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CONMEMORACIÓN DE LOS 50 AÑOS DE EPM
Agosto 6 de 2005 (Medellín – Antioquia)

Compatriotas:

Acudo esta noche a la ciudad a expresar la felicitación de todos los colombianos por la labor de Empresas Públicas de Medellín, a agradecer a Empresas Públicas lo que ha hecho por la ciudad y por toda Colombia.

Hace ya algunos meses, en la compañía del doctor José Roberto Arango, nos propusimos la tarea de resolver dos viejos litigios, el litigio del tren metropolitano y el litigio de la reclamación de Empresas Públicas a Isagen y se logró, lo cual le dio bastante tranquilidad al sistema de transporte masivo de Medellín y por el otro lado despeja el futuro de Isagen.

Conversando con compatriotas de otras regiones, me decían, Presidente, ¿pero por qué le dieron es financiación a Antioquia y a Medellín si son muy ricos? Es una distorsión que hay en la mente de mucho compatriota, y que con paciencia y permanente pedagogía debemos disipar.

En todas partes contesto: miren la topografía de Antioquia, 125 municipios a lo largo y ancho de una topografía tan difícil, apenas tres terrenitos planos, no tiene Antioquia regalías de petróleo, su carbón muestra todas las dificultades para la exportación, lo que pudo ser una bonanza aurífera, no lo fue, y cuando abundamos en esas explicaciones y a ello le sumamos los indicadores sociales que son bastante preocupantes, acostumbro a decir a mis compatriotas de otras regiones, la riqueza de Antioquia, radica en el ejercicio de la laboriosidad de sus ciudadanos, en casos de capitalización social y tan importantes como Empresas Públicas de Medellín, o el Idea, Instituto para el Desarrollo del Departamento y de pronto con un futuro más incierto en su propia fábrica de licores.

Y recuerdo a mis compatriotas. ¿Qué habría sido del país si Antioquia no construye ese conjunto de represas, primero en el norte del departamento y luego alrededor del complejo Peñol-Guatapé?

La verdad, es que fueron visionarios los creadores de Empresas Públicas de Medellín, juiciosos en grado sumo, todos sus administradores, haber conseguido este capital social para una tierra muy bien dotada en la inteligencia y en el empuje de sus pobladores, muy pobre en sus recursos naturales.

Al felicitar a todos los alcaldes de Medellín, a los gobernadores del departamento, al actual gobernador, al actual alcalde, al gerente, al doctor Juan Felipe Gaviria, a su equipo, quiero también mencionar entre todos a uno de los ausentes, a Diego Calle Restrepo, de quien dijera el presidente Valencia, “gobernaba con unas manos firmes como el acero y puras como el oro”.

La frase de Valencia, es aplicable no solo, a ese antioqueño sobresaliente, de dimensión infinita que fuera Diego Calle, sino a lo que ha sido la regla histórica del manejo de Empresas Públicas de Medellín, que ha producido este magnifico resultado.

El futuro. En el caso de las telecomunicaciones, enfrentamos grandes desafíos, mi generación que todavía se siente muy vigorosa, no soñó con Internet, ni con esta revolución inalámbrica.

Nosotros en el Gobierno Nacional hemos reformado 152 empresas, desde Telecom, el Banco Cafetero, redes de hospitales, Inravisión, faltando muchas especialmente en el sector de la salud.

Telecom pasó de ser una empresa que estaba perdiendo 400 mil millones al año a una empresa que el año pasado obtuvo ganancias por 950 mil millones, pero ahí no nos podemos quedar, para salvar ese patrimonio público, para salvar el derecho de los colombianos a tener servicios de vanguardia, para poder pagar las pensiones a ese universo de jubilados de Telecom y evitar un problema más grave al fisco nacional que se daría en el momento que se cargara el peso de esas pensiones contra el Ministerio de Hacienda, Telecom tiene que continuar su proceso reformista, por eso, para preservar ese patrimonio público, no para enajenarlo, estamos en la búsqueda de aliados estratégicos.

Esta semana, era la tesis que traíamos al foro, en buena hora convocado por el periódico El Colombiano, y sin querer hablar directamente de la reforma que se discute en este momento en el Concejo de la ciudad, me pareció que era mejor utilizar la generosa invitación que me hacían allí para referir nuestras reformas en el sector nacional de las telecomunicaciones y no obstante que la trayectoria de las dos empresas son incomparables, decirle a mis coterráneos, que aquello que hemos visto como el gran desafío en el área de comunicaciones frente al caso de Telecom, no puede ignorarse en Empresas Públicas de Medellín, ni lo podemos ignorar en el Gobierno Nacional que continuamos al frente de Emcali para salvarla, ni lo puede ignorar la Empresa de Teléfonos de Bogotá.

