CONGRESO NACIONAL DE
LA PAPA
Noviembre 11 de 2005 (Bogotá – cundinamarca)
Compatriotas:
Acudo con gran fe en Colombia
a reunirme esta mañana
con ustedes, los productores de papa mi Patria.
En este trigésimo aniversario de la Federación
Colombiana de Cultivadores de Papa, quiero rendir un
homenaje a quienes la fundaron, un homenaje a quienes
la han sostenido todos estos años, un homenaje
a sus directivos, a la doctora Sonia Navia de Mosquera,
la presidente de su Junta, a todos los integrantes de
la Junta; don Francisco Botero, Luis Eduardo Gutiérrez,
Eduardo Ordóñez, Filadelfo Pulido, Jairo
Avendaño, Freddy Manrique, José Arnulfo
Jojoa, Víctor García, Raúl Quevedo
Rey, Pedro Bernal, Jaime Enrique Velásquez, Carlos
Botero Botero, Rodrigo Vallejo Tabares, Jorge Hortúa
Camargo, Ramón Pardo.
Un homenaje al doctor Augusto
del Valle Estrada, gran directivo gremial, a todos
los funcionarios de la Federación.
Ustedes han hecho un esfuerzo
enorme por la seguridad alimentaria de Colombia en
momentos muy difíciles. ¿Cuántas
crisis de precios han tenido que transcurrir? Unas más
extensas que otras, unas más agravadas que otras,
porque una crisis extensa en el precio de la papa, sumada
a un encarecimiento de insumos, sumada a un encarecimiento
de tasas de interés, sumada a la violencia en
los campos colombianos, es una crisis devastadora y ustedes
han logrado sobrevivir crisis con ese cuadro clínico.
Si ustedes hacen una reflexión interna, verán
que a muchos le ha tocado eso. Bajito el precio, larga
la fase de precios bajos en el ciclo, muy altos los insumos.
La doctora Sonia nos recordaba
que en el campo lo hemos sentido apenas con unos pocos
genéricos que tenemos,
hemos empezado a sentir los primeros alivios. Y no hace
mucho tiempo, eso es casi de los últimos años.
Y súmenle a eso otras cosas que les ha tocado
a ustedes. Tasas de interés. En la última
crisis de la economía colombiana que transcurrió no
hace mucho rato, apenas unos poquitos años, en
el campo colombiano tuvimos que pagar tasas de interés
entre el 50 y el 80 por ciento al año.
Y no era propiamente de créditos contratados
con agiotistas, era de créditos obtenidos a través
de FINAGRO.
La verdad es que yo veo este
gremio y tantos gremios de mi Patria y digo “cómo han sobrevivido”.
Diría yo que no estamos en los gloriosos, pero
el país tiene unas tendencias positivas que si
las manejamos bien pueden llevarnos a superar muchos
problemas.
Cuando entré, alguno de ustedes me habló de
un tema de orden público. Nosotros, apreciados
cultivadores de papa, necesitamos continuar y profundizar
y mejorar la política de Seguridad Democrática.
Esta tarde en el aniversario
de la Fuerza Aérea
Colombiana FAC, yo voy a referirme en especial a algunas
regiones donde tenemos que hacer superiores esfuerzos,
como los que hemos redoblado en Nariño en las últimas
semanas.
Estuve allá el lunes hace 15 días, en
Ipiales, tuvimos un consejo de seguridad de siete horas,
tomamos unas medidas, el señor Ministro de la
Defensa regresó con los Altos Mandos, yo estuve
de nuevo ayer en Pasto. Pusimos en cabeza del señor
General Carlos Eduardo Ávila la responsabilidad
de permanecer en Nariño y coordinar toda la acción
de orden público y demostrarnos resultados.
Ayer encontré más presencia nuestra en
esa carretera a Tumaco, encontré una acción
más agresiva para capturar extorsionistas en Pasto,
en Túquerres, en Ipiales.
