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INAUGURACIÓN DE LA CÁMARA DE COMERCIO
DEL ORIENTE ANTIOQUEÑO

Marzo 23 de 2007 (Rionegro – Antioquia)

Mis coterráneos y Compatriotas.

Quiero darles un saludo afectuoso, felicitar a la Cámara de Comercio por este gran avance.

En la discusión política que se adelanta actualmente en América Latina, se desconocen puntos muy importantes de la estructura social de Colombia.

Se desconoce por ejemplo, lo que significan en la estructura social de Colombia las Cajas de Compensación Familias y las Cámaras de Comercio.

Eso podríamos denominarlo como el desconocimiento de los amortiguadores sociales de la Nación.

Tantos momentos de tensión, tantos momentos de dificultad, tantos momentos de recesiones, de amenazas, qué habría sido de la nación sin las Cámaras de Comercio, qué habría sido de la Nación sin las Cajas de Compensación Familiar.

Las Cámaras de Comercio en Colombia cumplen una función que sí desempeña bien el ideal de las iniciales Cámaras de Comercio en el mundo.

Nacieron antes que se conformara debidamente el Estado. Nacieron como una necesidad de organizar las actividades económicas, las relaciones entre los diferentes actores de las actividades económicas, y entre ellos y la comunidad en general.

En Colombia las Cámaras de Comercio no se limitan solamente al registro mercantil, de ahí para delante es que trabajan.

Cómo trabajan diariamente en el progreso social- económico de sus jurisdicciones, cómo trabajan como voceros de la comunidad en general, mucho más allá que de los comerciantes antes las diferentes instancias del Estado, cómo trabajan en procura de las grandes reivindicaciones sociales.

A lo largo de estos casi cinco años de Gobierno, he tenido el privilegio de trabajar muy de la mano con las Cámaras de Comercio.

Expreso hoy mi gratitud a todas ellas, en cabeza de ese gran líder de Confecámaras, el doctor Eugenio Marulanda.

Y expreso mi gratitud a Cámaras de Comercio, como la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia, aquí representada por su directora ejecutiva, la doctora Lina Vélez Nicholls, la Cámara de Comercio de la Urrá Sur, aquí representada por el presidente de su junta, el doctor William Fernando Yarce y por si directora ejecutiva, la doctora Lilian.

Por ejemplo, nosotros hemos tenido en todo el país, gracias a las Cámaras de Comercio, unos eventos periódicos que reúnen las diferentes expresiones del Gobierno Nacional con los niveles medios de la industria y del comercio para identificar obstáculos gubernamentales a la prosperidad de la actividad económica y removerlos. Ha sido muy útil.

Cómo nos han inspirado reformas en lo tributario, reformas en el tema de trámites, reformas en la asignación de créditos. Hemos podido trabajar en muchas ciudades de Colombia.

Nuestro programa de masificación del crédito popular y de crédito a la mediana y a la pequeña empresa, gracias a la cooperación de las Cámaras de Comercio. Mi gratitud.

Y qué gran liderazgo el que se ve en la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño.

Quiero rendirles un homenaje, felicitarlos, son ya 20 años de una tarea fecunda, una tarea fecunda en momentos difíciles y una tarea fecunda en momentos muy favorables.

El ex presidente Laureano Gómez solía decir que la solución de los problemas depende más de los seres humanos que de las estructuras que se crean para que ellos dirijan.

En esta Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño sí que encontramos valía humana, valida de liderazgo.

A la junta directiva, en cabeza del doctor Jorge Wilson, nuestro más sentido reconocimiento, a todos los afiliados, al equipo directivo, a los funcionarios.

Y hago un reconocimiento muy especial al doctor Rodrigo Zuluaga. He tenido el privilegio de conocerlo desde hace muchos años, cuando mirábamos con gran admiración su gestión como Alcalde de La Ceja, con dedicación, con transparencia ha conducido este gran proceso de la Cámara de Comercio del Oriente que es un proceso exitoso, es una historia positiva para contar y para esperar de ella que siga produciendo muy buenos resultados.

Y qué bueno, al inaugurar esta sede, este homenaje al doctor Jaime Tobón Villegas, uno de los antioqueños que mejor expresa las virtudes del pueblo de esta gran tierra nuestra.

