DECLARACIÓN DE LOS PRESIDENTES
DE COLOMBIA Y ESTADOS UNIDOS, ÁLVARO URIBE VÉLEZ
Y GEORGE W. BUSH
Rueda de prensa
Marzo 11 de 2007 (Bogotá – Cundinamarca)
Á
lvaro Uribe Vélez, presidente de Colombia: Quiero
dar de nuevo la más cálida bienvenida
al Presidente Bush, a su delegación. En el almuerzo
de trabajo que acaba de concluir, al final, pudimos
leer unos bellos párrafos del Libertador Bolívar.
Uno, en la Carta de Angostura,
en el cual destacaba la formación de la Nación de los Estados
Unidos alrededor de la libertad, alrededor de la tolerancia
y alrededor de hacer, de la ley general, una respuesta
al interés colectivo a través de la voluntad
individual.
Otra bellísima mención
del Libertador, en el Congreso Constituyente de Bolivia,
sobre el legado
del Presidente George Washington.
Expresaba que las relaciones
entre el pueblo colombiano y el pueblo de los Estados
Unidos, son unas relaciones
sólidas, de gran entendimiento alrededor de
los valores democráticos desde el nacimiento
de nuestras dos organizaciones estatales.
Esta visita nos enaltece, nos aumenta la confianza
en nuestras relaciones, en el proceso colombiano. La
agradecemos inmensamente, Presidente Bush.
Llega usted a Colombia en un
momento de agitación
por el proceso de paz, en un momento de revelaciones
que agitan muchísimo el debate público,
pero que se están dando por una razón:
porque nuestra política de Seguridad Democrática
se ha propuesto derrotar el terrorismo, en todas sus
expresiones: en la expresión guerrillera, en
la expresión paramilitar. Porque nuestra política
de Seguridad Democrática se ha propuesto restablecer
la plena vigencia de las instituciones democráticas
en toda Colombia.
Estas revelaciones se dan,
porque nuestra ley de Justicia y Paz exige la verdad.
Exige la verdad para que el
país conozca la dimensión de la tragedia
sufrida. Exige la verdad, para preparar un futuro libre
de paramilitares, libre de guerrilla, libre de narcotráfico.
La ley de Justicia y paz que
hoy se aplica, discutida en el proceso de aprobación en el Congreso,
discutida en su aplicación, tiene tres elementos
que la distinguen de anteriores leyes de paz en Colombia
y en el mundo.
Esta ley exige la justicia.
No puede haber amnistía
ni indulto para delitos atroces.
Esta Ley exige la reparación. No hay otro país
en el mundo, diferente de Colombia, que pueda decir,
que para conceder unos beneficios de sentencias reducidas
en una ley de paz, exige a los victimarios la entrega
de sus bienes para reparar a las víctimas. Eso
no se ha dado en ninguna parte del mundo.
Don países de América Latina trataron
de compensar víctimas de gobiernos dictatoriales
pero con sumas modestas del presupuesto. Aquí se
exige compensar las víctimas con todo el patrimonio,
con todo el dinero de los victimarios.
Verdad, justicia y reparación,
son tres elementos claves de esta ley.
Este país tiene una justicia independiente,
señor Presidente Bush, que distingue a nuestra
democracia.
La decisión de mi Gobierno en este proceso
de recuperación institucional, es el total apoyo
a la justicia para que Colombia supere definitivamente
el tiempo del terrorismo.
Es bueno hacer algo de historia.
Durante 30 años,
las guerrillas marxistas maltrataron a Colombia, propusieron
una revolución social y lograron más
pobreza. Propusieron más democracia y asesinaban
alcaldes, concejales, diputados. Asesinaban las expresiones
de la democracia.
Esas guerrillas terminaron
financiadas por el narcotráfico.
Mucha gente, en muchas regiones de Colombia, no sintió la
protección estatal, que hoy les llega gracias
a la Seguridad Democrática. Ese crecimiento
de las guerrillas, esa falta de protección estatal
a nuestros ciudadanos, condujo a que las mismas guerrillas
engendraran el paramilitarismo y que ese paramilitarismo
cometiera los mismos crímenes atroces de las
guerrillas.