El Ejército bastante comprometido con corregimientos
tan importantes para ustedes como son Miraflores, Chiles,
La Victoria, una acción muy resuelta de la Policía
para acabar el narcotráfico en Llorente, me he
dicho: cómo es que un municipio de cinco mil habitantes
como Llorente, va a tener unos carteles de la droga como
los de otrora, en Medellín y Cali.
Allá hay que meter a la cárcel a todo
el que esté en eso, lo mismo que en Barbacoas.
Le dicen a uno que en Barbacoas han prosperado los almacenes
de insumos agropecuarios no para producir papa, allá el
clima no lo permite, ni agricultura de tierra caliente
sino para producir coca.
Allá hay que fumigar y arrancar la coca, meter
a la cárcel a los traficantes y meter a la cárcel
a los distribuidores de insumos agropecuarios que le
estén ayudando a los narcotraficantes, y en eso
estamos en Nariño.
Sólo hemos cogido a demostrar que las instituciones
si pueden, nos tenemos que aplicar a eso. A mi me sorprende,
me duele mucho que ya con 39, casi 40 meses de este Gobierno,
todavía tengamos problemas como el que tenemos
en la carretera Junín – Barbacoas donde
hay unos vehículos transportando gasolina simplemente
para entregarle al narcotráfico, y ese narcotráfico
es el que alimenta todos esos grupos de extorsionistas,
secuestradores, de terroristas.
Vamos a aplicarnos a eso.
Yo voy a mencionar esta tarde
siete, ocho puntos problemáticos
de la Patria, porque la política de Seguridad
Democrática ha mejorado la situación, pero
no es para cantar victoria amigos.
Vamos ganando, pero no hemos
ganado. Ahora, en la medida que la afiancemos nos va
a dar más tranquilidad,
más inversión y más empleo, y también
va a crear condiciones para la paz.
¿No pensarán en algún momento los
que quedan en los paramilitares, las FARC y el ELN que
la política de Seguridad Democrática es
una garantía para que ellos negocien? Yo creo
que sí, y que deberían entrar a reflexionar
sobre eso.
Me dicen a toda hora: “Presidente, es que el discurso
suyo es muy duro”. Ayer le decía a los militares,
vamos a hacer un pacto: Seamos más efectivos en
la acción a ver si yo puedo suavizar el discurso.
Entonces, si el problema para
que las FARC y el ELN quieran hacer la paz es que yo
suavice el discurso yo
lo hago, si lo que tengo que hacer para que hagan la
paz es no decirle terroristas yo no tengo inconvenientes
en decirles ‘arcángeles’, pero que
hagan la paz, queridos amigos.
Yo confío que la insistencia en la Seguridad
Democrática es garantía para que ellos
hagan la paz.
¿Que quieren hacer política? La política
de Seguridad Democrática es garantía para
todo el mundo. Hoy reitero aquí ante ustedes que
este Gobierno tiene una razón de orgullo por Colombia,
una razón de sensibilidad por Colombia, es que
este proceso electoral sea totalmente garantista, por
Colombia, por nuestra Patria, por la generación
de empleo, por la confianza.
Les iba a proponer una cosa:
que los comités
de la Federación, en toda parte, tengan una gran
coordinación con Ejército y Policía.
Yo estoy dispuesto, doctor Augusto, doctora Sonia, a
que tantas reuniones como se necesiten con el Ministerio
de Defensa para coordinar eso, lo hagan.
Ahora, ustedes han ayudado mucho.
Están ahora
en un caminito bueno de precio, están transitando
un buen momento, pero les tocó un final de 2003
y un 2004 muy malo y sin embargo recuperaron áreas,
hicieron un buen patriotismo, ustedes, extendiendo el área
sembrada en papa para ayudarnos a generar empleo, a llenar
allí los vacíos que se estaban produciendo
con la acción militar, ese terrorismo sacándolo
de allí, me parecía ver en esas zonas frías,
adelante la Fuerza Pública y detrás ustedes,
sin importar el precio lo hicieron con un gran patriotismo
y yo he venido hoy a agradecérselos.
Pero tienen que seguir haciéndolo.
Se acreditaron para que les pidamos que sigan haciendo
eso, apreciados
paperos.