Por eso, yo comprendo la reforma que aquí se propone, que no es una reforma para privatizar un patrimonio, que más que público es social, que no es una reforma para despojarse de un patrimonio que es un gran capital social de nuestro pueblo, que no es una reforma para renunciar a esas utilidades que como lo manifestara el señor Alcalde (de Medellín, Sergio Fajardo), dar la posibilidad de que esta ciudad avance en inversión social.

La utilidad industrial de Empresas Públicas de Medellín que se transfiere a la ciudad, es una fuente de recursos que la ciudad no tendrían manera de reemplazar para adelantar sus programas de inversión social.

Comprendo la iniciativa de las autoridades de la ciudad de enfrentar visionariamente el reto de la revolución de las telecomunicaciones y avanzar con toda la agilidad administrativa para que las empresas salgan adelante frente a ese desafío.

Yo creo, que hay algo en esa propuesta que tiene que quedar claro en la mente de todo coterráneo, no hay asomos de privatizar, no hay asomos de que se deteriore ese patrimonio público, de que se afecte esa fuente de utilidades tan importante para que la ciudad avance en lo social, pero si es imperativo tener flexibilidad, tener posibilidades de cuantas alianzas estratégicas y cuantas ofertas de servicio sean necesario implementar.

Hablando del futuro, esa discusión tiene que ser tranquila e imaginativa. Las diferentes opciones tienen que tener un punto de encuentro: la preservación de este patrimonio, pero es preferible dar el camino de esas reformas que correr el riesgo que esos patrimonios se deterioren.

Mañana en la Quinta de Bolívar de Bogotá a las 10:00 de la mañana, lanzaremos un documento que venimos construyendo hace meses: Colombia Segundo Centenario. Una visión de nuestra Patria al 7 de agosto del 2019, integral, con metas parciales para el 20 de julio del 2010 y con un gran acople a las metas sociales del milenio.

Queremos que con espíritu profundamente democrático y plural, el país discuta este documento que entregamos como un primer borrador, para que la Nación, al dar el paso de un plan cuatrienal de desarrollo a otro tenga, como base también y como fuente esa discusión pública y esa visión de futuro. Y allí entra el tema de los servicios públicos, con ese liderazgo que todos los colombianos reconocemos a Empresas Públicas de Medellín, servicios públicos de cobertura universal, eficientes, solidarios, servicios públicos con actores públicos, con actores estatales sin clientelismo y sin abusos.

Servicios públicos sin antagonismos entre usuarios y proveedores, servicios públicos con unos nuevos instrumentos de mercadeo social, de administración social, con pequeñas empresas comunitarias como las que dejamos instaladas hoy en Cupica, Chocó, para administrar unos servicios que desde hoy empezó a disfrutar esa comunidad y que la hacen sobresaliente en el Pacífico, de buena energía las 24 horas, de permanente acueducto, de buen alcantarillado.

Servicios públicos con instrumentos de participación ciudadana que aquí en Antioquia se dan por descontado por ese sentido de pertenencia de los ciudadanos frente a Empresas Públicas de Medellín, pero que tenemos que sembrar en otras partes de Colombia, donde hemos empezado como en el caso de Cali, a buscar ese objetivo, recorriendo el camino de hacer de cada ciudadano de Cali un socio, a través de un porcentaje mensual de la tarifa del fondo de capitalización social de EMCALI.

Servicios públicos con esquemas de mercadeo social, por ejemplo, con prepagos en la venta de energía y otros de los servicios.

EPM tiene que jugar, como la ha hecho hasta ahora, un papel de liderazgo en esa tarea, un papel de liderazgo en la promoción de la participación comunitaria, un papel de liderazgo en buena gerencia, en buena administración.

Cuando me reclamaban los compatriotas de Caldas y de Quindío, al principio de la administración, que ayudáramos para que entrara Empresas Públicas a esas electrificadotas, me decían “es que más que los recursos financieros, necesitamos el recurso de la buena administración de Empresas Públicas”.

Allí donde se presenta un problema de servicios públicos en Colombia, justamente por esa valoración de los colombianos al nivel gerencial, administrativo de Empresas Públicas, todo el mundo quisiera su presencia.

Futuro de Empresas Públicas, para seguir haciendo desarrollos hidroeléctricos como Porce III. El Gobierno que presido, a pesar de objeciones muy severas, tomó la decisión de dar el aval para que Empresas Públicas de Medellín acceda a los recursos en las líneas más favorables de los bancos internacionales a fin de financiar la construcción de Porce III.

