Actualizada 10:00

AÑO 2004

Enero

Febrero

Marzo

Abril

Mayo

Junio

Julio

Agosto

Septiembre

Octubre

Noviembre

Diciembre

 

CONFERENCIA EN EL FORO NUEVA ECONOMÍA
Mayo 21 de 2004 (Madrid – España)

Compatriotas:

Había podido acudir a este foro primero en mi condición de candidato a la Presidencia de Colombia y después como Presidente electo. En la segunda oportunidad pudimos examinar de manera concreta y puntual las expectativas, las angustias, los obstáculos y un programa trazado para recuperar y acentuar confianza en Colombia.

Esa es la palabra clave, confianza. Confianza para las actuales inversionistas, confianza para nuevos inversionistas, confianza para los trabajadores, confianza para los estudiantes, confianza para todos aquellos que algo tienen que ver con Colombia.

Y cómo me complace hoy, cuando estamos completando 22 meses de Gobierno, reunirme con ustedes que, como lo ha dicho el Vicepresidente (de la República, Francisco Santos), representan la comunidad inversionista más importante en Colombia. Quiero, en primer lugar, expresar toda nuestra gratitud a España, por la confianza en Colombia, a sus inversionistas por aportarle a Colombia, a la democracia que ustedes han construido en este gran país, por ese permanente apoyo a Colombia. Ha sido una muy constructiva relación, hemos recibido un apoyo permanente, un apoyo que se ha dado en una concepción de Estado a Estado sin altibajos, con una solidaridad plenamente expresada.

Para consolidar la confianza en Colombia, hemos venido trabajando tres ejes: la seguridad, la transparencia y la reactivación económica y social.

¿Por qué nuestra política de seguridad la denominamos democrática? Por varias razones: el Continente fue recorrido hace algunas décadas por la doctrina de la seguridad nacional, se violaban los derechos humanos se daba la espalda a las aspiraciones democráticas, se utilizaba la seguridad para enseñorear dictaduras y para perseguir a los disidentes. El concepto nuestro implica todo lo contrario, por eso se denomina democrático. Nuestra propuesta de seguridad, en plena ejecución, es para apoyar y engrandecer la democracia, es para servir al pluralismo, es para que sienta efectiva protección contra los violentos aquel que ejerce la política con ideas afines del Gobierno y aquel que la ejerce con la oposición al Gobierno. Seguridad para proteger por igual al empresario que al trabajador, seguridad para todos los colombianos.

Cuando estamos ya con un Gobierno avanzado, el concepto de seguridad no puede ser un concepto abstracto, tiene que mostrar coherencia con la práctica, la mejor muestra de coherencia es lo que ocurrió el año pasado en dos certámenes electorales de gran importancia: por un lado la elección de las autoridades territoriales y por otro la convocatoria de los colombianos a un referendo, a un ejercicio de democracia directa que solamente había tenido un antecedente en el año de 1957 – 1958, en esos dos certámenes electorales del año pasado, abstencionistas opositores estuvieron plenamente rodeados de garantías. Gracias a la Seguridad Democrática, Colombia sintió que en lo político estábamos pasando de las garantías meramente retóricas y abstractas a las garantías efectivas, a aquellas que se otorgan y se sienten en los momentos fundamentales de la democracia.

Por supuesto que mi tesis y mi acción de Gobierno tienen controversia y entre la masa de la controversia tiene mucho peso algún sector que durante años le jugo a que el terrorismo avanzara en Colombia, a que el terrorismo pudiera apoderarse de Colombia.

Esa Seguridad Democrática nos ha llevado a buscar el aislamiento de los terroristas, a desfinanciarlos, para desfinanciarlos es fundamental la lucha contra la droga, el país llego a tener 160 mil hectáreas sembradas en drogas ilícitas, hemos hecho un inmenso esfuerzo, el 31 de diciembre todavía teníamos 86 mil, este año hemos fumigado 60 mil, pero se dan procesos de recuperación que nos exigen seguir con toda la persistencia.

Hemos mejorado el control territorial 174 cabeceras urbanas de municipalidades no contaban con presencia de la Fuerza Pública, hoy la tienen. Hemos avanzado bastante en ese control territorial y hemos construido confianza ciudadana en las instituciones, para que los colombianos no tengan que ser esclavos del narcotráfico, esclavos de la guerrilla o esclavos de los mal llamados paramilitares.

Esa Patria colombiana, de casi millón 200 mil kilómetros cuadrados, en selva cuenta aún con 578 mil kilómetros, la sola extensión de la selva colombiana, supera la extensión territorial de Francia y a pesar del daño de la droga que había alcanzado a destruir un millón 700 mil hectáreas de selva tropical, una razón bien importante para derrotar la droga en Colombia, porque Colombia tiene una importantísima inserción a la selva amazónica, que de no derrotar la droga en Colombia, la droga puede derrotar en pocas décadas todo el ecosistema amazónico.

A pesar de todo lo que ha ocurrido, hemos podido mantener esa reserva tan importante para la humanidad que es nuestra selva, que se convierte también en un refugio de la retaguardia terrorista que estamos combatiendo como nunca antes que se había combatido .

Lo primero que quiero pedir a la comunidad internacional es que no se tenga consideración alguna con los violentos colombianos, cuando leo la legislación española, cuando leo la legislación alemana, cuando leo la legislación inglesa, ustedes tienen una coincidencia: señalan como terrositas a aquel que apela al uso o a la simple amenaza de violencia invocando cualquier pretexto, invocando cualquier pretexto, que puede ser una razón ideológica, política, religiosa y el supuesto balance para ese señalamiento, es que ustedes tienen unas democracias operantes. Cuando no hay terrorismo de Estado, cuando la democracia es operante el único calificativo que se puede dar a los violentos que atentan contra las instituciones y la ciudadanía es el de terroristas.

Una democracia transparente, dinámica, garantista, pluralista como la colombiana, merece lo mismo que merecen las democracias española, inglesa, alemana, que a todos aquellos que atentan contra esas instituciones y contra esa ciudadanía en forma violenta, no les quepa sino un calificativo el de terroristas.

Y preguntaran ustedes: ‘¿hay posibilidades de negociación?’ Por supuesto, pero a partir del cese de hostilidades, a partir de que cesen las acciones terroristas, a partir de que haya una expresión de buena fe, porque con algunos de estos grupos los intentos de negociación que se hicieron en el pasado, solo condujeron a que ellos se fortalecieran en su propósito de derrocar las instituciones democráticas.