Entonces, estén en coordinación, en todas
las regiones, con Ejército y Policía, y
DAS. Yo le he pedido a la Fuerza Pública, miren:
se necesita una gran coordinación, se necesita
una gran coordinación con la sociedad civil y
esa coordinación exige que nosotros en la Fuerza
Pública tengamos las puertas abiertas los teléfonos
disponibles para recibir cualquier queja, cualquier reclamo,
cualquier denuncia de ustedes. Y que ustedes tengan confianza
en su Fuerza Pública para acudir a ella. Esto
no lo sacamos adelante si no hay una gran coordinación
en un marco de construcción de confianza entre
los colombianos de bien y su Fuerza Pública y
su administración de justicia. Quería sugerir
eso.
En el tema social. Yo confió que el país
ya en un tramo corto pueda decir que ha logrado cobertura
total en educación básica.
Colombia a mi juicio necesita
lo siguiente, apreciados papicultores: seguridad democrática, respeto a
las libertades, construcción de justicia social,
que es cohesión social; transparencia y el respeto
a las instituciones de nuestro ordenamiento jurídico.
Y para tener toda la credibilidad
en la comunidad internacional, yo creo que requerimos
fijarnos obsesivamente en tres
mensajes a la comunidad internacional: la Seguridad Democrática,
la transparencia que es la derrota de la corrupción
y el cumplimiento de las metas sociales del milenio.
Los agricultores de mi Patria,
y eso lo veía
hace 15 días en la asamblea de la SAC, tienen
una gran preocupación por el tema de las metas
sociales: vamos a cumplirlas, con la ayuda de Dios.
Estamos en el 91 por ciento de
cobertura de educación
básica y tenemos que llegar a ciento por ciento.
Hay que continuar esta revolución del Sena, esta
revolución de calidad. Hay muchas dificultades,
pero en eso hemos mejorado. Yo creo que los esfuerzos
de nutrición que se están haciendo grandes,
pero todavía insuficientes, van a ayudar más,
porque el problema de desnutrición de los sectores
más pobres es una gran limitante a la escolaridad
y es un gran impulso a la deserción.
Yo confió también que cumplamos las metas
de salud. Aquí esta el viceministro Eduardo Alvarado,
de una tierra de papa como Nariño.
Cuando este Gobierno empezó teníamos 10.5
millones de colombianos en el régimen subsidiado
de salud. Este año terminamos con 18 millones.
Con la ayuda de Dios en dos años, los 26 millones
de colombianos que integran los estratos uno, dos y tres
deben tener plena cobertura para que esos temas dejen
de ser temas del discurso y pasen a ser temas de resultados.
Confió que eso se pueda dar.
Es muy importante el trabajo
de ustedes con el Sena y que coordinemos la investigación. Ayer me hicieron
un reclamo en Nariño por una finca de Corpoica
y por el cierre de Corpoica. Esa finca se había
convenido que se le entregaba a la universidad, pero
yo creo que hay que hacer, Viceministro, lo sugiero con
mucho respeto, un gran convenio de investigación.
Son 500 hectáreas, me dicen que de un suelo volcánico
de muy buena calidad. ¿Así es? Yo no la
conozco. ¿En qué parte queda? En las faldas
del Galeras. ¿Saliendo de la ciudad o por la otra
cara? Empieza uno a subir por Pasto, no tiene uno que
ir a subirse por Consacá.
Yo creo que hay que hacer ahí unos convenios
con los diferentes gremios, la universidad. Yo rogaría
una gran acción de conjunto y que empecemos a
mostrar resultados gremios del sector agropecuario, Corpoica,
universidad, Sena y Colciencias.
Mire, ayer me decían allá que tienen un
gran problema porque Nariño en la tierra fría
todavía no sabe que pasto utilizar. Definitivamente
los tetralites, y lo ve uno en las tierras más
fértiles del mundo, en las tierras de estación,
no son pastos perennes. Son muy exigentes de agua, son
muy exigentes de abono y por bien que unos los trate
durando mucho, durante tres, cuatro años. En Nariño
tiene un problema de luminosidad que dicen los expertos
que no les permite tener una buena producción
de kikuyu, así alternen esos pastos con papa,
que la papa es el gran nitrogenante, es el gran fertilizador
de los pastos.
