Adelantar esta política es una necesidad para Colombia, dice Vicepresidente
SEGURIDAD DEMOCRÁTICA RESPETA DERECHOS HUMANOS
Bogotá, 25 nov (CNE). El vicepresidente de la República, Francisco Santos Calderón, sostuvo hoy que la política de Seguridad Democrática es “una necesidad para Colombia y está estructurada para ser respetuosa de los derechos humanos”.
Santos Calderón hizo este anuncio al instalar la Primera Reunión Plenaria del Gobierno Nacional con Organizaciones de Derechos Humanos y Paz, evento que contó con la asistencia de Carlos Franco Echavarría, director del Programa Presidencial de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario.
El Vicepresidente de la República calificó este encuentro como “de alta importancia para el país” y aseguró que “con base en las cifras de secuestros, asesinatos, desplazamientos y terrorismo, se convierte en una obligación implementar una firme política de Seguridad Democrática, haciendo cumplir los derechos humanos”.
Reiteró que esta política busca contar con los controles institucionales y ciudadanos necesarios para evitar cualquier exceso en el momento de implementarla.
Santos Calderón manifestó que temas como la protección a la Misión Médica, el fin del secuestro, la no utilización de minas antipersonales y la exclusión de la población civil del conflicto, son vitales para permitir el alivio de la crisis humanitaria que vive Colombia.
Por su parte, el director del Programa Presidencial de Derechos Humanos, Carlos Franco Echavarría, dijo que “la Nación tiene el reto en los próximos cuatro años de implementar estas estrategias en medio de una situación compleja y lograr eficacia en el respeto de los derechos humanos en Colombia”.
También sostuvo que “ante estos retos el Gobierno se ha propuesto unos temas que ya han sido incluidos en la propuesta del Plan de Desarrollo y que contemplan políticas de prevención y fortalecimiento de la participación ciudadana para hacer de los derechos humanos un tema fundamental del desarrollo de las regiones”.
Franco Echavarría consideró como de “alta importancia” la comprensión de la comunidad internacional de los distintos aspectos de la política de Seguridad Democrática y de la difusión de la situación real del país en ese tema.
Estos encuentros se llevarán a cabo cada dos meses, con el fin de que se conviertan en instrumentos permanentes para determinar y evaluar el cumplimiento de los derechos humanos en Colombia