INSTALACIÓN
DE LA PRIMERA RONDA DE NEGOCIACIONES DE TLC
CON LOS PAÍSES CENTROAMERICANOS
Junio 5 de 2006 (Bogotá – Cundinamarca)
Compatriotas:
Celebro esta ocasión, muchísimo, con
los hermanos países de Centroamérica
y del Caribe, hemos venido construyendo una gran unidad,
profundizando una extraordinaria integración.
A lo largo de la superación de los problemas
de Centroamérica, mis antecesores en la Presidencia
de la República y compatriotas muy destacados,
estuvieron siempre de manera diligente, prestos a apoyar
esos procesos que le dieron un horizonte triunfante,
un horizonte exitoso a la hermana región centroamericana.
Colombia, el Gobierno que presido
especialmente, ha sentido toda la solidaridad centroamericana
en nuestra
lucha contra el terrorismo, hemos tenido allí unos
aliados que no claudican, de todas las horas, tenemos
por ellos inmensa gratitud.
Hace cuatro años, cuando este Gobierno empezaba,
tuve la oportunidad de proponer a los Presidente de
Centroamérica y al Presidente de México,
que Colombia debería ser parte del plan Panamá-Puebla,
Colombia fue admitido como país observador,
lo que nos permite avanzar en esa integración
en temas muy importantes, como la construcción
de la línea de transmisión de energía,
el gasoducto, y crear condiciones para que en algún
momento se pueda construir la carretera del Darién.
Ya, se ha avanzado mucho en
los estudios preliminares de la línea de transmisión de energía,
lo podíamos revisar el pasado sábado,
en la reunión de República Dominicana;
la línea iría por conducción aérea
hasta Acandí, allí iría por el
lecho del mar en unos 27 kilómetros en frente
de la costa de Colombia y después tendría
un extenso recorrido por el lecho del mar de la hermana
República de Panamá.
Confiamos que rápidamente se concluyan, esos
primeros estudios se sucedan, por los estudios ya de
ingeniería de detalle, y podamos ejecutar esta
obra para la región.
El gasoducto es otro imperativo.
Se está en
el estudio de utilizar primero unas barcazas que puedan
ayudar a proveer con gas natural condensado a la hermana
región centroamericana, antes de impulsar la
construcción del gasoducto. Y ojalá,
los directores de nuestros medios de comunicación
nos ayuden en la tarea de un diálogo fecundo,
entre los medios de comunicación de Colombia
y los medios de comunicación de Panamá,
para construir opinión pública favorable
a la carretera del Darién, que es una necesidad,
el Gobierno continuará en ese empeño.
El pasado sábado, se dio otro paso muy importante,
los Presidentes centroamericanos, firmaron una carta
para que Colombia ya no sea miembro observador del
plan Panamá-Puebla, sino miembro de pleno derecho,
y se instó a encontrar un texto de acuerdo con
la hermana República de Nicaragua, porque como
todos ustedes saben, la hermana República de
Nicaragua ha propuesto una demanda que se tramita en
la Corte de La Haya, y los Presidente centroamericanos
y del Caribe, en esa proposición donde dicen
que Colombia debe ser admitido ya como miembro de pleno
derecho del plan Panamá-Puebla, también
proponen que sea México y Panamá, los
dos países delegatarios para ayudar a un texto
final entre Colombia y Nicaragua.
Confío que en poco tiempo podamos decirle a
nuestros pueblos que Colombia es miembro de pleno derecho
del plan Panamá-Puebla.
La integración energética es fundamental,
nosotros estamos en plena construcción de la
tercera línea hacia Suramérica, hemos
avanzado en la integración con Venezuela, el
primero de julio empiezan las obras, ya las obras del
gasoducto entre nuestra Guajira y Maracaibo, que en
las etapas iniciales llevará a Colombia a venderle
gas a la hermana República Bolivariana de Venezuela.
Que paradojas, ellos que tienen muchísimo más
que nosotros, mientras Venezuela es un país
con 270 teras de reservas de gas probadas, Colombia
tiene siete, pero una gran expectativa en las exploraciones
que estamos haciendo en el Caribe. Ocurre si, que Venezuela
lo tiene bien concentrado en el centro-oriente y tiene
todavía deficiencias graves en el occidente,
que recibiría provisión de parte de Colombia,
en la seguridad de que en el futuro, si la circunstancia
lo exigiere, Venezuela nos ayudaría.
Y lo más importante es que ese trayecto debe
considerarse como un primer paso para avanzar en lo
que tiene que ser el gasoducto entre Venezuela y Centroamérica
por el territorio de Colombia, para lo cual nosotros
hemos reiterado toda, toda nuestra voluntad.