Cuando algunos me dicen, para no citar sino algunas de sus virtudes, al caer el sol en las tardes de los sábados: ‘presidente debemos terminar este Consejo Comunitario ya, hay algunos Ministros ojerosos o usted se ve cansado’, les digo: eh, no se ha cansado el doctor Villegas para que vengan a decir que nosotros estamos cansados.

Esa energía, esa laboriosidad, ese amor por las tareas difíciles, por su tierra, por sus instituciones democráticas, esa solidaridad con sus coterráneos y con sus compatriotas, en fin, podríamos decir muchas, muchas cosas y nos quedaríamos cortos para unir nuestro modesto testimonio a este homenaje que en buena hora le hace la Cámara de Comercio a este gran antioqueño.

Muchas felicitaciones doctor Jaime, y no habrá homenaje suficiente para reconocer todo lo que usted nos ha enseñado.

Quiero referirme a algunos de los temas que tan juiciosamente nos han expuesto esta tarde el señor Director de la Cámara de Comercio y el señor gobernador del departamento (de Antioquia), el doctor Aníbal Gaviria.

Pero el señor Alcalde ha pedido, que quiere darnos el informe sobre el avance de una obra bien importante que compromete esfuerzos de todas las entidades del Estado.

El tema de servicios públicos, me parece que con el concurso de todos y con un gran liderazgo de la Cámara de Comercio, vamos en la dirección correcta.

Yo quiero hoy reconocer que la Cámara de Comercio del oriente antioqueño ha sido la pionera en el tema. Empezaba yo la Presidencia, y estábamos en una reunión con el senador Rubén Darío Quintero, el doctor Rodrigo Zuluaga, y me expusieron de nuevo el problema del diferencial tarifario. Ese día, gracias a la Cámara de Comercio, empezó el proceso. Y encontramos un gran entusiasmo, una gran determinación en el gobernador Aníbal Gaviria, que ha sido fundamental para sacar eso adelante, y la receptividad de Empresas Públicas de Medellín.

El acuerdo se hizo, desaparece Eade, había muchas dudas a cerca de si la ley permitía o no, que Empresas Públicas de Medellín asumiera las pensiones de Eade y las expectativas pensionales. Me dije, ¿pero por qué no?, yo no creo que los pensionados de Eade, que los trabajadores de Eade que tienen expectativas pensionales, puedan tener un mejor apoyo que Empresas Públicas de Medellín.

Eso exigió un nuevo decreto, casi no lo expedimos. Pero se expidió. Me dijeron que era el obstáculo. Ese decreto salió ya hace varios meses.

Expedimos otro decreto, porque el problema es semejante. Las tarifas de la periferia cundinamarquesa, son muy elevadas en comparación con Bogotá. El problema se da en varias regiones colombianas. Un decreto de unificación de mercado. Por eso me preocupa que después de haber resuelto el problema pensional, haber expedido el decreto de unificación de mercados, siga sin aplicarse la iniciación de la eliminación del diferencial tarifario.

Se que allí ha habido algún reclamo, porque había bastantes complicaciones, una de ellas con las empresas de Caucasia. Vamos a ver si con una gestión que se comprometió hace unos minutos el Ministro de Minas, y otra la señora Superintendente de Servicios, se puede agilizar eso. Pero creo que si nos ayudan el Alcalde de Medellín y el Gerente de las Empresas Públicas, con el decreto de unificación de los, de los mercados, puede empezar ya a aplicarse la unificación tarifaria.

Servicios públicos. La idea de la empresa regional para los otros servicios. A mi me parece bien, estamos en mora de hacerlo, esa fue la razón de eliminar Acuantioquia, que era un monstruo burocrático costosísimo e ineficiente. Y el proceso enseña, muchas veces con errores hay que aprender. No fue posible en ese momento tener la unificación de todos los municipios del oriente que antes estaban en Acuantioquia. Pero yo creo que se ha venido dando un proceso a lo largo de los años, y hoy hay espejos, muy, muy positivos, como en otras regiones del departamento.

Yo quiero proponerles esto: el oriente está en un punto que puede convertirse en el asentamiento humano de mejor calidad de vida del país, o puede convertirse en un monstruo de concreto. Y el Gobierno Nacional poco puede hacer, porque la Constitución Colombiana le asigne específicamente a los municipios, esas definiciones de ordenamiento territorial.

