EXPOSICIÓN DEL PRESIDENTE URIBE EN FORO DEL SECTOR SOLIDARIO
Bogotá, 25 jun (CNE). El Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, hizo la siguiente exposición ante el Primer Foro Social y Solidario ‘Hacia un Estado Comunitario’, evento que se lleva a cabo en Bogotá. Posteriormente absolvió algunas inquietudes de los asistentes.
“Déjenme recoger estas muy positivas inquietudes que hemos escuchado en algunos conceptos generales y en una propuesta metodológica, para medir el avance transversal de la economía solidaria en las principales expresiones de la vida colombiana en los años que vienen.
Unos conceptos elementales. El Estado Comunitario. Busca que el Estado fundamentalmente beneficie a la comunidad. Que el Estado no beneficie grupos de interés, no beneficie burocracia, no beneficie clientelismo, no beneficie monopolios. Que el Estado beneficie a la comunidad.
Es una manera operativa de proceder el Estado, que lo diferencia de lo que ha sido el modelo burocrático derivado de lo que podríamos llamar la desnaturalización de la Socialdemocracia. Y por supuesto que lo diferencia de la ilusión o el paradigma neoliberal. Ni lo uno, ni lo otro.
Ese Estado Comunitario tiene que ser Estado promotor. Tiene que intervenir para conciliar diferencias. Pero no puede ser obstructor de la iniciativa privada. Menos puede ser obstructor de la iniciativa social.
De ahí la importancia que todo lo que hagamos en estas reformas tenga claridad. Que Dansocial y las superintendencias tienen que cumplir, el uno una tarea promotora fundamentalmente, las otras una tarea de vigilancia, pero ninguno una tarea de obstrucción.
El Estado Comunitario, para cumplir su objetivo que la comunidad sea la gran beneficiaria de su tarea, necesita como presupuesto, como condición, que la comunidad sea la gran autora de su tarea. Para beneficiar a la comunidad, que la comunidad sea la que defina qué hace ese Estado, que participe en las tareas de ejecución de las tareas de ese Estado y que las vigile.
Me gusta mucho que en Colombia hemos venido agrupando el mutualismo, la acción comunal, las cooperativas, todas como especie en ese gran género que es la economía solidaria, los fondos de empleados, el voluntarismo. Y hacia allá tenemos que avanzar.
He venido sosteniendo desde hace muchos años (porque con ustedes, con los mayores aquí presentes de mi generación, venimos trabajando desde hace muchos años en diferentes desarrollos del cooperativismo), que la economía solidaria es un instrumento para hacer más social al sector privado y menos burocrático al sector público.
Yo creo que eso sigue siendo valido y así lo propusimos a principios de los años 80, cuando dábamos en muchos Concejos colombianos, empezando por el de mi ciudad, la batalla para obtener la exención del impuesto de industria y comercio.
Ahora: Colombia tiene muy rica normatividad solidaria. Que se le mejore, está bien. Colombia tiene fervor solidario, marchitado en los últimos años. La crisis del cooperativismo financiero nos hizo mucho daño. Hay que recuperar la credibilidad, porque se afectó la credibilidad.
En la campaña yo hablaba con mucho entusiasmo de promover el sector financiero del cooperativismo y encontraba en todas partes desaliento, desmayo, oposición. Hay que recuperar esa fe de los colombianos en las formas solidarias. Hay que preservarlas inmaculadas. No podemos dejar que el clientelismo incursione en las formas solidarias. No podemos permitir que las formas solidarias se presten para corrupción. Eso es dejar corromper la sal. Y ese rescate es necesario para rescatar lo más importante: la credibilidad de los colombianos en sus formas solidarias.
¿Cómo lo vamos a medir? Revisemos el compromiso de Dansocial con todas las agencias del Estado. Ajustemos eso a los 100 puntos del Manifiesto Democrático y al Plan de Desarrollo.
Les recuerdo a ustedes 6 políticas que impulsa este Gobierno:
- La política de seguridad.
- La política de disminución de costos del Estado.
- La política de aumento de ingresos del Estado.
- El referendo contra la corrupción y la politiquería.
- La reactivación económica y la social.
En seguridad creo que el único camino es que todos los colombianos seamos solidarios entre nosotros y con las instituciones democráticas.
Confío en que eso se vaya abriendo paso todos los días más y más en Colombia. Aquí vamos a derrotar el terrorismo, en una tarea que toma años, dificultades, y en la medida que todos solidariamente acompañemos las instituciones democráticas.
