XXVIII FESTIVAL DE LA LEYENDA
VALLENATA
Abril 26 de 2005 (Valledupar – Cesar)
Compatriotas:
Cuando empieza este Festival se inicia
una semana de alegría
para la Patria, que resuena en el mundo entero. Ustedes han
logrado ese milagro de una convocatoria universal de todos
los sectores sociales y económicos. Han logrado ese
milagro de convocar a la Nación entera alrededor de
esta expresión, que une el alma de los colombianos.
Y ustedes se han constituido en una de las mejores presencias
del país ante la comunidad internacional.
¡Qué bueno que al llegar el Festival de la Leyenda
Vallenata empiece pues esta semana de alegría para todo
el pueblo colombiano! Confío que además de ustedes,
que tienen la fortuna de vivir en esta bella ciudad, miles
de colombianos puedan hacer turismo esta semana, desplazándose
por las carreteras, en avión, y que ustedes los alberguen
en sus casas, con la hospitalidad característica de
este pueblo, para que más y más colombianos puedan
integrarse a gozar el Festival de la Leyenda.
Todo se va haciendo poco a poco. Hace
algunos años
se empezó este bello parque, todavía nos falta,
pero me decía la Ministra de la Cultura (María
Consuelo Araújo), ¿qué nos falta, Ministra,
que ves de platica que esté en camino para terminar
lo que hace falta y cuándo lo podremos tener totalmente
listo?
María Consuelo Araújo, ministra de Cultura:
Muy buenas noches. El año pasado, Presidente, usted
se comprometió a conseguir 2.300 millones de pesos para
la terminación del Coliseo y el Parque de la Leyenda.
Tal como fue su compromiso, los recursos se adicionaron gracias
al acompañamiento del Congreso de la República,
y los recibimos en el mes de diciembre.
Durante estos primeros meses del año terminamos los
camerinos, los locales comerciales y las cabinas del ensayo,
por valor de 500 millones de pesos. Y próximamente terminaremos
el parque con los 1.800 millones que nos quedan. Pero no queríamos
empezar la licitación y el proceso de construcción
antes de que pasara el Festival, para no interrumpir el goce
de todas las personas que van a venir esta semana a la ciudad.
La buena noticia que tenemos, además, es que la Gobernación
va a sumar recursos a estos 1.800 millones que ya tenemos y
que van a ser contratados gracias a la gerencia de Fonade.
Eso significará el parque con el bosque del amor amor,
el callejón de los cañagüates, y todo lo
que soñó el diseñador Santander Bolaño
y La Cacica cuando pensó en este parque.
Presidente de la República: Bueno, entonces pidámosle
a mi Dios que nos dé vida para encontrarnos dentro de
un año aquí mismo y tener completamente terminadas
las obras exteriores a las cuales se acaba de referir la Ministra.
El Alcalde se ha referido al tema de
la reubicación
de las viviendas de la zona del río Guatapurí.
Estamos comprometidos, Alcalde.
Ese trabajo conjunto nos permitirá en agosto entregar
700 viviendas. No vamos a permitir que a medida que las personas
se trasladen a sus nuevas casitas, decentes, cómodas,
con zonas recreativas, se ocupen los lotes que dejan en la
orilla del Guatapurí. Las construcciones hay que demolerlas
e ir integrando los lotes a un gran parque popular, que empiece
en Hurtado, más arriba en la Sierra, donde nace el río,
y que termine, ojalá, donde las aguas del Guatapurí,
ya mezcladas con las del Cesar, desembocan en el Magdalena.
Ese compromiso lo vamos a cumplir a cabalidad. Las casitas
están en construcción.
Esta noche nos decía el Procurador que ya una tarea
que él ha venido gestando en Bogotá con el Alcalde
y el Gobernador, va bastante adelantada: un acuerdo con el
joven Ministro de Agricultura (Andrés Felipe Arias) –ministros
jóvenes, ahí los tienen, la Ministra de la Cultura
(María Consuelo Araújo) y el Ministro de Agricultura,
nombrados jovencitos para que queden hipotecados a servirle
toda la vida a Colombia, esa es la razón de haberlos
nombrados tan jovencitos-.
El Ministro de Agricultura atendió ese reclamo del
Procurador y de las autoridades del Cesar y ya se está firmando
un convenio para entregar un lote del Idema y hacer un gran
conjunto residencial para los profesionales de esta ciudad.
Esta tarde vimos el lote y le dije
al Gobernador y al Alcalde, ‘yo
no pongo sino una pequeña condición: preserven
los árboles que son tan bellos, llevan tantos años
y que reemplazarlos es tan difícil’.
Estamos gestionando ese sueño del Alcalde, el proyecto
múltiple de Besotes. El compromiso es un crédito
internacional, la Nación lo avala y el departamento
ayuda a pagarlo con las regalías de carbón.
Hemos avanzado mucho en seguridad social.
Cuando este Gobierno empezó 80 mil ciudadanos de Valledupar tenían
afiliación al régimen subsidiado de salud, hoy
casi 170 mil. Cuando este Gobierno empezó 376 mil ciudadanos
del Cesar tenían afiliación al régimen
subsidiado de salud, hoy hay 207 mil más, pero el Alcalde,
el Gobernador y yo nos comprometemos que dentro de un año,
si nos podemos citar aquí mismo, si la Providencia nos
cuida a todos ustedes y a nosotros la vida, aspiramos decir
que toda la gente de los estratos 1 y 2 del Cesar estará afiliada
al régimen subsidiado de salud.