Y esa tarea, de fortalecimiento democrático, de lucha contra el terrorismo, la estamos acompañando de la reactivación económica, de la reactivación social. Nos hemos propuesto en el tema de la reactivación económica, consolidar la estabilidad macroeconómica, darle claridad y transparencia y sostenibilidad a las reglas de juego. En la estabilidad macroeconómica, es fundamental el tema fiscal, ya el Vicepresidente, en la generosa introducción, refería a algunas de las cifras.

Mi Gobierno empieza el 7 de agosto de 2002 con un déficit fiscal del 4.2 por ciento, en diciembre de 2003, lo habíamos reducido a 2.8 por ciento y este año estamos trabajando, para reducirlo a 2.5 por ciento.

Mi Gobierno empieza en medio de una espiral de crecimiento al endeudamiento, que había conducido a Colombia en los últimos años a pasar de un endeudamiento del 26 por ciento del producto al 54 por ciento. Frenamos la espiral de asenso del endeudamiento, ya lo hemos reducido en algunos puntos, y esperamos que se pueda ver en el futuro la tendencia decadente, no solo como proporción del producto, sino también por su peso en el presupuesto anual.

Para lograrlo hemos pedido esfuerzos adicionales a los colombianos en tributación. Quiero decirles, que la tributación que hemos logrado es costosa para quien no quiera crecer, pero enormemente estimulante para quien quiera crecer.

Por ejemplo este año, estamos estrenando una deducción del 30 por ciento a todas las inversiones del sector privado generadoras de renta, hemos tomado decisiones para devolver el IVA a la adquisición de bienes de capital para empresas altamente exportadoras, hemos reducido el porcentaje de exportación de su producto total para que una empresa sea calificada como altamente exportadora, hemos tomado la decisión de devolver el IVA a la adquisición de bienes de capital, hemos eliminado los aranceles para la adquisición de bienes de capital.

El año pasado el sector industrial creció un 30 por ciento en bienes de capital sin incluir los sistemas de transporte. Ese crecimiento del año pasado a pesar del enorme esfuerzo del Gobierno por reducir el déficit, por frenar el endeudamiento y por derrotar las drogas se situó en el 3.76 por ciento, nuestra proyección macroeconómica era crecer al 2 por ciento.

Pero lo más importante es esto, si ese crecimiento lo miramos sin tener en cuenta las cifras de la droga, se sitúa en el 4.06 por ciento. Ayer conocimos, del sector privado, las cifras de crecimiento de la industria en el primer trimestre, están alrededor del 8 por ciento. La seguridad y el manejo confiable de la economía están conduciendo también a la reactivación del campo, el año pasado incorporamos 160 mil hectáreas a cultivos bien importantes para el producto y para el empleo.

Hemos hecho un gran esfuerzo para que el aumento de los tributos vaya a acompañado con la expansión de la base de contribuyentes, una de las medidas ha sido ofrecer una devolución de dos puntos de IVA, a aquellos que paguen la adquisición de bienes y servicios con dinero plástico, para formalizar esa economía. En el primer trimestre, el uso de tarjetas de débito, creció en un 30 por ciento.

Hemos hecho un gran esfuerzo para contraer el gasto público burocrático. Propuse como candidato, que Colombia trabajará un esquema de Estado Comunitario, alejado de las prácticas clientelistas, derrochadoras de recursos, de los estados burocráticos y con la preocupación social, de la cual carece el modelo neoliberal.

Ese Estado para la comunidad, con creciente participación de la comunidad, para el beneficio exclusivo de la comunidad, obliga a hacer un replanteamiento del gasto. Hemos eliminado gasto público burocrático para fortalecer seguridad y para fortalecer inversión social y eso estimula la decisión de los contribuyentes para recibir los nuevos impuestos en ese esquema de incentivos al crecimiento.

Por el lado de la reactivación social, estamos trabajando las siete herramientas de Equidad: la revolución educativa, la ampliación de la protección social, el estímulo a la economía solidaria, el manejo social de los servicios públicos, en lo cual hemos tenido una gran comprensión de inversionistas españoles, que quiero agradecer públicamente, porque encontramos una conflagración entre proveedores privados de servicios públicos y comunidades de usuarios y el gobierno no optó por la indiferencia, no optó por el populismo, el Gobierno optó por el camino de construir consensos entre proveedores de servicios y consumidores y ustedes nos han ayudado enormemente y hoy presentamos un panorama más tranquilo en esa materia.

Hemos venido trabajando otras herramientas de equidad, como el manejo social del campo, en Colombia en donde se debilita la agricultura, toma fuerza la droga ilícita. La calidad de vida urbana, solamente teníamos dos ciudades con unos principios de transporte masivo: Medellín con el tren metropolitano y Bogotá con el Transmilenio. Estamos empezando obras de un nuevo sistema de transporte masivo en Cali, adjudicando las primeras licitaciones en Pereira y terminando diseños en el Valle de Aburrá, en Cartagena, en Bucaramanga y en Barranquilla.

Este Gobierno, dejará bastante avanzado un plan de pavimentos de 3.300 kilómetros, obras tan importantes, como la doble calzada Bogotá – Girardot, el Túnel de la Línea, están en pleno proceso de licitación.

Para contribuir a esa confianza, hemos tomado dos decisiones, la primera: acelerar la inserción de Colombia en la economía mundial. De manera tranquila, casi que imperceptible, construimos un gran consenso al interior de la sociedad colombiana y con los países de la comunidad andina para nuestra negociación con MERCOSUR. Hemos hecho el acuerdo Comunidad Andina – MERCOSUR.

Hace dos días iniciamos, en Cartagena, la negociación del Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos, tenemos mucha fe, que ese tratado incorpore unas cláusulas de equidad que le den plena confianza a las comunidades pobres de América Latina, que de luces sobre como hay que incorporarle al Comercio Internacional el capítulo social para evitar la polarización política entre los amigos y los adversarios del libre comercio y encontramos con inversionistas de los Estados Unidos, especialmente con inversionistas españoles, enorme cantidad de contenciosos.

Repaso en estas mesas, la presencia de muy distinguidos inversionistas españoles en Colombia y recuerdo que hace 21 meses, estábamos simplemente recibiendo la queja por el contencioso de los ferrocarriles, el reclamo por el contencioso en la energía, el reclamo por falta de adecuadas normas para darle seguridad a los inversionistas en petróleo, el reclamo por los contenciosos de las concesiones viales.

