GOBIERNO PROPONE PLAN DE SALVAMENTO PARA LAS EPS
Bogotá, 10 sep (CNE).- El Ministro de Salud y Trabajo, Juan Luis Londoño, le solicitó hoy a su colega de Hacienda, Roberto Junguito Bonnet, autorizar una adición presupuestal por 200 mil millones de pesos para solucionar los problemas más críticos que afronta el sistema de salud en el país.
La solicitud la hizo el ministro Londoño durante un debate sobre la situación financiera de las entidades promotoras de salud, celebrado en las comisiones séptimas de Senado y Cámara.
Según el Ministro, con este plan de salvamento se solucionarán problemas como el mal funcionamiento, la baja calidad de la prestación del servicio y la falta de definición de un mecanismo ideal de pago para que las entidades se puedan poner al día en sus obligaciones.
Londoño dijo que para mejorar la situación financiera del sector se deben cambiar los modelos de contratación del sistema de salud, "lo que generará confianza y mejorará la calidad del servicio".
Resaltó que se encuentra en trámite en el Congreso un proyecto de Ley de Control a la Evasión de los aportes al sistema de salud, problema que hoy alcanza el 40 por ciento.
En el proyecto se contemplan cambios en los mecanismos de consecución de recursos de todo el sistema de seguridad social, "porque si todo el mundo evade nadie tiene plata".
Respecto a la situación financiera de Caprecom y Cajanal, explicó que se deben simplificar los procesos de contratación de estas entidades, que han incrementado sus deudas y están "arrastrando gran parte de las dificultades del régimen subsidiado y contributivo".
Explicó que el país no puede seguir dilatando decisiones de fondo sobre entidades cuya situación financiera es tan endeble y agregó que es muy posible que existan fusiones o liquidaciones.
Anunció que en los próximos meses se tomará una decisión de fondo sobre la existencia y salvación de la atención de los pacientes de esas entidades y de la organización futura.
Londoño advirtió que es necesario fortalecer la Superintendencia Nacional de Salud y, además, convertirla en un ente de protección de salud que tenga instrumentos y "deje atrás la politiquería".