Porque si ustedes me preguntaran qué Colombia quiero,
les voy a decir una Colombia con 4 características:
sin droga, sin terrorismo, sin corrupción, con justicia
social, y una quinta característica, con vallenatos.
Es la Colombia que queremos.
Hemos avanzado muchísimo con el Sena, pero queremos
completar esa revolución. Cuando empezamos, en este
departamento apenas se formaban 16 mil por año, este
año debemos formar en el departamento del Cesar más
de 50 mil jóvenes en el Sena. Todos los municipios empiezan
a tener presencia en el Sena y estamos trabajando ese bellísimo
programa de Jóvenes Rurales.
Confío el 20 de julio decirle al Congreso de Colombia
que Bienestar Familiar ha aumentado en 4 millones los usuarios,
con proyectos como el restaurante para 400 mil ancianos, el
subsidio para 170 mil ancianos y un desayuno para un millón
de niñitos menores de cinco años, y que el Cesar
participe en eso.
Seguiremos recuperando la agricultura,
a pesar de las dificultades con el precio del algodón y del maíz. Pero vemos
mucho futuro para la producción de combustibles biológicos
a partir de la yuca, de la caña de azúcar, de
la palma africana. Mucho futuro al café orgánico,
mucho futuro al cacao. Recuperar el Cesar agrícola es
uno de nuestros sueños.
Cuando este Gobierno empezó, Colombia exportaba 32
millones de toneladas de carbón. Este año exportaremos
56 millones de toneladas de carón, con un gran beneficio
para el Cesar, para La Guajira, y hemos acelerado la recuperación
del ferrocarril.
Pero así como a este parque le faltan tantas cosas,
a lo social y a lo económico le faltan muchas.
Qué bonito el homenaje que le rinden a Rafael Escalona.
Maestro, mi generación ha vivido muy triste porque no
ha tenido un día de paz, pero su inspiración,
su nobleza, ha hecho que mi generación tenga sueños,
sueños bellos, y en medio de las dificultades de la
violencia sus canciones han hecho feliz a mi generación.
Muchas, muchas gracias.
Y al lado suyo le rinden homenaje a
otra fábrica de
ensueños, a Leandro Díaz, que ha tenido el alma
por sus ojos y en su alma ha tenido sus ojos, que nos ha visto
a todos a través de la nobleza de su alma.
Y le rinden un homenaje a Adolfo Pacheco
Anillo, nacido en San Jacinto. Ese compositor de los Montes
de María,
internacionalizado con “La Hamaca Grande”, “El
Viejo Miguel”, “El Mochuelo” y “Mercedes”.
Y a Calixto Ochoa, rey del Festival
en 1970, su talento se ha reflejado en “La Ombligona”, “Compae Menejo”, “Todo
es para ti”, “El Africano”, “Marta
Marilí”, “Lirio Rojo”, “Los
Sabanales”.
A Emiliano Zuleta Baquero, esa institución del folclor
vallenato. Esta noche su hijo “Poncho” nos guiaba
interpretando el himno de la Patria.
Y un homenaje póstumo a Tobías Enrique Pumarejo
Gutiérrez. “Don Toba” estudió en
mi ciudad de Medellín, fue uno de esos primeros contactos
que crearon esa unión permanente entre mi pequeña
comarca y esta comarca vallenata. A todos ellos, un homenaje
del alma.
Esta tierra tiene carbón pero eso no es suficiente.
Esta tierra tiene agricultura pero eso no es suficiente, esta
tierra tiene un gran futuro en la producción del alcohol
carburante pero eso no es suficiente. Esta tierra tiene algo
que es más que suficiente: el corazón de cada
uno de ustedes, mis compatriotas del Cesar.
Yo tengo solamente una promesa que
hacerles, un compromiso que reafirmar con ustedes, de la
mano del Procurador, de la
mano del Alcalde, de la mano del Gobernador, de la mano de
las Fuerzas Militares y de Policía de la Patria: devolverle
a esta tierra la paz, la paz total, para que los cesarences
puedan desplazarse por las carreteras, trabajar tranquilos,
para que las inspiraciones de los dúos vallenatos no
tengan que estar motivadas en leyendas de sangre sino siempre
en alegres ilusiones.
Yo soy un contrasentido, porque tengo
un alma de deliberación,
de demócrata, y al mismo tiempo un espíritu de
soldado y de Policía. Mientras ejerza la Presidencia
de la República, mis compatriotas en mí tienen
un soldado y un Policía al servicio de la Constitución,
de la Ley, del orden y de la paz para que vuelva la alegría
a esta tierra.
Muchas gracias a los colombianos que
vendrán de todas
las regiones, muchas gracias a usted, presidente Samper, a
usted embajador Moreno, a su señora Gabriela, que tanto
quiere esta tierra, muchas gracias a los alcaldes de las ciudades
venezolanas que nos acompañan, a sus delegaciones musicales,
porque con usted, presidente Samper, todos ellos encabezan
esa peregrinación anual que congrega a tantos para sentir
desde aquí las mejores vibraciones del alma colombiana.
Las almas que quedan tristes esta semana vibrarán alegres
cuando sientan desde Valledupar los pentagramas del acordeón.
Muchas gracias.