Nos hemos propuesto superar esos contenciosos con tres requisitos: primero, con ajuste total al ordenamiento jurídico. Segundo, con equidad y tercero con transparencia.

Por ejemplo encontramos varios contenciosos en el sector de las telecomunicaciones, hemos concluido ya el arreglo en dos y si se dan esos tres requisitos, vamos a conciliar en los otros seis.

El tema de la transparencia es de gran importancia, para la credibilidad popular en los procesos, para eliminar suspicacias, y por eso hemos dicho que uno de los requisitos de la transparencia es que la comunidad conozca plenamente esos acuerdos. Antes de firmar esas transacciones, las publicamos ampliamente para que el pueblo colombiano las conozca, y para que esas transacciones estén rodeadas de legitimidad.

Hace pocos días, con nuestros dos embajadores, tuve la oportunidad de reunirme en Bogotá con un grupo muy representativo de ustedes, de la comunidad española inversionista en nuestra tierra. Hicimos un repaso, por supuesto que subsisten problemas pero hemos avanzado mucho y hemos avanzado como hay que avanzar, de acuerdo con el ordenamiento jurídico, sin maltratar la equidad y con absoluta transparencia para que esos acuerdos los firme el Gobierno, pero que cuenten con lo más importante, con el respaldo del pueblo.

Estamos apostándole a un crecimiento de la economía colombiana este año del 5 por ciento. Si bien hemos creado millón 100 mil empleos en el sector privado, durante esta administración ha aumentado la tasa de participación, 570 mil nuevos jóvenes colombianos entran cada año al mercado del trabajo, paulatinamente ha venido descendiendo el desempleo del 17 al 13 por ciento pero un paro como acá se denomina ese flagelo del 13 por ciento es muy alto.

Tenemos innumerables problemas sociales, pero trabajando con dedicación, empujando el crecimiento de la economía, con el concepto de construir una sociedad sin exclusiones y sin odios, pluralista, en permanente debate creativo, con solidaridad vamos a salir adelante.

Confiamos, que con la mayor confianza de ustedes que se está viendo, nos ayuden a superar el tema de la declinación en la producción de petróleo. Hemos construido un nuevo marco legal.

Conversando con algunos de ustedes, se sienten más cómodos y estamos acompañando esos procesos de exploración con incentivos tributarios y fundamentalmente con la determinación de que los terroristas no los afecte.

Durante el Gobierno del presidente Gaviria, Colombia hizo la primera profunda reforma pensional, al principio de este gobierno se hizo la segunda, nos falta una tercera y quizá una cuarta, para poder despejar en el frente fiscal el tema pensional.

Confiamos lograr avanzar en ese sendero, para que la comunidad nacional e internacional vea un futuro claro y sano en finanzas públicas y para que los pensionados colombianos sientan que hay responsabilidad para garantizarles el pago de sus pensiones.

Quiero finalizar acá, para tomar las preguntas de ustedes. Alguien lleno de afecto y solidaridad conmigo, preocupado por algunas manifestaciones que se ocurren en las calles y que allí donde aparezco siempre se dan, he contado con la fortuna de tener comités de bienvenida, desde que tome la decisión de entregar mi vida a derrotar el terrorismo en Colombia, alguien me decía: ‘Presidente y entonces las preguntas también escógelas’ y dije: no, pregúntemelas en público, no las escojamos, que no hay temas vedados.

Mil gracias y les ofrezco la palabra.

CONVERSATORIO

En Colombia la empresa privada paga tres cuartas partes de la cotización de los trabajadores al sistema de salud. A cargo del empleador está todo el pago por los riesgos profesionales. La empresa privada colombiana es una empresa de enorme responsabilidad social.

Yo quiero decir esto, guárdenlo en su mente: el problema colombiano no es imputable a la empresa privada sino a la falta de empresa privada. Lo que necesitamos es que en Colombia crezca la empresa privada.

No ha podido crecer al ritmo que lo ha demandando el país, justamente por el terrorismo y por otros fenómenos. Y en el momento en que la empresa privada crezca velozmente, se empiezan a dar oportunidades a todos los sectores que hoy viven de informales y están en la miseria.

Ayer al inaugurar un gran centro comercial en Bogotá, hacía esta cuenta: hoy empiezan a trabajar en ese centro alrededor de 2.000 personas. Cada uno va a tener una situación laboral formal con salario justo, legal, con prestaciones sociales, con acceso a la seguridad social.

En las calles de Bogotá deambulan miles de bogotanos a la intemperie. Y cuando uno compara el salario mínimo en el sector privado formal, con lo que recibe a título de ingresos un trabajador informal, el informal no gana más de la tercera parte de lo que está ganando el trabajador formalizado con salario mínimo.

El otro equivoco es: cuando hablan del problema colombiano, dicen: “los actores del conflicto”. Y señalan por igual a la Fuerza Pública, a los paramilitares y a los guerrilleros.

Primero: allá no hay conflicto. Savater, en uno de esos ensayos tan agudos como los que él hace, dice que el conflicto son los mismos violentos. Cuando se trata de expresar que hay un conflicto para justificar o explicar el terrorismo, hay que entender que allá el conflicto lo crean los violentos.

Entonces allá no es que se esté resolviendo por la vía militar un conflicto. Allá lo que hay es un desafío del terrorismo contra un pueblo y unas instituciones democráticas.

Y lo segundo y último que hay que esclarecer: nosotros no podemos seguir igualando –y con esto creo responderle–, no podemos seguir igualando la Fuerza Pública con paramilitares y guerrilleros.

Paramilitares y guerrilleros son los destructores de la vida civilizada, del ordenamiento jurídico. La Fuerza Pública es la expresión institucional del Estado, en nombre de la sociedad, para ser el fiel de la garantía de los derechos al conglomerado. Yo no puedo equiparar Fuerza Pública con bandoleros”.

Pregunta: ¿Está usted ganando la guerra? ¿Será en este o en el segundo mandato?

Presidente de la República: No hablemos de guerra. La guerra históricamente es una realidad cruel, pero un concepto relativamente noble. Allí no hay guerra ni conflicto. Allá hay un desafío del terrorismo contra la institucionalidad democrática, contra una ciudadanía sufrida que quiere salir adelante.

Lo que sí le contesto a mi amable preguntador, interrogador, es lo siguiente: a las buenas o a las malas vamos a derrotar el terrorismo. Y sobre eso no puede caber duda.

