FUERZA PÚBLICA Y CIUDADANOS SOMOS INVENCIBLES: MINDEFENSA
Bogotá, 15 nov (cne).- “esto nos demuestra que no debemos dejar sola a la Fuerza Pública y que la Fuerza Pública y los ciudadanos somos invencibles”. Con estas palabras la ministra de Defensa, Marta Lucía Ramírez de Rincón, destacó la rápida acción de las autoridades que permitió el rescate del obispo de Zipaquirá, monseñor Jorge Enrique Jiménez, y del sacerdote Desiderio Orjuela, durante operativos adelantados en zona rural de Cundinamarca.
Ramírez de Rincón reportó que aunque los operativos de rescate se iniciaron siete horas después del plagio, gracias al apoyo brindado desde el primer momento por los ciudadanos de la región, la Policía y al Ejército lograron la liberación del Obispo y el sacerdote de Pacho, Cundinamarca.
“Esto nos demuestra que tenemos una Fuerza Pública totalmente comprometida. Nuestros hombres han trabajado 24 horas sin parar. También nos demuestra que cuando los ciudadanos están unidos y que cuando ciudadanos e instituciones somos uno solo, a este país no hay nadie que lo pueda parar”, expresó la ministra Ramírez de Rincón.
“El presidente Álvaro Uribe Vélez estuvo atento todo el tiempo dirigiendo, coordinando y estimulando a todos y cada uno de los miembros de la Fuerza Pública, para que se diera este resultado que hace que estemos muy contentos todos”, expresó la funcionaria.
SE PAGARÁ LA RECOMPENSA
La Jefe de la cartera de Defensa anunció que el Gobierno pagará los 100 millones de pesos ofrecidos como recompensa a quienes suministraran información que permitiera adelantar los operativos de rescate de los miembros de la Iglesia Católica.
“No solamente por la recompensas se mueve la solidaridad de los ciudadanos. Aunque sin duda en este caso esa recompensa que vamos a pagar está más que bien fundamentada y justificada. Porque fue una información la que sirvió para efectuar toda esta operación de rescate que terminó muy bien, gracias a Dios”, sostuvo la funcionaria.
También destacó la cooperación desinteresada de los habitantes de varios municipios cundinamarqueses, quienes durante los últimos cuatro días entregaron informaciones a las autoridades sobre cada uno de los lugares por donde iban pasando el obispo Jiménez, el padre Orjuela y los captores.
“En estos días de búsqueda eran los campesinos de esos lugares los que espontáneamente brindaban información al Ejército para ayudar y orientar. Esta fue una ayuda desinteresada”, enfatizó la ministra Ramírez.
EL OPERATIVO DE RESCATE
El lunes pasado, luego de conocerse el secuestro del Obispo de Zipaquirá y del párroco del municipio cundinamarqués de Pacho, el Ejercito y la Policía emprendieron en forma conjunta los operativos de rescate.
El primer día fue hallado el vehículo que se utilizó para cometer el plagio. El miércoles las tropas del Grupo de Contraguerrilla 16 y de la Brigada Móvil 2 sostuvieron un enfrentamiento con guerrilleros de las Farc. En este hecho fue abatido uno de los secuestradores.
Ayer jueves, explicó la Ministra de Defensa, las autoridades encontraron los caballos que se utilizaron para transportar a los cautivos y hoy, luego de varios enfrentamientos registrados en zona rural del municipio cundinamarqués de Topaipí, se produjo el exitoso operativo que terminó con el rescate, sanos y salvos, de monseñor Jiménez y del sacerdote Orjuela.
“Cada vez que exista la posibilidad de rescatar a un ciudadano con la menor cantidad de riesgo posible para su vida, creemos que vale la pena intentarlo. Pero eso es algo que el Presidente (Álvaro Uribe Vélez) ha querido que en cada momento lo evalúe la familia. Cuando las familias no han estado dispuestas al rescate, no lo hemos intentado”, concluyó la Ministra de Defensa.