El otro tema bien importante,
es el de la iniciativa energética. Los hermanos países de Centroamérica
y el Caribe, tienen enormes dificultades en materia
de energéticos fósiles, todos son importadores,
sus gobiernos democráticos que han consolidado
ejemplarmente esas democracias, que han logrado una
integración gerencial, hay que ver como marcha
de bien esa integración centroamericana y del
Caribe, como marcha gerencialmente, ha pagado un costo
muy alto, por los nuevos precios del petróleo,
o por los precios del petróleo de los últimos
años, y eso como en otras partes puede suceder,
pone a riesgo inversiones sociales, por los crecientes
recursos que tengan que destinarse a comprar, a pagar
la canasta energética.
Colombia, que no está a salvo en materia de
petróleo, porque si bien nuestra producción
no ha caído tanto como se esperaba, todavía
no tenemos grandes hallazgos, hay mucha exploración
en el país, las cifras son muy buenas, el año
pasado exploramos 35 pozos, ya a estas alturas del
año llevamos 26, cuando el Gobierno empezó estábamos
haciendo sísmica en mil kilómetros por
año, este año ya llevamos más
de 6.500 kilómetros cuadrados de sísmica
en nuestro país. Hay mucha exploración,
hay mucha búsqueda, pero todavía no hay
hallazgos grandes, la situación de petróleo
de nuestra patria, no está despejada, como también
es bien difícil en las hermanas naciones centroamericanas.
De allí la importancia de la iniciativa energética,
estamos trabajando con México, el apoyo del
Banco Interamericano en esa iniciativa, el sábado
se aprobaron decisiones muy importantes para garantizar
para Centroamérica el suministro a precios competitivos
de petróleo y derivados, la construcción
de una refinería que les ahorrará muchos
costos en materia de provisión de gasolina,
y en materia de provisión de insumos de petroquímica
y el compromiso mexicano de proveerlos con unos 250
mil barriles al día de petróleo, eso
va ayudar mucho. Pero a esto se suma el compromiso
de todos, de desarrollar en cada uno de nuestros países
proyectos de combustibles alternativos de origen biológico,
en lo cual Colombia y los hermanos centroamericanos
tenemos todas las posibilidades, vamos a seguir trabajando
en ese desarrollo.
Muy apreciados Ministros y
Embajadores de las hermanas repúblicas de Honduras, El Salvador y Guatemala,
hace cuatro años no teníamos todavía
producción de combustibles biológicos
en Colombia, hoy estamos produciendo un millón
50 mil litros al día de alcohol carburante y
tenemos mucho entusiasmo en esa materia.
Incluso el Consejo de Ministros
de hoy estaba tomando decisiones de impulsar unos
fondos de capital de riesgo
para hacer nuevos desarrollos en zonas donde no hay
vigorosa iniciativa privada pero que hay muchas condiciones,
por ejemplo para producirlo a partir de yuca, en Sucre,
o para estimular siembras de palma africana en el pacífico
donde hemos tenido una muy peligrosa arremetida de
la siembra de coca.
Tememos mucho entusiasmo en
crecer nuestra producción
de combustibles biológicos, allí hay
una gran posibilidad de alternativas al petróleo,
allí hay una gran posibilidad de mejoramiento
ambiental y allí hay una gran posibilidad de
generación de empleo.
Y lo que queremos, de acuerdo
con lo decidido el pasado sábado en Santo Domingo, es impulsar conjuntamente
con cada uno de ustedes estas iniciativas de combustibles
biológicos.
La iniciativa energética es otro punto que
nos une profundamente con los hermanos centroamericanos.
Y viene este tratado de comercio. La verdad es que
no se entendería que Centroamérica tenga
un tratado de comercio con los Estados Unidos, que
nosotros lleguemos a tenerlo y que nos demos la espalda
entre Centroamérica y nosotros.
Diría yo que este paso que de un lado dan Honduras,
El Salvador y Guatemala, es un primer paso para que
entre toda Centroamérica. Y del lado nuestro,
el paso que da Colombia, es un primer paso para que
entren todos los hermanos andinos.
En la reunión con los Presidentes andinos el
próximo martes en Quito, me permitiré informarles
sobre este paso e invitarlos a que consideren también
entrar en esta negociación.
A mi me preocuparía mucho que si no hacemos
esta negociación, una creciente relación
comercial de ustedes con otros países, una creciente
relación comercial nuestra con otros países,
llegue a opacar, a disminuir en lugar de que crezcan,
las relaciones comerciales entre Centroamérica,
Colombia, entre Centroamérica y la Comunidad
Andina.