Las guerrillas marxistas trajeron
a Colombia el principio de la validez de combinar
todas las formas de lucha,
infiltraron la universidad, el movimiento obrero, el
movimiento campesino. Infiltraron sectores muy importantes
de movimientos intelectuales, del periodismo. Infiltraron
la política.
Esas guerrillas sembraron odio
de clases, quisieron acabar con los cimientos de
fraternidad sobre los cuales
se ha fundido esta Nación.
Esas guerrillas les enseñaron a los paramilitares
a combinar todas las formas de lucha. ¿Qué pasa?:
que cuando esas guerrillas, algunas de ellas se amnistiaron,
no se les exigió la verdad que ahora se exige,
entonces no dijeron cuáles fueron los sectores
de la sociedad civil que infiltraron.
A esas guerrillas no se les
exigió la reparación
a las víctimas, que hoy se exige. Esas guerrillas
pudieron, a pesar de haber cometido tantos crímenes
atroces, tener amnistía o indulto por crímenes
atroces. Amnistía e indulto que hoy no se da,
por crímenes atroces.
Este proceso de paz que hoy
adelantamos, con las características
de verdad, justicia y reparación, marca los
límites para los procesos de paz del futuro.
La seriedad de este proceso,
le dirá al mundo
y a Colombia que los procesos que Colombia adelante
en el futuro con guerrillas como el ELN y la Farc,
deberán exigir –como hoy exigimos- verdad,
deberán exigir justicia y deberán exigir
reparación.
Sepa, señor Presidente Bush, que nuestro compromiso
es la total derrota del terrorismo y la recuperación
total de la justicia y de las instituciones democráticas.
Trabajamos con un modelo de
Estado. Nosotros no desmantelamos el Estado como
se hizo en muchos países de América
Latina en la década del 90 ni proponemos la
estatización. No aceptamos desmantelar el Estado
ni tampoco el monopolio estatal. Nosotros estamos creando
toda la confianza para la inversión privada
en Colombia, pero al mismo tiempo, exigiendo toda la
responsabilidad social.
Nosotros vemos en la confianza
un medio de inversión,
en la inversión una herramienta de crecimiento
y en el crecimiento una posibilidad de superar pobreza
y de construir equidad.
Llega usted a Colombia, agitando
para el Continente una tesis necesaria: la diversificación de la
canasta energética.
Después de Brasil, Colombia es el segundo país
del Continente en producción de biocombustibles.
Creamos los incentivos tributarios, aprobamos la reglamentación
de acuerdo con las normas de la Organización
Internacional de comercio (OMC), ya hay proyectos produciendo
más de un millón de litros de etanol
en Colombia al día y hay muchos que se están
instalando. Tenemos seis millones de hectáreas
en la Orinoquía, en sabanas, que podemos conquistar
para biocombustibles, sin destruir un solo árbol
de nuestra selva.
Hemos agradecido al Presidente
de los Estados Unidos y a su delegación, el
apoyo a Colombia en el Plan Colombia.
La lucha contra la droga tiene
apoyos, apoyos de discurso y apoyos prácticos, el apoyo de su país,
de su antecesor el Presidente Clinton, de su Congreso,
su apoyo entusiasta, con ejemplar determinación,
Presidente Bush, han sido apoyos prácticos a
la valerosa lucha del pueblo colombiano contra las
drogas.
Tuvimos la oportunidad de hablar
de temas muy importantes como nuestra agenda contra
la pobreza, nuestros objetivos
sociales, nuestro programa de Familias Guardabosques –único
en el mundo- que le paga hoy a 50 mil familias campesinas
para que mantengan áreas de selva libres de
bosque, libres de droga y cuiden la recuperación
del bosque allí donde fue destruido.
Hablamos nuevamente de nuestro
acuerdo de comercio. Una posibilidad política de integración,
ajeno a sectarismos ideológicos, que busca oportunidades
para la inversión, para el empleo digno, con
afiliación a la seguridad social.
Muchas gracias por su visita,
señor Presidente.
Me sentí muy orgulloso de mis compatriotas,
cuando usted, tranquilamente, después de aterrizar
en el aeropuerto Eldorado, alrededor de esos paisajes
tan bellos, hizo el recorrido hasta la Plaza de Bolívar
y hasta esta Casa de Nariño.