Y lo más importante es sembrar en el pueblo colombiano la conciencia de que ese problemita que hemos sufrido 40 años nos lo tenemos que quitar de encima de una vez por todas.

Y por eso hay que hablar lo mismo en cualquier población de Colombia o en la Casa de las Américas de Madrid o en este Hotel. Yo no puedo cambiar de discurso. Y no puedo tener un discurso grabado en mi corazón y otro expresado en mis palabras. Tome el tiempo que tome, la decisión en Colombia es derrotar estos bandoleros.

Pregunta: ¿Teme alguna reducción de la cooperación española en materia militar antiterrorista con el gobierno del PSOE? ¿Teme que el nuevo gobierno en España cancele la ayuda militar a Colombia? ¿Le pedirá al ministro español de Defensa, José Bono, que siga esa ayuda y que incluso aumente?

Presidente de la República: Primero hay que entender que estas son unas relaciones de cinco siglos. No unas relaciones de ahora. Si en muchas partes donde las relaciones son nuevas, ellas se entienden como relaciones de Estado a Estado, aquí sí tenemos que entender que son relaciones de Estado a Estado. Relaciones incancelables. Irrompibles. Relaciones de cinco siglos que se tienen que proyectar al infinito.

Por eso siempre hay que manejarlas con fraternidad y con prudencia, independientemente de lo que pase en la arena política de cada país. Relaciones de Estado a Estado. Siempre tienen que ser fraternas. Siempre tienen que ser de amplia cooperación. Yo confío muchísimo. En Colombia tenemos enorme gratitud por lo que ha sido la cooperación española y confiamos muchísimo en la cooperación española para poder superar las dolencias del pueblo colombiano.

Por ahora le voy hacer una solicitud aquí concreta al señor Vicepresidente: ayúdeme con unos proyectos que están en el Fondo de Asistencia para el Desarrollo, que estoy seguro que eso encuentra unanimidad total.

Ayer me llamaron de la ciudad de Manizales, una señora muy querida, de las ciudades más importantes de la Patria, y me dijeron: tan pronto hable con el Vicepresidente mañana al mediodía, o con el Presidente, recuérdele el Aeropuerto de Palestina. Como a mí me gustan las cosas concretas, ahí le queda, Vicepresidente, apunte: Fondo de Asistencia al Desarrollo, Aeropuerto de Palestina en Manizales”.

Interlocutor: No sé si ha reparado, señor Presidente, en que el señor Vicepresidente le ha pasado a la guapa Secretaria de Estado de Cooperación Internacional el tema. Aquí somos muy ágiles.

Pregunta: A usted, Presidente Uribe, le atacan mucho las organizaciones de defensa de los derechos humanos por su política de seguridad democrática. Su política de lucha contra el terrorismo ha sido criticada por su dureza. Algunas medidas como las brigadas de autodefensa han sido consideradas como poco respetuosas con los derechos civiles. ¿Está su Gobierno dispuesto a hacer cambios en este sentido?

Presidente de la República: El primero de los derechos humanos es la seguridad.

Respuestas. Elecciones del año pasado: Los actores más radicales de oposición tuvieron las garantías efectivas que nunca habían tenido. ¿Por qué? Porque en Colombia siempre el Estado da garantías, pero por la fortaleza de los grupos violentos ellas las niegan. El año pasado, gracias a la Política de Seguridad Democrática, los sectores más radicales de oposición tuvieron garantías efectivas. Pasaron de las garantías de palabra, de las garantías retóricas, a las garantías efectivas.

Respuesta: el año pasado en relación con 2002, el asesinato disminuyó en Colombia un 22 por ciento. En lo acumulado de este año va disminuyendo otro 17 por ciento.

Respuesta: el año pasado en relación con 2002, el secuestro disminuyó en Colombia 27 por ciento. En lo acumulado de este año va disminuyendo 45 por ciento.

Respuesta: Colombia tiene 1.090 alcaldías elegidas popularmente. Cuando yo llegué a la Presidencia casi 400 alcaldes estaban desterrados de sus municipalidades por los grupos violentos. Hoy todos están ejerciendo la autoridad en su respectivo municipio, independientemente de su afinidad o de su desacuerdo con el Gobierno. Eso se llama garantía democrática, garantía de seguridad a la democracia.

Respuesta: En Colombia hemos aumentado enormemente la protección a los sindicalistas, a los maestros y a los periodistas. Yo quisiera decirle hoy a la comunidad española que ya no se presenta un solo asesinato de integrantes de organizaciones sindicales en Colombia. Todavía lo hay. Pero, por ejemplo, asesinaron 120 en el 2002. El año pasado redujimos a 54. Ojalá podamos llegar a cero. Es nuestro esfuerzo.

La política de seguridad en una democracia solamente es sostenible en la medida que tenga respaldo de opinión. Colombia necesita sostenibilidad en esa política. Y la opinión para darle sostenibilidad exige dos cosas: eficacia y transparencia.

La principal prueba de transparencia es que en Colombia no hay doble discurso. El discurso es el mismo aquí o en la Casa de las Américas. La otra garantía es que en Colombia no hay nada oculto. Colombia es un país abierto todo al periodismo. Las ONG, algunas que tanto me critican, en mí tienen un contradictor respetuoso. Sin afectarle sus derechos discrepo de algunas de ellas cuando dicen lo que no corresponde a la verdad. Yo también tengo derecho a decir la mía. Pero nunca he cerrado el espacio.

¿Qué país del mundo con ese problema del terrorismo es tan abierto? ¿Ustedes saben cuántos terroristas encontramos el 7 de agosto de 2002? Sumen: 17 mil de las Farc en los campos, en las ciudades 10 mil milicianos de las Farc, cuatro mil del ELN y 15 mil de autodefensas.

El mundo no ha mostrado en su historia que un Estado con ese desafío terrorista respete los preceptos de la transparencia y el pluralismo. Nosotros los hemos respetado integralmente. ¿Cuántos estados no se han cerrado a la observación nacional e internacional para poder enfrentar esos fenómenos? Miremos década y media. En otros países vecinos de Colombia en nuestra América del Sur se justificó el cercenamiento de las libertades para derrotar el terrorismo. El gran reto en Colombia es derrotar el terrorismo sin limitar las libertades, sin cercenarlas.

