XXIII CONGRESO NACIONAL DE FEDELONJAS
Julio 30 de 2004 (Neiva – Huila)
Compatriotas:
Me agrada mucho podamos celebrar este congreso en Neiva. Felicito
a Fedelonjas por escoger esta gran ciudad de la Patria, maltratada
durante tantos años, para que albergara este congreso. Qué buen
homenaje, qué buen gesto de solidaridad con el pueblo del
Huila.
Éste es un pueblo laborioso, de las mejores costumbres,
maltratado por la acción de los violentos, pero que ha demostrado
una tenacidad, una capacidad de superar dificultades, que lo hacen,
ante los ojos de los colombianos, un pueblo superior, como lo reconoce
hoy Fedelonjas.
Después de la intervención del doctor Medina, amable,
nos obliga a pellizcarnos. Hemos escuchado dos intervenciones que
compendian toda la materia: la del doctor Mutis y la de la Ministra
(de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Sandra Suárez).
Poco podría agregar yo, simplemente reiterarles toda la
voluntad del Gobierno para que este sector sostenga el crecimiento
donde lo ha emprendido y crezca donde todavía no está creciendo.
Yo no creo que una economía se pueda sostener solamente
en la construcción, pero tampoco creo que una economía
pueda crecer sostenidamente sin la construcción. Cuando
crece basada solamente en la construcción, se produce un
fenómeno de burbuja y después siempre llega una crisis
porque los recursos fortuitos, de origen lícito o ilícito,
que produce la burbuja, se agotan. Pero cuando está ausente
la construcción, la economía no es capaz de producir
suficientes recursos, especialmente para aumentar el consumo, para
tonificar la demanda y así garantizar un proceso más
sostenido y más vigoroso de crecimiento de la economía.
Creo que es muy importante cimentar esto en la mente de los colombianos
para el debate. El resto de la economía necesita de la construcción
como la construcción necesita el resto de la economía.
Diría que, en nuestra política, ese debate quedó superado.
Cuando nosotros fuimos a formular el plan de desarrollo, no les
preguntamos qué es primero: exportar o construir. Necesitamos
que ambos vayan de primero.
Nosotros creemos que esos debates condujeron a escoger, muchas
veces caprichosamente, un sector sobre otro y hacer daño
a la larga. Creo que hay dos cosas que nos ayudan a proyectar un
crecimiento de la economía elevado y sostenido: la confianza
inversionista y que esa economía crezca sustentada en todos
los sectores. Por eso es que hay que hacer un esfuerzo para mantener
un crecimiento de la construcción y crecerla donde todavía
no crece. Hay que mantener un crecimiento en la inversión
industrial. Hay que mirar cómo crecemos más en el área
de las exportaciones. Hay que recuperar plenamente el campo. Hay
que avanzar en el sector de los servicios.
Quería, pues, decirles, que veo necesario sustentar el
crecimiento de la economía para una visión de crecimiento
sostenido y fuerte en el largo plazo en varios sectores, donde
la construcción juega un papel de primerísima importancia.
De los temas que han tratado aquí, me parece importante
anotar lo siguiente: si bien el Gobierno se ha propuesto, primero
pagar las vigencias y los compromisos presupuestales que se heredaron
en la materia, y que nos pareció bien que el anterior Gobierno
hubiera hecho uso de esas herramientas porque la construcción
también juega un papel anticíclico en las crisis.
Y es legítimo buscar anticipar proyectos de construcción,
así se tengan que pagar en el futuro. Pero es responsable
el Gobierno que llega pagarlos oportunamente.
Eso nos llevó a invertir una cuantiosa suma de recursos
de los presupuestos de este Gobierno en pagar subsidios comprometidos
en el pasado. Pero qué bueno que se hayan pagado. Qué bueno
que, en medio de las dificultades que reconozco… Yo creo
que la política está bien concebida. No se ha improvisado.
Yo no digo que ‘bien concebida’ por dogma. Si hay fallas,
las corregimos. Creo que está bien concebida porque se ha
discutido mucho, porque ha sido el producto de mirarle todos los
eslabones y de ver cómo se ajusta el uno y se ajusta el
otro. Yo creo que la política está bien concebida,
todavía faltan resultados en áreas.
Por ejemplo, el Gobierno se comprometió a entregar en vivienda
social 400 mil. Y vamos todavía lejos de esa meta. O sea
que tenemos que acelerar muchísimo la ejecución.