Creo que aquí hay que pensar y actuar con mucha, con mucha decisión.

Hace casi año y medio yo produje un decreto que paralizó muchas urbanizaciones rurales, porque se empezaron a construir velozmente tan pronto empezó la recuperación de la economía, y no se veía en muchas partes del país, incluido el oriente antioqueño, la planificación de las vías futuras, de los senderos, de los servicios públicos, las reservas de las franjas para ampliar vías, el respeto a las servidumbres históricas, a los lugares públicos, los retiros de las quebradas, los retiros de los ríos. Eso hay que revisarlo y aplicarlo muy cuidadosamente. Y a eso se tienen que dedicar con devoción, con celo los alcaldes.

A los abogados del Gobierno Nacional es decían que el Gobierno Nacional no era competente para ese decreto, que dificultad la que encontramos para poder, para poder expedir ese decreto. Pienso que la constitución de la empresa regional de servicios públicos, teniendo en cuenta el modelo del señor Gobernador que empieza a tener éxito en otras regiones, puede ayudar, para que desde esa empresa de servicios públicos se haga una mejor planificación para la zona. La otra la puede hacer el área metropolitana.

Yo quiero personalmente mirar el proyecto de ley de las áreas, doctor Rodrigo, áreas metropolitanas con el concepto de exigir coordinación, pero no de crear costos burocráticos. Uno de los problemas que han tenido las áreas metropolitanas en el país, es que se convierten en nuevas estructuras de costo burocrático. Lo que se necesita es que coordinen, pero que no tengan nuevas burocracias. Si el proyecto de ley ayuda a eso, impulsémoslo. Pero esa integración la tiene que hacer el oriente antioqueño, en servicios públicos, en infraestructura en general.

El tema de los servicios públicos tiene varios apoyos, un apoyo, lo que le correspondía a la Nación en EADE, se le deja al departamento de Antioquia para el fondo del agua. Y estoy seguro que el señor gobernador, quien va a distribuir eso, porque lo que hace el Gobierno Nacional es decirle, señor gobernador el dinero le queda a Antioquia.

Seguramente será muy receptivo para ayudar a ese esquema del oriente antioqueño, con alguna parte de esos recursos. Pero quiero decirles esto también, hoy, las normas tributarias ayudan muchísimo. Las empresas de servicios públicos que inviertan en esos desarrollos regionales, tienen una deducción tributaria del 40 por ciento, ese es un enorme regalo que les da la Nación, rebajándoles impuestos. O sea que las condiciones están dadas para responder a esta necesidad del oriente antioqueño.

A mi me parece que no se debería prescindir de Empresas Públicas, porque una cosa es estar en Antioquia y contar con Empresas Públicas, y otra cosa es estar en otras regiones colombianas, y no tener pares de Empresas Públicas para poder contar con ellas. Contar con Empresas Públicas es un privilegio, por eso no debe prescindirse de Empresas Públicas, creo yo, para cualquiera de estas soluciones. El tema de servicios públicos, el tema de áreas metropolitanas.

El tema vías. Sí, en efecto siendo yo Gobernador de Antioquia tuve ese inmenso honor, se adjudicó la concesión a 78 firmas antioqueñas para construir el túnel, como se adjudicó también la concesión de la vía Bello – Atí. Y con la ayuda del entonces Director Nacional de INVIAS, el doctor Guillermo Gaviria Correa, que en paz descanse, y el doctor Juan Gómez Martínez, entonces ministro de Obras Públicas, pudimos completar los recursos para abrir y adjudicar la licitación del túnel Fernando Gómez Martínez, hoy en buena hora en plena operación. Esa obra marchó bien, pero después lo del túnel al oriente y lo de la doble calzada Bello - Atillo, se transformaron en pleitos. Cuando llegamos a la Presidencia con la generosidad de los colombianos nos dimos a la tarea de superarlo, tomó mucho tiempo. Afortunadamente contamos con la buena voluntad de los dos gobernadores, el doctor Eugenio Prieto, ahora el doctor Aníbal Gaviria, de los alcaldes, de los ingenieros, y se pudo resolver ese problema.

Me parece que todo lo que se está haciendo en la comunicación del Valle de Aburrá con el oriente es muy bueno, y me parece que son muy buenas las proposiciones del Gobernador, para llevar unos recursos a otras vías del oriente antioqueño.

