Dice presidente Álvaro Uribe en entrevista con La Tercera
MIENTRAS LA GUERRILLA NO SUSPENDA EL TERRORISMO, EL ÚNICO CAMINO ES LA AUTORIDAD
Santiago de Chile, 31 ago, (CNE). El diario La Tercera de Chile, abrió su primera página de la edición dominical con una entrevista que su enviado especial, Alejandro Tapia, le hizo al Jefe de Estado colombiano. El diálogo tuvo lugar en Aguachica, Cesar, al término del Consejo Comunal el pasado 16 de agosto.
El presidente Alvaro Uribe le dijo al diario que trabajará "todos los días para derrotar el terrorismo" y
agradeció al Presidente chileno Ricardo Lagos por ser un "gran abogado de la causa colombiana".
El siguiente es el texto completo de la entrevista:
Entrevista al Presidente colombiano, Alvaro Uribe:
"Mientras la guerrilla no suspenda el terrorismo, el único camino es la autoridad"
El mandatario acaba de cumplir su primer año de gobierno con un 70% de apoyo popular, un balance positivo en la lucha contra la guerrilla y una asignatura pendiente en materia económica. En conversación con La Tercera, advierte que trabajará "todos los días para derrotar el terrorismo" y agradece al Presidente chileno Ricardo Lagos por ser un "gran abogado de la causa colombiana".
Alejandro Tapia C., enviado especial a Colombia
Como cada sábado desde que asumió el poder el 7 de agosto de 2002, Alvaro Uribe se levantó en la madrugada del pasado 16 de agosto para tomar un pequeño avión militar de dos hélices que lo llevaría a algún rincón lejano del territorio colombiano. La idea de ese día es llevar a cabo un nuevo Consejo Comunal, una de las iniciativas clave de su gobierno destinada a tratar temas sociales de forma directa con la gente. Así, Uribe marca presencia en el país más violento de América Latina con un conflicto armado de más de cuatro décadas.
Pasadas las 11 de la mañana, y después de enfrentar un fuerte aguacero que estremece el avión en el que Uribe también lleva a algunos de sus ministros y viceministros, la comitiva aterriza en una pista de tierra en la calurosa localidad de Aguachica en la norteña región del César, lugar que cuenta con la presencia de los tres principales grupos insurgentes de Colombia: las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y los paramilitares.
Por eso, la seguridad es extrema. Decenas de policías y militares vigilan la pista, ubicada a 15 kilómetros de la ciudad de 87 mil habitantes, mientras un helicóptero vigila cualquier movimiento sospechoso. La comitiva se traslada en siete camionetas, una ambulancia y dos buses. Tres motos no se separan de los vehículos.
"Mi afán es poder mirar mi conciencia y encontrarla tranquila de que procedí con honradez", dice el Presidente, vestido de blanco, con la camisa afuera y un sombrero y poncho típicos de la zona, cuando se le pregunta sobre cómo quiere ser recordado al término de su gestión. Uribe accedió a que La Tercera lo acompañara en su visita a Aguachica y luego concedió una entrevista a este medio.
Tras un año en el gobierno ¿Sigue pensando que la lucha frontal contra la guerrilla es la única vía hacia la paz?
Mientras -las Farc y el ELN- no tengan voluntad sincera de suspender el terrorismo y de negociar, el único camino es el de la autoridad. En eso no puede haber ni vacilación ni retroceso.
Pero ¿existe la posibilidad de que al igual de como lo está haciendo con los grupos paramilitares se inicie un diálogo con las Farc y el Eln?
Existe toda la voluntad de hacerlo a partir de que ellos expresen su determinación de abandonar la violencia, de negociar, y además les daríamos todas las garantías.
¿Cree que fue un error de su antecesor, el ex Presidente Andrés Pastrana, darle tanto territorio a las Farc a través de la llamada zona desmilitarizada?
El Presidente Pastrana procedió con buena fe. Yo no censuro al Presidente Pastrana. Quienes quedaron mal fueron los guerrilleros, que utilizaron esa zona para sembrar coca, para tener ahí un imperio de terror, un lugar de cautiverio para secuestrados. Y mientras estaban en la mesa (de negociación) enfrente de micrófonos, simultáneamente debajo de la mesa daban órdenes de secuestros.
¿Podría decir que en este momento su gobierno está ganando la lucha contra los grupos insurgentes?
Es muy difícil. A mi no me gusta poner plazos. A mis compatriotas les he dicho que milagros no se pueden ofrecer. En la medida en que avancemos hacia la desmovilización eso produce tres resultados: primero, menos violencia, segundo, un camino más despejado para la recuperación de los derechos humanos y tercero, un nuevo compromiso para que en Colombia la gente no se someta ante la guerrilla ni se defienda a través de los paramilitares y recuperemos el imperio constitucional.
Al igual que Uribe, la población de Aguachica sabe que la lucha contra la subversión es una tarea extremadamente compleja. Según los expertos, el gran logro de Uribe en su primer año de gestión ha sido que los colombianos han vuelto a creer en el gobierno. De hecho, el mandatario goza de más de un 70% de popularidad, según las encuestas.