Diría que tenemos una buena concepción de política,
un atraso en el cumplimiento de metas (en el caso de vivienda social),
una necesidad de acelerar la ejecución. Pero tenemos que
tener en cuenta que nos pusimos al día, que honramos unos
compromisos que, en nombre de la Nación, adquirió el
Gobierno anterior y que eso era necesario para darle credibilidad
a la política.
El segundo punto importante es que uno de los cambios de la política
consiste en lo que la Ministra y la Viceministra han llamado ‘un
estímulo a la demanda efectiva.’ Esto es: cuando la
Ministra nos decía ahora que llegamos a tener 140 mil millones
en subsidios que no se habían ejecutado. Una cosa es que
el Gobierno los deba. Lo que se debía, lo pagamos. Creo
que estamos al día. Otra cosa es que subsidios adjudicados,
los adjudicatarios no llenaban los requisitos. Y al no llegar los
requisitos, simplemente aparecía adjudicado el subsidio,
por supuesto, no desarrollado el proyecto, no beneficiado el adjudicatario,
no pagado el subsidio.
Creo que el correctivo es bueno porque el correctivo apunta a
que el adjudicatario de subsidios reúna los requisitos para
poder hacer efectivo el subsidio. De lo contrario, vamos a tener
que seguir anunciando grandes cantidades de subsidios y muy poca
ejecución porque los beneficiarios no reúnen los
requisitos.
Se ha venido haciendo un esfuerzo allí en dos sentidos.
Primero, para que el problema no se vuelva a repetir. Y segundo,
para resolver el problema que se había acumulado en el pasado.
De los 140 mil millones, vamos hoy en 88 mil que falta desembolsar
(de subsidios adjudicados en el pasado y que todavía no
se habían reunido los requisitos por parte de los adjudicatarios.
Ese es otro punto importante.
Pero también tenemos que utilizar vigencias futuras, lo
digo con toda honradez. Este año, el Ministerio va a ejecutar
la apropiación inicial y una vigencia de 120 mil millones
y una vigencia futura de 111 mil para acelerar el proceso. Eso
nos permitirá pagar los subsidios del año entrante
el año entrante. Pero para poder pagarlos el año
entrante cuando esté vigente el Presupuesto 2005, anticipar
el proceso con el respaldo de la vigencia futura. Y creemos que
eso nos va a ayudar a imprimirle dinámica al proceso.
La señora Ministra omitió el tema de mejoramiento
de vivienda rural. El Gobierno ejecutó el año pasado
30 mil millones. El Presupuesto de este año es de 30 mil
millones. Entiendo que ya el Banco Agrario hizo las adjudicaciones,
pero nos hemos comprometido, y creo que ese compromiso lo asumimos
en un consejo comunitario aquí en el Huila, que tendríamos
que adicionarle al Presupuesto otros 30 mil millones para el mejoramiento
de vivienda rural. Con la ayuda de Dios, lo vamos a hacer. Yo he
estado pendiente con el Ministerio de Hacienda, casi diciéndolos: ‘sacrifiquen
cualquier adición presupuestal menos los 30 mil millones
para el mejoramiento de vivienda rural.’ Si eso lo logramos,
vamos a pasar de un proceso anual de mejoramiento de vivienda rural
de 30 mil millones a otro de 70 mil. Y eso hay que lograrlo este
año. Y con la ayuda de Dios, repetirlo el año entrante.
Este país lo necesita enormemente.
La violencia no es el único factor de desplazamiento. Y
en la medida en que la superamos, incidamos en el desplazamiento.
Cuando la agricultura no es negocio, cuando no hay servicios en
el campo, cuando no hay posibilidades de acceso a la educación,
cuando no hay esperanza de tener una vivienda digna en el campo,
se producen esos fenómenos de desplazamiento que en otros
períodos históricos también abundaron, que
fue una expulsión del campesinado hacia las grandes ciudades
y que lo llamábamos ‘migraciones del campo a la ciudad’ y
que, en algunas ciudades, han creado tantos problemas para los
migrantes, para las autoridades, para la economía en general.
Tenemos, pues, ese compromiso de los 70 mil millones de mejoramiento
de vivienda en el campo.
El país tiene que dar ahora, que empiezan las discusiones
tributarias en el Congreso, y que empieza la discusión del
Presupuesto, un debate: el debate sobre las exenciones tributarias.
