DECLARATORIA DE LA SELVA DE FLORENCIA,
CALDAS,
COMO PARQUE NATURAL NACIONAL
Marzo
10 de 2005 (Bogotá – Cundinamarca)
Compatriotas:
Quiero felicitarlos a todos y por conducto del Gobernador y de
los alcaldes, quiero felicitar a la comunidad del departamento
de Caldas, a la comunidad de cada uno de los municipios, por la
iniciativa.
El Gobierno Nacional –lo ha dicho la Ministra (de Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial, Sandra Suárez)- lo ha
que hecho es, recoger una iniciativa que surgió en esta
querida región de la Patria.
Quiero felicitar a la Ministra, a su equipo,
a la directora de Parques, Julia Miranda Londoño. Y expresar
tres o cuatro preocupaciones sobre parques.
Me parece de la mayor importancia que podamos
avanzar en esa integración
entre parques nacionales y turismo ecológico, nada mejor
para cuidar los parques que sembrar sentido de pertenencia y crear
condiciones para que los colombianos los disfruten, para que los
aprecien. El que va a un parque nacional, lo conoce, lo interioriza,
se convierte en un guardián de ese parque.
Celebro que el Ministerio ya haya venido abriendo las licitaciones
para escoger los concesionarios.
Esta mañana tuve una reunión con las autoridades
del Magdalena, con sus gremios, parlamentarios, alcalde de Santa
Marta y hablamos del Tayrona, que está inserto ¿en
qué?: el departamento del Magdalena tiene el 40 por ciento
de su área geográfica, incluida en parques Nacionales.
Una riqueza que si no se maneja bien, se convierte en una limitación.
Ellos venían pidiendo, desde hace muchos años, que
se abriera la posibilidad del turismo ecológico en el parque
Tayrona, en buena hora el Ministerio ya ha dado ese paso, se ha
agotado la etapa de prepliego y esta misma tarde, Julia va a tener
una reunión final con las autoridades del departamento,
con la alcaldía de Santa Marta, gremios, para ultimar los
detalles del pliego de condiciones que ha de salir a consideración
de los proponentes ya en pocos días.
Y habíamos propuesto que la audiencia pública para
evaluar propuestas y para adjudicar la concesión se realice
en la ciudad de Santa Marta. Audiencia pública. Creo que
este proceso debe replicarse en todas partes, que oportunamente
se defina en qué lugar, de los departamentos del Eje Cafetero,
se hace la audiencia pública para adjudicar la concesión
del parque de Los Nevados.
Eso va de la mano con uno de los primeros
incentivos tributarios que se aprobó en el curso de este Gobierno. El Congreso
de la República en la primera reforma tributaria nos aprobó una
exención tributaria al ecoturismo y creo que eso va ayudar
muchísimo, en la medida que podamos tener buenos concesionarios
y avanzar en el tema de recobrar la seguridad en estos sitios de
esta Patria.
En el momento en que, como lo decía el Gobernador, recobremos
la seguridad en el oriente de Caldas, este sitio se tiene que convertir
en un polo de atracción turística de gran importancia,
además muy bien situado en todo el corazón del país.
Está cerca de toda parte. Está cerca de las grandes
ciudades, no es difícil venir de caribe colombiano por la
carretera del Magdalena Medio y subir a este parque. No es difícil
llegar del sur del país. Yo diría que es el parque
del corazón del país, en todo el centro.
Tenemos preocupaciones con otros temas.
Me preocupa el tema de la droga en los parques nacionales. Nosotros
hemos venido disminuyendo
la extensión sembrada en droga pero lentamente. Si, venimos
de 160 mil hectáreas pero todavía quedan alrededor
de 75 mil hectáreas. Eso es mucho. Este año tenemos
que fumigar otras 140 mil, a ver cómo descendemos más
ese hectariaje. El objetivo es: Colombia sin drogas ilícitas.
Pero me preocupa, por ejemplo, el parque
de La Macarena. Ahora estamos, desde hace semanas, con nuestra
Fuerza Pública,
en una operación contra las Farc, porque allí tienen
una zona de coca, que les produce, aproximadamente, 50 mil millones
de pesos cada dos meses. Son 17 mil hectáreas y de esas
17 mil hectáreas, hay aproximadamente 6 mil en el parque
de La Macarena.
Sería muy bueno que los ambientalistas piensen cuál
es el camino, nos den consejos, aquí hay toda la voluntad
política para eliminar definitivamente la droga en los parques
nacionales. Eso sí puede ser el mayor depredador, el depredador
mortal de los parques nacionales, que avance esa mancha de drogas
ilícitas en estos parques.
Quería también expresarles esa inquietud, porque
nosotros estamos implementando un proceso de erradicación
manual pero es muy lento, es que aquí no estamos hablando
de unos parquecitos de droga, aquí hay unas extensiones
muy grandes y yo creo que es mejor darse una pela de una vez y
limpiar de droga esos parques, que seguir en una eterna discusión
ambiental y asistir, como testigos, a que esos parques se acaben
porque no se procedió de manera efectiva contra la droga
que está plantada allí. Quiero invitar a esa reflexión.
Hay allí otros temas de gran importancia: el tema de los
parques y las carreteras, por ejemplo, la carretera del Darién.