Pregunta: En confianza, Presidente ¿podría decirnos por qué fracasó el referendo en el que usted había puesto tanto de sí mismo para la reforma constitucional en Colombia? ¿Promueve ahora la reforma de su legislación electoral que le permitiría presentarse para su reelección, para así digamos que cobrarse la revancha y tener más tiempo para llevar a cabo las reformas profundas que anhela para su país?

Presidente de la República: En una democracia el proceso reformista es un proceso de todos los días. Casi que de pasos imperceptibles, pero diarios. Las democracias, sobre todo con la problemática social como la que se da en Colombia, requieren un proceso ininterrumpido de ajuste. Hay que hacer reformas todos los días. Alguien de la oposición me decía: es que tú debiste cobrar el Referendo. El referendo obtuvo un millón de votos más a favor que los que yo obtuve para ser elegido Presidente.

¿Qué pasa? El Consejo Electoral incluyó en el umbral cédulas de muertos, cédulas de la Fuerza Pública, que en Colombia no puede deliberar ni votar. Cédulas no entregadas. Yo hice el reclamo. No negaron los hechos sino que dijeron que no podían cambiar las reglas. Yo soy un combatiente. El combatiente que se dedica a la revancha pierde todas las batallas. Yo no me dedico a las revanchas sino a cuajar victorias para mi país todos los días.

Pregunta: Hablemos de privatizaciones: ¿qué propósito tiene el gobierno que usted preside en esta materia: los trabajadores de ecopetrol están en huelga. Según el comunicado de la unión sindical obrera, se va a aprovechar la huelga para privatizar la empresa. ¿Es esto cierto? ¿Va a ser así?

Presidente de la República: En Colombia hay un gran espacio al sector privado, pero no hay dogmatismo de privatizaciones. No hay furia de privatizaciones. Lo que propuse y estoy cumpliendo, es un Estado sostenible. Es un Estado que cumpla sus deberes sociales, pero con sostenibilidad.

Cuando fuimos a reformar la Empresa de Telecomunicaciones, me dijeron: privatícela. Yo dije no. El sector privado en telecomunicaciones tiene suficiente espacio en Colombia. Celebro, por ejemplo, que Telefónica acaba de comprar a Bellsouth. Y ahora me decía el Presidente de Telefónica que van sumamente bien en Colombia.

Las empresas de telefonía móvil obtuvieron en Colombia el año pasado los mayores crecimientos en la región. Veníamos de una base baja, pero han crecido con mucho dinamismo. Dije: no, yo no voy a privatizar la Empresa de Telecomunicaciones. Vamos a volverla sostenible, competitiva.

Y hubo que hacerle una reforma profunda, disminuirle los costos, la nómina. También se dijo lo mismo: que la iba a privatizar. Pasamos de una empresa que perdía 170 millones de dólares al año, a una empresa estatal que se está ganando ahora 170 millones de dólares. Y que está resolviendo sus contenciosos con el sector privado internacional.

El petróleo lo mismo. Nosotros hemos hecho dos cosas en petróleo. Primero: hemos ajustado el marco normativo para que haya más confianza en los inversionistas internacionales. Hoy me he encontrado con los presidentes de dos empresas españolas y me han dado un testimonio que me devuelve la esperanza. Me han dicho que con el marco normativo que hemos ajustado, se aprestan a hacer todas las inversiones posibles en Colombia. Y lo necesitamos.

Segundo: estamos reformando la empresa estatal para hacerla sostenible. Lo que pasa es que la empresa estatal, con los privilegios laborales y pensionales, la iban a destruir los mismos que se oponían a la privatización. Ellos saben que este Gobierno no la va a privatizar. Este Gobierno lo que está es introduciendo unas reformas para hacerla sostenible. Qué tal que esa empresa llegue a lo que puede llegar: a que el Presupuesto Nacional le tenga que trasladar 300 millones de dólares al año para pagar pensiones.

Entonces no sé por qué hacen tanto escándalo, cuando saben que de este Gobierno se puede discrepar, pero que este Gobierno tiene palabra, que no se va a privatizar. Que lo que hemos hecho es quitar unos privilegios que tenían sectores laborales allí, para darle sostenibilidad a la empresa.

Tenían un privilegio pensional insostenible. ¿Ustedes creen que hay empresa en el mundo que resista que a un trabajador no se le pueda despedir? Ahora: las reformas las hemos hecho respetando derechos adquiridos.

La Reforma Pensional es para los nuevos trabajadores de Ecopetrol. Hasta nos quedamos cortos. No sé por qué protestan tanto. La Reforma Laboral es para los nuevos trabajadores de Ecopetrol. Pero la empresa se mantiene como empresa estatal.

Qué bueno que hagan esas preguntas porque se desorienta mucho. Y si yo pasara respondiéndole a la crítica todos los días, no trabajaría. Entonces como hay oportunidades como ésta, donde puedo responder esas preguntas, ojalá las hagan todas.

Pregunta: En el capítulo sobre las relaciones entre Colombia y España: en la prensa colombiana de las últimas fechas se ha puesto de manifiesto un cierto temor sobre que tras las relaciones amistosas que usted tenía con el anterior presidente del gobierno español, el señor Aznar, ahora le podría ir mal con el nuevo gobierno socialista que preside el señor Rodríguez zapatero, con el que, por cierto, va a reunirse esta misma tarde. El señor Solís ya le ha puesto fácil el camino. Ya le ha dado alguna orientación.

¿Han notado ustedes algo raro o, por el contrario, ven ustedes buena disposición para una estrecha colaboración en temas, por ejemplo, como el relativo a la regularización de los emigrantes colombianos sin papeles?

En un foro, “Colombia una oportunidad”, organizado por su embajada en Madrid, las empresas españolas han demandado una mayor seguridad jurídica para sus inversiones y contratos en Colombia, mediante una reforma de la legislación de su país, y también con medidas como un acuerdo con España para la protección recíproca de inversiones y un convenio para evitar la doble tributación, como el que nuestro país suscribió el año pasado con chile. Hay bastantes preguntas y comunicaciones al moderador, desde empresarios que están aquí, como el señor Rivero del grupo Zafir, que le felicitan a usted por la resolución de un caso, creo que el de COMMSA, que afectaba muchos intereses españoles y de una manera grave.

Presidente de la República: En la intervención inicial referí a ustedes que este Gobierno encontró contenciosos en los ferrocarriles, en las carreteras, en la energía eléctrica, etcétera. En las telecomunicaciones. Nos hemos propuesto superarlos, porque si no cuál era la alternativa: que Colombia se quedará sin inversión internacional. Superarlos con tres condiciones: en la búsqueda de la juricidad, la equidad y la transparencia. Que el pueblo colombiano conozca lo que se decida.