¿Qué sigue?, sigue el tema de túnel o no túnel. Yo creí que los únicos que discutíamos con conceptos subjetivos éramos los abogados, pero cómo discuten los ingenieros. Pensé que siempre actuaban sobre ciencias exactas y que no había lugar a la discusión. Pero yo tuve una experiencia muy joven y otra ya viejo. Muy joven aquí en el aeropuerto de Rionegro, siendo director de Aerocivil. Y hubo que resolver una disputa entre interventores y constructores, con pura lógica elemental de Santo Tomás, porque las matemáticas entre ellos no fueron capaces, y ahí funciona bien después de tantos años.

Cuando estábamos en la Gobernación de Antioquia me decían, ni riesgos doble calzada, ni riesgos doble calzada, me decían los ingenieros, todos a una, en esas pendientes con esos problemas geológicos no se puede, bueno, ustedes son los ingenieros son los que saben, vamos con el túnel.

Después llego a la Presidencia de la República, y hombre, ¿por qué ese pleito?, no porque ahora dicen que hay que hacer doble calzada, que no se puede hacer túnel. Bueno, entonces empezamos a resolverlo, al lado de la concesión de la autopista Medellín – Bogotá, 40 mil millones y otros esfuerzos, y lo que se definió fue esto: señores ingenieros, cuál es el interés de ustedes, que no nos quiten el derecho de hacer el túnel. Autoridades de Antioquia y de los municipios, ¿cuál es el interés de ustedes?, que hagamos la doble calzada. Entonces surgió una cosa muy elemental me permití decirles, vamos a resolver los dos intereses positivamente, hagamos la doble calzada, hagamos la doble calzada ahora que los ingenieros dicen que sí se puede. Además con ese paisaje tan lindo es mejor ir por una doble calzada, eso sí, que no la llenen de vallas. Y dejan ver todo lo verde, todo lo verde, que por un túnel.

Algunas de las cosas que me da tristeza es que el Rey (de España) va a llegar ahora y no le va a tocar ver de día ese trayecto tan bello entre el aeropuerto y el Hotel Intercontinental. Trayecto paradisíaco, pocos lugares del mundo lo tienen.

Y así se resolvió, los ingenieros dijeron, nosotros aceptamos superar el pleito, si nos preservan el derecho de hacer en el futuro el túnel, y hacemos ya la doble calzada.

Déjenme decir una cosa bien atrevida, todo está indicando que la solución prioritaria que hoy requerimos, es la solución de dobles calzadas.

Entonces, yo diría que muy delicadamente deberíamos buscar alternativas con los ingenieros. Sentarnos de nuevo con ellos.

Ahora, si no se le pone el cascabel al gato, no se resuelven los problemas. Vamos a ver entonces cómo tenemos un diálogo amable con ellos o sentamos el señor Gobernador, nos ayuda el ministro, nos ayudan los gremios, con los alcaldes y le buscamos una salida a eso.

Ese tema, el tema de Corpoica. Doctor Rodrigo, yo no me atrevería a decir, no tengo la facultad jurídica para decir: “bueno, que eso se destine a un centro de exposiciones”. Lo que sí le he pedido al Ministro de Agricultura es lo siguiente: Las Granjas de Corpoica, de todo el país, deben afectarse a que no las llenen de cemento, a preservarlas mínimamente como parques ecológicos. El compromiso que yo asumo con ustedes es que este gobierno está haciendo todas las gestiones para que quede asegurado, mínimo, un destino de parque ecológico para esa granja. Porque sería muy triste que en el proceso acelerado de urbanización, también la urbanizaran. Y si las disposiciones ecológicas permiten que haya allí algunos servicios, como el que dice el doctor Rodrigo, magnífico, pero yo no me comprometo hasta ahí. Me comprometo a la gestión que estamos haciendo. Que se reserven esos terrenos para que no sean construidos, para que queden como pulmones de todas estas áreas.

La concesión del aeropuerto marcha, señor gobernador, lo ha explicado, yo que eso puede ser muy bueno. La manera como el ministerio está vinculando los aeropuertos que el trajo en su lista para esa concesión, y lo necesitamos.

