XXVI ASAMBLEA DE AFILIADOS
DE LA CÁMARA COLOMBO-VENEZOLANA
Diciembre 06 de 2005 (Bogotá – Cundinamarca)
Compatriotas:
Quiero saludarlos
muy afectuosamente. Casualmente esta mañana por primera vez revelé, en una entrevista
al ex ministro Fernando Londoño, algunos temas
sobre los cuales todos los días se tejen de conjeturas
en los medios de comunicación y que tiene que
ver con las relaciones bilaterales.
Enmarque eso expresando,
que este Gobierno ha construido su política de relaciones exteriores, sobre varios
pilares: el primero, prudencia en el discurso; el segundo
eficacia en los resultados; el tercero, apertura universal;
y cuarto fraternidad democrática.
Preguntaba por ejemplo,
el ex ministro Fernando Londoño,
con el tema de los militares venezolanos que están
en Bogotá, porque, quiero mencionarlo, porque,
esto de las relaciones económicas no marchan solitas,
doctora Maria Luisa, esto tiene un fondo político
muy delicado, que hay que manejar con muchísima
prudencia todos los días, pretender que vamos
a aislar las relaciones económicas de las relaciones
políticas, en Colombia se aíslan muy fácil,
en otros países no, entonces ahí es donde
el Gobierno tiene que tener mucha delicadeza y el sector
privado les produce un impacto de tanta gravedad, una
imprudencia del Gobierno como una imprudencia del sector
privado.
Por ejemplo, preguntan
por el tema de los militares venezolanos que están en Bogotá, que las
decisiones del Gobierno de Colombia son contrarias a
la tradición del derecho de asilo, etcétera.
Yo he respondido lo siguiente: Colombia respeta su ordenamiento
jurídico, el ordenamiento jurídico internacional,
los derechos humanos y la soberanía de los países
hermanos, la de todos los países y tenemos que
ser especialmente cuidadosos en la soberanía de
los países hermanos.
En este caso no
se ha concedido derecho de asilo, tampoco se ha dado
una categoría, un tratamiento de refugiados;
se ha concedido una visa que les permite vivir en Colombia,
trabajar en Colombia y por supuesto tener la protección
que para todos los ciudadanos trae la Constitución
y el ordenamiento jurídico. Y ese tema es bastante
delicado, porque entonces empieza a relacionarse con
otros.
El tema de los abusos
de los terroristas colombianos en la frontera de los
países amigos. Ese es un
tema que se convierte en determinante de las relaciones
económicas como lo vimos en febrero, por eso esto
no se puede aislar. ¿Qué hemos dicho nosotros?
El Gobierno del presidente Chávez ha sido muy
cuidadoso y él mismo, en una relación franca,
cálida, amistosa, que para bien de nuestras dos
naciones hemos construido con él, en el sentido
de que ellos no albergan terroristas colombianos, que
abusivamente cruzan fronteras a cualquiera de nuestros
países vecinos, pero también han reclamado
otro tema; el asilo y la pretensión de asilo en
Colombia, de personas vinculadas a golpes de Estado en
Venezuela, eso nos obliga también a revisar la
historia del asil o, porque el asilo hay que concederlo,
el asilo es una institución profundamente más
que humanitaria, democrática, y la verdad es que
una cosa es, una actitud de un país frente a la
institución del asilo cuando hay de por medio
lucha democrática, que cuando hay golpes de Estado,
y eso hay que empezar a agitarlo claramente, yo no creo
que se pueda, entonces, crear incertidumbres sobre unos
temas económicos tratando de ocultar unos temas
políticos de gran sensibilidad.
La verdad es que
la crisis de febrero, no fue una crisis económica, fue una crisis política, auspiciada
por imprudencias en la comunicación colombiana,
pero imprudencias en cosas que desde acá se dijeron,
que produjeron un eco allá y crearon una crisis
que afortunadamente se pudo superar.