Me han dicho, es que después de la Ley 142 el Gobierno no le puede dar avales a un actor público porque lo pondría en desventaja frente a los actores privados. Y he contestado: “¿y quién distinto a Empresas Públicas hace estos desarrollos hidroeléctricos? Todavía el país no conoce al sector privado haciendo estos desarrollos hidroeléctricos. ¡Qué tal que no tuviéramos a Empresas Públicas!”.

Recuerdo que cuando tuve el inmenso honor, el infinito privilegio de ser Gobernador de Antioquia, avanzamos con Eade en los proyectos de las pequeñas centrales y con firmas de consultoría de Antioquia para incorporar el capital privado. Mis sucesores no pudieron llevar eso a buen término por falta de interés en el sector privado y terminaron esos desarrollos a cargo de Empresas Públicas de Medellín.

Por eso, por la necesidad de tenerla fortalecida para los desarrollos inmediatos como Porce III y otros del futuro, la Nación debe brindarle todo el apoyo.

Aspiro que esta semana la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público nos apruebe ese aval, y reitero ante mis coterráneos toda la voluntad del Gobierno Nacional para perfeccionarlo después de una decisión que está tomada.

Cuando miramos al futuro, aparece Santander con toda razón reclamando Sogamoso y esta tierra nuestra reclamando Ituango. Me pregunto, ¿quién va a hacer a Ituango, si no es con el liderazgo de Empresas Públicas de Medellín? Puede que encuentre socios pero sin su liderazgo no aparece a la vista quién pueda cometer esa empresa.

Para facilitar esos desarrollos, nosotros hemos venido impulsando la exportación de energía. Creo que este año vamos a superar los 250 millones de dólares y buscamos nuevos mercados. Para ampliar el mercado ecuatoriano y llegar al mercado peruano, el Gobierno Nacional acaba de adjudicar la segunda línea del sur. En pocos días empezará la construcción. Va por el Huila, el Caquetá, Putumayo, Nariño.

Para ampliar esos mercados de exportación que le posibiliten a empresas como Empresas Públicas de Medellín abocar el desafío de Ituango, desde el principio de la administración solicitamos que Colombia entrara al plan Panamá-Puebla. Nos admitieron inicialmente como país observador y avanzamos en tres objetivos.

La línea de transmisión de energía que debe estar construida en el 2008 y que pone la posibilidad a Empresas Públicas de desarrollar Ituango y de vender energía hasta México.

La línea de conducción de gas que va más adelante, ya consocios panameños y colombianos identificados, definiendo entre dos opciones ambientales el trazado, ambas por el lecho del mar, una a partir de Cartagena y otra a partir de Necoclí.

Y por supuesto el tema de la carretera. La semana pasada en presencia del Presidente de Panamá, le dije a la prensa de ese país: miren el problema de la carretera hoy no es un problema del gobierno del Presidente Torrijos, es un problema de la opinión pública panameña. Esa carretera en algún momento la van a hacer, pro qué no la dejan hacer ya para que mi generación no tenga que resignarse a verla desde el cielo.

Si la preocupación es la preocupación ecológica, las circunstancias han cambiado muchísimo. Hoy gracias a la sensibilización ecológica, la gente está más dada a cuidar los recursos ecológicos cuando puede verlos, estudiarlos tocarlos.

El Darién cruzado por esa carretera, cuya conveniencia todo el mundo acepta, se facilita el cuidado del recurso ambiental, ignorado allá lo van a devastar sin que nos demos cuenta.

Hemos pedido que sean los medios de comunicación los que en esta etapa aboquen el tema de la carretera para despejar las dudas de opinión que se erigen en el gran obstáculo en la hermana Panamá.

¡Qué bueno que los directores de los medios de Antioquia hagan esa convocatoria a los otros medios nacionales de nuestra Patria, y a los medios de Panamá, para discutirla!

Cuando hablamos de Colombia 2019, entra el tema de la energía eólica, en un mundo que ve con inmensa preocupación el agotamiento de las reservas del petróleo.

En un mundo que anticipa que en 40 años es posible que ya no se esté utilizando el petróleo; y 40 años es un espacio de tiempo muy corto para hacer esa transformación.

La Guajira, con un potencial de 5 millones de kilovatios de energía eólica, ya tiene un principio de 20 mil kilovatios de Empresas Públicas.

El Gobierno que presido, en la primera reforma tributaria, después de hablar con el entonces alcalde de Medellín, doctor Luis Pérez; y con la Gerencia de Empresas Públicas, tomó la decisión que aprobó el Congreso de la República, de dar una exención a la energía eólica, y de ayudar –a través del Ministerio de Ambiente- a obtener los certificados ambientales del Banco Mundial, que tanto ayudaron a financiar ese proyecto inicial.