Este es un momento, yo creo, bien importante para el país, a ratos creo que el país está de moda. Yo soy bien optimista. Pero es que esta mañana me decía el Gerente del Banco de la República que nosotros tuvimos el año pasado la segunda tasa per cápita de inversión extranjera en América Latina. Y me decía que el país que más recibió crecimiento, crecimiento de remesas de sus ciudadanos que viven en el extranjero fue Colombia. Que recibió 3900 millones de dólares. La gente quiere invertir en aquí. Y eso es muy bueno, nos trae ese problemita de la revaluación.

Yo he creído, apreciados coterráneos, que Colombia ha tenido muchas bonanzas y ahora tiene una bonanza de confianza, que tenemos que trabajar con mucha delicadeza y con seriedad. Colombia tuvo una bonanza en el gobierno del general Pedro Nel Ospina, cuando se recibió la indemnización por Panamá: 25 millones de dólares. Tuvo una segunda bonanza en el proceso de sustitución de importaciones, cuando las guerras europeas nos obligaron a hacerlo. Los gobiernos del generales Rojas Pinilla, de los doctores López Michelsen, Belisario Betancur, tuvieron bonanzas de café. Caño Limón, Cupiagua, Cusiana, trajeron bonanzas por esos descubrimientos petroleros.

La apertura del país hacia la telefonía móvil trajo inversión para la telefonía móvil. Una bonanza específica.

La apertura de la televisión a los canales privados de televisión trajo una bonanza. Hoy lo que vemos es un gran crecimiento de la inversión en nuestro país en todos los sectores. Por eso he dicho que esto es una bonanza de confianza.

Cuando nosotros empezamos la tasa de inversión en Colombia era del 12 por ciento, el año pasado fue del 26. La tasa de inversión del sector privado era del 6,5 el año pasado fue del 19. Esto es: por cada cien pesos del producto, el año pasado hubo inversiones del sector privado por 19 pesos. Eso es bien importante. Nos está poniendo ya en una muy buena posición internacional.

Si ustedes me preguntaran: ¿cuál es el principal que el gobierno busca para el éxito económico?, yo les diría: las tasas de inversión. Si el país logra mantener en el mediano y largo plazo altas tasas de inversión, el país se transforma.

A uno le hablaban, sí, muchos temas, el tema educativo en el Japón, el tema del empleo estable durante toda la vida, el tema innovativo, el tema de Corea, el tema de Irlanda del Norte; y yo creo que Colombia, a esos países les llegó la hora, yo creo que a Colombia le está llegando la hora. Le está llegando la hora y lo vemos por estas tasas de inversión.

Lo que pasó hace una semana con Paz del Río lo indica. Aquí quiero rendirle un homenaje a los trabajadores, en cabeza de don Gerardo. Yo le propuse hace cuatro años a los trabajadores: “bueno, seguramente el Gobierno Nacional va a tener que sacar una plata muy grande para pagar las pensiones de ustedes, plata que no hay. Ayúdenme a reducirle a esta empresa los costos laborales y hagan ustedes el tránsito de sindicalismo reivindicatorio, al sindicalismo de participación. Quítense la idea de que son trabajadores sindicalizados y pónganse el overol de gerentes de la empresa. Hicimos ese tránsito, y, mi Dios le ayuda a la buena fe. Nos vino también el tema del encarecimiento del precio mundial del acero. Y le quitamos a la empresa toda la politiquería, no más gerentes por política, no más juntas directivas por política, meritocracia y votos. Y ustedes vieron lo que pasó hace una semana. Ayúdeme don Gerardo a convencer a los trabajadores y pensionados allá para que parte de esos 700 mil millones van a recibir cinco mil familias boyacenses, nos los llevemos para la capitalización de Ecopetrol, para que hagamos capitalismo social.

La gente quiere invertir en Colombia, y no inversiones especulativas. No para traer unos dineros aquí para especular, sino en activos fijos. Eso es bien importante. Y alguien me dice: “eso está mal”. Yo creo que eso es muy bueno, eso fue lo que hizo Irlanda del Norte. Aquí que está el doctor Cárdenas.

Yo le aseguro que toda la plata que recibieron los accionistas de la Compañía Colombiana de Tabaco está bien invertida. ¿Habrán botado un peso? No, los paisas no saben de eso. ¿Se la habrán llevado para el extranjero? Creo que en las actuales condiciones, no.

