ENCUENTRO
FAMILIAS EN ACCIÓN
DE CÓRDOBA Y EL BAJO CAUCA ANTIOQUEÑO
Junio 14 de 2004 (Caucasia – Antioquia)
Compatriotas:
Quiero dar a todos ustedes un saludo lleno, lleno de afecto. Cómo
me gusta poder saludarlos en la mañana de este sábado
para que examinemos la marcha del programa Familias en Acción.
En toda la Patria hoy, hay 342 mil Familias en Acción. Ese
programa le cuesta al Gobierno Nacional 37 mil millones de pesos
cada dos meses. Hemos hecho el esfuerzo de mejorar el cumplimiento
en el pago. Quiero decirles a ustedes que, con la ayuda de Dios,
el programa se mantendrá durante todo este Gobierno, así se
agoten los recursos de crédito.
El programa empezó con un crédito internacional,
pero la decisión del Gobierno es mantener el programa aun
sin los recursos de crédito, porque es un programa ampliamente
benéfico para el pueblo colombiano.
Quiero agradecer a todos ustedes, a las mamás, a los papás,
a los niñitos, por haber confiado en el programa, por estar
contribuyendo a que los niñitos colombianos puedan estudiar,
nutrirse mejor.
Quiero agradecer al Congreso de la República, aquí representado
por los senadores Luis Alfredo Ramos, Humberto Builes, Luis Guillermo
Vélez Trujillo y por la honorable representante Rocío
Arias, el apoyo que nos han dado para aprobar los recursos presupuestales.
Ellos me han dicho, me han pedido que les comunique a ustedes que
tienen toda la voluntad de aprobar las acciones del presupuesto
para que el Gobierno Nacional pueda seguir pagando a ustedes este
subsidio. Un aplauso para ellos.
Rocío está muy enferma por un accidente, pero no
se perdió de una venida a su Caucasia y aquí está con
nosotros.
Creo que es importante lo siguiente: que escuchemos al subdirector
de la Red de Solidaridad para que nos explique los alcances del
programa. El programa se justifica en la medida en que mejore la
nutrición de los niños, en la medida en que mejore
la asistencia escolar de los niños, en la medida en que
mejore el consumo de alimentos en los hogares.
El Gobierno Nacional está midiendo todo esto y yo le voy
a pedir a nuestro delegado de la Red de Solidaridad que nos informe
sobre las evaluaciones que se han venido haciendo sobre el programa.
Le doy la palabra a Diego Molano.
Traigo para ustedes el saludo de dos personas. El saludo de la
Ministra del Medio Ambiente (Sandra Suárez), quien era al
principio de este Gobierno la directora del programa y trabajó tanto
con ustedes. En nombre de la Ministra, un saludo muy afectuoso.
Y también un saludo de Luis Alfonso Hoyos, director de la
Red de Solidaridad que, por compromisos diferentes, no pude acompañarnos
hoy.
Pero el doctor Molano les va a explicar a ustedes y, desde Caucasia,
al país, el avance de Familias en Acción y los resultados
que se empiezan a obtener. Recuerden, graben esto en la memoria:
342 mil familias beneficiadas, cuesta 37 mil millones cada dos
meses, el compromiso de este Gobierno es mantenerlo durante todo
su período, así se agote el crédito internacional.
Para esto, la plata, de alguna parte tiene que salir, pero tiene
que aparecer. Y esa platica se le da a las mamás básicamente
para que la platica no se vaya en licor. La platica se tiene que
gastar en nutrición y en pago de gastos educativos.
Levanten la mano las mamás que están recibiendo la
platica. Ahora bajen la mano.
Levanten la mano los maridos que vinieron a acompañarlas.
Poquitos, poquitos. Pero por allí hubo un patriota. ¿Usted
vino a acompañar a la señora? Bueno, yo veo que esos
maridos se han domesticado. ¿Dónde los dejaron hoy? ¿Trabajando?
Esto tiene un gran mensaje. Es que hay que reconocer en la mujer
colombiana toda la responsabilidad que ella tiene por la educación
y por la nutrición de sus hijitos y entregar a la mujer
colombiana este subsidio, en la seguridad de que cuando la mujer
colombiana recibe este subsidio, la platica se siente en mejoramiento
de la educación y en mejoramiento de la nutrición.
Les voy a hacer una pregunta: Lo que hace que están recibiendo
este subsidio, ¿los maridos están más juiciosos
o menos juiciosos? Levanten la mano las que creen que los maridos
están más juiciosos. Y las que creen que los marido
están menos juiciosos.
Ganaron los de más juiciosos. Es que tiene otro mensaje:
cuando el esposo observa que en la casa hay menos dificultades
para la nutrición de los niñitos y menos para el
estudio, el esposo se contagia de ese ambiente más positivo
en la familia. Si ha sido juicioso, continúa juicioso y
con más ánimo. Y en muchos casos, el que ha estado
desjuiciado, siente que la señora y los hijitos le dan un
ejemplo y entonces se ajuicia. Ese es otro efecto del programa.
Pero ahora sí, escuchamos al doctor Molano, subdirector
de la Red de Solidaridad.
Muchas gracias.
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