Me siento muy orgulloso que
el mundo pueda constatar, cómo este pueblo colombiano hoy está superando
las grandes dificultades que lo han atribulado.
De nuevo, muchas gracias por su visita
George W. Bush, presidente
de Estados Unidos: (La trascripción corresponde a la traducción
hecha por la intérprete oficial de la Embajada
de los Estados Unidos): Señor Presidente, muchísimas
gracias por sus amables palabras y por su invitación.
Laura y yo estamos emocionados
de estar una vez más
en su país. Realmente, esperaba con mucha alegría,
venir a esta ciudad capital tan hermosa y le doy las
gracias al pueblo colombiano por su generosa y cálida
bienvenida.
Hemos tenido una conversación estrecha y larga,
que es lo que uno espera cuando dos amigos se sientan
a comer juntos. Traigo el saludo fraterno del pueblo
estadounidense. El pueblo de mi país se preocupa
enormemente por la condición humana, cree muchísimo
en los derechos humanos, en los valores humanos, así como
ustedes. Somos dos fuertes democracias con muchos valores
que compartimos, de modo que esta visita avanza esos
valores.
Yo escuché muy cuidadosamente las palabras
del Presidente cuando expresó su preocupación
a cerca de las leyes inmigratorias de los Estados Unidos.
Fue muy elocuente en su preocupación por los
colombianos que viven en los Estados Unidos y le aseguré que
una prioridad principal de mi gobierno es lograr la
aprobación de una ley integral de reforma inmigratoria.
Voy a trabajar con los partidos para lograr esta aprobación
lo más rápidamente posible, señor
Presidente.
Hemos hablado de los beneficios
de expandir el comercio para que los habitantes de
nuestros dos países
puedan beneficiarse de ello.
Los Estados Unidos es el socio
comercial más
importante de Colombia. Colombia es el segundo mercado
más importante para los agricultores estadounidenses.
El comercio beneficia nuestros dos países y
puede aumentar aún más con un Acuerdo
de Libre Comercio, que hemos firmado en noviembre.
Le dije al Presidente que voy
a trabajar muchísimo
para lograr la aprobación de esa ley tan importante.
Creo que un paquete comercial con Colombia, es algo
que sirve a los intereses de nuestros dos países.
Me alegra la posibilidad de
hoy, de poder reunirme con algunos ciudadanos afrocolombianos
para hablar
sobre programas de justicia social. Y lo hago porque
es muy importante, para el pueblo suramericano y centroamericano,
que sepa que los Estados Unidos le importa sobremanera
la condición humana.
Y, que gran parte de nuestra asistencia, tiene como
destino lograr que las personas puedan cumplir con
las promesas de todos sus dones divinos. Queremos ofrecerle
oportunidades a cada uno.
Usted, señor Presidente ya ha descrito muchos
programas de su propio Gobierno –durante nuestro
almuerzo- y me impresionó muchísimo la
estrategia de su Gobierno y el vigor, la energía,
de su gabinete.
Será una gran alegría para mí poder
seguir trabajando con usted para derrotar a los narcotraficantes
y a los narcoterroristas.
Usted reconoce, como yo, que
la función más
importante del Estado es ofrecerle seguridad a su pueblo.
No se puede tolerar, en una sociedad, la capacidad
de algunos, de matar a vidas inocentes para lograr
sus objetivos políticos. Así que le agradezco
esa firmeza política, señor Presidente.
Quiero trabajar con usted en
la siguiente fase del Plan Colombia. Vamos a trabajar
junto con su Gobierno
para seguir luchando contra el narcotráfico.
Los Estados Unidos tiene la obligación de trabajar
para reducir la demanda de la droga y al mismo tiempo,
trabajar para limitar la provisión de droga.
Hay mucho que podemos hacer
juntos. Pero parte de esto, es ayudarles a ejercer
el control sobre todo
su territorio, fortaleciendo el Estado de Derecho y
expandir la oportunidad económica que tiene
cada ciudadano y eso es lo que queremos hacer.
El Plan Colombia reconoce la
importancia de proteger los derechos humanos. Agradezco
la decisión
del Presidente de llevar a los que violan los derechos
humanos ante la justicia. Es una persona firme en su
decisión. Será muy importante para los
miembros de nuestro Congreso en los Estados Unidos
que puedan ver esa decisión. Y yo creo que,
si tienen la oportunidad justa, el Presidente Uribe
puede explicarlo.