Los habitantes de Aguachica no son la excepción. Por eso, cuando el Presidente ingresa al salón donde se llevará a cabo el Consejo, una especie de gimnasio sin aire acondicionado, todos se abalanzan para darle la mano.
Pese a las advertencias de su aparato de seguridad, Uribe da abrazos y firma autógrafos. Dos guardaespaldas no se separan de él, aunque en realidad otros cuatro vigilan, de incógnitos, todo movimiento sospechoso.
Hasta el momento la política de línea dura de Uribe le ha dado ciertos resultados: los secuestros han disminuido en un 30% en el primer semestre, mientras que los atentados han bajado en un 50%. Sin embargo, la economía aún sigue débil y el narcotráfico causa estragos.
¿Cómo responde a las críticas de que por privilegiar la lucha frontal contra la guerrilla se ha despreocupado de la economía del país?
Ninguna economía se puede construir sobre el terrorismo. En la campaña dijimos que nuestro objetivo sería recuperar la confianza de los inversionistas, de los trabajadores a partir de tres premisas; la seguridad, el buen manejo macroeconómico y la estabilidad y transparencia en la reglas del juego. Después de algunos años de crecimiento negativo, este año la economía está creciendo por encima del 3%. Además, hemos creado 1.500.000 nuevos empleos.
En su visita a Colombia el general norteamericano Richard Myers pidió la colaboración regional para enfrentar el terrorismo ¿Usted está satisfecho con la ayuda que hasta ahora han prestado los países de la región?
En Paraguay hubo una nueva declaración, de mucha solidaridad con nosotros (siete países, incluido Chile, firmaron su apoyo al gobierno colombiano). Por eso agradezco al Presidente Ricardo Lagos y a su gobierno porque nos han dado una ayuda invaluable. Quiero decirle a Chile que nuestra lucha es inflexible, sin claudicación y transparente, con total apego a los derechos humanos.
Además del apoyo que le dio Chile en Asunción ¿De qué modo concreto podría ayudar el gobierno chileno en la lucha contra la violencia en Colombia?
El Presidente Lagos se ha convertido en lo que yo llamaría un gran abogado para defender la causa colombiana. Por ejemplo, le ha dicho de forma muy categórica a Europa que le tiene que ayudar a Colombia. Ha estado muy pendiente que los procesos de cooperación y de donantes con Europa se den definitivamente a favor de Colombia.
¿Chile podría llegar a formar parte de una eventual fuerza internacional de paz para Colombia?
De eso no se ha hablado.
¿Por qué no se ha tratado el tema de la fuerza internacional de paz para su país?
Tenemos aquí suficiente valor y ciudadanía para integrar nuestra policía y nuestro Ejército. Lo que necesitamos son recursos tecnológicos y que en ninguna parte se le de cabida al terrorismo y a la droga.
A las 18.00 en punto, Uribe, que ha sido el moderador y protagonista del Consejo Comunal en Aguachica pone fin a la actividad. El avión debe partir ya que el "aeropuerto" no tiene luz. El destino siguiente es Granada, donde Uribe debe inaugurar nuevas viviendas. Ese día, el domingo 17, la guerrilla envió un nuevo mensaje al Presidente y baleó su helicóptero. No fue, en todo caso, el primer atentado en su contra.
RECUADRO
El particular estilo Uribe
Desde que asumió el poder hace poco más de un año en medio de granadas lanzadas contra la sede del Ejecutivo por presuntos miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), el Presidente colombiano Alvaro Uribe se ha ganado la confianza de la mayoría de la población en parte gracias a su particular estilo.
Tantas son las diferencias con sus antecesores, que incluso Uribe, un menudo abogado de 51 años que practica yoga, ha sido frecuentemente caricaturizado. El día de Uribe parte alrededor de las 4.30 de la madrugada. Si esa mañana despierta en el palacio presidencial, su impostergable trote lo hace en sus máquinas de ejercicio mientras ve CNN para practicar inglés. Si no está en Bogotá, corre a campo travieso junto a cuatro de sus principales colaboradores obligados a seguir su trote de paso corto pero constante.
Para llegar a la norteña ciudad de Aguachica, hasta donde lo acompañó La Tercera, el Presidente se levantó a la misma hora de siempre, pese a que esa noche arribó a Bogotá a las dos de la madrugada tras una visita a Paraguay. "Es incansable y cuando ya no da más se toma unas gotas homeopáticas. Ese es su secreto", cuenta uno de sus colaboradores.
"No se crean que nos quedamos dormidos porque llegamos tarde de Paraguay", dice Uribe al inaugurar, como cada sábado, un nuevo Consejo Comunal, esta vez en Aguachica, donde se trasladó en un viejo avión militar. "El Presidente es tan austero que no ha querido cambiar los aviones que están bastante viejos y deteriorados", confiesa un alto funcionario de gobierno. Ello, a pesar de ser el mandatario que necesita la mayor cantidad de medidas de seguridad en América Latina