Yo creo que la papa y la porcicultura hay que entenderlas
como agroindustrias fertilizantes de suelos, mejoradoras
de suelos.
Entonces en Nariño ve uno un gran problema, una
gran necesidad de investigación, para no citar
sino ese caso el de Pasto, y muchos temas en el país.
Yo les pregunte ayer bueno, yo tengo claro que en esa
tierra caliente nariñense hay que producir palma
africana que tiene todo el futuro, no solo porque es
el aceite con colesterol bueno, sino por el biodiesel.
Hay que producir caucho que tiene todo el futuro. En
esa ladera, en la tierra cafetera marginal caliente hay
que producir cacao donde hay un gran déficit en
el mundo y Colombia tiene una gran posibilidad. Y dije: ¿Qué vamos
a producir en la tierra fría? Muy bien lo de papa. ¿Cómo
vamos a lograr, y aquí hay un gran desafío
Viceministro, que las variaciones en el precio de la
papa no sean tan agudas? Ahí hay una gran preocupación
que tenemos que enfrentar, porque un día los hacen
sentir riquitos y al otro día en la ruina.
Allá se levantó un señor ayer y
dijo que en la tierra cafetera están estudiando
tres productos, hablo del pimentón para producir
colorantes naturales. No recuerdo los otros dos. Lo de
la quinua va lento.
Entonces nosotros tenemos ahí que estudiar muy
cuidadosamente el sitio y lo estoy citando como un ejemplo,
pero el problema se repite en muchas partes del país: ¿qué vamos
a desarrollar? Entre otras cosas conectados con el mundo,
que nos lo compre el mundo.
A mi me ha reclamado Nariño, no solamente ponerle
iluminación y radioayudas para poder operar en
la noche el aeropuerto de Pasto, sino convertir el aeropuerto
de Ipiales en un aeropuerto internacional de carga. Y
me han dicho para poder exportar desde Ipiales, entonces
tenemos que tener los resultados de cómo vamos
a producir allá. ¿vamos a poder exportar
papa precocida paga flete aéreo? ¿Vamos
a poder exportar desde allá legumbres, hortalizas
en general? ¿Hay espacio en el mercado de flores
para estimular una industria de flores allá? A
mi me parece muy lógico lo del aeropuerto, pero
hay que saber cuál es la canasta exportable que
vamos a promover allá. Y eso necesita investigación
aplicada. Yo diría que no investigación
de power point sino, ayer les dije un centro de investigación,
y les dije tráiganme a ese centro, pero no me
lleven a una oficina aquí en Pasto. Pongan la
oficina donde este el invernadero.
Tenemos que hacer un gran esfuerzo
investigativo, aplicado. Yo rogaría que el Ministerio con los gremios,
y aquí están los Presidentes también
de la SAC y de Fedearroz, nos muestren todos los días
nuevos experimentos porque eso le ayuda mucho al país.
Una meta parcial estimula, un
hallazgo estimula. Miren el Sena en Simití le esta enseñando a los
campesinos a tener pescado en cautiverio, donde no hay
que hacer represas, sino tenerlo enjauladito en las ciénagas.
Uno se pone a revisar este país, un poquito al
sur de Barranca hasta la desembocadura del río
Magdalena en Bocas de Ceniza y tiene un conjunto cenagoso
este país hermoso, pero hermoso. Ahí se
podría producir el pescado del mundo. Yo se lo
decía el domingo pasado a los de La Mojana, pero
hay que hacer ese gran esfuerzo para que todo ese campesinado
ribereño de la ciénaga tenga unas jaulitas
ahí colgadas, en el borde de la ciénaga
cebando pescado en cautiverio.
Todos estos esfuerzos tiene que
hacerlos el país
agropecuario y yo creo que eso nos puede ayudar todo
en materia de seguridad alimentaría, y nos puede
ayudar a ser más competitivos en el mercado internacional
y eso nos puede ayudar a ser más productivos y
más generadores de empleo.
