Palabras del Presidente al iniciarse la Batalla de Flores del Carnaval de Barranquilla
CARNAVAL DE BARRANQUILLA SIGNIFICA REBELDÍA CONTRA LA VIOLENCIA
Yopal, 1 mar (CNE). El siguiente es el saludo del presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, a los barranquilleros, al iniciarse la Batalla de Flores del Carnaval. El pronunciamiento lo hizo el Mandatario durante el XVIII Consejo Comunal de Gobierno en Casanare.
“Compatriotas:
La Batalla de las Flores del Carnaval de Barranquilla nos alienta un gran sueño: que el pueblo de Colombia aprenda también a revelarse contra la violencia y el desorden.
Cada año, desde 1903, Barranquilla toda –sin distinción de clases- marcha y baila alegre y bullanguera y protesta contra quienes prediquen venganza, odio político, fanatismo ideológico, intolerancia religiosa y discriminación racial.
¡Que Colombia entera, desde el Caribe verdeazul y risueño hasta el Nariño de las fértiles colinas de apacibles, dance al ritmo de esas comparsas democráticas e igualitarias, que se burlan de quienes predican odio y siembran terror!
¡Que en esta tierra madre acogedora de todas las razas la única confrontación entre sus habitantes sea la de la Batalla de Flores, el golpe amistoso con una gascallena amarilla, el plegar sumiso de los pendones ante la belleza del cielo azul, el roce cariñoso con un coral rojo..!
Como Presidente de los colombianos, saludo al alegre pueblo de Barranquilla en el acto inaugural del Carnaval que es motivo de orgullo para toda Colombia.
En 1902, al terminar la Guerra de los Mil Días, el espíritu de reconciliación, de perdón y de olvido, iluminó la mente del general Heriberto Bengoechea –ilustre currambero, veterano de mil batallas- quien decidió que la única guerra que de ahora en adelante volverían a pelear los barranquilleros, se batiría en el terreno del folclor, con flores en lugar de acero gris y frío.
Que el único cadáver tendido en el campo sería el de Joselito Carnaval y que la única fiereza de los hombres se expresaría con las máscaras, atuendos y palotes...
Hasta la bravura de los animales feroces fue demeñada por la alegría de los hombres pacíficos, tanto, que el terrible caimán del río de la Magdalena en lugar de engullir humanos, solo come queso y come pan y toma tragos de ron.
La rebeldía barranquillera contra la violencia y su talante igualitario, son instrumentos de paz.
Barranquilla, como Francisco de Asís, siembra amor con su ejemplo y en lugar de injuriar, perdona. La sola imagen del pueblo danzante y bullicioso torna el desaliento en esperanza, hace prevalecer la luz sobre la sombra y cambia tristeza por alegría.
Sueña con que Colombia toda, recupere con esfuerzo y persistencia la alegría que produce vivir en paz, esa paz que los barranquilleros nunca permitieron que se las arrebatara.
El Carnaval de barranquilla es la expresión de la rebeldía del Caribe contra el desorden y contra la violencia. Es la expresión ordenada de un sentimiento natural de ese pueblo hacia el igualitarismo.
Desde el Casanare, donde se formó la bella epopeya del ejercito libertador, un saludo lleno de afecto al ejemplo de orden, de rebeldía contra la violencia que nos da Barranquilla con su carnaval.
Muchas gracias”.