El Gobierno colombiano sigue
logrando progresos y va a lograr aún más confianza por tarde
de todos sus ciudadanos y aún más respeto
en toda la comunidad internacional.
Usted ha establecido expectativas
muy altas para su Nación. Agradezco su decisión y es un
orgullo para mí, decir, que usted es mi amigo
personal y que su país es un socio estratégico
de los Estados Unidos.
Muchas gracias señor
Presidente
Rueda de prensa
Évelin Anzola, Radio Santafé. Para el
Presidente Bush: ¿cuál es su opinión
sobre el manejo que el Gobierno colombiano le ha dado
al escándalo de los vínculos de políticos
y funcionarios con paramilitares?
Cada día se conocen más nombres de miembros
del Gobierno vinculados con estos grupos. ¿Hasta
dónde, usted señor Presidente Bush, apoya
al Presidente Uribe y al proceso que se sigue, teniendo
en cuenta que la mayoría de estos jefes paramilitares
son narcotraficantes?
Y finalmente, ¿Estados Unidos insistirá en
la extradición de estos jefes?
George W. Bush: Yo apoyo un
plan que indica que habrá un
poder judicial independiente que va a estudiar cada
uno de los cargos que se presenta y va a decidir la
culpabilidad de cada persona y ese es el plan que yo
apoyo, es el plan que apoya el Presidente. O sea que
no hay favoritos políticos en el caso de la
justicia. Si hay una persona culpable, esa persona
va a tener que pagar su pena.
Y la mejor forma de asegurarse
que esa pena sea justa y que la justicia sea así, es que la justicia
sea independiente de la política. Así que,
cuando le hice esta misma pregunta al Presidente, sobre
las noticias que ley en Washington –las mismas
preguntas que le van a hacer cuando venga con su Gobierno,
para hablar con nuestro Congreso-, él contestó lo
mismo que yo les acabo de describir. Dijo: “tenemos
tribunales independientes, tenemos leyes, la gente
será responsable, no importa de cual partido
proviene”. Y eso es lo que el pueblo colombiano
espera. Ese es el tipo de justicia que van a recibir.
Este país a atravesado periodos sumamente difíciles,
la mejor forma de cerrar las heridas, es que las personas
vean una justicia independiente y ese es el tipo de
justicia que confío, va ha que va ha ofrecer
este Gobierno.
Deb Reichman, AP: Para el Presidente
Bush: algunos legisladores en el Congreso americano
encuentran desconcertante
la cantidad de tropas desplegadas de los Estados Unidos,
que sigue aumentando, incluso las revisiones de algunos
días, ha aumentado.
¿Usted cree que los ciudadanos de los Estados
Unidos ahora tendrían que estudiar esas 21 mil
tropas adicionales que pidió en enero, como
un punto de partida, simplemente?
Y para el Presidente Uribe:
con todo lo que se está diciendo
sobre Chavez, ¿nos puede decir si usted cree
que la influencia de este señor en la región
se ha exagerado?
George W. Bush: El anuncio sobre las tropas que hice
fue, sobre 21 mil tropas de combate. El Secretario
de Defensa, Robert Gates y el General Peter Pace (Jefe
de Estado Mayor Conjunto) atestiguaron ante el Congreso,
diciendo que esas tropas necesitan apoyo y eso es lo
que el pueblo estadoudinense ve con respecto a Irak.
Las tropas de apoyo necesarias para ayudar a que los
refuerzos puedan hacer se trabajo.
Yo espero, claro, que el Congreso
ofrezca la financiación
necesaria para que las tropas de combate puedan hacer
su trabajo, sin ningún tipo de ataduras.
Segundo, en cuando a Afganistán, yo sí anuncié –como
resultado de una revisión de nuestra política-
3.200 tropas adicionales, pero aparte de eso, las tropas
a las cuales usted se refiere, serán parte de
una misión especial que mencioné en la
estrategia, aunque no había ofrecido detalles
sobre las tropas, aún.
Álvaro Uribe Vélez: Colombia es un aliado
leal de los Estados Unidos y un hermano solidario de
América Latina.