Les decía que el 23 de noviembre es una fecha
que yo Espero con mucha ilusión, porque ese día
Bienestar Familiar completará 1 millón
6 mil niñitos, menores de cinco años, incorporados
por este Gobierno a un programa de alimentación
especial.
En este Gobierno hemos pasado de un Bienestar Familiar
de 6 millones 100 mil usuarios a un Bienestar Familiar
de cerca de 10 millones de usuarios.
Y espero con mucha ilusión la primera semana
de diciembre para decirle al país que ya tenemos
600 mil ancianos atendidos por el Gobierno. Pueden ser
200 mil – 215 mil ancianos, al terminar el año,
recibiendo una platica. Aquí están los
alcaldes, ellos saben que hay un poquito en cada municipio
y 400 mil ancianos recibiendo un almuerzo.
Todo esto, más el mejoramiento del empleo, el
mejoramiento de la economía, su impacto en el
empleo, nos tiene que ayudar a que este país se
nutra, a crear la demanda alimenticia que requiere Colombia.
El doctor Rafael Mejía ha insistido muchas veces:
bueno, sí, hay que ofrecer estos productos, ¿a
dónde está la demanda? Yo reconozco la
posibilidad que tenemos para orientar todas estas políticas
a tener demanda interna y en los mercados de exportación.
Hay que combinarlos ambos.
Creo que esto es muy importante.
Yo quiero decirlo mañana,
apreciados compatriotas, en ese consejo comunitario muy
importante, antes de lo que puede ser probablemente la última
ronda de negociación del TLC: el esfuerzo para
activar la economía de exportación no se
excluye con el esfuerzo que hay que hacer para activar
la economía interna.
Un país con un 52 por ciento de pobreza tiene
en la erradicación de la pobreza una gran posibilidad
para aumentar la demanda, pero también necesita
los mercados de exportación para que vayan jalonando.
Entonces eso no es incompatible. Tenemos que hacer las
dos cosas.
Y vamos entrando a ese tema del
TLC. Qué responsabilidad
tan grande. Pero yo no sé qué es peor:
si no firmarlo o firmarlo mal. Qué responsabilidad
tan grande.
Miren, yo me pongo a pensar en
este país, yo
le pregunté al Presidente de la República
Dominicana, le dije: “Presidente, cuénteme
una cosa, ¿por qué República Dominicana
firmó el Cafta, si ustedes han tenido un gran
privilegio, que es lo que los norteamericanos llaman
la Iniciativa del Caribe? Ustedes tienen un acceso al
mercado de Estados Unidos, concedido unilateralmente
por los Estados Unidos y que tiene vigencia hasta el
año 2008”.
Y me contestó: “porque ya nos dijeron que
después del 2008 no lo pueden prorrogar”.
Todos los presidentes centroamericanos
salieron, en Mar del Plata hubo 29 país apoyando eso. Todos
dijeron porque habían tenido que firmar el Cafta,
que en Centroamérica y el Caribe equivale al TLC
nuestro.
A mí me preocupa mucho el 31 de diciembre del
año entrante, que se acabe lo que se llama el
Atpdea. Es la ley de preferencias arancelarias para la
Comunidad Andina y de estímulo a la erradicación
de droga.
Eso nos ha permitido tener un
gran crecimiento de exportaciones a los Estados Unidos,
que inciden en el empleo. No olvidemos
qué le pasó a nuestra Patria en empleo.
El desempleo en Colombia en pocos años saltó del
7,5 a casi el 20. Ahora está en el 11 y pico.
Yo veía ayer en Pasto, sí todavía
tiene mucho desempleo, el 15. Pero viene del 22 por ciento
cuando empezó este Gobierno. 22 –
21,4. Ayer que veíamos lo de Pasto. ¿Quién
va a estar contento con estos niveles de desempleo? Nadie.
Pero hay que ver de dónde veníamos.