Déjenme saltar a la sexta política: la Reactivación Social, y mirar la economía solidaria a través de la siete herramientas de equidad:
La primera: Educación. Estamos en mora de reglamentar cómo vamos a aplicar los recursos tributarios del cooperativismo a la educación formal. Veo resistencias, veo dificultades, y ese es un empeño. Yo lo pondría como una tarea, doctor Alfredo, que debe quedar lista en los próximos días.
La señora Ministra le va a dar una buena noticia al país la próxima semana, sobre cómo hemos avanzado en educación, pero falta mucho, y en lo que falta es necesario el recurso de ustedes.
Nosotros queremos hacer el mejor uso del recurso de ustedes, a través de sus propias cooperativas. Es el ideal, pero en educación formal.
Déjenme hablar de manera sencilla, sin eludir responsabilidades, al grano. Nosotros no podemos despilfarrar dinero del cooperativismo en cursillos de formación, en seminarios, en botarates. La platica del cooperativismo a la educación se tiene que traducir en buena educación formal, en educación formal de gran calidad.
Y ahí hay otro punto. La señora Ministra tiene que hacer un esfuerzo muy grande para llegar al millón y medio de cupos en este Gobierno. Su gran apoyo en una de las acciones estratégicas, que es la de contratación de cupos, tiene que ser la economía solidaria. Con instituciones privadas sin ánimo de lucro, las que ustedes representan.
Ojalá podamos mostrar en cifras un buen avance en materia de economía solidaria y educación.
Segunda herramienta de equidad: la Protección Social. Varias expresiones allí. Porque vemos cómo la economía solidaria tiene que ser un instrumento que haga un recorrido transversal por las diferentes políticas del Estado.
Yo quiero dar unos ejemplos aquí de cómo debe hacer ese recorrido en el concepto de Estado democrático como Estado comunitario, en el concepto de Seguridad Democrática, y en estas siete herramientas de equidad de la Reactivación Social.
En la Protección Social. Cobertura de bienestar familiar. Es bien importante avanzar hacia la transformación de las madres comunitarias en organizaciones solidarias. Que todas participen de organizaciones solidarias y que llegue un momento en que la contratación sea de Bienestar Familiar con las organizaciones solidarias. Tenemos que medir a Bienestar Familiar en esos pasos y tener unas metas parciales y presentarle a país unos buenos resultados periódicos.
Régimen Subsidiado de Salud. Sigue existiendo un profundo debate. Muchos colombianos dicen: ‘No gasten plata en intermediarios, entréguenla a los hospitales’. ¿Pero qué pasó? Hasta el año 1993 se le entregó a los hospitales: no se avanzó en aseguramiento. Los hospitales se han excedido en burocracia. Hay que rescatarlos.
¿Cuál ha sido nuestra propuesta, que ya está en el Plan de Desarrollo? Que las únicas empresas que puedan prestar el servicio de régimen subsidiado de salud, sean empresas sin ánimo de lucro.
La ausencia de ánimo de lucro individual es una característica de la economía solidaria. Por supuesto, que no puede compararse, no puede hacerse equivalente a la ineficiencia. Porque mucha gente dice: ‘Ah, como no hay ánimo de lucro, pues entonces lo que nada nos cuesta volvámoslo fiesta’.
Hay que ser inmensamente productivos en el sector solidario de la economía. Lo que pasa es que los beneficios no se distribuyen como en las sociedades comerciales. Por eso se dice que es un sector donde una de las características esenciales es la ausencia del ánimo de lucro individual, que no del objetivo de alta productividad y de alta eficiencia.
¿Qué hemos propuesto nosotros? Vamos a zanjar la diferencia. Acabarle a Colombia ese enfrentamiento, esa polarización entre los que quieren que los dineros vayan a los hospitales y entre los que quieren mantener el régimen subsidiado como nació.
La propuesta es la del Plan de Desarrollo. Entidades regionales eficientes y sin ánimo de lucro. Y que fundamentalmente sean entidades del sector solidario de la economía. Ustedes van bien en eso, pero hay que avanzar más.
Yo diría que nos tenemos que bajar en gastos de administración. Ya nos bajamos del 15 al 10. Ahora nos tenemos que bajar del 10 máximo a un 7. Es primer reto.
Un segundo reto: hay que vincular como socios los hospitales públicos reestructurados. Y un tercer reto: hay que hacer un gran esfuerzo de integración entre las ARS y el sector solidario, y otras que también son del sector solidario, que son las Cajas de Compensación. Me parece que es una necesidad.