Todas las empresas que hemos visto que han tenido inversión extranjera está creciendo muchísimo en Colombia, y lo que pagan, en Colombia se multiplica. Piensen ustedes si nos podemos llevar de los 700 mil millones que van a recibir esas cinco mil familias de trabajadores, en Paz del Río, 500 mil para la capitalización de Ecopetrol.

Yo miro con mucha fe eso, porque eso es lo que nos va a ayudar a que esta economía tenga crecimiento sostenido, sea competitiva, financie obras públicas y supere pobreza y a tener empleos de calidad. El país no puede pensar en competir con empleos mal remunerados, con empleos sin seguridad social. Ese modelo dejémoslo a otros. Si nosotros queremos tener una relaciones laborales, no de capitalismo salvaje, unas relaciones laborales no de odio de clases, unas relaciones laborales cristianas, solidarias, tenemos que pensar en competir con empleos de buena calidad, empleos de remuneración digna, con afiliación a la seguridad social. Y de ahí, la importancia de la inversión.

¿De dónde se deriva esa inversión? De la confianza en Colombia. Y a la confianza en Colombia contribuyen muchos elementos, uno de ellos, el modelo de Estado. Muy importante en este momento en América Latina.

Nosotros no entramos ni en la moda de desmontar el estado, ni en la moda de estatizarlo todo. Nosotros hemos venido profundizando el concepto colombiano de darle todas las garantías a la inversión privada, exigiéndole responsabilidad social, que yo creo que es lo más importante, esa combinación.

El modelo colombiano es hoy un modelo que se discute, se discute con otros países del continente que están en otra idea política, y nosotros las respetamos, pero nos toca explicar este modelo. Y ese modelo, por eso lo tenemos que profundizar, genera mucha confianza. Y el que sabe que en Colombia está ocurriendo eso, quiere mandar platica para acá.

La doctora Alicia Arango, la Secretaria de la Presidencia, tiene una orden que cumple rigurosamente, le digo: “doctora Alicia, empresario que diga que va a invertir en Colombia y que necesita una cita conmigo, a cualquier hora y en cualquier lugar. Eso, no me los deja escapar”. Y si, los empresarios que han pasado por la Presidencia van a cumplir las inversiones que han ofrecido, esto va a crecer mucho.

Jota, mire, para Banca de Oportunidades, el solo Citygroup me prometió mil corresponsales no bancarios, mil pequeñas oficinas, en sitios populares de las grandes ciudades y en sitios rurales de Colombia, para apoyar Banca de Oportunidades. Cuando me visitó, dije: “Bienvenida su inversión en Colombia”. Pero hay un economista, que se llama Stiglitz, que dice: “que cuando los bancos internacionales llegan a un país como Colombia, solamente financian las grandes transnacionales y no financian lo local. Denme una pruebita de que va a financiar lo local” y se comprometió conmigo con esos mil corresponsales no bancarios para los sectores populares.

Y el modelo colombiano genera mucha confianza. Para consolidar esa confianza estamos trabajando tres propósitos de gobierno: Seguridad Democrática, consolidarla, un país sin guerrilla, sin paramilitares, sin narcotráfico. No es fácil deshacerse de todas esas plagas, pero si nosotros no desfallecemos, el país, la democracia, termina derrotando. Lo importante es que el estado democrático no desfallezca.

Segundo, la confianza en la inversión económica. Y tercero, la política social, que tiene unas metas muy exigentes en este gobierno, y se van cumpliendo. Ya hay noticias muy buenas de disminución de la pobreza, gracias a esta recuperación de la actividad económica, y en muchas ciudades colombianas.

En el tema de confianza inversionista, permítanme decir lo siguiente, juega un gran papel la tributación nosotros por razones sociales dijimos: no eliminamos las contribuciones a las Cajas de Compensación, al Bienestar y al SENA, esas son instituciones muy importantes para el tejido social de la Nación, pero le hemos dado una gran compensación al empresariado.

Y me voy a referir solamente a dos temas: los estímulos tributarios y la nueva Ley de zonas francas.

Eso marca una gran diferencia, por ejemplo, con la tributación de los Estados Unidos, una de las críticas al esquema tributario norteamericano es que rebajó las tarifas de manera general. Entonces dicen los opositores: están premiando es a los ricos, facilitándoles que lleven a sus bolsillos más utilidades. Nosotros no hicimos eso.