Y el desempleo de jefes de hogar
llegó a situarse
en el 10. Yo no puedo estar contento con el que tenemos
hoy: 5,4. Es que cuando está desempleado el jefe
de hogar, se desentabla la familia. Si hay unos niños
chiquitos, la señora los tiene que abandonar e
irse a buscar empleo, para resolver problemas de ingreso
básico de la familia. Si hay unos muchachos estudiantes,
se desesperan y abandonan el colegio o la universidad
para buscar empleo. El desempleo de jefes de hogar acaba
con la familia y acaba con la educación. Es el
gran propulsor de la deserción educativa.
Entonces a uno le da mucho miedo
que llegue el 31 de diciembre del año entrante y que no tengamos firmado
el TLC. No es por razones ideológicas que lo queremos
firmar, queridos amigos. Es porque necesitamos ese mercado.
Más aún, yo no creo que eso se pueda llamar
rigurosamente un tratado de libre comercio. Ese es más
un tratado de acceso a mercado.
Un tratado de libre comercio
con tantas limitaciones, que hay que ponerle cuotas
a un producto, que hay unos
páneles para el otro, que hay una exclusión
técnica del otro, yo creo que eso es más
un tratado para flexibilizar acceso a mercados que un
tratado de libre comercio.
Yo le decía al presidente Chávez, cordial,
amistosamente: Presidente, tú no necesitas eso,
pero Venezuela no debe cerrar las puertas. Hoy es con
los Estados Unidos, pero mañana lo tenemos que
hacer con Europa, porque con Europa tenemos unas preferencias
hoy pero también se van a vencer. Y nos van a
obligar a negociar.
Yo decía al presidente Chávez: tú tienes
petróleo. En Colombia hay una declinación
progresiva de producción de petróleo. Todavía
no hemos logrado los nuevos hallazgos, que nos permitan
decir: ya se revirtió la tendencia, y darle al
país un parte de tranquilidad. Ojalá. No
podemos.
El petróleo se lo arrebatan a uno con tratado
o sin tratado. Nosotros tenemos que vender papa y leche
y tenemos que vender quesos y yogures y tenemos que vender
textiles y confecciones. Y todo eso, a diferencia del
petróleo, necesita pelear y necesita competir
por los mercados. Esa es la razón.
Ahora, nosotros no tenemos en
esto dogmas ideológicos.
Nosotros negociamos con MERCOSUR, cuando eso no se esperaba.
Eso se veía como algo iluso, muy lejano.
Y somos pragmáticos. ¿Yo por qué le
he tenido que imponer unas restricciones a las importaciones
chinas? Porque nos podían acabar textiles y confecciones.
Les tuvimos que poner unas salvaguardias y los chinos
han entendido. Porque les dije en todos los tonos: hombre,
con ustedes no hay sino afecto, deseos de tener todos
los días las mejores relaciones políticas
entre Colombia y China. Pero, apreciados amigos, esta
economía nuestra es muy fragilita. Nos acaban
aquí unos sectores muy generadores de empleo.
Y ahí va a empezar nuestra negociación
con los chinos, a partir de la salvaguardia.
Esto del comercio no es por enemistarnos
con unos países
y congraciarnos con otros. Es para buscarles salidas
a la necesidad que Colombia tiene de ampliar la producción
que requiere ampliar los mercados.
Entonces invitó a mis
compatriotas a ver eso del TLC con mucho pragmatismo.
Si no lo hacemos, pido
que me den alternativas.
Miren, cuando Nuestro Señor y el pueblo le han
dado a uno la posibilidad de ser Presidente de sus compatriotas,
uno tiene que ser tozudo pero no dogmático. Hay
una gran diferencia entre la tozudez y el dogmatismo.
Tiene que ser tozudo, pero permanentemente dispuesto
a hacer revisiones.
Yo me he trasnochado mucho en
los últimos días
pensando cuál es la alternativa al TLC. Y también
he adivinado a los críticos. Y me atrevería
a decir que los críticos del TLC, finalmente,
en una decisión de responsabilidad patriótica,
en el evento que tuvieran la posibilidad de dirigir el
país, no dirían: no lo firmo, sino que
dirían: lo puedo negociar mejor.