Nosotros hemos impulsado más integración
con los Estados Unidos a través del Plan Colombia,
del Tratado de Libre Comercio y más integración
con América Latina.
La Comunidad Andina, con un
gran liderazgo de Colombia, ha realizado el acuerdo
con MERCOSUR. Hemos contribuido
a la creación de la unión suramericana.
Recientemente, Colombia fue aceptada como miembro principal
del Plan Panamá – Puebla. Estamos buscando
el acuerdo con Canadá. Estamos próximos
a cerrar negociaciones con tres países centroamericanos.
Como verá, esta es una política internacional
democrática, leal.
Con nuestros países hermanos, cultivamos las
mejores relaciones. Respetamos y pedimos que todo el
mundo respete los principios rectores del derecho internacional
público, como el respeto a la autonomía
de cada país y el principio de no intervención.
Nos tenemos que ayudar, todos,
en el fomento de las libertades, en la superación
de la pobreza y en la conquista de la de la seguridad.
No puedo dejar de referirme
a la pregunta que se le formuló al Presidente
Bush.
Primero: debe saber el mundo
entero, que este país
estuvo afectado, durante 30 años, por guerrillas
marxistas. Que esas guerrillas penetraron la política,
el periodismo, penetraron el movimiento sindical, penetraron
la universidad y nunca se exigió la verdad,
que habrá que exigirla en el futuro.
Segundo: debe saber el mundo,
que muchas regiones de Colombia estuvieron, esos
30 años, desprotegidas.
Tercero: debe saber el mundo,
que esas guerrillas y la desprotección ciudadana,
crearon el paramilitarismo.
Cuarto: debe saber el mundo,
que este Gobierno es el primero que ha emprendido
en Colombia la lucha frontal
para desmontar el paramilitarismo. Hoy hay debate político,
pero ha disminuido enormemente la agresión paramilitar. ¿Por
qué? Porque la ley de Justicia y Paz ha llevado
a la gran mayoría de los líderes paramilitares
a la cárcel, porque nuestra política
de Seguridad Democrática ha dado de baja a más
de 1.700 integrantes de las organizaciones paramilitares.
Me gusta mucho esta concurrencia
de periodismo internacional a Colombia para poder
afirmar, que la gran mayoría
de hechos criminales que hoy se juzgan, ocurrieron
con anterioridad a mi Gobierno. Para poder afirmar,
que la Seguridad Democrática ha venido recuperando
la transparencia en los procesos electorales de Colombia.
La elecciones del año pasado, la oposición
a mi Gobierno, no tiene una sola queja de falta de
garantías. Pudieron visitar todos los lugares
que en el pasado estaban vedados, porque en una parte
el control guerrillero no lo permitía, en otra
parte el control paramilitar no lo permitía.
Los candidatos a la Presidencia
en las elecciones de 2006, fueron beneficiarios de
garantías efectivas,
visitaron todo el país, se notó el efecto
de la política de Seguridad Democrática
porque no hubo presiones contra ellos, de terroristas.
La única presión en las elecciones del
2006, fue contra electores que apoyaban mi candidatura
en departamentos del sur del país, donde la
Farc, financiada por el narcotráfico, hizo un
paro armado en vísperas electorales y amenazó a
aquellos que votaran por mi. Eso lo debe saber el mundo.
Y aquí hubo candidatos para el Congreso y para
la Presidencia, de todas las vertientes ideológicas.
El mundo debe saber, que el
que ha exigido la verdad es el Gobierno, que es el
impulsor de la ley de Justicia
y Paz. Que el Gobierno es el que tomó las decisiones
de desmontar militarmente el aparato criminal de los
paramilitares. Que el Gobierno es el que tomó las
decisiones de llevarlos a la cárcel. Que el
Gobierno es el que ha tomado la decisión de
que tienen que entregar todos los bienes para poder
compensar a las víctimas. Y que el Gobierno
es el que ha tomado la decisión de darle todo
el apoyo a la justicia.
Por primera vez, la Corte Suprema
de Justicia de Colombia, que es independiente, tiene
un cuerpo de investigación
propio, gracias a la voluntad del Gobierno de apropiar
los recursos presupuestales para ello.