Nosotros en lugar de proponernos reducciones drásticas de tarifas, lo que hicimos fue estimular la inversión. Toda inversión que se haga hoy en Colombia tiene un 40 por ciento de deducción, toda nueva empresa que se cree hoy en Colombia tiene un 40 por ciento de deducción. Yo tengo mucha fe que eso va a ayudar, me dicen que en las asambleas empresariales que están empezando a darse este año ya han tomado mucha decisión de reinvertir gracias a esos estímulos. Yo le hacía esta cuenta al doctor Juan Felipe Gaviria: supongamos que Porce III cueste dos billones, y empresas públicas desde la Ley 142 es contribuyente común y corriente, supongamos que en Porce II cueste dos billones, la deducción es del 40 por ciento, una deducción del 800 mil millones, si la multiplicamos por una tarifa del 32, eso tiene una disminución de impuestos de 256 mil millones, eso le regala la Nación al contribuyente que invierte, eso equivale al 12,8 de la inversión, eso nos hace muy competitivos, por eso hay que contar el cuento en todas partes para estimular a todo el mundo a invertir.

Y me preguntaba alguien de Empresas Públicas: “¿bueno son 256 mil… pero si no podemos deducir los 800 mil millones en el primer año?” Una de las cosas buenas de la reforma es que autoriza que esas deducciones se puedan llevar a perdidas y ejercerla en cualquiera de los años fiscales subsiguientes, prácticamente sin límite de tiempo.

Y nos ayuda mucho la nueva Ley de zonas francas, porque ya queda sin la amenaza de la organización mundial de comercio, con una tarifa del 15 por ciento en renta, que es concurrente con estos estímulos. Un empresario de zona franca que invierta 100 pesos, no solamente tienen el beneficio de la tarifa del 15 por ciento, sino que de esos 100 pesos el Estado le deduce 40, y el Estado le aporta el 12,8 en impuestos que le perdona para contribuirle a sus nuevas inversiones. Además de otros estímulos bien importantes, que el Congreso de manera talentosa en diciembre los dejó ya de manera estable: 30 años de exención a los nuevos hoteles, unas exenciones bien largas, bien importantes a la agricultura de tardío rendimiento, no hay IVA ni impuesto global al combustible para los combustibles biológicos.

Vamos a ver si con el Gobernador sacamos rápidamente una pequeña planta de alcohol carburante en Vegachí, tenemos la obsesión de instalar una en Vegachí, entre los muchos proyectos grandes que hay en Colombia, pero hacer dos pequeñas, para mostrar que eso también se puede producir en pequeña cantidad dada la peculiaridad de muchas regiones colombianas, una en Vegachí y otra en la olla del río Suárez. Eso tiene unos grandes estímulos.

Entonces yo veo con mucho optimismo que la inversión en Colombia tiene que seguir creciendo, porque hay los estímulos, empezamos a ser competitivos y hay un concepto de Estado totalmente favorable a la inversión.

Tenemos problemas, el problema de la revaluación, no es fácil, esta mañana tuvimos una reunión larga con el equipo económico, con el Banco de la República. Entonces empezamos a revisar qué más puede hacer el Gobierno en gasto público. Les dije mire: el país no me permite que yo frene una sola de las nuevas carreteras que se están concesionado. Cómo les parece donde yo les diga a ustedes mis paisanos que no vamos a sacar la concesión para la doble calzada de Turbo a Santafé o que vamos a frenar el Metroplus de Medellín, que tiene un aporte del 70 por ciento del Gobierno Nacional, o cualquiera de esas obras o que le digamos a la costa Caribe que le vamos a frenar las inversiones en el puerto de Barranquilla o al Valle del Cauca que vamos a frenar las obras que a penas empiezan para la construcción de la doble calzada Buga – Buenaventura.

Me dicen: Presidente en gastos generales. Hemos hecho un esfuerzo enorme. Esta mañana le pedí al equipo de Gobierno otros dos esfuerzos en gastos generales. Son más importantes por el ejemplo que dan, que por lo que puedan ahorrar en dinero. Vamos a aplicar un plan riguroso de ahorro en el consumo de energía, pero no con la modalidad tradicional, sino tratando de cambiar las luminarias del país por luminarias de bajo consumo y tratando de cambiar todos los bombillos de edificios públicos, por esos nuevos bombillos de bajo consumo y hacer también un gran esfuerzo en consumo de agua, empezando por exigir que todos los edificios públicos tengan dispensadores de agua de bajo consumo, que son los que se producen ahora. Vamos a hacer todos esos esfuerzos.