Yo creo sinceramente, y lo digo
constructivamente, sin desafío, que mis críticos en la dirigencia
política colombiana, en el fondo del alma, no
tienen la decisión de privar a este país
y que renuncie al TLC. Yo pienso que llegarían
máximo hasta exigir una mejor negociación,
que estamos bregando a que sea la mejor, a que sea equitativa.
A mí me parece muy difícil hoy que un
líder político de la Patria diga definitivamente
no al TLC. ¿A dónde están las alternativas?
Preparémonos porque tenemos
que hacer lo de China y lo de Europa. Europa nos ha
dado unas preferencias
unilaterales, pero nos ha dicho: hay que negociar.
Entonces aquí traía el doctor Augusto
quejas, que yo le ruego al Ministerio de Agricultura
mirarlas y cruzarlas, por ejemplo con temas como el del
arroz, doctor Rafael Hernández, las quejas con
el Ecuador, conversar con los hermanos ecuatorianos y
decir bueno vamos a poner aquí sobre la mesa unos
problemitas y arreglémonos todos, porque ayer
se me quejaron allá de que teníamos trancadas
35 mil toneladas de arroz de Ecuador que no habíamos
dejado entrar y se me quejaron ayer en Nariño
que están ahí en la frontera, yo les dije,
hombre hemos tenido unos problemas ahí también
con unas restricciones ecuatorianas recientes a nuestro
tema avícola y ahora aparece este de la papa.
Miren queridos amigos, Colombia
tiene que fortalecer la Comunidad Andina, y lo tenemos
que fortalecer con
hermandad con Venezuela, con hermandad con Ecuador, con
hermandad con Bolivia, con hermandad con Perú y
hay que hacer entender en todas partes de la Comunidad
Andina que el fortalecimiento de la Comunidad Andina
no se excluye con el TLC con Estados Unidos ni con el
acuerdo con Europa, como no se excluyó con nuestro
acuerdo con MERCOSUR, al contrario pienso yo, que en
la medida que los países de la Comunidad Andina
asumamos en bloque responsabilidades frente a terceros
vamos a tener que ser más cumplidos entre nosotros.
Europa nos ha dicho: prepárense ustedes andinos,
porque ustedes violan las normas que se han impuesto,
si van a negociar con Europa tienen que ser rigurosamente
cumplidos con Europa y rigurosamente cumplidos entre
ustedes. Entonces cuando yo escuchaba al doctor Augusto
traer esa queja lógica, de algunos problemas con
los hermanos venezolanos, de algunos problemas con los
hermanos ecuatorianos, venía a mi mente esta reflexión
que he madurado mucho, un gran camino, más que
el Tribunal Andino de Justicia, el camino eficaz para
que todos cumplamos con la normatividad andina es que
nos comprometamos entre todos ante terceros, porque los
terceros si nos hacen cumplir y ser cumplidos entre nosotros.
Yo creo que ese es un gran camino.
Ahora el TLC. Claro, miren ayer
me decían: Uribe
usted se va a quedar por fuera y va a dejar a Colombia
por fuera, que ya Perú va a firmar, yo creo que
a los presidentes gremiales les ha llegado en estos días
ese runrún, que Perú ya va a firmar y que
a nosotros nos van a dejar por fuera, que Uribe está haciendo
política. No señores. Estamos tratando
de que esto sea lo más equitativo por condiciones
políticas superiores para unir este pueblo, para
que un tratado con Estados Unidos se reciba como un tratado
de equidad, para que se reciba con prudente ilusión,
para que no haya reacciones de rabia que nos afecte la
armonía entre los colombianos y la armonía
que debe prevalecer en las relaciones internacionales.
Esto es difícil. Hay sectores de la Patria muy
críticos y ahora resulta el otro lío en
el exterior: ah Uribe va a dejar a Colombia por fuera
por política, ya vamos a firmar con Perú.
Entonces esto es uno tallado a dos cuerdas, queridos
amigos esto es bien difícil, vamos a bregar a
negociar esto muy bien negociado, vamos a ver hasta dónde
podemos llegar, yo le he pedido a los Ministros, hombre
háblenle mañana en ese Consejo Comunitario
a los compatriotas, con toda la franqueza.