Y la verdad eso sería muy perjudicial no solo
en el comercio sino en las inversiones, las inversiones
colombianas en Centroamérica son muy grandes
y crecientes, y hay muchas inversiones centroamericanas
en Colombia.
Cuando visité recientemente la hermana República
de El Salvador me reuní con un grupo de empresarios,
primero El Salvador, el Presidente (Elías Antonio)
Saca –con gran entusiasmo- tomó nuestra
ley de incentivos a la construcción de hoteles,
yo creo que es una ley sumamente buena, de avanzada,
que nos aprobó este Congreso, aquí está el
señor ex ministro Cabal y el doctor Rueda que
conocen lo útil que ha sido, y me invitó a
inaugurar un Decámeron, de inversión
colombiana en El Salvador gracias a que El Salvador
tomó la ley de incentivos tributarios de Colombia
para los hoteles.
Y ese mismo día nos reunimos con unos inversionistas
salvadoreños que van a hacer aquí una
formidable inversión en hoteles. Ya la han definido,
ya tiene adquiridos los terrenos, tienen cerrada la
financiación y están próximos
a emprender las obras. Solamente para citar como hay
un flujo de inversiones en ambas direcciones que nos
obliga a avanzar en este tipo de tratados.
Yo creo que no debemos mirar solamente el tema del
comercio sino el tema de las inversiones, porque comercio
e inversiones se jalonan mutuamente, tienen mutuas
implicaciones positivas.
Y hemos hablado desde el mes
de febrero cuando tuve la oportunidad de visitar
al señor Presidente
de Guatemala, al señor Presidente de El Salvador,
y posteriormente en la posesión del señor
presidente Zelaya, en Honduras, de que este tratado
nuestro debe tener la cláusula de equidad, el
compromiso de reconocer las asimetrías, de corregir
en períodos de desgravación los desbalances
que puedan tener unos y otros sectores en nuestras
economías. Y además, incorporar otro
elemento esencial en la cláusula de equidad,
el compromiso de los países signatarios, de
avanzar rápidamente en lo social, de cumplir
las Metas Sociales del Milenio, de avanzar rápidamente
en los objetivos de superación de la pobreza.
Para nosotros el comercio internacional
no es un dogma, no es una categoría ideológica, sino
un camino de estímulo a la inversión,
un camino de oportunidades a la producción,
un camino de generación de empleo y un camino
de superación de la pobreza.
Yo tengo mucha confianza que
en la medida que este tratado lo negociemos con equidad,
los únicos
tratados perdurables son los tratados que tienen equidad,
son los únicos tratados que legitiman las instituciones
y los pueblos, y que este tratado tenga el elemento
novedoso de unos compromisos para poner unas fechas
de superación de pobreza en nuestros pueblos,
yo tengo la esperanza de que eso va a mostrar otra
cara de lo que tiene que ser el proceso de integración
de las Américas, que tiene que ser un espejo
que de ejemplos de cómo avanzar en la integración
de las Américas superando antagonismos ideológicos.
Tenemos mucho optimismo que este proceso se surta ágilmente
y que demos como resultado un tratado con equidad.
Celebro también el tratado que se ha firmado
hoy con la hermana República de Guatemala sobre
protección recíproca de inversiones.
Colombia lleva tres, el primero lo firmamos con España
gracias a la muy diligente actividad de la doctora
Noemí Sanín, nuestra embajadora. El segundo
con Suiza hace apenas pocas semanas, con la muy diligente
intervención de la embajadora Helena Echavarría,
y este tercero, con Guatemala.
Qué difícil, era un objetivo desde que
empezó el Gobierno hace cuatro años,
y uno siempre se muere de envidia de la buena porque
abre un catálogo de Chile, si la memoria no
me falla Chile tiene 38 tratados de protección
recíproca de inversión. O sea ministro
que ahí vamos en tres, apure, este chancecito
que nos dieron los colombianos ahora no podemos perder
un día, esta Patria tiene muchas necesidades.
Yo tengo mucha confianza en
que nosotros podamos avanzar en estos tratados porque
necesitamos crear toda la
confianza para la inversión en nuestro país
y para la inversión de nuestros compatriotas
en otros países, como en estos países
hermanos.
Señores Ministros, visitantes y señores
Embajadores, muchas gracias porque podamos avanzar
en la construcción de este acuerdo con ustedes,
y ruego hacer llegar al señor presidente José Manuel
Zelaya, de Honduras; al señor presidente Elías
Antonio Saca, de El Salvador; y al señor presidente
Oscar Berger, de Guatemala, un mensaje de toda nuestra
consideración, de todo nuestro aprecio, de afecto
del pueblo colombiano por los hermanos pueblos que
ellos representan.
A todos muchas gracias.