COMMSA es uno de esos casos. Esos problemas los heredé yo todos. Pero yo me he hecho esta reflexión: si Colombia no los supera, mantenemos estancada la inversión. Y ese es un caso que se ha debatido públicamente. Se hizo un acuerdo entre el Gobierno y ese consorcio. Pasó a los tribunales. La semana pasada fue aprobado por el Tribunal de Cundinamarca. No sabemos si hay nuevas instancias o no.

Seguridad jurídica. Creo que los acuerdos logrados en lo que va corrido de este Gobierno les da a los inversionistas españoles más claridad de la vocación de Colombia por la seguridad jurídica. Tenemos en trámite en el Congreso de la República una ley que nos permita firma acuerdos de estabilidad tributaria con inversionistas. Pero Colombia ha sido bastante respetuosa en esa materia. El convenio de seguridad para la inversión extranjera entre los dos países, ojalá lo pudiéramos sacar adelante.

El desmonte de la doble tributación, tarde que temprano se impone. Tenemos que ir un poquito lentos por los problemas fiscales de Colombia. ¿Qué hace Colombia donde ustedes no paguen impuestos, si ustedes son unos contribuyentes que necesitamos y bastante apreciados en Colombia?

La primera pregunta: las relaciones con España. No, repito: son relaciones institucionales, históricas, de Estado a Estado. Colombia ha tenido un gran apoyo de la democracia española. Cuando Presidente era el Presidente Suárez, cuando el Presidente era Felipe González. Alguna vez vine yo acá, menos conocido pero con las mismas críticas. Y me reuní con Felipe González. Y yo creí que en esa reunión, yo iba a salir muy regañado. Y me dijo: Uribe, sigue con tus tesis, con la seguridad. Es un valor democrático y una fuente de recursos. El Presidente Aznar nos apoyó inmensamente. Tengo toda la confianza de que vamos a recibir un gran apoyo del Presidente Rodríguez Zapatero. Son unas relaciones de Estado a Estado. De democracia a democracia.

Pregunta: ¿Podría revelarnos alguna de las peticiones que le va a hacer al señor Rodríguez Zapatero esta tarde?

Presidente de la República: Por lo menos ahora va una: la del Aeropuerto de Palestina. Salgo con esa petición resuelta esta tarde y quedo muy contento.

Pregunta: ¿Piensa usted, aparte del aeropuerto de Palestina, que España y la Unión Europea están haciendo suficiente para con su lucha para establecer los derechos de todos los colombianos?

Presidente de la República: Han hecho mucho, pero hay que hacer más. Yo tengo que agradecer todo lo hecho. Pero ese problema nuestro es tan grande, es tan grande, que hay que hacer más.

¿Sabe por qué nosotros tenemos terrorismo? Porque hay droga. ¿Ustedes se imaginan qué es una extensión de 160 mil hectáreas de droga para financiar el terrorismo? Yo no creo que haya país del mundo que haya sufrido ese desafío. Por eso hay que hacer más.

Ayer, por ejemplo, mientras yo me aprestaba a salir del país, la Policía colombiana decomisó una máquina que venía para España. Lograron abrirla a pesar de la sofisticación, y encontraron 146 kilos de cocaína. Se ha hecho mucho, pero hay que hacer más.

Tengo un programa bellísimo, para que se entusiasmen ayudarnos. Estamos dándole a los campesinos colombianos la posibilidad de ser guardabosques. Colombia tiene unos terrenos muy extensos, que hacen parte del ecosistema amazónico. Colombia es el séptimo país del mundo en biodiversidad. Uno de los primeros países en disponibilidad de agua dulce por unidad de superficie. Cuando se destruye el bosque por sembrar coca, se le hace un profundo daño al ecosistema. Puede destruir la Amazonía.

Entonces si bien nosotros tenemos que recuperar la economía, la agricultura comercial, nuevos productos agrícolas, etcétera, tenemos que preservar el bosque. Ese es un recurso de la humanidad. A campesinos que viven en las áreas donde estamos destruyendo la coca, les hemos ofrecido que se conviertan en guardabosques. Ya tenemos 21 mil familias. El programa es muy bello y seguro, porque lo monitorea Naciones Unidas.

Nosotros le pagamos a cada familia dos mil dólares al año. Para hacerle el pago necesitamos el certificado de Naciones Unidas de que han cumplido con dos obligaciones: primero, que han mantenido un área determinada libre de droga, y segundo, que han cuidado la recuperación del bosque. Pero necesitamos llegar a 50 mil familias.

Yo creo que es un programa bellísimo para España y para la Unión Europea. Patrocínenme unas familias, Vicepresidente. Ahí le dejo también esa propuesta.

Pregunta: Hace unos días, aquí en Madrid, su director de planeación nacional, el señor montenegro, presentó los índices de gestión de la violencia en Colombia, que muestran una tendencia a la baja desde el año pasado, como usted ya ha señalado, en la relación directa de la violencia con el mundo de las drogas. ¿quiere decir esto que su gobierno empieza a tener a los narcotraficantes debajo de su bota por primera vez en muchos años, o más bien se trata de una mejora transitoria difícil de mantener y que los narcos recuperarán tarde o temprano el poder perdido?

¿Cuál es la salida económica para los pequeños cultivadores de coca, probablemente la que usted ya señalaba, un producto que da mayores ingresos que los cultivos tradicionales?

Presidente de la República: Siquiera el parte optimista la semana pasada lo dieron el Director de Planeación y nuestra Embajadora. Porque, ¿qué papel me toca a mí? Yo no puedo estar a toda hora mirando las cifras buenas. Tengo que preocuparme por lo que nos falta. Nosotros no podemos estar tranquilos hasta el día que en Colombia podamos decir: no hay un solo secuestro. Importante que se reduzca el número de secuestrados, como se ha reducido en los últimos dos años, pero la preocupación del Gobierno tiene que ser hasta acabar ese flagelo. Lo mismo con la droga.

Yo confío que con cooperación internacional, con conciencia, con persistencia en mi país, con persistencia... Uno de los problemas que ha habido en mi país es que las instituciones políticas no han permitido tener perseverancia, han inducido a la volatilidad. Por ejemplo, el Ministro de Gobierno del Presidente Gaviria, un destacadísimo colombiano, el doctor Fabio Villegas, dijo en esa época, y muchos colombianos lo aplaudimos, que en 18 meses Colombia no tendría guerrilla. Pero fue que a ellos no les dieron sino cuatro años de Gobierno. Y don Manuel Marulanda se ha dado 10 gobiernos. Eso siempre es disparejo, ¿no?