Quería proponerles el tema de protección social, el tema de bienestar familiar, el tema de régimen subsidiado de salud. Y todo lo que ustedes puedan avanzar en régimen contributivo, magnífico.
Está un capitulo muy duro, muy difícil, que es el Seguro Social. Mi deseo es que podamos avanzar, para que los propios trabajadores sean los operadores de la EPS y de las IPS del Seguro.
Voy a hacer una referencia de manera general a ese tema al final, al hablar del sector solidario de la economía y la reforma del Estado.
Entonces, hemos hecho unos comentarios breves sobre educación, sobre protección social.
Tercera herramienta: la Economía Solidaria. Omito referirme a ella porque ella tiene que expresarse en todas las otras.
Cuarta herramienta: Manejo Social de los Servicios Públicos. Aquí necesitamos partir de reconocer que Colombia necesita en los servicios públicos del capital privado, el capital público y el capital solidario. Se requiere de los tres.
El país tiene unas deficiencias alarmantes en materia de servicios públicos. No puede haber dogmatismos excluyentes.
El papel de capital solidario. Debemos avanzar hacia un punto ideal: que todas las empresas de servicios públicos en Colombia tengan fondos de capitalización social. Ya lo tenemos pactado en Emcali. En la reestructuración de Emcali, todos los usuarios serán socios del Fondo de Capitalización Social.
Y para garantizar que ese Fondo no solamente le haga un aporte económico a la empresa, sino que esa participación de la ciudadanía de Cali garantice la eficiencia y la transparencia de la empresa, habrá un pacto de administración entre Emcali y el Fondo de Capitalización Social. Pero eso hay que llevarlo a todas las empresas de servicios públicos.
El Gobierno Nacional está haciendo el esfuerzo de que empiecen las intervenidas y en todas aquellas a las cuales el Gobierno Nacional les ayude a capitalizarse, como una condición para entregar esos recursos.
Esto es bien importante, como también es bien importante un entendimiento entre los proveedores de servicios y las asociaciones solidarias de usuarios.
El problema, por ejemplo, que tenemos en la Costa Caribe con las electrificadoras, no se resuelve si no hay un diálogo permanente entre las organizaciones de usuarios y los proveedores del servicio.
El Gobierno Nacional ha venido estimulando ese diálogo. Creemos que es una necesidad.
Y en muchos sitios de Colombia, los proveedores del servicio deben ser directamente organizaciones solidarias.
Tuve la experiencia en la Gobernación de Antioquia, cuando eliminamos un monstruo burocrático que era Cuantioquia: algunos de esos municipios, para la operación del acueducto, fueron entregados a organizaciones solidarias que habían surgido de antiguos empleados de la empresa burocrática. Se liquidó la empresa burocrática, dejaron de pertenecer a ella, se organizaron solidariamente y con ellos contratamos la operación de los servicios.
Yo insto al sector solidario a que se organice para ser operador de los servicios públicos. Aquí está el señor viceministro del Medio Ambiente, el doctor Bonilla. Ellos están promoviendo operadores especialmente de acueducto y alcantarillado en todo el país y el sector solidario tiene que ser allí un actor de primera línea.
El Manejo Social del Campo. Hay unas buenas cifras de los proyectos asociativos que vienen siendo financiados por Finagro, y Banco Agrario, promovidos por el Ministerio de Agricultura.
Yo revisaba ayer cifras de importación de maquinaria. Como van las cosas, este año el país importará tres veces la maquinaria agrícola que importó el año pasado. Y a 30 de abril ya habíamos superado todo lo importado en el 2001. Y el gran esfuerzo este año se ha concentrado en entidades asociativas de economía solidaria.
Finagro ha ofrecido dos atractivos bien importantes: el uno, concentrar el ICR, que es poco, básicamente a los grupos asociativos y a los pequeños productores. Y el dos, darles una línea de crédito muy buena (doctor César: 8 años, 9 por ciento de tasa de interés fija, ¿ya se han colocado más o menos 25 mil millones? ¿Qué porcentaje entre grupos asociativos? ¿Todos entonces?).
Yo creo que eso es un buen avance. Y el Plan Colombia también está impulsando una serie de proyectos productivos a través de grupos asociativos de gran importancia. Allí hay un punto esencial en la filosofía de este Gobierno. El rescate del campo con una serie de estímulos: el estímulo del crédito, el estímulo de la tasa de cambio competitiva, el estímulo de la seguridad, el estímulo de la focalización del ICR especialmente a la economía campesina y asociativa, y otro bien importante, que es el de los estímulos tributarios.
La semana pasada el Congreso nos aprobó la Ley que reduce el IVA de la panela del 7 al 2 por ciento. Por ahora se elimina el 7 y, como todos los productos, empezará a pagar el 2 por ciento, el primero de enero del 2005. Pero además se declaró una exención tributaria a los cultivos de tardío rendimiento.
El Gobierno nuestro ha venido proponiendo la eliminación de exenciones tributarias que no tenían ninguna relación con la recuperación económica y del empleo, que se veía a las claras que era el resultado de presiones de grupo de interés. Y hemos venido proponiendo y el Congreso ha venido aprobando unos estímulos tributarios muy concretos para lo que el país necesita, a fin de recuperar su economía y recuperar su empleo.
Entonces veamos un cultivo de tardío rendimiento: la palma africana. Al gran productor le queda un beneficio, que es la exención tributaria sobre las nuevas plantaciones. Y eso no va a ser fácil, porque el día de sanción de la Ley, lo vamos a llamar a la Presidencia a firmar un acuerdo sobre cuántas hectáreas no van a sembrar, a ver cuántos empleos se van a generar.
El pequeño productor que no vive preocupado de los impuestos y que dirá: ‘Para mí no es un estímulo la exención tributaria’, tiene el ICR, tiene subsidio directo. Entonces: focalización del subsidio directo al pequeño productor y a los grupos asociativos, y exenciones tributarias a los otros productores.
Estos son temas bien importantes en el manejo social del campo. Yo creo que, Alfredo, se le debe entregar al país, con la Oficina de Información de la Presidencia, periódicamente, una información consolidada de todo esto: en proyectos, en empleos, en recursos de créditos, etcétera.
Porque una de las cosas que a mí me ha preocupado del sector solidario toda la vida, es que hay mucha carreta y mucho debate normativo.
El país quiere ver al sector solidario es prestando plata y haciendo empresa y creando empleo. No resolviendo solamente los problemas de los muertos, sino los problemas de los vivos, que fue nuestra filosofía cuando nos propusimos con la doctora Azucena potenciar el mutualismo. Déjelo ahí que siga ayudando a cumplir esa obra de misericordia, que es enterrar a los muertos, pero primero proporcióneles buena vida mientras estén vivos.
Muy bien. Entonces nos toca hacer una reflexión: poca carreta y mucho resultado en bienestar para los colombianos. Entonces llevamos Educación, Protección Social, Manejo Social de los Servicios Públicos y del Campo.
Calidad de Vida Urbana. Es fundamental allí el tema de vivienda. Este Gobierno está privilegiando para subsidios los proyectos de vivienda con características urbanísticas de calidad de vida.
A los pobres no los podemos seguir metiendo en alcancías, en hornos crematorios. Nosotros necesitamos vivienda popular de calidad de vida y ahí tienen que jugar ustedes un papel muy importante y muy agresivo. Porque yo veo muchos negociantes en todo el país detrás de los proyectos de vivienda social. Métanse ustedes: que sea la economía solidaria la que domine la vivienda social en Colombia, qué bueno.
Ahora: la gente abusa del género ‘economía solidaria’. Entonces uno ve muchos negociantes que están traficando con subsidios y que están traficando con créditos, que se esconden con el buen nombre de la economía solidaria y lo presentan como un proyecto de la economía solidaria, cuando simplemente es un proyecto de intereses económicos particulares para hacer tráfico de influencias. Yo creo que ustedes se tienen que meter a dominar todo lo que es el campo de la vivienda social.
Y está el tema del País de Propietarios, que lo podemos manejar de muy diferentes formas. El microcrédito: esta Nación nuestra tiene más espíritu empresarial que espíritu de subalternidad laboral.
El crecimiento del microcrédito en este Gobierno es muy grande, pero a mí me preocupa. Porque no lo veo homogéneo en todas las regiones. Ahora me decía al entrar a este recinto el doctor Pablo Obregón Santodomiongo, que donde hay instituciones fuertes vamos bien. Donde no las hay, vamos mal.
Entonces el gran esfuerzo que tiene que hacer el Gobierno, el doctor Zarruk, que es el gran responsable de ese tema, y ustedes que nos han ayudado mucho, es fortalecer instituciones donde no las hay. Y hay algunos departamentos que las tienen buenas en las capitales, pero que no hacen presencia en los municipios. Allá tenemos que llegar.
Y ese microcrédito ha logrado concitar ya la atención del sector bancario tradicional. Yo diría que el Ministro de Desarrollo, Jorge Humberto Botero, ha tenido razón. Que el problema no es falta de recursos sino falta de garantías. Entonces el esfuerzo que se ha venido haciendo con el Fondo de Garantías es muy bueno.
Ese Fondo ha ido creciendo bien y este Gobierno, a través de los pactos con los departamentos y con los municipios, ha logrado que crezca mucho mas.
Pero hay que empezar a mostrarle al país resultados. Que ya gracias al aporte del departamento del Valle, se han entregado tantos créditos en el departamento del Valle, a tantos usuarios, para generar tantos empleos, por tanto valor, con una garantía del ochenta por ciento. Tantos en Cali, tantos en Buenaventura, tantos en Cerrito, tantos en Pradera, tantos en Candelaria, etcétera.
Y empezar a empujar los departamentos más atrasados. El ex presidente Carlos Lleras se preocupaba mucho y con mucha razón por el crecimiento equilibrado del país. El equilibrio regional. Y fue una institución transversal en la Reforma Constitucional de 1968.
Uno de los problemas graves que tiene el país en microcrédito es la falta de equilibrio regional. En unas partes muy bien, en otras partes muy rezagados. Yo diría que eso es fundamental en el País de Propietarios.
Lo de vivienda, fundamental en el País de Propietarios. Estimulemos todos los instrumentos, saquemos jugo de todos los instrumentos. Este Gobierno ha expedido una gran cantidad de decretos y el Congreso nos ha aprobado una gran cantidad de estímulos legales para la vivienda.
El último, el de la semana pasada, la nueva Ley de Arrendamientos, con la exención a la inversión en vivienda para dar en arrendamiento. Eso lo debería recoger el sector solidario. Ser el gran autor de esa tarea.
Nosotros sabemos que hoy hay un déficit grande de subsidios de vivienda social. ¿Por qué? Fundamentalmente en las grandes ciudades. Porque este Gobierno se ha dedicado a privilegiar municipios, para evitar esta tendencia del crecimiento macrocefálico. El país con unas grandes urbes y unos apéndices raquíticos, anémicos, pánfilos.
Hay que buscar el crecimiento equilibrado del país. Pero el problema nos ha aparecido en las grandes ciudades. Hoy se quejan los constructores de que no hay subsidios de vivienda social y tienen razón.
Y la segunda causa de ese problema es que nos hemos dedicado a pagar los subsidios que se adjudicaron en el pasado. Antes que seguir entregando nuevos subsidios, a buscar la platica para pagar los que se entregaron en el pasado.
Yo vengo a reiterar algo que dije en la Convención Bancaria en Cartagena hace quince días: busquemos una línea de crédito a largo plazo para reemplazar subsidios donde se pueda, a través de Findeter. Y si se puede acosemos esa línea de crédito (a ver, Alicia, preguntémosle a Findeter en qué vamos. Juan Pablo, al Director de Vivienda, al doctor Gastelbondo).
Yo creo que en el sector agropecuario hemos reemplazado muchos subsidios por crédito a largo plazo. Y creo que en el sector vivienda también lo podemos hacer, no completamente. Porque hay unos sectores que definitivamente no podrán adquirir vivienda si no hay subsidio.
Pero yo creo que hay una franjita de los aspirantes a subsidio que les podemos reemplazar el subsidio por el crédito a largo plazo y desatrancar este problema que tenemos. Y ojalá eso se pudiera canalizar fundamentalmente con entidades del sector solidario.
Quiero recordarles: en este Gobierno se mantuvo la exención a las cuentas AFC (Ahorro para Fomento a la Construcción). Entonces: parte de la retención en la fuente, uno lo puede dedicar a vivienda y se exime de la retención en la fuente.
Este Gobierno creó el leasing hipotecario con exención tributaria. Este Gobierno simplificó el ejecutivo hipotecario para que no haya temor a embarcarse en construcción de vivienda. Este Gobierno acaba de obtener que el Congreso le apruebe el nuevo contrato de arrendamiento, con un estímulo tributario a la inversión en vivienda para dar en arrendamiento. Este Gobierno lanzo la línea de crédito Swap. Esto es, crédito con seguro de inflación para adquisición de vivienda. Este Gobierno ha reglamentado la orientación del microcrédito hacia la vivienda. Allí hay muchas, muchas posibilidades para el sector solidario".