A mi me da miedo que Las Américas sigan allí divididas
en materia geográfica, que mantengamos una carretera de
Panamá a Alaska y una carretera de Colombia a la Patagonia
y que nos estemos dando la espalda en el Darién y que mientras
avanza la discusión ambiental, avanza la depredación.
Cuando uno ve las actitudes, las inclinaciones
culturales de la nueva generación, llega muy fácil a la conclusión
de que la nueva generación no tiene alma depredadora, de
que la nueva generación tiene un alma de conservación.
Yo creo que abrir esa carretera es de gran
importancia para cuidar ese parque, para cuidar esos recursos
del Darién, en el
lado colombiano y en el lado panameño.
Tener eso allá, aislado, el mundo a penas conociéndolo
por fotos, sin una vía para que la gente pueda llegar fácilmente,
es exponernos a que allá solamente residan y acudan los
depredadores. Por eso en la reunión que voy a tener con
el Presidente de Panamá, el próximo domingo, vamos
a insistirle en la necesidad de que hagamos la vía, que
nos defina cuál es el sitio de encuentro en la frontera
de las dos vías y Colombia avanzaría.
Yo me hago esta composición de lugar: unos muchachos de
sexto de bachillerato, de universidad, que les hablen de ese parque,
que lo conozcan a penas por fotos o por videos, este que nos mostraron
aquí es muy bonito, pero siempre es mejor estar allá,
siempre es mejor ir a pasear allá, es mucho mejor ir a disfrutar
las quebradas que vimos, allá, que solamente poder verlas
en el video.
Entonces, a los muchachos les muestran
ese parque en video, no lo pueden disfrutar, no lo conocen, ¿qué sentido
de pertenencia se les despierta? En cambio, los montan en una buseta
y hacen una excursión y van allá y cada uno se convierte
en un guardián de ese parque.
Creo que el debate deberíamos de superarlo y deberíamos
todos, ponernos de acuerdo en que lo que se necesita es que la
ciudadanía de Colombia, de todos los países, pueda
conocer esos parques y que cada ciudadano que lo conozca que viva
muy sensibilizado y se constituya en guardián de esa alcancía
de recursos naturales. La discusión es válida para
muchos sitios. Colombia no tiene sino dos salidas viales al Pacífico,
la de Pasto – Tumaco y la de Cali – Buenaventura, necesitamos
la tercera. Venimos pavimentando la carretera de Pereira – Pueblo
Rico – Santa Cecilia – Tadó, llamada a comunicar
Bogotá – Eje Cafetero con el río Atrato, en
el Chocó, pero estamos muy cerca del Pacífico, falta
un tramito ahí de 45 kilómetros, que es el tramito
entre las Ánimas y Nuquí. Ojalá podamos tener
rápidamente la licencia ambiental y hacer ese tramo.
Creo que es válida la preocupación que he expresado
sobre el Darién, mientras discutimos y lo hacemos o no,
lo depredan. Abierta esa carretera, gracias a lo que piensa la
nueva generación, a la sensibilización que han logrado
las corrientes ambientalistas de Colombia y el mundo, esa carretera
se convierte en un factor de cuidado de esos sitios tan importantes
en materia de recursos naturales.
Qué bueno que los ambientalistas nos ayudaran con la opinión
pública de Panamá. Dispuestos nosotros a hacer el
compromiso que haya que hacer, para que la opinión pública
de Panamá entienda que la mejor manera de preservar ese
parque es haciendo la carretera, con todos los condicionamientos
y ponernos de acuerdo los dos gobiernos en todas las regulaciones
para visitar y para permanecer por unos días, de turismo,
en el área. Yo creo que ese sería un gran paso.
Los felicito, ¿cuándo será que
me dejan ir a mi, a unas vacaciones en esas quebradas tan bonitas
de ese parque?
Y finalmente, ¿sabe qué me gusta? Que veo que es
un parque donde no hay disputa entre los ecologistas y los propietarios
tradicionales. Allá hay unos propietarios tradicionales
que tienen un hectariaje, el departamento y la Corporación
habían comprado parte de ese hectariaje –un gran porcentaje,
entiendo que municipios también, pero quedan unos propietarios.
Y me dice la Ministra que están comprometidos en la tarea
de conservación, que tienen cultura de conservación
y es muy importante, en lugar de mantenerlos a todo hora muertos
de miedo que los van a ir a sacar, el Estado, sin con qué expropiarlos,
sin con qué indemnizarlos, es mucho mejor volverlos amigos,
convertirlos en celadores de ese parque, en guardianes de esos
recursos ecológicos y así se logra un acuerdo que
le conviene a todo el mundo.
Le conviene a ellos –que no los van a sacar de allá-
, le conviene al país –que ahí va a tener unos
socios naturales para la preservación de ese recurso natural-
y le conviene a todo el mundo. Ese creo, que es muy buen punto:
un sistema de coexistencia, de convivencia con residentes, históricos,
consuetudinarios de un parque natural. En lugar de lanzar la ofensiva
de lanzarlos de allí, buscar la manera –como lo han
encontrado en este territorio- de entenderse con ellos para que
contribuyan eficazmente al cuidado del parque.
Muchas gracias.