Un Estado transparente y democrático nunca es derrotado por el terrorismo. Con perseverancia, ese Estado termina derrotando el terrorismo y sus fuentes de financiación”.

Pregunta: Hablemos, señor Presidente, si le parece bien, de las relaciones de Colombia con los estados unidos. Si le parece bien, hagámoslo por partes: colaboración en la lucha contra el narcotráfico. ¿qué valoración hace usted del plan Colombia, entendiendo que con fondos de ese plan se están contratando empresas privadas de seguridad y que actualmente están operando en colombia. ¿Nos podría aclarar este punto?

Relaciones comerciales: ¿qué pronóstico y qué calendario tiene usted sobre las negociaciones iniciadas esta misma semana para un tratado de libre comercio con estados unidos?

Presidente de la República: Primero fue el Plan Colombia y segundo el cronograma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.

Pregunta: ¿Cómo ha ido la primera ronda de negociaciones con estados unidos sobre el libre comercio? ¿Y cree que se va a firmar el tratado pronto?

Presidente de la República: Primero mi evaluación del Plan Colombia. Lo creo mi predecesor. Lo aplaudí entonces. Le he dado continuidad y lo vamos a incrementar. Es un gran paso. Porque en muchas partes se dice: hay que apoyar a Colombia contra la droga, pero eso no pasa de una declaración. El Plan Colombia permitió pasar de las declaraciones a la práctica. Ha sido inmensamente útil. Pasar de 160 mil hectáreas de droga a 86 mil, con la perspectiva de que vamos a derrotar la droga, demuestra la validez del Plan Colombia.

La tarea militar la hacemos exclusivamente con colombianos. En el Plan Colombia hay asesores norteamericanos que están participando como asesores en el tema de la lucha contra la droga. Muchas veces para poder derrotar la droga en un área, primero tiene que entrar una brigada militar antinarcóticos. Porque los cultivos de droga en Colombia los cuidan terroristas sumamente poderosos y bien armados. Entonces eso no es tan fácil. Y yo creo que hay que desmitificar el Plan Colombia. Hay que entenderlo como una ayuda concreta, abierta.

La democracia en los Estados Unidos como la colombiana es abierta. Eso está expuesto al escrutinio de la opinión y de las diferentes bancadas parlamentarias en los Estados Unidos. El Plan Colombia tiene una característica bien importante. Todas las decisiones de los Estados Unidos frente a Colombia son decisiones de Estado, de una política bipartidista en el Congreso norteamericano. Y así hay que preservarlas y proyectarlas y nos ayuda muchísimo.

Colombia y los países andinos han venido recibiendo un acceso al mercado de Estados Unidos, que lo define el Congreso de Estados Unidos por períodos relativamente cortos. Se inició en la administración del señor Presidente Barco, cuando era Ministro de él el señor Presidente Gaviria. Cuando tenemos ese acceso al mercado de Estados Unidos mejora mucho nuestra economía. Cuando se interrumpe porque se vence la ley norteamericana, mientras se renueva, tenemos reveses. Y siempre los inversionistas dicen: una concesión unilateral no es garantía para la inversión. Por eso necesitamos el Tratado.

La fecha. El ATPDEA, que es el acto del Congreso norteamericano que da estas preferencias a la Comunidad Andina, su última renovación vence el 31 de diciembre de 2006. Por tarde para esa fecha deberíamos tener implementado el Tratado bilateral con Estados Unidos.

¿Por qué nos propusimos acelerarlo? Porque el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas marcha con lentitud y tenemos preocupación de que no esté perfeccionado para el 31 de diciembre del 2006. ¿Se excluyen? No se excluyen. Nosotros aspiramos que nuestro Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos sea un paso importante que estimule el avance de las negociaciones de la zona de Libre Comercio de las Américas.

A propósito, a partir de octubre la Unión Europea va a discutir la renovación de las preferencias unilaterales a la Comunidad Andina. Es un tema que le voy a plantear nuevamente al Gobierno Español. Necesitamos el apoyo de ustedes para que nos prorroguen esas preferencias y la comprensión para que podamos entrar a negociar con la Unión Europea el Acuerdo de Comercio entre Comunidad Andina y Unión Europea. Yo creo que ese es un punto esencial de nuestra agenda bilateral con España y con la Comunidad Europea en su conjunto.

Pregunta: En ese sentido, señor presidente, ¿qué espera Colombia de la cumbre iberoamericana que se celebrará dentro de unos días en Guadalajara? además de recibirle a usted el presidente del gobierno, está teniendo, a propósito de la boda real y fuera de la boda real, la próxima semana, con el presidente de chile, distintos contactos. Parece que el señor Rodríguez Zapatero va a ser un aliado importante, y ya lo ven ustedes como tal, precisamente en la orientación del eje América Latina, España, Europa.

Presidente de la República: Primero: nosotros esperamos seguir construyendo unas relaciones muy positivas con el Estado Español, con sus diferentes gobiernos. Y creo que a pesar de que nos falta superar algunas dificultades con inversionistas, creo que el balance de agosto de 2002 a la fecha es bueno. Lo que se ha superado con inversionistas españoles.

Nosotros necesitamos que ustedes se vuelquen a invertir más y más en Colombia. A esta reunión llevo gratas noticias, por lo que me han expresado, en telecomunicaciones y en el sector de telefonía y en el sector de petróleos.

¿De la reunión de México qué esperamos? La ratificación del apoyo a la lucha contra la droga y el terrorismo, la prorroga del tratamiento preferencial de la Unión Europea a la Comunidad Andina y la primera expresión de voluntad de entrar a examinar la negociación de un tratado entre la Unión Europea y la Comunidad Andina.

La Unión Europea lo ha hecho con Chile, con México. Se ha anunciado que va a empezar a hacerlo con MERCOSUR. Seguramente en el futuro habrá uno entre la alianza de libre comercio de las Américas y la Unión Europea. Pero alguno inmediato entre la Unión Europea y la Comunidad Andina se puede constituir en un gran paso para llegar al más ambicioso entre la Alianza de Libre Comercio de las Américas en gestación y la Unión Europea. Esos son temas que consideramos esenciales de la Cumbre de Guadalajara.