En el futuro, Colombia necesita que esos 20 mil kilovatios de energía eólica que hoy se generan en La Guajira, se vayan aproximando a los 5 millones, el potencial de la península. Y el gran actor tiene que ser Empresas Públicas de Medellín.

Por eso la contribución inicial del Gobierno Nacional fue el tema de la exención tributaria.

Y hablando de agua, en muchas partes de Colombia se reclama la presencia de Empresas Públicas por la calidad de su gerencia.

Y en Antioquia, en muchas regiones se demanda la presencia de Empresas Públicas.

El Gobierno propuso, y el Congreso aprobó, una deducción tributaria hasta del 40 por ciento del valor de las inversiones, para estimular –por ejemplo- que Empresas Públicas de Medellín lidere e invierta en acueductos regionales como el que se requiere en Urabá, en el occidente medio o en el bajo Cauca.

Yo celebro la decisión del señor alcalde (de Medellín, Sergio Fajardo) y del señor gerente (de EPM, Juan Felipe Gaviria), que comunicaron esta semana en el Foro Nacional de Servicios Públicos, de unificar el mercado de Antioquia, lo que va a traer grandes economías en materia de gerencia, en materia de administración, y va a ir cerrando la brecha entre las tarifas de Medellín –las más baratas de Colombia- y las del resto de Antioquia –de las más caras-.

Pues bien. El Gobierno Nacional, que ha venido reclamando el tema, tiene que cooperar para facilitar esa unificación del mercado. El Gobierno Nacional manifestó por mi conducto esta semana, la decisión de vender las acciones de EADE a Empresas Públicas de Medellín.

Pero para combinar eso, con la necesidad de construir esos acueductos regionales, apoyados por una generosa deducción tributaria del Gobierno Nacional, propusimos lo siguiente, que lo planteo de nuevo esta noche ante mis coterráneos: una permuta de acciones. Que se constituya ya, con el liderazgo de Empresas Públicas de Medellín, la empresa regional de acueductos, pensando en Urabá, occidente medio, bajo Cauca y otros. Y que el valor de las acciones de la Nación en EADE, se lo entreguen a la Nación en acciones en la nueva empresa de acueductos.

Así facilitamos la unificación del mercado antioqueño de energía. Y así vamos dando pasos para poder dotar a las regiones atrasadas en acueductos, de este servicio.

El señor Gobernador nos ha reclamado que se posibilite el ingreso del sector privado al acueducto regional de Urabá. Nosotros lo estimulamos sin que estemos en condiciones fiscales de adoptar un nuevo incentivo. Los hay, y muchos.

Durante los años fiscales 2004, 2005 y 2006, en virtud de la ley, se deduce a los inversionistas colombianos un 30 por ciento de sus inversiones, para poder estimular el crecimiento de la inversión en nuestra Patria y la generación de empleo.

Allí tienen un gran incentivo los particulares que quisieran entrar en el acueducto regional de Urabá, para que sea multipropósito y utilizarlo también como fuente del recurso hídrico para el riego de las plantaciones en la región y el mejoramiento de la competitividad.

Y el Ministerio de Agricultura y FINAGRO han ofrecido una excelente línea de crédito para quienes quieran invertir en ese tipo de proyectos de riego.

Esta semana el señor Ministro (de Agricultura, Andrés Felipe Arias) anunció la presencia del Fondo de Garantías Agropecuarias en sectores donde no había estado; y una línea de crédito muy generosa a la DTF, para quienes quieran invertir en actividades del sector agropecuario, como la mencionada.

¡Colombia necesita de Empresas Públicas de Medellín, como la ciudad lo ha necesitado!

Queremos que Empresas Públicas de Medellín le ayude a la Patria en el jalonamiento de todos estos proyectos. Empresas Públicas de Medellín es un caso social inigualable.

¿Por qué caso social? Más que por su propiedad estatal, por el sentido de pertenencia de los ciudadanos en relación con Empresas Públicas de Medellín.

Cuando vemos otras empresas estatales en diferentes regiones, que son objeto del vituperio de los ciudadanos y la desconfianza, nos damos cuenta que aquí lo que ha construido ese capital social es el buen manejo, el buen servicio de Empresas Públicas de Medellín, y ese recíproco afecto del pueblo.

Señor alcalde, doctor Sergio Fajardo; señor gerente, doctor Juan Felipe Gaviria: a ustedes, a todo el equipo directivo, de trabajadores de Empresas Públicas de Medellín, y a todos nuestros coterráneos, que llevan en el alma estas Empresas, muchas felicitaciones y la invitación para que asuman un gran papel de liderazgo, para que la Visión Colombia 2019 sea una realidad.

Muchas gracias.

 
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