Tema por ejemplo,
de esos grupos paramilitares que estaban obrando allá. Esta mañana decía
yo: no es que el Gobierno esté olvidado de ello,
lo que pasa es que en las relaciones exteriores hay que
escoger entre el escándalo y la eficacia o la
eficacia. Unas relaciones internacionales manejadas con
escándalo producen conflicto, pero no producen
resultados eficaces, nosotros hablamos de todos estos
temas con mucha franqueza, con amistad, con espíritu
constructivo con el presidente Chávez, pero no
podemos salir a hacer escándalos; el Gobierno
colombiano tiene que tener allí dos preocupaciones,
convergentes, ambas válidas, una, por el respeto
a la soberanía del país hermano y otra
por la suerte de unos compatriotas, posiblemente equivocada
con una acción delincuencial que el país
no los puede abandonar.
Estos eventos para
llamar la atención, de que
el tema andino tiene unas sensibilidades políticas
que empiezan a ser más determinantes de lo económico,
que si ustedes me preguntaran qué es más
determinante en las sensibilidades andinas ¿lo
económico, lo político? Yo diría
que la mayor determinación la tiene lo político
sobre lo económico.
Por ejemplo, con
la hermana república del Ecuador.
Qué tema tan difícil para nosotros. Yo
estuve en Putumayo el sábado, allá se han
volcado a sembrar coca en los 10 kilómetros cercanos
a la línea de frontera, y el Gobierno ecuatoriano,
con el cual tenemos toda la solidaridad, todo el respeto,
nos pide que no fumiguemos allí, entonces uno
se pone en esta preocupación, ¿ah dejamos
que eso se inunde de coca?. Sembrar 10 kilómetros
de coca allí, es sembrar coca para causar un problema
en toda la tierra, eso es sumamente grave.
Esta mañana me decían: Colombia renuncio
a fumigar. No, ni riesgos. ¿Qué estamos
haciendo nosotros? El Gobierno ecuatoriano nos pidió una
pausa, la Canciller dijo, habrá una suspensión
temporal. ¿Cuándo? Una vez terminemos esta
ronda de fumigaciones que hay allá. ¿Qué va
a pasar después? Si reaparece la coca tenemos
que fumigar, si no reaparece no fumigamos, ¿ahora
que comprendemos nosotros? El Gobierno ecuatoriano tiene
una situación política que está relacionada
también con este tema, de lo cual tenemos que
ser muy respetuosos; para que hablar de la situación
política boliviana.
Entonces yo concluiría esta primera parte diciendo:
aquí se necesita prudencia de todo el mundo. Yo
creo que es tan grave, una alharaca contra la Comunidad
Andina en favor del TLC con Estados Unidos, como una
alharaca contra el TLC, con el pretexto de que va acabar
con la comunidad andina y esas alharacas no hacen bien
producidas por el Gobierno o producidas por el sector
privado, entre otras cosas porque nosotros hemos venido
trabajando no el criterio de que lo uno excluye a lo
otro, sino el criterio de que lo uno necesita a lo otro
y lo otro necesita lo uno.
El tema de la infraestructura: Colombia lo ha propuesto
y lo quiere llevara adelante. Nosotros quisimos cambiar,
desde el principio del Gobierno, una agenda de explosivos
políticos, por una agenda de obras concretas,
y yo creo que eso está en las memorias de todas
mis reuniones con el presidente Chávez. Yo creo
que eso es bien importante para las relaciones de los
dos países; cambiar una agenda de explosivos políticos,
por una agenda de obras completas. Entonces, en esa agenda
propusimos la salida de Norte de Santander por un puente
mejor, en la Fría, por una carreteras mejores
a los puertos venezolanos. Propusimos el gasoducto de
La Guajira a Venezuela, porque no obstante que las reservas
de nosotros en gas son mínimas, venimos agregando
pero continúan siendo mínimas, frente a
las reservas de la hermana República de Venezuela,
ellos tienen dificultades en el occidente, porque su
gran producción está en el oriente y todavía
no tiene debidamente conectado el occidente, propusimos
hacer ese gasoducto para alimentar el occidente de Venezuela,
y ellos aceptaron que mañana, pasado mañana,
cuando ellos estén debidamente conectados y nosotros
tengamos faltantes de gas, ese gasoducto servirá para
enviar gas de allá para acá.