Yo le decía ayer en un diálogo informal al señor
Contralor: ‘vamos a dividirlas en las exenciones nuevas y
en las viejas.’ Este Gobierno ha aprobado unas exenciones
para actividades que no sería posible desarrollar si no
hay ese estímulo tributario. Por ejemplo, para el alcohol
carburante.
El Gobernador, que fue Ministro de Agricultura, sabe que sin esa
exención es imposible producir alcohol carburante. ¿Cuánto
nos va a ayudar el año entrante contar con las primeras
plantas que se instalan gracias a esa exención y a que hay
confianza inversionista en el país y que van a destinar
un millón de litros al día?
Una exención a la hotelería. En el Banco Mundial
uno encuentra literatura para todo, para sostener la tesis de que
esos estímulos son útiles o la contraria, de que
no se necesita. Pero la práctica es compleja.
Uno va a la República Dominicana y toda esa infraestructura
hotelera la han hecho con estímulos. Va uno a Cuba y encuentra
que el Gobierno cubano ha hecho grandes inversiones en infraestructura
de hoteles y llama operadores internacionales y les da todas las
garantías y las exenciones hasta que paguen la inversión.
Y una vez han pagado la inversión (esto que les voy a decir
no es para que se me vayan para Cuba, que hay que seguir invirtiendo
aquí), les dice: ‘ustedes, por todo, no van a pagar
sino el 30 por ciento.’
Entonces miren, el Gobierno invierte en infraestructura. Muchas
veces no solamente en el lote, en las áreas adyacentes,
en las vías de comunicación en los servicios públicos,
sino en la construcción del edificio. Llama a la operadora
y le dice: ‘usted tiene un estímulo tributario. Usted
no me pague impuestos hasta que no recupere la inversión’. ¿Y
después qué le cobra? Por todo, un 30 por ciento.
Cuando uno ve el caso de Costa Rica, el caso de República
Dominicana, el caso de Cuba, y conversa con sus compatriotas, llega
a la conclusión de que hay que dar ese estímulo tributario.
Yo creo mucho en esa recuperación y, en su defecto, sobre
la construcción.
Quería llamar la atención de ustedes. Están
ya formando el embrioncito alrededor de cien proyectos hoteleros
en el país. Y unos ya empezaron ejecución. Eso es
bien importante. Y ese estímulo tributario ayuda muchísimo.
Yo creo que eso va a tener una primera incidencia sobre la construcción
de gran importancia.
Otras exenciones. No me voy a referir a ellas, sino a entrar directamente
a las que atañen a ustedes. A mí me parece que lo
que hizo el Gobierno anterior con la posibilidad de que la retención
en la fuente se aplicara a cuentas para vivienda es muy buena.
Este Gobierno no dudó ni en reconocer que era muy bueno
ni en mantenerlo. Alguien dice: ‘pero es que no le ayuda
a los pobres, eso solamente lo utiliza la clase media alta y la
clase alta.’ Pero, ¿cuánto ayuda a los pobres
a activar la construcción en esos segmentos? Que es una
construcción demandante de una gran variedad de materias
primas. Una construcción de mucho valor agregado, una construcción
bastante generadora de empleo, por ese lado es que hay que mirar
el beneficio de esa exención a los sectores mas pobres de
la nación. Aquí la hemos mantenido, quiero reiterar
ante ustedes la voluntad de mantenerla.
La exención a los materiales del iba, los materiales de
construcción de vías, hay que mantenerla. Es que
es muy importante revisar este tema porque muchas veces se habla,
no resuelvan el problema tributario eliminando las exenciones,
entonces vamos a tener que hacer pedagogía en el país,
mirando una a una estas exenciones.
El tema del arrendamiento, de la inversión en vivienda
para dar en arrendamiento. En buena hora el congreso nos aprobó la
exención, sin exención eso no arranca. Es que uno
no puede olvidar la historia de su patria. Doctor Mutis, usted
decía ahora que, ¿cuántos arrendatarios hay
en Colombia? 12 millones de arrendatarios, esa es una cifra enorme.
Yo no se como proporción del total poblacional como se compara
con estándares internacionales.
