión de 11 ó 12 mil millones (de pesos) al año
y se cede durante todo el tiempo que se requiera para el buen suceso
de la concesión.
Tercero, hemos tomado la decisión de aplazar la iniciación
de las obras de la concesión entre Cerritos y la Victoria
por 12 meses. El proceso licitatorio continuará pero se
aplazará la iniciación de las obras por 12 meses
y durante esos 12 meses, ceder los ingresos derivados del peaje
de Cerritos a la doble calzada cafetera, pero con destinación
específica a aplicar esos ingresos en la variante sur – sur
de Pereira.
Pero aquí vienen unas ayuditas de ustedes. Antes de que
me llame el Gobernador del Valle del Cauca, necesito que el Gobernador
de Risaralda y el Gobernador de Caldas lo llamen y le digan que
se quede tranquilito, que la doble calzada Cerritos – La
Victoria la vamos a hacer, que simplemente le vamos a quitar la
platica de ese peaje 12 meses para traerla a una necesidad bien
urgente que es la vía sur - sur en Pereira. Ustedes me lo
cuadran.
Y segundo, este es un Gobierno que tiene
muchas dificultades fiscales, que nos vamos a quejar, hay que
estar resolviéndolas. Mi
Dios sabe como ajusta las ecuaciones, que tal que a uno con estas
ganas le hubiera dado plata a borbotones. Ahí nos ha tocado
gota a gota, pero hay vamos. Me tienen que ayudar en esto y por
eso celebro que nos podamos reunir ahora con el Gobernador de Caldas,
el Alcalde de Chinchiná, ya hablé con el Alcalde
de Manizales y me van a ayudar el Alcalde de Pereira y el Gobernador
de Risaralda.
Necesitamos una ayudita en La Siria, es
que todo el tráfico
se esta yendo por allá y es imposible cerrar financieramente
esa concesión si no hay una ayudita. Entonces le vamos a
pedir a la comunidad un sacrificio, un esfuerzo, que nos ayuden
allí con un peaje del cual quedarán excluidos aquellos
ciudadanos que habitualmente por razones laborales se transportan
entre Palestina – Chinchiná – Manizales y viceversa.
A ellos los excluimos.
Eso representa, más o menos, 500 a 700 vehículos
diarios, pero ayúdenos con eso porque hemos hecho un gran
esfuerzo. El Instituto Nacional de Vías no esta hoy bien
financiado por todas las dificultades de este Gobierno, desprenderse
de esos peajes que aporta le implica buscar compensaciones por
otros lados y necesitamos adelantar estas obras.
Creo que con eso vamos a poder ver un avance
menos despacioso de la obra. Quisiéramos verlo con mayor
celeridad, seguimos atentos a eso. Por lo menos estas decisiones,
ahora, ayudan a ver
como le vamos respondiendo a esta gran tierra.
Rector, querida comunidad universitaria, a todos
muchas felicitaciones. Gracias porque ustedes hacen grande a Colombia.
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