Me decían: Presidente en gasto burocrático. A nosotros nos falta mucho en la reforma del Estado, ustedes saben que ahora estamos reformando las clínicas del Seguro Social, ya se han dado pasos muy importantes en Antioquia, en Cartagena, en Bucaramanga. Yo voy a aprovechar hasta las 3:00 de la tarde del 7 de agosto de 2010, con la ayuda de Dios para reformar el Estado.

Pero miren porque este tema de la relación: revaluación – gasto público. Miren la evaluación que hicimos esta mañana: entre agosto de 2002 y diciembre de 2006 se reformaron 340 entidades, muchas con enormes dificultades. Yo no creí cuando estaba joven que Colombia obtuviera espacio político, ideológico, para reformar a Telecom como se reformó o para quitarle a sectores de excesos sindicales y politiqueros el manejo de las clínicas del Seguro Social y ahí lo vamos logrando.

Se han reformado de estas 340 entidades, 132 hospitales, muchos en Antioquia, 35 empresas de servicios públicos y las otras entidades que todos conocemos. ¿Saben cuántos cargos se han eliminado? 32.836. ¿Saben cuánto ahorran todo esto? Eso ahorra 3,5 billones por año, un punto al PIB. Pero a eso hay que sumarle otro ahorro, el ahorro de la reforma constitucional de pensiones y de la reforma legal de pensiones.

Entonces yo quiero decirle al país desde esta Cámara de Comercio del oriente Antioqueño, el Gobierno quiere tener todo el cuidado en el gasto público, lo que podamos hacer queremos hacerlo, pero tenemos unos compromisos en infraestructura inaplazables, unos compromisos sociales inaplazables. ¿Cómo le digo yo al país que no vamos a llegar este año, con estos niveles de pobreza que todavía tenemos tan altos, a millón y medio de Familias en Acción?

Entonces teniendo en cuenta eso vamos a ver cómo continuamos esta coordinación con el Banco de la República. Nos hemos comprometido a tener rápidamente un promedio de cinco, seis billones del Presupuesto Nacional como recursos congelados del Banco Central. Porque nos preocupa enormemente esta revaluación y yo creo que nos toca pensar en unos aportes presupuéstales más amplios, para que en el caso de los productos agrícolas o agroindustriales, de acuerdo con el permiso de la Organización Mundial de Comercio, se les dé un apoyo para la exportación y en el caso de los manufacturados, cuya exportación no se puede apoyar por prohibición expresa de la Organización Mundial de Comercio, en casos críticos se les den apoyos a la producción que ya empiezan a darse a través de Bancoldex.

Tenemos una cosa muy buena, la tasa de inversión en Colombia. Otra cosa muy buena el crecimiento de la economía el año pasado: 6,8. Ahora lo importante es no dejar que esa tasa de inversión se crezca, pero hay problemas como este problema de la revaluación, que no quería eludirlo aquí con ustedes apreciados compatriotas.

Y yo siempre me he sentido en mucha vida social en estos días y uno no está acostumbrado a eso, porque ya llevo dos sábados sin consejo comunitario, con unas visitas bien importantes, pero entonces vamos a atenderlas con todo el cariño como sabemos hacerlo aquí, qué le hace que tengamos que hacer un poquito de vida social pero esas visitas le van a ayudar mucho a Colombia y todo visitante importante que podamos invitar bienvenido, porque salir al extranjero a hablar de Colombia o no cree o van dos o la televisión extranjera no le asigna importancia a eso o cualquier cosa buena que uno diga ahí mismo la matan con una noticia de un crimen, cuando vienen aquí se encantan, entonces hay que seguir trayéndolos aquí, por eso hoy estamos de plácemes para darle esta bienvenida a los Reyes de España que han sido tan buenos amigos de Colombia y que hoy nos hacen el honor a los antioqueños de pisar esta tierra.

Doctor Rodrigo muchas felicitaciones. Doctor Jorge Wilson muchas felicitaciones.

Apreciados empresarios del oriente muchas felicitaciones.

 
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