Le daba a uno la impresión que en Colombia había
mucho temor a invertir para dar en arrendamiento, menos en bodegas
y en locales comerciales, más en viviendas. Yo venia observando
en el país hacía muchos años un pánico
inversionista para invertir en vivienda para dar en arrendamiento,
no se la evidencia de ustedes si confirma o rectifica esa aseveración.
Teníamos ese pánico, hemos dado dos pasos para superar
ese pánico: el estatuto de arrendamientos, acompañado
con unas normas más ágiles que también aprobamos
para el proceso ejecutivo hipotecario y el segundo paso, la exención
tributaria. Ahora lo que necesitamos es que eso se vea en proyectos.
Otro tema allí bien importante es la deducción del
30 por ciento al conjunto general de la economía que aprobamos
en diciembre del el año pasado, que dice la norma: cualquier
inversión generadora de renta es deducible en un 30 por
ciento. Cualquier inversión generadora de renta.
Yo la defendí mucho por lo siguiente: nosotros tenemos
un país para los que pagan impuestos muy grabado y este
gobierno ha grabado mucho a los que pagan impuestos y entonces
uno tiene que reconocer esa realidad, para ser competitivos y que
la gente invierta, hay que buscar alternativas, por eso hemos escogido
la alternativa de estímulos orientados al crecimiento.
Yo diría que tenemos una tributación hoy alta para
quien no quiera crecer y con estímulos para quien quiera
crecer. La deducción del 30% es muy buena, si yo tengo una
fabriquita de helados allá en Garzón, que generó cien
pesos de utilidad, compré una maquina que vale 60, deduzco
el 30, deduzco 18, entonces no voy a pagar impuestos sobre 100
sino sobre 82, pero lo mas importante, como los beneficia a ustedes,
en todo lo que sea actividad generadora de renta del contribuyente
se aplica. Un almacén de cadena amplia la construcción,
es inversión generadora de renta, puede deducir el 30 por
ciento. Una bodega comercial, el contribuyente puede deducir el
30 por ciento del valor de la inversión.
No se si habían reflexionado sobre ese tema, pero es un
tema que va a ayudar mucho en todos los sectores de la economía.
En el sector inmobiliario si que esta llamado a ayudar.
El Ministerio de Hacienda calcula que eso nos puede costar 400
mil millones el año entrante, pero ¿cuánto
va a beneficiar al país? Uno se pregunta ¿en ausencia
de este estímulo con las tazas de contribución tan
altas y harían esas inversiones? Yo creo que es sembrar
una gran cosecha porque allí viene formación de capital,
allí viene generación de empleo, allí viene
expansión de la economía y después viene masa
contribuyente, ingreso que contribuye, finalmente se beneficia
el fisco.
Entonces yo creo que es bien importante considerar en el sector
inmobiliario el esquema tributario como lo hemos venido orientando.
Yo quisiera oír opiniones de ustedes sobre el tema de el
estimulo a la vivienda, a la inversión en vivienda para
dar en arrendamiento, eso lo aprobamos en junio del año
pasado, se que hace poco salieron nuevas reglamentaciones, no fue
fácil, pero yo estaría hoy con la ilusión
de ver que rápidamente vamos a tener proyectos. Que pasamos
de la teoría a la práctica. Quisiera oír algunas
opiniones de ustedes sobre este tema. No se que pudiera hacer el
gobierno para canalizar más hacia la construcción
el ahorro de los colombianos en el exterior.
Lo que fundamentalmente se hizo para facilitar eso ahorros y esos
envíos de manera general, fue eliminar el impuesto de giros,
decisiones oficiales propiamente para canalizar esos recursos a
la construcción no hay, pero veo que algunos bancos ya vienen
ofreciendo la posibilidad de que con las colocaciones allá se
respaldan los créditos de acá, lo cual puede ayudar,
pero no tengo claridad que más pudiéramos hacer en
esa materia.
Hay una serie de puntos que a tocado el doctor Sergio, que ha
tocado la Ministra, la Viceministra los ha estado acompañando,
yo no quisiera abundar en eso, quisiera mirar inicialmente inquietudes
de ustedes sobre esto. Preguntarles ¿si vamos a tener inversiones
en vivienda social para dar en arrendamiento?
Preguntarles qué podría hacer el gobierno, yo no
lo tengo claro, para estimular que los colombianos que ahorran
en el extranjero inviertan en vivienda en Colombia. Si me ayudaran
con algunos comentarios sobre esos dos puntos.
Muchas gracias.
|