Pregunta: Está cundiendo su estilo petitorio y me mandan una nota para agradecerle que aproveche la oportunidad que usted tiene con el señor Rodríguez zapatero para pedirle ayuda para que apoye donaciones privadas a Colombia, con el objetivo de estimular las empresas solidarias. El señor José Ignacio sala franca, diputado del parlamento europeo, solicitó el micrófono.

Diputado: El Presidente Uribe conoce bien la incontinencia porque la ha sufrido de los parlamentarios europeos, y por lo tanto, abusando de su amabilidad y de su facilidad y propensión para el diálogo, quisiera formularle algunas preguntas que están en estrecha relación con algunas de las que se han formulado aquí en este almuerzo.

Señor Presidente: Usted sabe que el gobierno anterior, el gobierno del presidente Aznar, ha tenido un compromiso indeclinable, irrenunciable, en la lucha contra el terrorismo. Y no sólo en España sino también en otros países, como es en el caso de Colombia. Se ha pedido y obtenido la inclusión de las farc y del ELN en la lista de las organizaciones terroristas de la unión europea. Y ello por considerar que el terrorismo no es un fenómeno que se pueda predicar de una región, de un país, de un continente, sino que tiene un carácter planetario universal. Aparte de esta petición relativa al aeropuerto de Palestina, ¿piensa usted presentar y recabar del actual presidente del gobierno apoyo internacional en la lucha contra el terrorismo en el ámbito de la unión europea?

Segunda pregunta: ¿conoce usted la declaración que han firmado los presidentes de los principales grupos del parlamento europeo, y si la conoce, qué valoración le merece de la liberación de todas las personas secuestradas en Colombia, en el sentido de rechazar el secuestro, el asesinato, la extorsión y la tortura como método de dicha política?

Presidente de la República: Empiezo por lo que debiera haber dicho en un inicio: la expresión de mi gratitud en nombre del pueblo colombiano a la gestión suya, distinguido parlamentario, en el Parlamento Europeo. Fue muy grato en febrero cuando visité el Parlamento Europeo, recibir un gran apoyo de los parlamentarios españoles, de sus dos grandes partidos. Me reuní con unos y con otros. Y quiero agradecerles. Estoy inmensamente agradecido, en nombre del pueblo colombiano, por la declaración que ustedes propusieron y sacaron adelante, exigiéndole al grupo terrorista Farc la liberación inmediata de los secuestrados. Ese fue un gran paso.

Yo la pregunta la tengo que devolver. Cincuenta mil terroristas que tenía Colombia en el 2002, confío que los hayamos reducido. Todavía 80 a 90 mil hectáreas, alimentando el terrorismo. Ayer otro desafío. Venían casi 150 kilos de droga para España. ¿Qué Gobierno democrático se puede negar a ayudarle a un país como Colombia a superar eso? Esto yo lo tengo que decir cándidamente: ¿Ustedes creen que yo no le voy a pedir al Presidente Rodríguez Zapatero que me ayude? Claro que le tengo que pedir que me ayude.

Pregunta: Le voy a agrupar varias preguntas y usted, si le parece oportuno, las contesta de la mejor manera.

¿Cómo están las relaciones con los vecinos, en especial Venezuela? ¿Cómo va la cooperación energética? ¿Qué opina de la denuncia del Presidente Chávez de que Colombia y estados unidos alentaban un golpe en Venezuela?

¿Cómo están las relaciones con el gobierno brasileño con respecto al combate, al tráfico de drogas entre la frontera de esos dos países?

¿Qué compensación está su gobierno dispuesto a darle en caso de que su frontera se afecte con las fumigaciones que hace Colombia?

Y finalmente: ¿Actualmente una comisión parlamentaria de Venezuela está en Madrid negociando para que España elimine las ayudas para que Colombia compre armas porque, según dicen los diputados, hay grandes riesgos de que Colombia invada a Venezuela. ¿Cuál es su opinión?

Presidente de la República: La relación con los vecinos. El problema hoy es colombiano. Mañana puede ser de cualquiera de ellos. Nosotros ya hemos encontrado casos en los cuales en un departamento colombiano de la frontera hay cero secuestrados. En el mismo momento ha habido hasta 50 en el departamento de la Nación vecina.

Colombia hace años pensó que se podría lucrar del narcotráfico, pero que no corría el riesgo de ser país productor. Llegamos a tener más hectáreas sembradas en cultivos ilícitos que la suma de Perú y Bolivia.

Decíamos cínicamente: ese es un problema de las naciones consumidoras, no nuestras. Hoy tenemos más de un millón de consumidores. Con un enorme sufrimiento para nuestras familias. Eso es lo que tienen que mirar todos los países vecinos. El terrorismo no tiene fronteras. El terrorismo es coqueto y virtuoso, mientras toma posesión. Apenas le dan campito acaba con quienes le dieron facilidades. El terrorismo es un tigre que se agacha para que la víctima se monte en él. Pero después la víctima termina devorada. Eso es lo que tienen que pensar los países vecinos.

Yo tengo gran amistad con el Presidente Gutiérrez. Lo aprecio enormemente. Mi deseo es que salga adelante. Le dije al Parlamento Ecuatoriano, en un debate amable, abierto, les dije: miren, ustedes tienen de cinco a siete mil hectáreas de droga. Si no se ponen las pilas, terminan con 200 mil. Uno no quisiera eso para alguno de los vecinos.

El problema está en Colombia, pero causa un riesgo para la región. Por eso toda la región nos tiene que ayudar.

El tema de Venezuela. Allá lo trató prudentemente nuestra Canciller. Yo no voy a afectar con intervenciones mías, la prudencia con que ella manejó el tema. Colombia no tiene interés en atentar contra Gobierno o Nación alguna. Pero sí tenemos interés en acabar con nuestros terroristas, estén donde estén.

Brasil nos ha dado todo el apoyo. Y el sistema satelital de control amazónico, instalado por el Brasil, confiamos que en poco tiempo va a empezar a ayudar para que la Amazonía no siga siendo el lugar de ingreso y de salida, ni siga siendo un espacio aéreo del narcotráfico. Confiamos que esa ayuda del Brasil se va a dar. Avanza muy bien el tema con el Presidente Lula, con la Cancillería Brasilera, y es una necesidad.

Muchas gracias.

 
CONTÁCTENOS
MAPA DEL SITIO
| Quejas y Reclamos | Web Master |
Linea de Quejas y Reclamos 018000-913666

COPYRIGHT © 2006 PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA