VISITA A LA BASE MILITAR DE LA MACARENA
Mayo 03 de 2004 (La Macarena – Meta)

Compatriotas:

Quiero darles un saludo muy afectuoso, expresarles la gratitud de la Nación entera por la abnegada y patriótica labor que ustedes están cumpliendo. La tarea de ustedes tiene un destino: liberar a Colombia de la pesadilla del terrorismo.

Los terroristas se apoderaron de estas tierras, anularon la tranquilidad de los ciudadanos, eliminaron la libertad de los ciudadanos.

En el camino del aeropuerto a aquí, al hablar con algunos campesinos, me contaban su tragedia: sus fincas fueron arrebatadas por la Farc, los obligaron a abandonar sus cultivos, sus ganados, los arruinaron. Aquí instaló la Farc un imperio de terror, un imperio de coca, un imperio de violencia y ustedes, soldados de mi Patria, han recibido el encargo de recuperar esta tierra para la tranquilidad de los ciudadanos, para la democracia, para la agricultura, para la ganadería, para la convivencia.

¡Qué bello el sueño que derrotemos el terrorismo! y ¡qué estimulante saber que con el esfuerzo y el sacrificio de ustedes, lo vamos a lograr!

¡Hoy hay una decisión total en el pueblo, hoy no se siente vacilación en la Nación, hoy hay un empuje imparable para derrotar el terrorismo!

Detrás de ustedes, Soldados de mi Patria, están todas las instituciones democráticas. Los ancianos de la Nación rezan por ustedes porque ellos pasaron su infancia, su juventud, su madurez y viven ahora su edad mayor, afligidos por el terrorismo y no quieren morirse sin antes ver la Patria libre de terrorismo.

Las madres de familia de Colombia, las mamás de las nuevas generaciones de colombianos, le imploran a Dios que esta batalla decisiva, la ganen los soldados de la Patria para derrotar el terrorismo y asegurarle a la nueva generación que hoy apenas crece, que está en las bancas de los jardines infantiles o aprendiendo a caminar o empezando a encontrarse con el uso de razón, las madres de esa generación le imploran a Dios que esta batalla definitiva la ganen los soldados de la Patria, para que la nueva generación tenga el derecho, ejerza el derecho, tenga la total posibilidad de vivir feliz en Colombia.

El terrorismo es cínico. Esa combinación de acceso a las armas, de dinero proveniente de la coca y el secuestro, de estado con complejos e inhibido para combatirlos, le dio arrogancia al terrorismo. Jugaron con los gobiernos, con la buena fe de los procesos de paz, simplemente utilizaron eso para fortalecerse en su designio criminal.

Pero con ustedes, llevando en su alma la letra de la Constitución y en sus manos el fusil de la democracia, con el valor civil de ustedes, con su energía, con su patriotismo, vamos a derrotar los terroristas.

¡La Nación entera los acompaña, Soldados de mi Patria! ¡Hoy es muy momento para ratificar: llegó la hora de cambiar de posiciones, a esta hora el Estado no tiene reversa, a esta hora tiene que empezar la reversa de los terroristas!

Mi saludo afectuoso soldados, suboficiales, oficiales, altos mandos. El presente y el futuro de la Patria se presenta bello, gracias al esfuerzo, a la lucha, al sacrificio de ustedes.

Este saludo lleno de afecto, les ruego transmitirlo a sus familias. Cuando le escriban al papá, a la mamá, a los hermanos, a la novia, a la esposa, a los hijos, cuando hablen con ellos, díganles que ustedes han sentido el estimulo de toda la Nación, de todas las instituciones democráticas y que ustedes son concientes que tienen que cumplir una misión histórica para devolver a esta Patria la ilusión de vivir en paz

Muchas gracias a ustedes. Un viva a Colombia y a ustedes un aplauso, desde el corazón.