Claro, a nosotros nos preocupa
enormemente el tema del arroz, y también hay
que decirle la verdad a los colombianos, no crezcamos
la frontera de arroz.
Cómo no nos va a preocupar el tema de los cuartos
traseros de pollo, si en Estados Unidos no les gustan
sino las pechugas y lo que son las alitas y los muslos
allá no valen a nada y no las mandan aquí baratísimas,
entonces uno se come en San Andrés un muslo de
pollo norteamericano, que no parece de pollo sino de
pavo, largísimo y lo compra por muy poquita plata,
cómo no nos va a preocupar eso, porque si hay
una industria bien dinámica en Colombia, bien
generadora de empleo y por ende de demanda de alimentos
es la industria avícola, si nosotros no salvamos
la industria avícola, cómo salvamos la
producción de maíz, si el gran consumidor
de maíz es la avicultura, entonces estamos buscando
que los Estados Unidos entiendan eso.
Ahora nuestra posición sí, es política,
en el buen sentido de la palabra, procurando el bienestar
de los colombianos, procurando que este tratado en lugar
de crear fisuras, cree unidad entre los colombianos,
cree unidad entre nuestro país, los hermanos andinos,
los Estados Unidos.
Sí, mucha gente dice “yo cumplí por
allá discretamente en Mar del Plata” el
pasado sábado, una labor ahí de mediación
y hay que seguirla cumpliendo. El Gobierno de la hermana
República de Venezuela tiene que entender que
el afán de Ecuador, de Perú, de Colombia
es un afán por salvar estos pueblos nuestros como
Venezuela los quiere salvar subsidiando los sectores
pobres con los recursos del petróleo, que nosotros
necesitamos si, muy bien unirnos con MERCOSUR, pero necesitamos
unirnos más entre nosotros, yo creo que es muy
importante que esto no produzca fisuras en la Comunidad
Andina, que al contrario nos fortalezca en la unidad
y que eso se maneje con toda sinceridad.
Allá nos decía el Presidente de Bolivia:
Bolivia todavía no está lista pero no nos
dejen por fuera. Entonces le dijimos al presidente Bush,
nosotros tenemos que ser todos solidarios con Bolivia,
no podemos dejar a los hermanos bolivianos por fuera,
Ecuador ha tenido unas dificultades y ahí les
estamos ayudando. Entonces es un momento difícil.
El doctor Rafael Mejía me decía con toda
razón hace 15 días, es que llegamos a la última
ronda y faltan un poco de definiciones, sí, miren
yo he seguido profundizando mi raciocinio. Veo una cosa
el calendario electoral en los Estados Unidos y aquí,
a mí me hace temer pesar que si esto no se termina
con equidad entre noviembre y diciembre, Estados Unidos
entra en un año electoral para renovar su Congreso
y aquí en elecciones de Congreso y de Presidente,
que de pronto nos pospongan esa negociación hasta
el 2007, entonces me da miedo con las exportaciones del
2007, porque como el 31 de diciembre de 2006 se elimina
el ATPDEA, las exportaciones de 2007 son unas exportaciones
que van a estar grabadas con aranceles a Estados Unidos.
Yo quiero anticiparles a ustedes
estas confesiones, que voy a hacer mañana en el Consejo Comunitario
sobre el TLC, el ideal es que lo podamos firmar en condiciones
de equidad. Yo estoy llamando hoy al señor (Rob)
Portman, que es el representante para comercio de los
Estados Unidos y le voy a decir mire; sentémonos
imaginativa y desprevenidamente a buscarle opciones,
a los puntos en que tenemos dificultades, guiados por
una lucecita que se deriva de la palabra equidad, le
voy a hacer esa invitación, breguemos a no pararnos
de la mesa hasta que hallamos encontrado las opciones,
pero todo el mundo aportando con creatividad a ver si
superamos este impasse, porque me preocupa fisuras entre
los colombianos, me preocupa una mala negociación
y me preocupa no cerrar la negociación. Cualquier
escenario de esos es malo, apreciados compatriotas. Vamos
a ver cómo avanzamos en esto.
Muchas gracias.