Aquí estamos desmontando lo que se engendró durante
muchos años. Durante más de tres décadas,
el terrorismo fue avanzando en la toma de territorio
de Colombia, el terrorismo fue avanzando en la supresión
de las libertades, en la amenaza de los periodistas,
en el asesinato de los líderes sindicales. Y
de todo ello, nos estamos recuperando.
Este debate obliga, también, a entrar en anécdotas.
Hace pocos días fui preguntado si el Gobierno
apoyaba la transmisión directa en la televisión,
de las audiencias en las cuales tienen que dar sus
versiones los líderes paramilitares que están
en la cárcel, ante los fiscales. Yo dije: el
Gobierno apoya esa transmisión, en vivo y en
directo, porque es un camino de verdad.
Esto es: aquí, en lugar
de existir temor a la verdad, lo que ha habido es,
apoyo a la verdad.
En lugar de buscar esguinces a la justicia, lo que
ha habido es, apoyo a la justicia.
Por ejemplo, hablemos del ex
director del DAS (Jorge Noguera). Cuando él salió del DAS, contra él
no había denuncias de vínculos con el
paramilitarismo. Los hechos por los cuales a él
se le acusa, son hechos que se conocieron varios meses
después, de haberse retirado de la institución. –Tengo
que entrar en estos temas porque son temas que hoy
cobran mucha trascendencia en el debate internacional-.
Y ha dicho el Ministro de Defensa
(Juan Manuel Santos) que, militares que llegaren
a aparecer vinculados con
organizaciones terroristas, serán inmediatamente
separados del cargo. Pero, lo que no podemos incurrir
es en el juego que quieren los amigos de las guerrillas
de que debilitemos las Fuerzas Militares. No las vamos
a debilitar, por que es el único camino que
tenemos para tener un país sin guerrillas y
sin paramilitares.
Miembros de Gobierno, que llegaren
a aparecer con vínculos con estas organizaciones, serán
inmediatamente desvinculados.
Por eso me preocupa que, en
la pregunta que hizo la distinguida periodista, hizo
la afirmación inexacta
de que hay “un crecido número de miembros
de Gobierno vinculados a las organizaciones paramilitares”.
Eso se contradice con lo siguiente: este es le primer
Gobierno que empezó a perseguir militarmente
a los paramilitares, que ha dado de baja paramilitares
y que los tiene en la cárcel.
Vamos a acabar con los paramilitares
y vamos a acabar con las guerrillas. Porque en lo
que no podemos caer
es en el juego de que un escándalo paramilitar
frene la realidad de unos resultados de política
de Seguridad Democrática.
El Ministro de Defensa decía en el almuerzo
cómo, a los 20 mil contribuyentes más
ricos de Colombia, se les está derramando un
nuevo impuesto para que contribuyan a la consolidación
de la Seguridad Democrática.
Y vamos a ir, con la exigencia de la verdad, sin temor
a riesgos. Y eso es lo que marca la diferencia.
Aquí, cuando yo era candidato a la Presidencia
se me leyó parcialmente el discurso. Se me escuchó cuando
decía que Colombia tenía que acabar con
la guerrilla, pero de pronto no se me escuchó lo
que también dije: que el único camino
era el camino de la recuperación institucional
y que por ende, también había que acabar
con los paramilitares.
El 7 de agosto ajustaré cinco años en
el Gobierno y no ha habido una sola hora de este Gobierno –y
lo digo ante un gran aliado, el Presidente de los Estados
Unidos y ante el mundo, a través de esta gran
presencia del periodismo internacional- en que no hayamos
dado la batalla contra la guerrilla, contra el paramilitarismo,
contra el narcotráfico.
Nuestro único objetivo es una Colombia sin
esas plagas. Nuestro único objetivo es una Colombia
que recupere vigorosamente la presencia de las instituciones.
¡Aquí no hay nada que esconder! Aquí hay
una lucha para desmontar el terrorismo y que le quede
claro a todos los visitantes de la prensa internacional.
Edulfo Peña, El Tiempo: Pregunta para Presidente
Bush: la guerrilla y las Farc, en Colombia, tiene varios
secuestrados con propósitos políticos,
desde hace muchos años y se esta planteando
en Colombia la posibilidad de un acuerdo humanitario
para lograr la liberación, entre otros, de tres
ciudadanos de su país. Esta semana, su Subsecretario
Shannon (de Estado para América Latina de EEUU,
Thomas),dijo que Estados Unidos seria feliz si se pudiera
lograr una solución por la vía del acuerdo
humanitario.