Y después de mucho discutir yo tomé la
decisión de que nosotros diéramos vía
libre para que lo hiciera Venezuela, ¿por qué?,
porque primero se propuso que lo hicieran los dos gobiernos,
nosotros no teníamos la partida presupuestal,
propusimos que buscáramos un tercero del sector
privado, Venezuela no estuvo de acuerdo, y finalmente
en un gesto de hermandad, de solidaridad dijimos: bueno
que lo haga Venezuela, nosotros no tenemos ninguna dificultad
y yo creo que eso quedó claramente definido y
fue positivamente celebrado y recibido en la reunión
de Punto Fijo hace dos semanas, esos son todos detalles
políticos que muestran que hemos venido por el
camino de consolidar esa relación y que no es
bueno ni que el Gobierno la afecte ni que el sector privado
la llene de dudas, ahí se necesita mucha prudencia
de ambos.
Enseguida el tubo de Venezuela al Pacífico. Fue
propuesta nuestra y la hemos reiterado en todas las reuniones
con el Gobierno del presidente Chávez, ojalá se
instalará rápidamente ese tubo, nosotros
les hemos dicho, si lo instalan los chinos bien, si lo
instala Venezuela bien, no tenemos problema, están
discutiendo trazados, ojalá ya estuviera definido,
la voluntad política de Colombia está expresada,
es clara, ojalá eso se haga, creo que no va a
haber problemas en la navegación por el río
Meta, el río Orinoco, nosotros el año entrante
vamos a hacer una inversión, está en el
presupuesto Nacional, para empezar a mejorar la infraestructura
de navegabilidad en el río Meta.
Incluso en infraestructura hemos empezado a cumplir la
tarea que a Colombia corresponde como país que
une Suramérica con Centroamérica, una de
nuestras primeras decisiones en materia de política
exterior fue acercarnos a Centroamérica y lo hicimos,
y cómo fue de importante para la elección
del Presidente del BID, hoy es bueno recordarlo, qué tal
que no hubiéramos tenido ese acercamiento con
Centroamérica, cómo fue de importante ese
acercamiento con Centroamérica para la elección
del Presidente del BID, que será tan útil
para todos los países hermanos.
Y ahí hemos avanzados con unos temas que son fundamentales
para Suramérica, no solo para la comunidad andina,
el tema de la línea de transmisión de energía,
el tema del gasoducto y ojalá podamos despejar
el tema de la carretera.
La línea de transmisión de energía
debe estar construida en el año 2008, el gasoducto
se está estudiando qué va primero, si el
envío de gas comprimido en embarcaciones o la
construcción del gasoducto, pero ese es otro paso
de gran importancia y no solamente para conectarnos con
Panamá sino con el Plan Panamá- Puebla.
Hace 15 días se hizo la primera reunión
de directores de medios de comunicación de Colombia
y medios de comunicación de Panamá sobre
la carretera, porque el gran obstáculo que vemos
a la carretera es la opinión pública panameña.
Y todo esto ayuda muchísimo a la integración
andina y a lo que se ha llamado la integración
energética suraméricana, la verdad es que
esa perspectiva en el gasoducto al Plan Panamá-Puebla,
que lo ha estado activando Colombia, los grandes beneficiarios
van a ser los países Centroamericanos y Venezuela, ¿por
qué?, porque los grandes necesitados de gas son
los países centroamericanos e incluso México
y el gran proveedor va a ser Venezuela, Colombia no tiene
hasta hoy reservas descubiertas de gas que le permitan
ofrecerse al Plan Panamá-Puebla como proveedor.
Entonces tenemos una dimensión yo diría
que integral, grande de todo este proceso. Entonces hay
un tema político, hay un tema de infraestructura,
el tercer capítulo, es el capítulo de dudas
que advierte la intervención de la doctora María
Luisa sobre las relaciones entre la Comunidad Andina,
el tema MERCOSUR y el tema del TLC con los Estados Unidos.
Yo quisiera escuchar preguntas, comentarios y preocupaciones
de ustedes y procurando no faltar a la prudencia, tratar
de dar la respuesta más indicada. Entonces les
ofrecería la palabra sobre ese tercer capítulo
y que además es el motivo de la convocatoria de
esta reunión hoy, sobre eso les ofrezco la palabra
apreciados compatriotas.
Muchas gracias