Mi pregunta concreta es: ¿usted y su gobierno
van a impulsar una alternativa de acuerdo humanitario
para lograr la liberación de estos secuestrados,
incluso sus tres ciudadanos americanos, por esta vía,
como alternativa a una acción militar?
Y seguidamente con eso, ¿es cierto que ustedes
hoy, los dos Presidentes, hablar de reforzar una acción
militar para su recuperación?
Y usted no respondió la anterior pregunta señor
Presidente Bush, si va a insistir en la solicitud de
extradición de los jefes paramilitares en Colombia.
George W. Bush: En cuanto a
la extradición,
en eso voy a trabajar con el Presidente Uribe. Hemos
tenido buenas relaciones, somos amigos también,
hemos trabajado muy estrechamente sobre el tema de
extradición, así que será una
decisión entre los dos Gobiernos.
En cuanto a los rehenes, me
preocupa enormemente su seguridad, me preocupan sus
familias, se trata de tres
personas inocentes que llevan, como rehenes, demasiado
tiempo y sus familias están sumamente preocupadas.
Sus raptores deberían mostrar cierto sentido
humanitario, pero he hablado con el Presidente, sé que
está desarrollando estrategias que esperamos
puedan lograr su liberación con seguridad.
Es terrible vivir en una sociedad
donde se encuentra una parte del país, donde se secuestran las
personas. Si una persona está aquí, tratando
de ayudar, sin importar cuáles son las ideas
de su familia, eso es lo que yo estoy pensando señor,
con respecto a esos rehenes. Me gustaría verlos
con salir con seguridad.
Matthew Spetahick, Reuters: Según su evaluación, ¿qué es
lo que se logró si se logró algo en la
Conferencia de Bagdad y qué espera para próximas
rondas? Y ¿cree usted que Irán y Siria
fueron serios con respecto a sus declaraciones finales,
que quieren ayudar a estabilizar a Irak y cree usted
que esta sería la forma de abrir contactos más
formales y directos con esos dos países?
George W. Bush: Bueno, yo soy
del tipo de persona que me gusta que las personas
hablen directamente y
que después hagan lo que han dicho.
Las palabras son fáciles en la política
y en la diplomacia internacional. Si realmente quieren
ayudar a estabilizar Irak, hay cosas que tienen que
hacer, como cortar el flujo de armas y las bombas suicidas
en Irak. Hay que medir las en las palabras que se formulan.
Pero es bueno escuchar esas palabras, son buenas declaraciones,
ahora pueden actuar con base a eso.
En primer lugar, fue importante
que en la conferencia, las personas de ese vecindario
dijeran cosas importantes
sobre la joven democracia. Ahora públicamente
están dedicados a ayudar a Irak, lo que me parece
un paso muy positivo.
El otro beneficio que se deriva
de la conferencia, es que el Gobierno ha cobrado
cierta confianza. Es
una joven democracia, con naciones de todo el barrio
y de todo el mundo que vienen y hablan con ellos de
manera constructiva y positiva. Parte del éxito
de Irak va a depender de si este Gobierno tiene la
confianza necesaria para tomar decisiones difíciles.
Y el aprender la democracia
trata sobre eso, han tenido que aprender la democracia
muy rápidamente y
creo que la conferencia va a otorgarle a las diferentes
facciones en Irak, la confianza necesaria para hacer
lo difícil, reconciliarse y darle al gobierno
la confianza necesaria para tomar las decisiones para
que esa reconciliación pueda plasmarse.
Así que, fue un resultado muy positivo en cuanto
a las expectativas de las próximas reuniones,
veremos. Pero el tema es que lo logrado en el primero
puede llevar a eso. La Secretaria de Estado (Condoleezza)
Rice va a asistir a esa conferencia. O sea que es un
paso hacia arriba, sin dejar de lado a nadie en cuanto
al grado de los asistentes.
Así que, creo que Condoleezza Rice va a llevar
una agenda que va a ayudar a avanzar esta joven democracia
y va a trabajar con los demás países
para lograrla.
Gracias señor Presidente.
Álvaro Uribe Vélez: Gracias Presidente.